Editoriales

Voces y miradas diferentes y plurales sobre nuestra realidad

El león afortunado     20-04-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 937

 

"Cuando el saqueo se convierte en el modo de vida de un grupo de hombres en una sociedad, éstos no tardarán en crear un sistema legal que lo autorice y un código moral que lo glorifique”.

Frédéric Bastiat

 

Napoleón elegía a sus generales por la suerte que los acompañaba en batalla; de haber sido contemporáneos, Javier Milei hubiera sido seguramente escogido. Un nuevo escándalo detonó en el H° Aguantadero cuando los senadores, votando a mano alzada, se duplicaron las dietas (sueldos) que ellos mismos perciben, pese a tener libre ejercicio de sus respectivas profesiones, en medio de una angustiante pérdida de poder adquisitivo de salario y jubilaciones y del riesgo de desocupación que conlleva la fuerte recesión. La ciudadanía, estupefacta por la clara desconexión que existe entre estos miembros de la “casta” multipartidaria, reaccionó con enorme indignación, pues achaca al Congreso, con razón, no sólo trabajar muy poco, sino que, cuando lo hace, complica la vida de todos, como fue la nefasta ley de alquileres, ahora derogada por el DNU presidencial, que sacó del mercado a la casi totalidad de inmuebles de renta.

 

El periodismo libre, esencial custodio de la democracia (mal que le pese al Presidente, que lo castiga ante la menor crítica), y las redes sociales incrementaron la rabia de la sociedad frente a esa manifestación de inaceptables privilegios, difundiendo la inexplicable cantidad de asesores y empleados que dependen de cada legislador, algunos de los cuales engordan sus emolumentos reteniendo parte del salario que les atribuye.

 

Y es razonable la furia cuando se suman otras informaciones: en ciertos casos, el número de inútiles asesores individuales supera los cuarenta; los miembros del Congreso, cuando terminan su período como senador o diputado, habitualmente los hacen nombrar en la planta permanente del Poder Legislativo, en las famosas “capas geológicas” que explican la enorme cantidad de empleados de éste; gozan de un suplemento por “desarraigo”, que perciben todos los que viven fuera de la ciudad de Buenos Aires; pueden cambiar por efectivo los pasajes de avión que reciben para asistir a las reuniones de comisiones y del cuerpo; disponen de automóviles y celulares cuyo costo es soportado por el Congreso (todos nosotros); etc., etc.. Cuando ve trabado en los laberintos de la política las leyes que pretende, ¿qué más hubiera podido pedir Milei para desacreditarlos que esta impúdica exhibición de poder de la “casta”?

 

Para el martes 23 ha sido convocada una marcha para protestar contra lo que falsamente se presenta como un recorte al presupuesto educativo cuando, en realidad, lo que busca el Gobierno es terminar con los focos de enorme corrupción que representan las nuevas universidades de bajísima calidad, creadas a mansalva para satisfacer las ansias de poder y dinero de  funcionarios y caudillos de todos los pelajes que sólo son, verdaderamente, centros de adoctrinamiento político al servicio de los “barones” del Conurbano y fuentes inagotables de corrupción. Esto último se prueba más que razonablemente por la adhesión a esa marcha de las organizaciones piqueteras unificadas, cuyos integrantes pagan –con sus impuestos, como el IVA de alimentos- el costo de una universidad pública a la cual, pese a ser gratuita, sus hijos no podrán asistir por falta de recursos, tal como demuestra la composición social del alumnado.

 

Me permito insistir con cuanto dije en una antigua nota –“Estúpida Universidad” (ln.run/7a75e)- ya que formulé una propuesta para ayudar al país y, sobre todo, a nuestro futuro. Todo tiene solución, pero se necesita coraje y poco temor a los gritos enfervorizados del radicalismo, de La Cámpora y del trotskismo, dispuestos a aplaudir cualquier disparate y, sobre todo, a oponerse a cuanto afecte sus insaciables bolsillos. En ella propuse terminar con el ingreso irrestricto y con la existencia de estudiantes crónicos, con la gratuidad de la enseñanza para los extranjeros, con la angustiosa falta de profesionales en ciencias duras y el absurdo exceso de graduados en carreras innecesarias, con los déficits en infraestructura, laboratorios y medios de investigación, y recomendé un método claro para mejorar la calidad de la enseñanza y la retribución a los profesores, y para poner a la universidad al servicio del desarrollo real del país y atraer inversiones externas, que necesitamos con desesperación.

 

Este último tema se vincula, lamentablemente, con la seguridad jurídica, una natural exigencia de los capitales para aposentarse en cualquier nación. Y es aquí donde la ya formalizada postulación del Juez Federal Ariel Lijo para integrar la Corte Suprema adquiere caracteres dramáticos. Cuando se han expresado tan en contra de su designación todas las entidades empresarias (AEA, AmCham, IDEA, ACDE, UIA, CAC, etc.) y las organizaciones que representan a la sociedad civil (Conciencia, Colegio Público de Abogados, Colegio de Abogados de la Capital Federal, CyCIP, etc.) la insistencia de Milei resulta inexplicable y altamente sospechosa. ¿Por qué no llamar a concurso público de postulantes?

 

Para su nombramiento, la mayoría especial que la Constitución exige (dos tercios de los senadores presentes) requerirá del voto de muchos de los integrantes de los bloques kirchneristas; ¿cuál será la moneda de cambio que el Gobierno estará dispuesto a ofrecer para obtenerlos? ¿Alguna forma de impunidad para los innumerables delitos imprescriptibles cometidos por la asociación ilícita comandada por Cristina Fernández? Si así fuera, todo el gran capital político que conserva el Presidente, aún en medio de este tan salvaje como inevitable ajuste, se habrá perdido irremediablemente y la Argentina volverá a derrumbarse al abismo de la historia.

Un León en un Mundo Loco    13-04-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 936

 

“Las armas son instrumentos fatales que solamente deben ser utilizadas cuando no hay otra alternativa”. 

Sun Tzu

 

Si bien no hay duda alguna que a Javier Milei le tocó la peor herencia de nuestra historia, incluyendo la económica que recibió Carlos Menem de Raúl Alfonsín en un remoto 1989, tampoco se puede negar que debe interactuar con un mundo exterior cada vez más complicado; el kirchnerismo nos ató al carro triunfal de los regímenes más siniestros y autoritarios, pero el Presidente está ejecutando, en materia geopolítica, un más que razonable giro copernicano, acercándonos a las democracias occidentales de las cuales nunca hubiéramos debido alejarnos. Si uno se detiene a observar en detalle un mapamundi, podrá comprobar cuántos nuevos conflictos se están desarrollando simultáneamente, cuánto han crecido los presupuestos militares en el mundo y cuántas positivas organizaciones internacionales están en serio riesgo de implosión.

 

La franca asociación con los Estados Unidos no sólo ya nos ha comenzado a aportar equipamiento militar (como el acceso a modernos aviones de combate daneses cuya compra había sido objetada por Gran Bretaña) sino que implica un claro y fundamental apoyo de Washington ante los organismos multilaterales de crédito, en especial frente al FMI, a pesar del disgusto que puede provocar en Joe Biden la amistad de Milei con Donald Trump, su duro contendiente en las elecciones de noviembre.

 

A los mismos efectos, no es irrelevante la posición del Gobierno en la criminal invasión que Vladimir Putin, en pos de recrear la Rusia zarista de la cual se imagina heredero, lleva adelante contra una Ucrania martirizada y cuyo fin nadie se atreve a pronosticar, pese al desgaste que está sufriendo Volodimir Zelensky por la falta de apoyo de algunas grandes potencias y por la pérdida de vidas y de material.

 

Irán ha desestabilizado definitivamente Medio Oriente, utilizando sus milicias terroristas (Hamas) para atacar a un Israel que, vejado y humillado por el criminal ataque del 7 de octubre de 2023, habilitó a Benjamín Netanyahu a desatar una brutal represión en la Franja de Gaza y atacar objetivos en Cisjordania y Siria, incrementando el riesgo de una conflagración nuclear en toda la zona y, a la vez, a despejar los nubarrones domésticos que se cernían sobre su gobierno. Sin duda nos recuerdan los atentados que concretaron contra la Embajada y la AMIA aquí, cuya responsabilidad le ha sido adjudicada definitivamente a Irán por la Cámara Federal de Casación en un histórico fallo emitido esta misma semana; esa condena, y la siniestra amenaza del terrorismo a realizar nuevas “proezas” contra los enemigos de Irán en el mundo, ha llevado a aumentar el estado de alerta en nuestro país,

 

América Latina, que fue durante años un continente de paz, no es ajena ya a las tensiones internacionales, en razón tanto de los alineamientos geopolíticos en la nueva guerra fría global cuanto de la confrontación local entre los populismos de izquierda, aquí básicamente disfrazados de socialismo del siglo XXI, y las repúblicas democráticas que, según parece, van recuperando paulatinamente terreno. Los recientes conflictos territoriales entre Venezuela y Guyana por el Esequibo, y los roces diplomáticos que involucran a México, Venezuela, Nicaragua, Chile, Ecuador, Colombia y Brasil, son síntomas claros de esa nueva situación.

 

Si todo esto fuera poco, es sabido que Cuba, con el apoyo de Venezuela –ésta aliada de Irán, como Bolivia- ha vuelto a las andadas en materia de terrorismo, como hizo en los 60’s y 70’s, cuando pretendió extender su revolución a toda la región, y se han detectado infiltrados de esas nacionalidades para generar violencia en varios países. Se expanden, además, las violentas organizaciones narco-criminales mexicanas, brasileñas y bolivianas; ya corre inocente sangre en Ecuador y Argentina, y una clara preocupación al respecto surge en Uruguay y en Chile.

 

Xi Jimping está generando graves tensiones en el sur de Asia, en especial por su promesa de incorporar por la fuerza a Taiwan a su territorio, lo cual ha llevado a que los Estados Unidos construyeran una amplia alianza defensiva con Australia, Nueva Zelanda, Filipinas y otras naciones vecinas; todos están convencidos que los recientes problemas de la economía china podrían llevar al ahora eternizado Presidente a desatar una guerra para galvanizar el apoyo popular a su gestión. Y su nefasta Ruta de la Seda le ha permitido hacerse de recursos naturales en todo el continente africano. El kirchnerismo en el poder, respaldado por mayorías legislativas traidoras a la Patria, le cedió la soberanía sobre 200 Ha en la Provincia de Neuquén por 50 años renovables, para instalar allí una base del Ejército de Liberación, permitiendo así a la potencia asiática acceder al control del tráfico naval bioceánico y acercarse a la Antártida, un bocado más que apetecible; transformaron así a la Argentina en un blanco militar en caso de una guerra global.

 

En ese escenario internacional se mueve el león libertario, y ya ha logrado mudar a nuestro país al lado correcto de la mesa de arena y comenzado a corregir los negativos efectos de una mal intencionada política exterior. Pero no hay almuerzo gratis, y la Cancillería debiera extremar los cuidados para no vernos involucrados en conflictos ajenos, pues aún no estamos preparados, militar ni económicamente, para enfrentarlos.

Sí, pero…     06-04-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 935

 

“Prefiero molestar con la verdad que complacer con adulaciones”.

 Lucio Anneo Séneca

 

Estoy jubilado y, como tal, pertenezco al sector más perjudicado por el inevitable ajuste de las catastróficas cuentas públicas que Javier Milei recibió como herencia del kirchnerismo; los veinte años de populismo ladrón y suicida, que toleramos sin chistar, no podían ser, ni lo fueron, gratuitos. Sin embargo, sigo apoyando firmemente al Gobierno pues tengo la convicción de que, con su sorprendente velocidad en la gestión económica, está llevando al país al buen camino y la certeza de que, si no se produce un improbable estallido social antes de junio, el rumbo será mantenido esta vez por mucho más de un período presidencial. Como dijo Claudio Zuchovicki, en su imperdible disertación en el Rotary Club (https://tinyurl.com/y7z6vee2), como muchísimos ciudadanos creo que esta vez saldrá bien y llegaremos a buen puerto. Las razones son varias. Hizo dos preguntas a los comensales. La primera, quién era el jefe del oficialismo; la obvia y unánime respuesta fue Milei; en cambio, cuando intentó que sus oyentes identificaran al jefe de la oposición, las respuestas fueron casi infinitas.

 

El proyecto moralizador del Gobierno y el descubrimiento diario de kioscos de corrupción y nichos de latrocinio en los tres niveles de la administración pública están generando en la sociedad, harta de “ñoquis” y absurdos privilegios y canonjías, un tan generalizado repudio que hasta los despidos y cese de contratos son aplaudidos masivamente, como prueba la falta de acompañamiento a las diferentes medidas que ha tomado ATE para protestar. La -hace años- temible CGT sintió tanto el fracaso del paro general que realizó contra el Presidente a sólo 50 días de su asunción, que no consigue unificar un criterio para implementar un plan de lucha. Y los gerentes de la pobreza, por su parte, han perdido totalmente la capacidad de movilización al impedirse su intermediación entre el Estado y los comedores populares y los beneficiarios de los planes sociales.

 

El león libertario vive hoy en un mundo raro: el peronismo, al cual la sociedad le adjudica la responsabilidad por los padecimientos actuales por su voracidad saqueadora y sus políticas empobrecedoras, está tratando, con enorme dificultad, de reconfigurarse después de las peores derrotas electorales de su historia a las cuales lo condujo Cristina Fernández y la prueba es que, en muchas provincias del Noroeste que le eran tradicionalmente adictas y en las cuales ni siquiera La Liberad Avanza tuvo candidatos, hoy Milei concita una mayor aprobación que los gobernadores electos en octubre;  por su parte, el radicalismo vive una crisis tal que, mientras el recién elegido Presidente del partido, Martín Lousteau, votaba en el debate de la “ley ómnibus” en contra del Gobierno, casi todos los senadores de su bloque lo hicieran a favor.

 

Por supuesto, aplaudo fervorosamente cuanto se está haciendo en las áreas de seguridad y defensa y, en especial, el fin del falso relato sobre lo ocurrido en los trágicos 70’s; espero, sí, que esta correcta orientación oficial tenga su correlato en la actitud de los fiscales y del propio Gobierno en relación a los presos políticos, militares, policías, sacerdotes y civiles, encarcelados para servir al kirchnerismo al blindarlo con el favor de una izquierda que, como decía el fundador de la banda delictiva, “te da fueros”.

 

Pero nada de todo lo positivo que veo y apoyo en la gestión de Milei me permite obviar algunos “detalles” graves, que pueden resultar enormemente gravosas, tanto para el erario público cuanto para la poderosa imagen “anticasta” y anticorrupción que irradia el Presidente; estos temas no llegan habitualmente al conocimiento del gran público, mucho más preocupado por los problemas que afectan a la realidad cotidiana, pero sí inquietan, y mucho, a los más informados y, entre ellos, a los inversores, propios y ajenos, que necesitamos con absoluta desesperación para sacar a la Argentina del pozo de inmundicia y decadencia en que se encuentra. Las voces de alerta o de franca crítica que surgen todos los días de las asociaciones empresarias, políticas y profesionales son claros avisos en tal sentido.

 

Me refiero, una vez más, a hechos inexplicados, tales como la designación de Mariano Cúneo Libarona como Ministro de Justicia, a la nominación del Juez Ariel Lijo para integrar la Corte, al nombramiento de Andrés de la Cruz como Sub-Procurador del Tesoro, y a la anunciada elección de Santiago Viola como representante de la Cámara de Diputados en la Auditoría General. Dado que Carlos Pagni inventarió con coraje y tan prolijamente las pavorosas manchas que cubren el pasado reciente de todos estos tigres y las naturales susceptibilidades que sus nombres despiertan en su absolutamente imperdible nota del jueves en La Nación (https://tinyurl.com/3hhzmpf4), puedo abstenerme de repetirlas aquí.

 

Circulan infinidad de versiones acerca de las razones que llevaron al Presidente a cometer estos claros dislates, e incluyen desde un pacto de impunidad con Cristina Fernández y sus cómplices a cambio de un dudoso apoyo a sus transformadoras propuestas legislativas, a la necesidad de contar con una Corte Suprema adicta para evitar un freno judicial a las medidas del Ejecutivo nacional, y hasta a un acuerdo secreto con el Sergio Massa que, para dividir a la oposición, habría habilitado y financiado la campaña electoral del líder libertario y llenado sus listas con candidatos que le son fieles. Está en Milei dar las explicaciones del caso, pero, si estuviera habilitado, sin duda le recomendaría que lo hiciera muy rápido, antes de que se produzcan los efectos negativos que he descripto.

¿Lijando para la impunidad?     30-03-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 935

 

“Errar es humano. Perdonar es divino. Rectificar es de sabios”.

 Alexander Pope

 

Mi estado de ánimo frente a la gestión de Javier Milei podría resumirse así: “Sí, claro, pero …”. Y creo que la mayoría de la ciudadanía, tal como confirman las encuestas que circulan, tiene la misma posición, aunque los “peros” de cada uno de nosotros puedan ser disímiles, ya que en general debidos a la recesión y a la pérdida de poder adquisitivo de salarios y jubilaciones que, por supuesto, también me afectan, pero no priorizo. En mi caso, me duele aplaudir gestos y actitudes del Presidente que, sin piedad alguna, critiqué en Néstor y Cristina Kirchner cuando hacían algo similar, aunque en sentido opuesto.

 

No entiendo la inexplicada pretensión de llevar a la Corte Suprema al actual Juez de Primera Instancia en lo Criminal Federal Ariel Lijo. Comparten mi estupor, y así lo han manifestado, cámaras empresariales, colegios de abogados, periodistas prestigiosos, académicos de todos los colores ideológicos; en los muchos años que llevo ejerciendo mi profesión, nunca he visto un rechazo tan unánime ni extendido.

 

La razón para esa férrea oposición es simple, pero tajante. Lijo no reúne, ni por asomo, las virtudes morales y los antecedentes académicos necesarios para llegar a ser ministro del supremo Tribunal de la Nación, intérprete definitivo de la constitucionalidad de las leyes y reglamentos que rigen nuestra vida en común, de nuestras libertades individuales y de nuestros patrimonios. Tan trascendentes son sus responsabilidades institucionales que el más elemental criterio exige que sus miembros sean, a la vista de la sociedad en su conjunto, absolutamente impolutos e intachables, aunque, a veces, no coincidamos con sus sentencias. Ese rol le ha sido asignado a la Corte Suprema por la misma Constitución, que la convirtió en cabeza de uno de los tres poderes del Estado y, en definitiva, en árbitro y contrapeso de las disputas entre el Ejecutivo y el Legislativo.

 

Por eso, esta candidatura es mucho más grave aún que la designación del cuestionable Mariano Cúneo Libarona como Ministro de Justicia de la Nación; éste puede ser desplazado por un simple decreto presidencial mientras que la remoción de un Juez de la Corte, inamovible hasta los 75 años, requiere cumplir un engorroso trámite ante el Congreso de la Nación, vía un juicio político. Tan complicado es el procedimiento y tan difícil obtener allí las mayorías especiales necesarias que ni siquiera la nefasta dupla de los Fernández² logró concretarlo cuando intentó echar por mal desempeño a Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Juan Carlos Maqueda, pese a que disponía de mayorías simples en ambas cámaras legislativas.

 

 Entonces, ¿qué ha llevado a Milei a proponer a Lijo como candidato? Como es economista y, por tanto, desconoce el mundo tribunalicio, ¿puede atribuirse a un mero error? Si así fuera, ¿por qué no desiste ahora, que se le ha explicado con claridad? Por otra parte, si además de este impresentable, propuso al incuestionable Manuel García-Mansilla, un constitucionalista de enorme relevancia, para la Corte en reemplazo de Maqueda para cuando éste cumpla la edad máxima (75) a fin de año, ¿por qué no invierte los términos y relega hasta entonces al más cuestionado? En la medida en que no cuenta con un grupo significativo de senadores y sabe que, para que su candidato resulte aprobado, se requerirá del apoyo de las bancadas kirchneristas; ¿qué está dispuesto a ofrecer a Cristina Fernández para que ella ordene que lo acompañen con sus votos?

 

Como dije más arriba, la sociedad está mayoritariamente dispuesta a sacrificar su presente y soportar el irremediable ajuste que exige el poner orden en el desquicio heredado de las cuentas públicas y en la desmadrada inflación, con vistas a un futuro mejor para cada uno y sus descendientes. Pero, correlativamente, casi como un proceso de sanación colectiva, demanda las mismas (y malversadas) “memoria, verdad y justicia”, hasta ahora no concretada, para los imprescriptibles delitos de defraudación al Estado cometidos por los cleptócratas que nos gobernaron 16 de los últimos 20 años, ninguno de ellos en la cárcel. Porque ha sido tan gigantesca la malversación de caudales públicos y tan procaz la exhibición de las riquezas mal habidas, que ya nadie niega que es la real causa de la pobreza y la indigencia, del deterioro de la educación y de la salud públicas, de la extensión del narcotráfico y de la violencia cotidiana.

 

Entonces, si a la profunda herida que, al menos entre las élites, ya produjo en la imagen del Presidente esta horrible nominación, se le sumara que la sociedad entera comenzará a percibir que la moneda de cambio para la aprobación de la candidatura de Lijo hubiera sido garantizar la impunidad del kirchnerismo, el castigo a La Libertad Avanza en las elecciones de medio término se convertirá en una realidad irreversible. Esta misma semana vi a Milei claramente en campaña para ellas y me parece que eso debiera llevarlo a reflexionar sobre este peliagudo tema y hacerlo desistir de esta tan criticada postulación, que todos ignoramos quién le propuso. Si hubiera sido Cúneo Libarona, que tanto conoce al mundo de Comodoro Py, sede de la Justicia Penal Federal en la Capital Federal, el Ministro habrá sumado una nueva mancha a su tan atigrado curriculum.

 

Dada la importancia de la fecha, deseo a cada uno de mis lectores y a la Argentina misma, una muy feliz y santa Pascua de Resurrección. Recemos para que este Cristo, que mañana habrá salido nuevamente del sepulcro, recuerde que alguna vez se puso la camiseta nacional y otorgue, con su infinita paciencia, el perdón a nuestros tan reiterados pecados colectivos.

La mujer de César     23-03-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 934

 

“No deshonra a un hombre equivocarse. Lo que deshonra es persistir en el error”. 

Benito Juárez

 

Atribuyen a Julio César, que habría acuñado la frase para justificar su divorcio de Pompeya, haber dicho que su mujer no sólo debía ser honesta sino parecerlo. Como he afirmado infinidad de veces desde el 10 de diciembre, aplaudo y apoyo decididamente a Javier Milei por la forma en que está actuando el Gobierno, ya que está alcanzando, con inusitada velocidad y pese a lo catastrófico de la herencia, éxitos notables en economía, defensa, seguridad y acción social, y en la permanente exhibición y denuncia de hechos y nichos de corrupción de las anteriores administraciones.

 

Pero ello no obsta para que me produzcan enorme escozor algunas decisiones que adopta. La primera, como he dicho en otras notas, fue la designación para ocupar el crucial cargo de Ministro de Justicia a Mariano Cúneo Libarona, un abogado penalista con máculas importantes en su pasado reciente (haber representado a connotados narcotraficantes y funcionarios corruptos). Si bien es correcto el argumento que ahora esgrime, en el sentido de que todos tienen derecho a una defensa letrada, no lo es menos que cada profesional tiene idéntica libertad para rechazarlos; para ello, el Estado dispone de un cuerpo de defensores públicos que asumen ese rol cuando un imputado carece de abogado particular, cualquiera fuera la razón.

 

Esta semana, esa categoría de cuestionable llegó a un extremo más grave aún: la inexplicable propuesta del actual Juez Ariel Lijo para integrar la Corte Suprema. El vocero presidencial arguyó que contaba con gran experiencia en materia penal para justificar la decisión de Milei, pero el argumento cae por su propio peso cuando se sabe que hay multitud de profesionales intachables y con extensos pergaminos académicos con mejores cualidades que este extraño candidato, si lo que se hubiera buscado era llevar al máximo Tribunal un especialista en el tema.

 

Los Juzgados Federales de Primera Instancia en lo Penal, en especial los doce –muchos de ellos vacantes- que tienen su asiento en la Capital Federal, tienen un rol fundamental: de su decisión, revisable por la Cámara Federal de Apelaciones, depende que una causa llegue o no a juicio oral; en resumen, tienen el “pasa o no pasa” de las denuncias, con todo lo que ello implica en materia de permanentes y efectivas tentaciones. Algunos de los jueces que ocupan ese cargo son verdaderamente intachables y, por eso, sólo tienen un buen pasar, mientras que otros exhiben una riqueza injustificable, siempre producto de favores políticos o criminales. Como pueden “dormir” las causas durante años (Marcelo Martínez de Giorgi es un claro ejemplo de ese expertise), demoran su juzgamiento y permiten que accedan a la prescripción, equivalente a la impunidad más absoluta.

 

Milei le está pidiendo a la sociedad que tenga paciencia y aguante el monumental ajuste que, tal como había dicho en campaña, está aplicando y que recae sobre las pymes y las clases media y baja con salarios formales. Pero los tragos tan amargos resultarían digeribles porque también la “casta” se vería perjudicada y, en gran medida, parece estar haciéndolo; por eso, no se entiende qué buscó con la proposición de Lijo, tal vez el mejor exponente de ella en la Justicia. Esa falta de visible razón da pábilo a sospechas y genera rumores acerca de algún pacto subterráneo con el kirchnerismo dado que, para la efectiva designación, se requiere del voto afirmativo de 48 senadores, una cifra imposible de alcanzar sin la aprobación de Cristina Fernández, que conserva una enorme influencia sobre los legisladores de su facción; ayer mismo, una de sus principales espadas, el Senador José Mayans, expresó su complacencia por la intención de cubrir la vacante en la Corte. Reconozcamos que suena raro.

 

El Presidente está pagando un enorme costo político con esta propuesta, una tonelada de barro que cayó sobre su impoluta imagen. Si lo hizo sólo para intentar subordinar a los tres ministros (Rosatti, Rosenkrantz y Maqueda) que se niegan a actuar con la ductilidad que mostraba su colega Lorenzetti al tratar con la Casa Rosada cuando ejercía la Presidencia del cuerpo, no lo logrará, por mucho que haya jubilado anticipadamente (avisándole que no permitirá su permanencia cuando cumpla 75 años) al tercero de los antes mencionados.

 

La otra posibilidad, claro, es que se busque compensar políticamente a la “casta”, con el ingreso de Lijo a la Corte, la conformidad simultánea para la designación de Manuel García-Mansilla, un constitucionalista intachable, que reemplazaría a Maqueda al cesar éste. Si bien creo que la política es el arte de la negociación, que se torna esencial cuando se carece de volumen numérico en el H° Aguantadero, me parece que el Tribunal supremo, árbitro de la constitucionalidad de las leyes y como tal necesariamente incuestionable y transparente, no debe ser un ámbito donde esas transacciones puedan llevarse a cabo, en especial en un Gobierno que, como vemos todos los días, se resiste siquiera a dialogar con la oposición para alcanzar sus objetivos legislativos.

 

Por el bien de la República y de sus instituciones, espero que el Presidente dé marcha atrás y desista de cometer tamaño disparate, porque con una Justicia independiente, seria, rápida y limpia, todo será posible; sin ella, nada lo será. Concluyo felicitando a Victoria Villarruel, Vicepresidente de la Nación, por la forma en que se está desempeñando, plasmada en la entrevista que concedió a Joni Viale el jueves, que le permitió desmentir las especulaciones, emanadas de las múltiples usinas destituyentes afectadas por la liberación de la economía y las desregulaciones, acerca de su presunta intención de reemplazar a Milei en el sillón de Rivadavia.

¿Con qué cara? 16-03-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 933

 

“Cuando la Patria está en peligro, se recurre a Dios y al soldado; cuando el peligro pasa, Dios es olvidado y el soldado, despreciado”

 

Hoy, tal como sucediera a partir de 1969, la Patria está en peligro frente al desalmado ataque del terrorismo, ahora derivado del narcotráfico, cuya enorme expansión se debe a la sociedad comercial que mantuvo con el kirchnerismo y se sostiene aún con la protección y colaboración de políticos, jueces, fiscales, policías, corrompidos por la enorme masa de dinero que manejan los cárteles. Y nuevamente, como en 1975, todas las miradas de la sociedad se concentran en las fuerzas armadas (FFAA) para disponerlas a “exterminar” (Juan Perón, 19 Ene 74, tras el ataque al Regimiento de Tanques 10, de Azul) y “aniquilar” (Decreto del 5 Feb 75, que ordenó el Operativo Independencia) a los nuevos agresores. Como han pasado casi 50 años de esos hechos, resulta imprescindible recordar que la mayoría de los ataques a guarniciones y comisarías, atentados con bombas (4380), de secuestros (758), de muertos (1094) y heridos (2368) que cometieron Montoneros y el ERP se dieron, precisamente, durante el gobierno constitucional del Presidente con mayor apoyo electoral de la historia.

 

Raúl Alfonsín comenzó a desfinanciar a las FFAA y durante su gobierno, después de juzgar y condenar a los integrantes de las tres juntas militares y a los jefes de las organizaciones terroristas, proceso en el cual el Tribunal reconoció que habíamos vivido una guerra, el Congreso dictó las leyes de “obediencia debida” (responsabilidad penal limitada sólo a los mandos superiores) y “punto final” (límite temporal a la posibilidad de denunciar presuntos delitos de lesa humanidad).

 

Carlos Menem, amén de continuar la política de restricción de recursos presupuestarios, decretó el indulto para todos, militares y terroristas, que habían sido condenados en esos juicios. Después de las breves presidencias de Fernando de la Rúa y de Eduardo Duhalde, en 2003 llegó al poder Néstor Kirchner y la tragedia se consumó (y nada cambió durante las presidencias de Mauricio Macri y Alberto Fernández). Para obtener la impunidad que le concedía la izquierda, inició una feroz cacería de militares con la anuencia del Congreso y del Poder Judicial y extendió las indemnizaciones menemistas a todo un insólito universo de falsos reclamantes. A la vez, reglamentó la Ley de Defensa (1988) para limitar el accionar de las FFAA exclusivamente repeler a ejércitos extranjeros, formales y uniformados, que invadan nuestro territorio.

 

Por sus instrucciones, el H° Aguantadero resolvió la nulidad (sólo para los jefes de las FFAA) de los indultos de Menem, derogó el Código de Justicia Militar (las acciones militares fueron juzgadas con el Código Civil) y las leyes de “obediencia debida” y “punto final” y miles de soldados de baja graduación, civiles y sacerdotes fueron imputados y procesados en juicios absolutamente nulos; es más, para que no resultara aplicable a ellos la ley del “2x1” (cada día de prisión preventiva se computa doble para la pena), la “reinterpretó”. Y el Presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti, dijo que se trataba de una política “consensuada” con los otros poderes del Estado.

 

Para llevar adelante esos procesos kafkianos, se destruyeron todos los pilares del Derecho: los imputados no fueron juzgados por sus jueces naturales y, bajo una ley posterior a los hechos, dejaron de funcionar la presunción constitucional de inocencia y la ley más beneficiosa para el condenado, las limitaciones a las prisiones preventivas -transformándolas en penas anticipadas-, se manipularon testigos y se desvirtuaron las pruebas, y se resolvió la imprescriptibilidad de los llamados delitos de lesa humanidad.

 

Para tener una idea de la magnitud de la represalia, en Núremberg los aliados vencedores juzgaron a sólo 24 jerarcas nazis, imputados por la matanza de 6 millones de personas; en la Argentina, los datos, al 28 de febrero de 2024, son diametralmente distintas: de los 2725 presos políticos (PP), uniformados y civiles, han muerto en cautiverio 830, de los cuales sólo 125 tenían sentencia firme; y pese a que la ley dice que la prisión preventiva sólo puede extenderse por 2 años, prorrogable por uno más por causas justificadas (peligro de fuga o de alteración de pruebas), 19 PP llevan 16 años en esa condición, 145 PP entre 11 y 15 años, 212 PP entre 6 y 10 años, y 142 entre 3 y 6 años. Y se trata de detenidos cuyas edades oscilan entre los 64 y los 100 años, con un promedio de 79. El absurdo llegó al paroxismo con el copamiento del regimiento de La Tablada, en enero de 1989, recuperado a sangre y fuego (10 militares muertos) por el Gral. Alfredo Arrillaga; éste (91 años) está preso y los guerrilleros asesinos están libres e indemnizados.

 

Esa canallesca persecución, cuyo único objetivo fue la venganza de los terroristas y, a la vez, habilitar el cobro de miles de indemnizaciones de US$ 300.000 a cada falso reclamante, fue consentida por una ciudadanía cobarde, hipócrita y suicida, y tolerada por los nuevos mandos de las FFAA que, salvo honrosísimas excepciones, callaron sus debidos reclamos de verdadera justicia. Así, los PP fueron transformados en chivos expiatorios del casi unánime pecado social de haberles exigido tomar el control de una situación desmadrada por la violencia terrorista.

 

En ese luctuoso espejo hoy se miran los jóvenes oficiales y suboficiales mientras se preguntan con qué cara se los convocará ahora a combatir al narco-terrorismo, y se ven obligados a contemplar ese reflejo porque no saben qué sucedería si, amén de carecer de aptitudes específicas, después de la sanción de una ley que habilite la participación de las FFAA en esta nueva guerra interna, aquélla fuera otra vez derogada por el H° Aguantadero y quienes hubieran participado en esa inevitablemente terrible guerra, juzgados dentro de muchas décadas como criminales comunes.


Perdidos en Marte 09-03-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 932

 

“A veces me he preguntado qué aspecto tendrían los Diez Mandamientos si Moisés los hubiese pasado por el Congreso de los EE.UU”.

Ronald Reagan

 

Durante todo este tan excepcional verano, los habitantes del mundo político, se trate de gobernadores, intendentes, “expertos en mercados regulados”, eternos dirigentes gremiales o crápulas gerentes de la pobreza, se han movido en medio de una extraña niebla que surge de la Casa Rosada; parecen marcianos en Carnaval. La razón es bien simple: Javier Milei no sólo no ha cambiado un ápice cuanto prometió hacer en campaña, sino que, con inusitada velocidad, marca la agenda diaria y no está dispuesto a jugar con las reglas tradicionales que sólo han beneficiado a la “casta” a fuerza de extorsiones y concesiones de inicuos privilegios.

 

Nunca se habían topado con alguien que, simplemente, no acepta amenazas ni presiones y, cuando éstas se producen, se niega a usar los instrumentos legales de los que dispone para frenarlas. Omar Maturano lo comprobó tempranamente cuando avisó, con bastante anticipación, que el sindicato de los conductores ferroviarios (La Fraternidad) haría una huelga para paralizar los trenes; esperaba que el Gobierno reaccionara dictando la conciliación obligatoria, pero, simplemente, éste lo ignoró. Concretada la medida de fuerza, fue él quien resultó condenado por la sociedad, cuyos integrantes más humildes fueron los principales perjudicados, en una reiteración de lo sucedido con el reciente paro general que realizó la CGT, comandada por otros sindicalistas repudiados y corruptos.

 

A los mandatarios provinciales les sucedió algo parecido cuando, a instancias del Gobernador de Chubut, Ignacio Torres, intentaron apretar al Ejecutivo nacional advirtiéndole que cortarían la salida de gas y petróleo del sur y dejarían al país entero sin energía; olvidaron que los yacimientos están concesionados a empresas privadas, y son privados los ductos que transportan los fluidos. El Presidente ganó la pulseada recordándoles los contratos de financiamiento firmados con el Estado federal y los gobernadores tuvieron que volver al redil.

 

Y para agravar el cuadro, Milei obtuvo un nuevo e inesperado plazo de casi tres meses con su convocatoria a firmar un acuerdo de diez políticas de Estado para que subsistan en los próximos mandatos con total prescindencia de lo circunstancial. Una vez más, todo el arco político quedó sumido en el desconcierto y obligado a abstenerse de actuar agresivamente hasta entonces. Por cierto, fue una muy inteligente movida y, en un país donde el largo plazo es la semana que viene, no es poco. Todos los gobernadores concurrieron ayer a una reunión previa, con la conspicua presencia de Axel Kiciloff, el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires que pretende ser el nuevo jefe del kirchnerismo, pese a su responsabilidad en tantas catástrofes que, por su soberbia e impericia, están cayendo sobre la Argentina en los tribunales de Nueva York y Londres.

 

Esta forma diametralmente distinta de conducir al país está generando, en el interior de todos los partidos políticos y en sus respectivas bancadas legislativas, nuevas fragmentaciones que amenazan su existencia misma. El radicalismo, que tiene el gobierno de cinco provincias, se divide entre los pocos que apoyan a la absurda oposición encarnada en su conducción nacional, a cargo de Martín Lousteau, y una muy importante fracción que está dispuesto a apoyar el programa de Milei, prometiendo nuevos remezones en la próxima Convención del partido.

 

El PJ, arrastrado por Cristina Fernández a las peores derrotas electorales de su historia, no consigue hacer pie y, horrorizado, observa como quienes suponía más leales, como el Gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, se inclinan a acompañar al Gobierno federal en los fundamentales cambios que propone, y sus liderazgos impuestos a dedo, como el de Máximo Kirchner en la jefatura partidaria en la Provincia de Buenos Aires, son severamente cuestionados. La desesperación cunde en sus filas y pueden llevar a sus dirigentes a imaginar nuevos golpes palaciegos, al estilo de los que organizó sucesivamente Eduardo Duhalde para llegar al sillón, porque saben que, si el modelo Milei llega al mes de junio sin un estallido social, arrasará en las elecciones de medio término y se hará con un montón de legisladores dispuestos a dar al Presidente las leyes necesarias.

 

Mientras tanto, el extraño “peronismo federal”, que pretende encabezar Miguel Ángel Pichetto, ha perdido tanto la brújula (quería ser la renovación, con vistas a acceder al poder en 2027) que se une al condenado delincuente Guillermo Moreno y al feudal Gildo Insfrán, eternizado Gobernador de Formosa, es decir, con lo peor disponible en su paleta de colores, repleta de infinitas y siempre cambiables franquicias. Y el mismo PRO se desgaja entre Mauricio Macri, del lado del Gobierno, y Horacio Rodríguez Larreta, en la resistencia.

 

En el ambiente periodístico, muy confundido, por cierto, proliferan las versiones, muchas veces contradictorias, porque no encuentra a quien creer al concentrarse las decisiones en la muy pequeña y cerrada mesa chica de Olivos, y se ve obligado a poner en permanente duda los dichos de los funcionarios, sean dados en “on” o en “off”. Y todo se le complica porque los estudiosos de la realidad social, como Guillermo Olivetto o la Universidad di Tella, dan cuenta de la contradictoria impresión que reciben en los “focus group”, que prestan voz simultáneamente a la dura situación económico-social que todos vivimos, acompañada por una irreductible confianza y una inédita esperanza en la gestión gubernamental.

La noche de anoche 02-03-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 931


” No tengo miedo de un ejército de leones dirigidos por una oveja; tengo miedo de un ejército de ovejas dirigidos por un león”. Alejandro Magno.

 

Como es bien sabido, cierro mis notas los viernes a las 1900 hs, aunque les ponga fecha de sábado; esta vez, por razones más que obvias, decidí esperar hasta la mañana para hacerlo y, claramente, lo sucedido en el Congreso justificó hacerlo, porque el discurso del Presidente ante la Asamblea Legislativa, para inaugurar el período de sesiones ordinarias, marcó un antes y un después en la penosa historia reciente y, en especial, se diferenció del primero de Mauricio Macri, en 2016, cuando cometió el fatal error –que le reproché en su momento desde aquí- de faltarle el respeto a la sociedad al no contar en detalle el estado en que había recibido la administración pública de las ausentes manos de Cristina Fernández.

 

Ya la semana había marcado un cambio importante, cuando las investigaciones desnudaron inmensos focos de corrupción en ANSES, AySA, PAMI, YPF, Aerolíneas Argentinas, todos los ministerios, la administración de los planes sociales y, la frutilla de ese postre tan maloliente, la contratación de innecesarios y carísimos intermediarios, vinculados claramente a Alberto Fernández, en los seguros públicos. El ex Presidente, aún ahora, invoca una pureza virginal mientras cobardemente inculpa por sus horribles latrocinios a las personas más cercanas; ya lo había hecho cuando, durante la “cuareterna”, fueron descubiertas sus fiestitas de Olivos y las adjudicó a su “querida Fabiola” y hoy lo vuelve a hacer señalando a su eterna –más de 30 años- secretaria privada e íntima amiga.

 

Javier Milei sorprendió a propios y extraños con la convocatoria a los gobernadores a suscribir el 25 de Mayo un pacto refundacional en Córdoba. De firmarse ese acuerdo, que contiene un esencial y positivo decálogo, que enumeró y calificó como innegociable, será en una vuelta copernicana en el camino de decadencia que nos trajo hasta aquí pero, con seguridad, enfrentará fuertes resistencias de los sectores que se verán afectados; me refiero a todos aquéllos que encarnan la “casta”: gobernadores e intendentes habituados a pasar la gorra, eternizados dirigentes gremiales, “expertos en mercados regulados”, profesionales de la política subsidiada, gerentes de la pobreza e industriales sobreprotegidos especialistas en cazar en el zoológico y pescar en la bañadera.

 

El león libertario, al que aplaudí con enorme entusiasmo durante todo su discurso, no defraudó a quienes lo llevaron al poder: no cambió un ápice las propuestas que hizo a la ciudadanía en campaña y desde el llano y, con gran tranquilidad, aseguró estar dispuesto a confrontar con quienes se opongan. Pero su inesperada y rutilante irrupción en un universo político tan decadente, con un mayoritario apoyo que conserva en medio de tantos sufrimientos, ha producido en todos los partidos una atomización que, al menos hasta ahora, les impide generar líderes fuertes que puedan encabezar la resistencia o impulsen un nuevo “club del helicóptero”; los ejemplos están a la vista, tanto en el peronismo y el radicalismo, cuanto en la franquicia kirchnerista y en el PRO. Y enfrente tienen un Presidente y una Vicepresidente fuertes, capaces de resistir cualquier intento destituyente que quisieran intentar los de siempre.

 

Por otra parte, y desmintiendo todos los rumores y suspicacias acerca de presuntos pactos preexistentes con los máximos responsables del cataclismo que arrasó el país e hizo colapsar todas sus columnas basales (educación, trabajo, salud, seguridad, defensa, economía, estructura social), anoche les puso nombres y apellidos: Cristina Fernández, Sergio Massa, Máximo Kirchner, Hugo y Pablo Moyano. La renovada instrucción a la UFI y a la OA de constituirse en querellantes en las causas de corrupción permite presumir que esas menciones no serán gratuitas.

 

A grandes rasgos, ya que una hora no hubiera alcanzado para hacer un inventario completo de las calamidades que esta administración heredó. Pero Milei no intentó enmascara o suavizar la certeza de que los próximos dos meses serán aún más duros para la sociedad en general, aun cuando la monstruosa inflación que heredó esta administración tienda a reducirse, por la generalizada recesión y la fuerte caída en el poder adquisitivo de salarios y jubilaciones, pero estoy convencido que, ya en mayo, el panorama general mostrará mejoras y traerá un principio de alivio. La ciudadanía, en medio del rigor que obliga la situación, está reaccionando debidamente al no convalidar los aumentos desmedidos de precios, y en algunos productos básicos éstos han comenzado a bajar. Si tenemos la tenacidad de aguantar un poco más estos obligados cambios de hábitos, para entonces habremos logrado cruzar este doloroso Jordán.

 

El impresionante cambio de rumbo en materia de alineamiento geopolítico que impulsó Milei, sumado al camino exactamente inverso que está recorriendo Luiz Inácio Lula da Silva, está dando sus primeros frutos que, con seguridad, tendrán efectos positivos en nuestra relación con el FMI. El reconocimiento internacional al esfuerzo que el Presidente está realizando para sacar al país del pantano y su clara alianza con los Estados Unidos le ha permitido, por ejemplo, recibir a grandes figuras del gobierno de Joe Biden y, a la vez, participar de un acto partidario con Donald Trump sin que ello altere el clima de amistad y respaldo.

 

Esta semana veremos reaccionar a los dueños de los miles de kioscos que se están empezando a clausurar mientras se cierran los absurdos agujeros por los cuales se escurrió (y se robó) tanto dinero. Pero tomémoslo, como hace Milei, con calma, que la sangre no llegará al río.

Sólo infamias 24-02-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 930

 

“Algunos de esos dirigentes gremiales, dueños de empresas y fortunas, se han transformado en los máximos extorsionadores del poder democrático”. Jorge Fernández Díaz

 

A sólo setenta y seis días de asumir, las deslumbrantes luces que encendió el Gobierno iluminan sin piedad las canalladas que el kirchnerismo cometió, con alevosía y sin vergüenza alguna, contra la sociedad en su conjunto; explican, en gran medida y para quien quiera verlas, las causas del inconmensurable desastre que hoy vivimos.

 

Todos los días, cualquiera sea el lugar que toque la actual administración, surgen toneladas de maloliente pus, síntoma claro de una extendida infección. Antes fueron los “chocolates” de la Legislatura bonaerense, los inicuos recitales “gratuitos” organizados con fines proselitistas por gobernadores e intendentes de las provincias y municipios más pobres, y los ya famosos fondos fiduciarios, esa monumental caja política –US$ 10.000 millones- de la que se alimentó la “casta” veinte años y que, al ser defendida con uñas y dientes por sus beneficiarios, hizo fracasar la “ley ómnibus”; esta semana, fueron el PAMI, la ANSES, el INADI, el IOMA, desmesurados organismos con presupuestos enormes y poblados de militantes “ñoquis” con remuneraciones de ensueño e incapaces de cumplir la función social para la que fueron creados.

 

Recuerdo a los funcionarios que tienen la obligación legal de denunciar los delitos de los que tomen conocimiento, y que serán los fiscales quienes, al recibir la información, impulsen la acción penal cuando corresponda. Y al Ministro de Justicia le agradezco que haya devuelto a la UIF y a la OA la posibilidad de actuar como querellantes, facultándolos a requerir pruebas.

 

En el caso de los fideicomisos, el más rutilante (no el mayor ni el menos explicable) es el Fondo de Integración Socio-Urbana (FISU), dirigido por Fernanda Miño, una enriquecida habitante de La Cava (San Isidro) e integrante del movimiento que lidera Juan Grabois, el líder de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular, al cual el Estado giró durante cuatro años dos millones de dólares diarios para obras que no se hicieron y que, cuando lo fueron, se trató básicamente de cordón-cuneta. Hoy, a pesar del escándalo, el dinero sigue fluyendo hacia el FISU, ahora canalizado por Caritas y las iglesias evangélicas. Este audaz piquetero, que se atribuye una íntima amistad con SS Francisco, tiene otro negocio comparable en el papel y el cartón que sus “cooperativas” compran, a precio vil, a los miles de pobres, verdaderos esclavos, que vemos cada noche en las calles del AMBA empujando sus penosos carritos.

 

Una somera auditoría sobre los distintos planes sociales, repartidos a mansalva por los Fernández², arrojó resultados sorprendentes, con miles de beneficiarios que viajaron al exterior en aviones y barcos, muchos con trabajos formales y decenas de antiguos muertos que seguían cobrando. Cuando se intenta terminar con la corrupción que campea en la intermediación de los alimentos, los gerentes de la pobreza, Grabois en primera fila, mandan descomunales obesas con ollas vacías a protestar y lloran en público por el hambre, y en privado porque se les acaba el robo y la reventa. Ahora, todas las organizaciones se han unido, como se vio ayer, en una protesta generalizada que enmascara la verdadera razón tras el telón de las necesidades de los pobres.

 

La reglamentación de la desregulación de las obras sociales sindicales afectó tanto a los dirigentes que, sin pudor alguno, despertaron del letargo de cuatro años en que se sumieron para evitar notar el terrible deterioro de salarios y jubilaciones y el aumento sideral de la pobreza que el populismo salvaje producía. Y es razonable que así ocurra, puesto que es de los aportes compulsivos de los trabajadores a las áreas de salud de los gremios de donde sus jerarcas extraen su riqueza personal; se sienten tan impunes, y lo han sido desde 1966, que no dudan en exhibir sus numerosos automóviles de lujo, sus fastuosas residencias, sus empresas contratadas por las mismas organizaciones que dirigen y sus viajes a sitios paradisíacos.

 

Con la percepción del notorio fracaso de la huelga general que promovieron hace pocos días, pero muy preocupados por el ataque a su órgano más sensible (el bolsillo), ahora reaccionan con paros sectoriales de todo tipo, en un remedo de guerra de guerrillas; comenzaron por los ferrocarriles –que sumó descrédito a los gremialistas cuando se informó que los maquinistas perciben salarios tanto mayores a los pasajeros que transportan, que son los principales perjudicados-, los servicios de salud, y amenazan con no iniciar el ciclo lectivo. Si bien es cierto que los médicos, enfermeros y maestros están mal pagos, no lo es menos que se trata de servicios esenciales que no pueden ni deben interrumpirse. Javier Milei debe entender que es en estas áreas –salud y educación, tanto como seguridad, defensa y justicia- donde el Estado debe mantener una presencia esencial, amén de fortalecer los organismos anti-monopólicos.

 

Un frente de tormenta más preocupante viene ahora desde las provincias petroleras de la Patagonia, cuyos gobernadores –varios de ellos del PRO- han unificado sus reclamos por los fondos que, dicen, han sido retenidos ilegalmente por el Presidente. En un comunicado conjunto, amenazaron ayer al Gobierno, apelando al federalismo, con no permitir que salga de sus territorios un solo barril de petróleo ni un metro cúbico de gas si, antes del próximo miércoles, Javier Milei no gira ese dinero. De hacerla efectiva, la energía dejará de fluir, electricidad incluida, con todo lo que ello puede significar para el país al sumarse a la fuerte recesión económica.

Esto no es de ahora    23-02-24 

por Alberto A. Anselmi

De nuestra Redacción:

Esto no es de ahora

Recordamos cuando el Director de este medio fue nombrado por la Secretaría de Lucha y Prevención contra el Narcotráfico, Delegado Regional, desde allí se recorrieron todos los pueblos de San Javier y San Alberto con el vehículo propio de esta Editorial, aunando Escuelas e Instituciones de todo Traslasierra, se comprometieron 330 personas (record) de los mismos en su representación para poder compartir los conocimientos para un trabajo idóneo y coincidente para la protección especial a los menores. No dejamos un Pueblo sin recorrer, Colegios, Instituciones,  Municipalidades y Comunas. Fue un trabajo en equipo. Todo fue con una gran labor.

El Secretario de la Secretaría del Narcotráfico y políticos del gobierno provincial, estuvieron presentes en la inauguración de la oficina en Traslasierra, específicamente en contribución de este periódico, brindando sin ningún cargo los espacios cedidos.

A las pocas semanas informamos a la Gobernación la existencia de estos medios de venta de drogas. Qué resolución tomó el gobierno? Avisarle a los narcos antes del allanamiento y cuando con el “Teatro” necesario ejecutan un allanamiento en los lugares, no había nada comprometedor y el Gobernador terminó por NO reconocer a Anselmi como Delegado Regional, convirtiendo a Anselmi en el hazme reír de peronistas y otros. Schiaretti resolvió no pagar nada por nuestros servicios ampliamente ejecutados, negando los tres certificados firmados por el Secretario de la Secretaría, Sebastián García Díaz.

Ahora y gracias al cambio en Mina Clavero de Intendente Peronista a Radical, quien fue capaz de abrir las puertas y sin avisos para que la policía de Villa Dolores pudiera entrar e inspeccionar los lugares que muchos pobladores ya conocían.

Esto es lo que la gente se debe dar cuenta, que hay que eliminar este kirchnerismo de tanta corrupción y violencia contra todos los opositores de su oposición, Como lo decía Perón: “Levantaremos horcas en todo el país para colgar a los opositores”. (8-9-47).

“Objetivo: Lista de dirigentes opositores; lista de instituciones reconocidas, como desafectar al gobierno; lista de opositores o de casas comerciales dirigidas o ligadas a los opositores; lista de representaciones cuyos gobiernos realizan campañas opositoras al nuestro. Personal: Serán empleados grupos previamente instruidos y seleccionados de las organizaciones dependientes de la CGT y del Partido Peronista Masculino. Misión: Atentados personales; voladuras; incendios”. (En el mismo documento). “Se lo deja cesante y se lo exonera… por la simple causa de ser un hombre que no comparte las ideas del gobierno; eso es suficiente” (3ª. Conferencia de Gobernadores).

Y así dejaron al país. La única solución es sacar para siempre a esta casta que tanto daño hizo al país y que no puedan, nunca más ejercer ningún cargo público.

Alberto Anselmi

Director

Desvergüenza 17-02-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 929

 

“No os fiéis de las palabras, que sirven para deslumbrar y tergiversar las cosas; no os fiéis de vosotros, que podéis equivocaros; hechos, sólo hechos, que lo demás son nubes”.  Santiago Rusiñol

 

La semana política local, sin olvidar la exitosa gira internacional que llevó a Israel e Italia al Presidente, tuvo un hecho refulgente: el documento de 33 páginas con el cual reapareció Cristina Fernández; en él no sólo fustigó a Javier Milei y sus ministros, sino que extendió sus críticas al títere que escogió, con un tuit, como titular del gobierno que ella secundó como Vicepresidente. Si algo confirmó la condenada jefa de la asociación ilícita que saqueó al país hasta dejarlo de rodillas, con una pobreza que supera el 50%, es que estamos ante una peligrosa psicópata, que pretende consumar una nueva estafa a la sociedad a escasos días de unas urnas que llevaron al peronismo a la peor derrota electoral de su historia.  

 

Todos la conocemos, ya que la padecimos durante 20 años en distintas funciones institucionales, pero el cinismo, la descarada mentira y la tergiversación de la historia que caracterizan este nuevo escrito hizo que la sociedad recuperara su capacidad de asombro. Es razonable que así sea, toda vez que las recomendaciones que contiene para la demolida educación pública, para el irracional sistema impositivo, para el tratamiento de la gigantesca deuda externa que ella generó, para el fomento a empresas grandes y medianas, para el obsoleto y perverso mundo del trabajo y para la inexistente seguridad, contradicen flagrantemente todo cuanto hizo desde el poder, aunque lo ejerciera tras bambalinas; el tono general del documento demuestra que la experiencia nada le enseñó y que es una desfachatada.

 

Es más, alguno de sus párrafos son amenazadoramente destituyentes, tal como la mención de los gobiernos de otro signo que, a por acción de distintos “clubs del helicóptero” siempre peronistas, vieron interrumpidos sus períodos presidenciales a lo largo de la historia reciente. Algún fiscal debería recoger ese desafiante guante con el cual volvió a azotar la cara de nuestra tan frágil democracia, y llevarla ante la Justicia.

 

Pero lo más grave es la impunidad -ese inexplicable manto con que la cubre aún Javier Milei- con la que se sigue moviendo en el escenario político, sin pedir perdón por su infinita corrupción ni sugerir la posibilidad de restituir al Estado al menos una pequeña parte de lo mucho que tanto ella como sus testaferros y cómplices robaron. Peor aún, a corto plazo, por la sentencia que condenó al país a pagar US$ 16.100 millones por la “estatización” de YPF, esta señora y su familia volverán a enriquecerse al embolsar el 30% de esa monstruosa suma.

 

En medio del feroz ajuste del gasto público que está ejecutando el Gobierno, cuya mayor víctima es la clase media afectada por la pinza que constituyen la dramática reducción del poder de compra de salarios y jubilaciones y, simultáneamente, el fortísimo aumento de precios de alimentos y servicios de todos los órdenes, cada día clama más al cielo la falta de referencias tanto del Presidente cuanto de su Ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, a la monumental corrupción que nos ha traído hasta aquí. No bastan las públicas condenas al injustificado dispendio de recursos que realizan las provincias en actos puramente demagógicos y populistas, en gran parte con oscurísimos manejos, sino que la sociedad exige –y lo gritará cada vez más a medida que el sufrimiento social se acentúe- que se actúe seriamente contra los claros responsables de esta trágica realidad.

 

No es mediante la propuesta de crear una inútil y redundante nueva Fiscalía, como dice Cúneo Libarona que se procederá, sino devolviendo a la Unidad de Investigación Financiera y a la Oficina Anticorrupción la facultad de actuar como querellantes en las causas penales contra los mayores jerarcas de la pirámide kirchnerista y sus contrapartes, las decenas de empresarios que confesaron sus delitos y las coimas que pagaron a funcionarios en la investigación de los “Cuadernos” de Oscar Centeno.

 

En otro orden de cosas, también apelo encarecidamente al Gobierno para que, sin un minuto más de demora porque las penosas circunstancias personales de los afectados así lo amerita, ese mismo Ministerio de Justicia que aparenta ser tan complaciente con los corruptos, se presente en todas las causas mal llamadas de “lesa humanidad” y requiera a los jueces, convertidos en verdaderos asesinos togados, cumplir su expresa obligación constitucional de considerar a todos los ciudadanos iguales ante la ley. La Ley 24.390 establece, claramente, que la prisión preventiva sólo puede disponerse por un máximo de dos años, prorrogable por uno más por razones fundadas; éstas son el peligro de fuga y la posibilidad de alterar las pruebas del proceso, y faculta a los jueces a otorgar la detención domiciliaria a los mayores de 70 años, como sin duda harán con Cristina Fernández.

 

Sin embargo, la enorme mayoría de los presos políticos (militares, policías, sacerdotes y civiles) que se pudren en las cárceles de todo el país no tiene aún sentencia firme y, sin embargo, padece prisiones preventivas que, en todos los casos, superan por mucho ese límite temporal y, puntualmente, llegan a los dieciséis años. Como nadie puede suponer que estos adultos mayores, que mueren como moscas detenidos en penales sin posibilidad alguna de atender a las patologías naturales de la vejez, puedan evadir la acción de la Justicia fugándose, o poner en riesgo las pruebas relacionadas con hechos sucedidos hace 50 años, sin duda estamos ante a una venganza de quienes fueron derrotados militarmente entonces, hoy encaramados en lugares expectables de la administración pública, la magistratura, la prensa y los organismos de derechos humanos “tuertos”.

Tragedias vecinas 10-02-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 928

 

“Las personas que están lo suficientemente locas como para creer que pueden cambiar el mundo, son las que lo hacen”.

Steve Jobs

 

Chile y Argentina están viviendo acontecimientos dramáticos casi en espejo. Mientras se incendiaban Viña del Mar y el Parque Nacional Los Alerces, hechos respecto a los cuales se sospecha responsables de nuestro lado a los falsos mapuches y, del otro, a sus reales homólogos trasandinos y a terroristas de variado origen, murió Sebastián Piñera, un Señor (con mayúscula) que, como Presidente y como opositor, hizo una enorme contribución a la cultura cívica y la convivencia política de su país; vayan mis consternadas condolencias a sus familiares y conciudadanos. Guardando las debidas distancias, en Buenos Aires el Gobierno decidió matar, sin silenciador, su proyecto de ley denominado pomposamente “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos”, al decidir su regreso a comisiones de la Cámara de Diputados, o sea, volver a foja cero el trámite legislativo; ahora, deja trascender que no insistirá en presentarlo.

 

Javier Milei llegó a la Presidencia por una suma clara de voluntades: 30% de votos propios, más un 26% del antikirchnerismo proveniente de la fallida candidatura de Patricia Bullrich. Pero lo hizo solo, sin armar un partido político real, es decir, una verdadera estructura que le permitiera obtener gobiernos provinciales y numerosas bancas legislativas federales. Está armando su gobierno con los hombres y mujeres que encuentra, ya que tampoco dispone de un importante caudal de experimentados cuadros capaces de asumir el control inmediato de todo el inmenso aparato de la administración del Estado. Que algunos de los elegidos sean ya tránsfugas o severamente cuestionables es, por hoy, harina de otro costal.

 

Porque protagoniza un giro copernicano en la lamentable deriva de nuestra historia, ejerce una forma de hacer política totalmente distinta. La manera en que el Ejecutivo se comportó en el Congreso permite calificarla de inocente o de audaz, según se la mire. ¿Realmente pensó que los diputados aliados o “dialoguistas” apoyarían en masa una reforma tan terminal para un sistema que les ha permitido subsistir tan ricamente hasta ahora?; antes del presunto fracaso, ¿no hizo un mero “poroteo” de votos para predecir qué expectativa de vida tenía su proyecto “ómnibus”?

 

Si la primera hipótesis fuera cierta, es decir, que Milei sea un virginal perdedor, habría aprendido con sangre una vieja lección: “Las democracias requieren negociación y concesiones. Los contratiempos son inevitables; las victorias, siempre parciales. Las iniciativas públicas más importantes para un presidente pueden ser destrozadas por los medios, malograrse en el Congreso o ser rechazadas por las Cortes” (S. Levitsky y D. Ziblatt, en “Cómo mueren las democracias”). Hasta un régimen tan siniestro como el que encabezó Cristina Fernández tuvo que aceptar que, aún maltrechas y golpeadas, las instituciones republicanas siguen funcionando en la Argentina; basta recordar qué suerte corrieron sus iniciativas de enjuiciar a los miembros de la Corte, de terminar con la prensa libre, de arrodillar a la Justicia desde el Consejo de la Magistratura, etc. En definitiva, no pudo, pese a su intenso “vamos por todo”, lograr una imposible impunidad por el pavoroso saqueo al que sometió al país.

 

La otra posibilidad es que, a sabiendas de lo inútil que resultaría el trámite parlamentario para el cambio que pretende, haya actuado intencionadamente para obligar a quitarse las caretas a los responsables de la suma histórica de fracasos que nos trajeron hasta aquí, tras las que pretendían seguir ocultándose en el Carnaval que hoy comienza, y exhibir su irresponsabilidad en esta cruel encrucijada y su distanciamiento de la sociedad.  Resultó notable ver a los representantes de algunas provincias en las que arrasó Milei (Córdoba es el mejor ejemplo, ya que allí obtuvo el 74% de los votos) oponerse a la voluntad de la enorme mayoría de sus habitantes.

 

Me inclino a pensar que lo que vimos el martes fue una jugada maestra del Presidente que, aún hoy y a pesar de la horrible estanflación que heredó y aspira corregir, conserva un substancial apoyo de la ciudadanía. Le permitió mostrar que pese a que, según la Constitución, los diputados representan a los ciudadanos de las provincias que votaron hace muy poco y masivamente por un futuro distinto, la “casta” se defendió a sí misma y a sus privilegios, descuartizando el proyecto para impedir cualquier alteración de ese status quo que le resulta adictivamente confortable. Aparentemente, también razonaron así los mercados, y la prueba fue la fuerte reducción en las varias cotizaciones del dólar, tanto en su versión blue cuanto el MEP y el CCL, después de un breve espasmo alcista; dependerá de los próximos pasos del Gobierno y de la tolerancia social la duración de esta pax cambiaria.

 

Amén del placer de verlos trabajar traspirando en verano, el único positivo subproducto de las maratónicas sesiones fue la comprobación del escaso, casi nulo, bagaje intelectual de la enorme mayoría de esos legisladores, probados analfabetos a los que nadie conoce y que accedieron a esa Cámara integrando listas-sábana confeccionadas por los jeques partidarios. Los prolongados discursos para oponerse a la aprobación de la ley, que mostraron sólo la desvergüenza y la idiota ideologización de quienes los pronunciaban, deben haber hecho llorar de tristeza a las paredes de un recinto que, años ha, escuchó las cultas e inflamadas verbas de Leandro Alem, Alfredo Palacios, Juan B. Justo, Arturo Frondizi, Ricardo Balbín y tantos otros. A la vista está que los argentinos no podemos, ni debemos, tolerar más esta deliberada protección a quienes hacen de la política un espúreo medio de vida, y exigir la inmediata utilización de la lista única en papel para evitar tamaña corruptela. Y también la “ficha limpia” de quienes pretendan ser candidatos, para impedir que sátrapas poseedores de prontuario y oscuro pasado puedan acceder a cualquier función pública.

Tripas Revueltas 03-02-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 927

 

“El saber y la razón hablan, la ignorancia y el error gritan”.

 Arturo Graf

 

Este tórrido verano que azota a la Argentina tiene su epicentro en las maratónicas sesiones del H° Aguantadero, y no es para menos. Un presidente, que desmiente con sus actos el fascismo que le endilgan el trotskismo y el narcokirchnerismo, envió a discusión (en realidad, a vivisección) dos enormes paquetes legislativos, la “Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” (aprobada ayer en general por amplia mayoría) y el Decreto de Necesidad y Urgencia, con los cuales pretende dar vuelta al país como un guante y relanzar su destino.

 

El jueves, después de fracasar en la tentativa de suspender la sesión en la Cámara de Diputados, la sociedad contranatura de camporistas ladrones y trotskistas subnormales decidió trasladar sus acciones a la calle para unificar sus reclamos precisamente con las más claras víctimas del populismo que arrasó el país. Mis retorcijones se agudizaron al ver al caradura Diputado y tan ilegalmente enriquecido Máximo Kirchner moverse burlonamente por la plaza, acompañado por una guardia pretoriana de desvergonzados colegas, entre los que destacaban Cecilia Moreau (nada menos que Vicepresidente 1° de la Cámara), el políglota ex Canciller Santiago Cafiero, la inefable Victoria Tolosa Paz, y Nicolás del Caño con Myriam Bregman, estos dos últimos representantes de una izquierda trasnochada que sólo alcanzó al 2% de los votos en las elecciones.

 

Sólo un país tan generoso como el nuestro permite que los causantes de tanta miseria fomenten la violencia irracional de verdaderos subversivos paseándose disfrazados de demócratas y republicanos, sin que nadie les exija rendir cuentas de sus nefastas gestiones y, menos aún, de sus inexplicables patrimonios. Habíamos tenido un adelanto el miércoles 24, cuando Axel Kiciloff, responsable directo por impericia dolosa de una de las mayores estafas que hoy nos agobian (el juicio perdido en Nueva York por la estatización del 51% de YPF, que costará US$ 16.100 millones) apareció sonriendo en la marcha de la CGT, mientras la Provincia que gobierna lloraba desesperada a Umma, la niña asesinada.

 

Nada de eso, sin embargo, puede llamar la atención de una sociedad hipócrita que, a cambio de falsas dádivas estatales, toleró sin inmutarse que el frustrado (por la temprana muerte de su gestor) proyecto de dinastía milenaria llevara adelante un horrible ataque a las instituciones y a las libertades individuales. Claramente en contra de tan perversas intenciones, y hartos del mal trato que nos propinó el kirchnernismo durante sus cuatro períodos presidenciales, elegimos a este Javier Milei, que hoy nos gobierna apoyado por el voto de 56% de los argentinos.

 

Pero también la recién estrenada gestión me produce retorcijones y me sume en dudas. Al deplorable nombramiento de Mariano Cúneo Libarona como Ministro de Justicia, tema al cual me he referido en las últimas notas, a la conservación de notorios camporistas en los asientos principales de Aerolíneas Argentinas y otras empresas estatales y de colaboradores de Sergio Massa en cajas públicas gravitantes y sospechadas, como AySA, en una clara protección a la corrupción de su mujer, Malena Galmarini, sumo otras designaciones que me hacen demasiado ruido. Daniel Scioli en Turismo y Deportes, o el hermano de Manuel Adorni, vocero presidencial, como asesor en Defensa (hubo que eximirlo de cumplir los requisitos para ello) son algunos, pero no los únicos, tristes ejemplos. Lo mismo sucede con el mantenimiento de la inexplicable protección a las armadurías de Tierra del Fuego, de la cual son principales beneficiarios Rubén Chernajovsky y Nicolás Caputo, tan costosa para el erario como insostenible.

 

Como ya dije, estoy dispuesto a ser paciente y esperar hasta ver cómo se desempeña un gobierno al que apoyo y que sólo lleva cincuenta días de estrenado e inclusive, a soportar calladamente el ajuste que está destruyendo, a una velocidad equivalente al 25% de inflación mensual, el poder adquisitivo de mi jubilación mientras los gastos a los que mi edad me impide renunciar (la prepaga médica) aumentan desmesuradamente.

 

Pero ello no obsta a que, como tantos otros, deje de preguntarme qué alcance tienen los antiguos y ya innegables acuerdos entre Milei y Massa e, inclusive, el supuesto pacto entre el Presidente y Cristina Fernández. Tengo la más absoluta convicción de que la sufrida clase media, hasta el momento única destinataria del durísimo ajuste, dejará de acompañar al Gobierno y comenzará a resistirlo si éste no avanza en la persecución a la sideral corrupción kirchnerista, que nos ha dejado prostrados y exánimes; sólo cuando perciba que esa gigantesca asociación ilícita comienza a pagar penalmente por sus pecados y se recuperan, vía extinción del dominio, por lo menos algunos de los bienes mal habidos, estará dispuesta a extender una confianza que, vistos los proyectos que el Ejecutivo envió al H° Aguantadero, constituye un virtual cheque en blanco.

 

Obviamente, el riesgo de un grave estallido social se agudiza con estos altísimos niveles de inflación, en especial cuando al lógico caldo de cultivo lo sazonan con vandalismo la izquierda violenta, siempre tan magra en votos como activa y visible en la calle, unida al peronismo reivindicador de absurdos y perversos privilegios sindicales y a los gerentes de la pobreza, habituados a organizar saqueos y conflictos para proteger sus intereses. Si el Gobierno no logra reducir la depreciación del peso en el segundo trimestre, ese peligro siempre latente seguramente se convertirá en realidad; a partir de entonces, el desenlace será por completo impredecible.

Sólo preguntas  27-01-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 926

 

“Si de algo soy rico es de perplejidades, no de certezas”.

 Jorge Luis Borges

 

En este país tan vertiginoso nos hemos acostumbrado a que diez días pueden ser un suspiro o una eternidad; por eso, no sé cómo calificar el lapso que transcurrió desde el sonoro discurso que pronunció Javier Milei en el importante foro de Suiza, que concentra factores de poder que superan a los propios Estados. Fue descripto, con ironía, por un ex ejecutivo de JP Morgan: “Davos es donde los billonarios explican a los millonarios qué esfuerzos debe realizar la clase media en favor de los pobres”. Bromas aparte, todos somos conscientes de la enorme repercusión, entre ponderaciones y críticas, que tuvieron las palabras del Presidente. Y ello motivó que se transformara en “EL” tema de conversación en muchas mesas, incluidas las familiares. Porque que fuera aplaudido por personas tan relevantes como Elon Musk, Donald Trump o Georgia Meloni y muchos líderes mundiales prueba que fue, al menos, algo inesperado.

 

Los detractores se concentraron en que habría desperdiciado ese escenario único para mostrar a los inversores las virtudes de nuestro país, que había hablado sólo como candidato y en que había caído en megalomanía al dar cátedra de economía a los tipos que manejan la política, el comercio, la industria y el dinero globales. La primera queja no tiene asidero alguno, toda vez que los grandes capitales –que, por cierto, hay muchos y cuantiosos en busca de oportunidades- cuentan con bancos y consultorías enormes que los asesoran y, por ello, saben de la Argentina y de su raro comportamiento más que sus propios habitantes. No coincido con la segunda y, en cuanto al tercer reproche, puede ser válido puesto que Milei preside un país que, exclusivamente por voluntad propia, ha caído en la más absoluta insignificancia y sólo contagia sus problemas al resto del mundo.

 

Ahora bien; la carrera que llevó a este exótico personaje a la Casa Rosada nos permitió descubrir cuánto habían cambiado los deseos y  las expectativas de la ciudadanía de nuestro país, ya que fue aupado al sillón presidencial por un voto absolutamente transversal, integrado tanto por las élites económicas cuanto por la clase media y los sectores más pobres, que expresó en las urnas su esperanza en un futuro posible y un terrible enfado contra quienes las han traído hasta este miserable presente y, así, impuso al peronismo la derrota más arrasadora de toda su historia.

 

Y aquí comienzan mis incertidumbres sobre el episodio Davos. ¿Será que ese cambio está ya presente en el mundo entero? ¿Habrá sido Milei simplemente quien tuvo la primera oportunidad de expresar claramente ante un público tan especial y conspicuo una extendida vocación de libertad personal? Porque, si algo está quedando expuesto en todas las latitudes es el generalizado descontento social contra los Estados caros e ineficientes y contra las “castas” locales e internacionales que medran a sus sombras mientras son incapaces de transformar positivamente la vida de los ciudadanos. ¿Qué significan, en ese cuadro, las fuertes modificaciones de distinto signo político que se están viendo o anunciando en tantos países?

 

Estructuras tan gravosas y caras para los presupuestos familiares como Naciones Unidas, la Unión Europea o la OEA han demostrado que son meras canonjías para sus funcionarios, puesto que no han podido impedir que Rusia invadiera a Ucrania, que se propagaran las guerras en Medio Oriente, que se incrementen los aprestos bélicos en el Mar de la China, ni que subsistan criminales dictaduras en Nicaragua, Irán, Cuba o Venezuela. Y qué decir de la corrupción estatal, amplificada por su protección al narcotráfico, que está convirtiendo a América Latina en un festival de cadáveres, que se esparce y arrasa con la juventud en todas las latitudes. ¿Acaso no fue precisamente ese el meollo del discurso de Presidente argentino, que acusó al Estado de ser fuente de tantos males?

 

Dejo la cuestión a la opinión de mis lectores para volver a un tema que, como bien saben, me obsesiona. Me refiero a la “extraña” conducta del Ministro de Justicia, quien mantuvo la prohibición dispuesta por Cristina Fernández a la Oficina Anticorrupción y la Unidad de Investigaciones Financieras de actuar como querellante en las causas que eran su natural ámbito de acción. Mis objeciones tienen que ver con lo irrazonable de esa actitud cuando, está más que probado, ambos organismos tanto han contribuido a obtener las escasas condenas de ladrones kirchneristas, apoyando y brindando información clave a los fiscales; o sea, este proceder de Mariano Cúneo Libarona coadyuva claramente a la búsqueda de una socialmente inaceptable impunidad.

 

El jueves, el vocero presidencial anunció que el Ministro trabaja en la creación de una fiscalía especial, con competencia nacional, para avanzar contra la corrupción de los funcionarios, sean éstos nacionales o provinciales y pertenezcan a los poderes ejecutivos o legislativos. Más allá de la falta de precisión en cuanto a si se refiere a actos pasados o futuros, esta iniciativa me parece totalmente irracional, porque bastaría con levantar aquella prohibición sin generar nuevos gastos y, por lo demás, vulnera el federalismo, ya que la competencia sobre los delitos cometidos en las provincias corresponde a sus propios tribunales. Habrá que estar atentos y esperar las aclaraciones del caso, antes de hacer sonar nuevamente las cacerolas para impedir que las necesidades políticas de un gobierno tan carente de espadas en el H° Aguantadero lo lleven a extender un manto de olvido y perdón a los responsables absolutos de la destrucción del país, de la cual dan principal testimonio el 50% de pobreza y el 211% de inflación anual.

La extorsión de la CGT y de los sindicalistas con el paro.    25-01-24 

por Alberto A. Anselmi

Analogía con lo que les enseñaba Perón


El kirchnerismo es un cáncer que se vino devorando todos los dineros de los argentinos y están dispuestos a seguir actuando como lo han hecho siempre y como les enseñó el propio Perón, quien tuvo la suerte de tomar la presidencia con un país absolutamente rico, éramos la 5ª potencia del mundo, pero las cosas comenzaron por mal camino de la demagogia. Según ellos Perón y Evita regalaban máquinas de coser, bicicletas y muchas cosas más y así comenzó a bajar la riqueza que teníamos en el tesoro, que Juan Domingo decía que no podía caminar en el tesoro nacional, por la cantidad de barras de oro que había y poco a poco nos dejó sin nada, paso del 5º al 36º puesto en el mundo en 1955.


Los negociados habían comenzado con la nacionalización de los ferrocarriles, embolsando en la oportunidad millones de Libras Esterlinas, proveniente de los ingleses muy contentos del gran negocio. Por qué el negocio; porque sólo faltaba un año para que se cumpliera el plazo de la concesión de 150 años, pero lo que era sumamente perjudicial para Argentina que recibíamos los trenes en el estado deplorable que se encontraban con las vías intransitables, con un altísimo costo para su puesta en servicio, cosa que podíamos haber evitado esperando un año para recibir al ferrocarril en perfecto estado, así como vías, durmientes, pintura y tapizados, (según el convenio firmado) pero nadie se daba cuenta y aplaudían a Perón por el “gran negocio” de haber logrado que los ferrocarriles fueran argentinos, pero no veían que los ferrocarriles igual eran argentinos, sólo había una concesión por 150 años que ya se cumplía.


Y así se siguió en este país, haciendo negocios personales, privatizando lo del estado y estatizando lo que era privado, no dan puntada “sin hilo”. El gran negocio kirchnerista pasó a ser la obra pública, que, aunque no la realizaran igual habían cobrado sus coimas.

“La consigna para todo kirchnerista, esté aislado o dentro de una organización, es contestar a una acción violenta ¡con otra más violenta! ¡Y cuando uno de los nuestros caiga, caerán cinco de los de ellos!”, dijo Perón (Keystone/Hulton Archive/Getty Images)


Haciendo una analogía del ayer de Perón con el paro del 24 de la CGT, encontramos una gran similitud del kirchnerismo y los sindicalistas de hoy que tanto quiere eliminar nuestro presidente Milei.

Para hacer esa analogía del proceder actual con este paro de la CGT y del peronismo/kirchnerismo, lo podemos comparar con la época de las frases de Perón que les inyectó a los peronistas de ayer, con ese desprecio a un futuro democrático y mejor.

¡Dijo el general!!!!: 

“El día que se lancen a colgar, yo estaré del lado de los que cuelgan”. (2-8-46)

“Entregaré unos metros de piola a cada descamisado y veremos quién cuelga a quién”. (13-8-46).

“A mí me van a matar peleando”. (13-8-46). (Recordamos que fue el único Presidente que huyó del país y lo hizo en la Cañonera Paraguaya)

“Con un fusil o con un cuchillo, a matar al que se encuentre”. (24-6-47).

“Esa paz tengo que imponerla yo por la fuerza”. (23-8-47).

“Levantaremos horcas en todo el país para colgar a los opositores”. (8-9-47).

“Vamos a salir a la calle de una sola vez para que no vuelvan nunca más ni los hijos de ellos”. (8-6-51).

“Distribuiremos alambre de enfardar para colgar a nuestros enemigos”. (31-8-51).

“Para el caso de un atentado al presidente de la Nación… hay que contestar con miles de atentados”. (Plan Político Año 1952).

“Objetivo: Lista de dirigentes opositores; lista de instituciones reconocidas como desafectas al gobierno; lista de opositores o de casas comerciales dirigidas o ligadas a los opositores; lista de representaciones cuyos gobiernos realizan campañas opositoras al nuestro. Personal: Serán empleados grupos previamente instruidos y seleccionados de las organizaciones dependientes de la CGT y del Partido Peronista Masculino. Misión: Atentados personales; voladuras; incendios”. (En el mismo documento). “Se lo deja cesante y se lo exonera… por la simple causa de ser un hombre que no comparte las ideas del gobierno; eso es suficiente” (3ª. Conferencia de Gobernadores).

“Vamos a tener que volver a la época de andar con alambre de fardo en el bolsillo”. (16-4-53), (horas antes del incendio de la Casa del Pueblo, la Casa Radical, la sede del Partido Demócrata Nacional y el Jockey Club).

“Leña… leña… Eso de la leña que ustedes aconsejan, ¿por qué no empiezan ustedes a darla?” (El mismo día). “Hay que buscar a esos agentes y donde se encuentren colgarlos de un árbol”. (El mismo día). “Compañeros: cuando haya que quemar, voy a salir yo a la cabeza de ustedes a quemar. Pero entonces, si eso fuera necesario, la historia recordaría la más grande hoguera que haya encendido la humanidad hasta nuestros días. Los que creen que nos cansaremos se equivocan. Nosotros tenemos cuerda para 100 años”. (7-5-53).

“A unos se los conduce con la persuasión y el ejemplo; a otros con la policía”. (15-5-53).

“Aquel que en cualquier lugar intente alterar el orden contra las autoridades… puede ser muerto por cualquier argentino. Esta conducta que ha de seguir todo peronista no solamente va dirigida contra los que ejecutan, sino también contra los que conspiren o inciten”. (31-8-55).

“Y cuando uno de los nuestros caiga, caerán cinco de ellos”. (31-8-55).

“Que sepan que esta lucha que iniciamos no ha de terminar hasta que no los hayamos aniquilado y aplastado”. (31-8-55).

“Nuestra nación necesita paz y tranquilidad… y eso lo hemos de conseguir persuadiendo, y si no a palos”. (31-8-55)

“Veremos si con esta demostración nuestros adversarios y nuestros enemigos comprenden. Si no lo hacen, ¡pobres de ellos! (31-8-55).

“Yo pido al pueblo que sea él también un custodio del orden. Si cree que lo puede hacer, que tome las medidas más violentas contra los alteradores del orden”. (31-8-55).

“¡Al enemigo, ni justicia!”. (Memorando reservado “para el doctor Subiza”. De su puño y letra, con triple subrayado). (Esta misma frase la vuelve a repetir desde el exterior en junio de 1972, y se difundió por televisión a todo el país los días 21 y 22-6-72). 

“¡Ah… si yo hubiese previsto lo que iba a pasar… entonces sí: ¡hubiera fusilado al medio millón, o a un millón, si era necesario! Tal vez ahora eso se produzca”. (9-5-70).

“Si yo tuviera 50 años menos, no sería incomprensible que anduviera ahora, colocando bombas o tomando la justicia por mi propia mano”. (30-12-72).

También habría dicho las palabras de Joseph Goebbels “Hay que hacer creer al pueblo que el hambre, la sed, la escasez y las enfermedades son culpa de nuestros opositores y hacer que nuestros simpatizantes se lo repitan en todo momento”.


¿Fue consciente Perón de lo que había dicho? ¿Supo que había incitado casi a una guerra civil? Eso es lo que se está incitando ahora por la CGT y los sindicalistas, pensando que se le terminan sus beneficios económicos. Y sin pensar que puede venir una guerra civil injusta del pueblo que no aguanta.


¿Estaremos en Dinamarca?  20-01-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 925

 

“Tanta cosa antigua que se pone de moda que sería bueno que volvieran la ética, la vergüenza, la inteligencia y la honestidad”.

 Groucho Marx

 

Parto de mi adhesión, en general, a las propuestas de cambio que, tan disruptivamente, ha planteado el Presidente a la sociedad y, además, soy paciente, pero confieso que algunos sugestivos detalles me hacen ruido. La presencia en los principales escalones de su administración de personajes sumamente cuestionables, tan prolijamente inventariados por Hugo Alconada Mom y Carlos Pagni en sus notas en La Nación, convierten a ese ruido en algo que huele mal, tal como describió William Shakespeare el clima de la corte en “Hamlet”.

 

Cuando vemos cuántos ex colaboradores de los Fernández² y de Massa quedaron a cargo de reparticiones y cajas claves del Estado (Secretaría de Minería, AFIP, AySA, PAMI, Aduana, Aerolíneas Argentinas, Casa de la Moneda, Derechos Humanos vengativos, tuertos y ladrones, etc.) surge la duda acerca de la real decisión de limpiar a la Argentina de corrupción que declama la administración libertaria. Con toda urgencia, Javier Milei debería recordar la conocida frase de Lee Kwan Yew, ex Primer Ministro de Singapur: “Si quieres derrotar a la corrupción, debes estar listo para enviar a la cárcel a tus amigos y familiares”.

 

A riesgo de resultar reiterativo, insisto en que el Ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, es un caso paradigmático. No sólo ha insistido públicamente en la falsa hipótesis del suicidio del Fiscal Alberto Nisman, de cuyo asesinato –lo determinó la Justicia- el jueves se cumplieron 9 años sin que se haya identificado, juzgado y condenado a sus autores materiales e intelectuales, sino que, más recientemente, suscribió la teoría del lawfare y adujo falta de pruebas de la culpabilidad de Cristina Fernández en la causa Vialidad, donde fue condenada por corrupción. Fue abogado de uno de los imputados –Sergio Taselli- en la causa Cuadernos, del destituido y condenado Juez Walter Bento y hasta de José Alperovich, ex Gobernador de Tucumán, ante la acusación de violación que formuló su sobrina. 

 

Mis quejas respecto a Cúneo Libarona no pasan por su anterior desempeño profesional, que lo ubicó tan cerca del kirchnerismo, sino por su inexplicable quita de la facultad de querellar a la Unidad de Investigación Financiera y a la Oficina Anticorrupción, organismos que Milei había prometido profesionalizar en su gestión e independizar del Ejecutivo, algo sonoramente incumplido. Sostengo que los principales damnificados por el imprescindible ajuste de la economía (la clase media) sólo estarán dispuestos a tolerarlo si los responsables del monumental saqueo al que fue sometido el país, causa eficiente de este pesado presente, que diariamente hacen gala de sus fortunas en el Calafate, en Madrid, en Marbella, etc., son llevados a Tribunales, juzgados y condenados; para lograrlo, el rol de UIF y de la OA resulta irremplazable y evitaría oscuros pactos de impunidad.

 

No lo conozco, y no pongo su honorabilidad en duda, pero me pregunto el porqué del “raro” nombramiento de Andrés de la Cruz como Subprocurador del Tesoro. Ese organismo tiene hoy como uno de sus principales temas el juicio en el cual la Juez Loretta Preska condenó a nuestro país a pagar la enorme suma de US$ 16.100 millones. Parte de ese dinero terminará en los bolsillos de los Kirchner a través de sus testaferros, los Eskenazy, ex titulares del 25% de YPF y dueños del Banco de Santa Cruz, a través del cual circularon los desaparecidos fondos de la Provincia, de los que se apropió el difunto patriarca, don Néstor. Que De la Cruz haya sido abogado de esos prestanombres debiera encender luces rojas en el tablero de mando de Milei, porque también huele a podrido.

 

Comencé esta columna diciendo que apoyo las políticas liberalizadoras de la economía del Presidente, y a las pruebas me remito: en un ya lejano 2005 escribí una nota, a la que titulé: “Los argentinos y los zapatos” (http://tinyurl.com/2ebp59s4) y en la cual traté de explicar a mis conciudadanos de qué se trataba la razonable apertura de la economía y cómo podía beneficiar a toda la sociedad.

 

Los últimos fueron veinte años de populismo suicida durante los cuales se nos educó creyendo que la luz, el gas, el agua y el transporte, éste especialmente en el AMBA, eran algo que no debíamos pagar; tan gratis creíamos que era la energía que nadie dudaba en derrocharla, hasta para calentar la pileta de natación o dejar el aire acondicionado encendido en su ausencia. Con la inminente quita de subsidios (aportados éstos por el Estado con endeudamiento, emisión e inflación), el consumo reaccionará, como debe ser, con una masiva economía de electricidad, ya que quien quiera dilapidarla tendrá que pagar por ella lo que realmente vale. Ya hemos visto como la fuerte caída de la demanda redujo los precios de la carne, y ese mismo efecto se reproducirá en todos los órdenes, hasta con los alquileres. Cualquiera podrá pedir por sus bienes, productos o servicios lo que mejor le parezca, pero el precio real surgirá cuando las apetencias del vendedor o proveedor confluyan con las posibilidades económicas del comprador: las cosas valen lo que alguien está dispuesto a pagar por ellas.

 

Por supuesto, y no sólo en ese tema, el Estado debe tener un fuerte rol de control para evitar cartelizaciones y abusos, a través de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia y del servicio de Protección al Consumidor, organismos que existen en todos los países liberales del mundo.

Quien avisa …  13-01-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 924

 

“La ceguera biológica impide ver; la ceguera ideológica impide pensar”. Octavio Paz

 

Quien crea que lo que sucede en Ecuador es sólo una violentísima guerra entre bandas de narcotraficantes que se disputan mercados y rutas comerciales, asociadas a los grandes cárteles mexicanos y colombianos, se equivocará de medio a medio. Más allá de lo anecdótico y puntual que aparece en la superficie, y como lo prueba la detención de venezolanos por participar en las acciones terroristas, se trata de la más infame reacción del “socialismo del siglo XXI” ante una ola que, como siempre ha sucedido en nuestra historia continental, recorre toda su geografía y hoy lo lleva a la derrota. En resumen, desde Quito y Guayaquil llegan avisos que deben encender luces rojas en los tableros de mando de los países de la región, ya que muchos de ellos ya están siendo agredidos por el narcoterrorismo transnacional, apoyado y financiado por las dictaduras bolivarianas y por Rusia e Irán, en una nueva versión de su guerra general con Estados Unidos.

 

El Foro de São Paulo y el Grupo de Puebla, que reúnen a quienes pretendían extender el mito de la “Patria Grande” y habían conseguido instalar foros como la Unasur y la CELAC, no están dispuestos a admitir su fracaso. Tras los triunfos de Gabriel Boric y Gustavo Petro, creyeron que la historia los favorecería, pero las sociedades están demostrando que están hartas de los populismos saqueadores que hoy sólo consiguen subsistir en la Nicaragua de Daniel Ortega, en la Cuba de Miguel Díaz-Canel, en la Venezuela de Nicolás Maduro y, algo, en la Honduras de Xiomara Castro.

 

Y fueron castigados duramente en los plebiscitos constitucionales de Chile, en las elecciones provinciales de Colombia y en los cruciales ballotages de Argentina y Ecuador, y están sumamente complicados en Bolivia por la pelea interna del MAS (que enfrenta a Evo Morales con el Presidente Luis Arce), en Perú, cuyos procesos políticos tienen décadas de inestabilidad y han llevado a la cárcel, o al suicidio, a muchos mandatarios, y hasta en México, hoy presidido por Andrés Manuel López Obrador, tal como se verá en las próximos comicios presidenciales. Por supuesto, perdieron El Salvador a manos de Nayib Bukele, y nunca lograron éxito alguno en Paraguay o Uruguay; y Brasil, donde Luiz Inácio Lula da Silva volvió al poder después de un oscuro trámite judicial, dispone de fuertes instituciones legislativas dispuestas a impedir cualquier deriva autoritaria.

 

Las noticias provenientes de este tan sufrido continente relatan rivalidades entre distintos grupos de narcomenudeo y, hasta allí, nada que ignoremos los argentinos, que todos los días vemos a Rosario y a tantos otros lugares del país desangrarse en manos de criminales; de la desidia y la innegable complicidad de políticos, jueces, fiscales, policías, financistas y empresarios, obtienen la protección necesaria para matar con impunidad a sus competidores y sembrar un indiscriminado terror, casi siempre desde el interior de las cárceles, donde inexplicablemente acceden a celulares.

 

El Presidente Daniel Noboa Azim ha respondido con dureza a la irracional violencia que azota a su país, donde los vándalos –sin duda inspirados por el ex Presidente Rafael Correa, condenado por corrupción y refugiado en Bélgica- tomaron por asalto canales de televisión y universidades, retienen y asesinan rehenes y amenazan públicamente al Estado ecuatoriano; suspendió las garantías ciudadanas y ordenó a las fuerzas armadas intervenir en las operaciones antiterroristas, a las que calificó como “conflicto armado interno”, una instrucción que fue acatada por los uniformados sin cuestionamiento alguno.

 

Eso obliga a preguntarse qué sucederá en Argentina, donde la Ley de Defensa, por inspiración del kirchnerismo vengativo y asociado a los narcos, les impide actuar dentro del territorio nacional, salvo que se trate de la invasión de un ejército oficial extranjero, cuando debamos enfrentar una guerra total contra los mismos enemigos, aquí sumados a los antiguos terroristas de Montoneros y ERP, los peruanos de Sendero Luminoso y de tantas otras organizaciones subversivas que combatieron al Estado argentino y fueron derrotadas en el campo militar.

 

En otro orden de cosas, en el juicio que la Argentina perdió en los tribunales de Nueva York, la Juez Loretta Preska rechazó un pedido para diferir hasta el 20 de febrero el plazo para ofrecer garantías y, así, evitar el embargo de los bienes que puedan identificarse como de propiedad del Estado, condenado al pago de la monumental suma de US$ 16.100 millones. Hace muchos años, en una nota a la que titulé “Cristinita, ¿otros US$ 5000 millones?” (http://tinyurl.com/yckfmfj9) expliqué por qué los Kirchner, siempre a través de sus testaferros, la familia Eskenazi, volvería a robar esa enorme suma. Espero que alguno de los más corajudos fiscales federales tome ya cartas en el asunto y denuncie penalmente a los responsables de tamaño saqueo.

 

Y también ansío que, así como ha aceptado modificar algunos puntos del paquete legislativo que envió al H° Aguantadero para su discusión, Javier Milei también ordene a su Ministro de Justicia dar marcha atrás con la prohibición a la Oficina Anticorrupción y a la Unidad de Investigación Financiera de actuar como querellantes en las causas por corrupción. Me parece absolutamente inaceptable que, para justificar tamaño dislate, Mariano Cúneo Libarona haya utilizado argumentos tales como la constancia de persecución política a opositores, o sea, al lawfare, un invento kirchnerista para intentar auto-absolverse.

A Trompadas  06-01-24
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 923


“Considera en poco al león que derrota al enemigo; el verdadero león es aquél que se derrota a sí mismo.” 

Yalal ad-Din Muhammad Rumi

 

Confieso que estoy desconcertado por algunos aspectos del DNU y del proyecto de “ley ómnibus” enviado al Congreso sin paracaídas y a los golpes, y que tantas esperables resistencias han suscitado en los sectores afectados, en el periodismo militante y en la Justicia, que reaccionó con una lluvia de cautelares. Considero a Javier Milei un gran jinete, y criticaré cuando se disipe la polvareda que levantó galopando con la velocidad que ha impreso a su gestión; sin duda lo hizo para aprovechar el estado de estupor en que quedó la oposición, por completo ignorante de cuánto había cambiado la sociedad, al ver triunfar en la carrera a un jockey novato, sin experiencia y montado a las apuradas sobre el hartazgo y la impaciencia de la juventud.

 

Mis cuatro principales cuestionamientos son la ratificación del Ministro de Justicia  de la más que interesada orden de Cristina Fernández que impide a la Oficina Anticorrupción y a la Unidad de Investigación Financiera actuar como querellantes en las causas penales; Mariano Cúneo Libarona argumentó para hacerlo que se usaron para perseguir opositores, o sea, justificó el invento del lawfare; el mantenimiento del régimen de protección a la industria ensambladora de Tierra del Fuego; la política relacionada con el Mar Argentino; y el nombramiento o conservación de funcionarios vinculados a la gestión de los Fernández² + Massa, moral y judicialmente cuestionados, incorporándolos a la actual administración.

 

En las causas por corrupción, aguardaré a ver qué hacen los fiscales ante las obligaciones persecutorias del delito que la ley les impone pero, si el ejemplo fuera Eduardo Taiano, mis críticas se convertirán en alaridos; ese Fiscal Federal pidió el sobreseimiento de Matías Tombolini, ex Secretario de Comercio, y de sus cómplices en la causa incoada por la conocidísima exigencia de coimas para autorizar el acceso a dólares oficiales a importadores, aduciendo que se había fundado en denuncias anónimas. Por el contrario, si los paradigmas fueran sus colegas Carlos Stornelli, Diego Luciani y tantos otros valientes, retiraré mis objeciones. Los ciudadanos de a pie, que apoyamos las políticas actuales (Milei hoy cuenta con una aprobación del 60%) pero seremos quienes más sufrirán el ajuste monumental que obligadamente ha puesto en marcha el Presidente, seremos también quienes peor reaccionaremos si el dolor en los bolsillos no fuera acompañado por un claro embate judicial contra aquéllos que tan impunemente, al menos hasta ahora, han saqueado tanto al país como para hacer imprescindible este duro apriete del cinturón.

 

Las “fábricas” de computadoras y celulares de Rubén Cherñajovsky y de Nicolás Caputo en la isla sureña gozan de una inicua protección que cuesta una fortuna al erario que ahora fue ampliada al excluir a los componentes que importa y allí ensambla de la aplicación del “impuesto PAIS”, perjudicando a los ciudadanos que podrían comprar productos en el extranjero, mejores y más baratos. Si se repone la libertad de importar y, consecuentemente, se permite que sea el mercado quien pone lógico freno a este inexplicable abuso, también quitaré el tema de mi lista de reclamos.

 

La propuesta de suprimir la Ley de Pesca que, reconozco, necesitaba importantes cambios, me asombra. Eliminar, lisa y llanamente, la política de cuidar nuestros recursos ictícolas de la depredación a de las flotas chinas y europeas, abriendo el Mar Argentino a quienes ofrezcan más dinero para pescar en él, me parece un disparate monumental. En el proyecto se deroga la obligación de faenar e industrializar en puertos argentinos, de utilizar tripulaciones locales y, dado el estado en que han quedado la Prefectura Naval y la Armada, que carecen totalmente de capacidad de control, se deja a la voluntad de los pesqueros la declaración de su captura a efectos impositivos. No entiendo, entonces, cuál sería el beneficio para el país, más allá de mejorar la recaudación inmediata a cambio de perder la futura, porque se extinguirían especies, se perderían miles de puestos de trabajo, se cerrarían cientos de fábricas y se pondría en juego, peligrosamente, la defensa de nuestras costas marítimas. El jueves el Gobierno reconoció que algunas de estas reformas serán revisadas; veremos entonces.

 

A pesar de comprender que el Presidente, que carece de un importante caudal de legisladores propios, de tan siquiera un gobernador y con pocas figuras experimentadas en sus filas originales, deberá acordar con muchos para obtener las leyes que le permitan aplicar su plan económico, y que esa combinación de factores hace que deba incorporar a muchos seguidores de otras fuerzas políticas a su administración, estimo que debe imponer una vara muy alta en materia de antecedentes morales para la admisión; todavía no parece ser el caso.

 

Creo que el enorme fárrago de medidas y cambios, unos cruciales y otros nimios, que contienen las dos normas –DNU y proyecto de ley- le servirán a Milei precisamente para esa negociación, entregando aquéllos que considere menores para garantizar la aprobación de los verdaderamente importantes. La convocatoria de las cúpulas de las centrales obreras, ajenas siempre a la voluntad de sus obligados y exprimidos súbditos, a un paro general a tan largo plazo como el 24 de enero va en el mismo sentido, o sea, intentar negociar con el Gobierno para evitar o, al menos, limar algunos de los recortes que, sin duda, afectarán las arcas personales de estos sátrapas eternizados e irrecuperables. En resumen, estoy en una ilusionada posición de “esperar y ver”, casi como hice anoche con los Reyes Magos.

Formas y Fondos   30-12-23
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 922

 

“Napoleón buscó la virtud y, como no la encontró, asumió el poder” Johann Wolfgang von Goethe

 

Hoy parece que la diferencia entre el Gobierno y sus potenciales aliados legislativos se reduce a las formas en que se está desempeñando desde hace sólo veinte días y, si bien éstas no dejan de ser importantes, creo que el debate debiera trascenderlas. El Presidente, con la legitimidad de origen que le dio el 56% de los votos que obtuvo en el ballotage el plan que expuso en campaña con sinceridad y dureza, está peleando el poder simultáneamente a todas las corporaciones que, hasta ahora, lo han ejercido sólo en beneficio propio y, en ese camino, mientras busca la legitimidad de ejercicio, demuestra que es un eximio jugador de ajedrez. La mayoría de los legisladores carece de tal virtud porque, si bien también ingresaron a la Cámara por el voto popular, la realidad es que para hacerlo se treparon a las penosas listas sábana armadas por los diferentes partidos políticos para pagar favores y lealtades oscuras, que nada tienen que ver con la capacidad para desempeñar tan trascendente rol republicano.

 

Si el DNU se hubiera dictado mientras estudiaba Derecho, seguramente entonces hubiera estado de acuerdo con todos los constitucionalistas –algunos de ellos, queridos y respetados amigos- que hoy impugnan este decreto de innegables necesidad y urgencia que entró en vigencia ayer. Pero he vivido nada menos que setenta y siete años aquí, y he visto a muchos radicales que hoy se rasgan las vestiduras por las formas, tolerar que Raúl Alfonsín hasta cambiara la moneda por decreto, en la época en que no existían los DNU, y a muchos peronistas también contagiados de un republicanismo que siempre les fue ajeno y extraño, ceder sin pudor alguno facultades legislativas a distintos mandatarios; con ellos Néstor y Cristina Kirchner pretendieron, vanamente, por cierto, ir por todo.

 

Los dirigentes sindicales, que se mantuvieron en un silencio comprado, sin hacer un solo paro, durante los cuatro años en que el trío maravilla (Fernández² & Massa) trituró salarios y jubilaciones, trabajo registrado, educación, salud y economía e impulsó la pobreza hasta el 50% (llevó la indigencia al 15%) y ahora, a sólo tres semanas de su asunción, rápidos y furiosos convocaron a una huelga general para el 24 de enero y amenazan, como hizo el violento camionero Pablo Moyano ayer, con voltear al Gobierno desde la calle para defender sus intereses y cajas personales. Los gerentes e intermediarios de la asistencia social –todos ellos, sumados, obtuvieron sólo setecientos mil votos- vociferan su apoyo, para intentar, con mal pronóstico, evitar que Patricia Bullrich imponga el orden y la ley en un terreno copado, hasta ahora, por ese mismo kirchnerismo depredador.

 

Los empresarios, también expertos depredadores, salieron a remarcar sideralmente sus productos, hasta que los grandes supermercados y hasta los pequeños consumidores reaccionaron y le pusieron un límite al disparate, sobre todo con la caída en el consumo. En el nuevo mundo que Milei quiere crear, cada cosa valdrá lo que alguien esté dispuesto a pagar por ella: cada uno podrá pedir el precio que quiera por sus bienes o servicios, pero no encontrará quienes los compren o contraten hasta que ambos factores –oferta y demanda- encuentren su equilibrio; y eso vale tanto para alimentos cuanto para alquileres, honorarios profesionales, etc.

 

Uno de mis principales críticas a las políticas de Milei se refería al inicuo régimen de protección a las ensambladoras de Tierra del Fuego, que esta misma semana fue omitido del proyecto de “ley ómnibus” que el Gobierno envió al Congreso. Pero, como habría sido compensado de hecho con la absoluta libertad de importar bienes para consumo personal, dejó de tener sentido. Y lo mismo sucederá con la absurda industria textil, tan protegida, tan cara y tan mala. Cuando podemos traer productos fabricados fuera, las mismas computadoras, celulares o ropa mejores y más baratos sin pagar inicuos impuestos disfrazados de derechos aduaneros, el coto de caza de los empresarios prebendarios pierde sus alambrados.

 

Aplaudo con entusiasmo la política de cielos abiertos y los miles de desregulaciones del comercio interno e internacional, del sistema financiero, de la salud, de los alquileres y del universo del trabajo y el sindicalismo y hasta del ejercicio profesional, y el fin del monopolio de Papel Prensa, que tanto han impedido nuestro desarrollo individual y colectivo. Y respaldaré, sin duda, la futura rebaja de la edad de imputabilidad penal, para que los menores que cometen delitos de adultos sean juzgados como tales.

 

El verano no será, precisamente, un lecho de rosas para los argentinos: deberemos hacer frente, en medio de una altísima inflación heredada, a las facturas de las grandes fiestas a las que no fuimos invitados –la mayor, los US$ 16.000 millones debidos por la cómplice mala praxis de Axel Kiciloff en el tema YPF en beneficio de Cristina Fernández, que se nos presentará el 10 de enero- pero, para divertirnos, podremos asistir al debut del sainete que se desplegará durante el año en el Congreso; allí, entre cómicos y onanistas discursos, se discutirá la validez del DNU y cada artículo del monumental proyecto de ley ómnibus, con la cual el Gobierno pretende enseñar a diputados y senadores a leer velozmente y a comprender los textos.

 

A pesar de todo ello, ¡el mejor 2024 posible para todos! Y recemos para conservar la frágil paz que hemos logrado con tanto esfuerzo y el sacrificio de centenares de valientes soldados, hoy ancianos presos.

Con la ilusión de los argentinos, nace una gran esperanza   27-12-23 

por Alberto A. Anselmi

Creo que nunca los ciudadanos sentimos la ilusión que “El Mesías ha llegado”

Se terminó el desastre, Robo y Desorden

 

El peor gobierno de la historia argentina, lleno de inútiles y ladrones, el Congreso sólo servía para sus reuniones políticas y tratar “negociados”. A tal punto que ni siquiera “hicieron tiempo” para anular la Ley de Alquileres que tanto daño produjo a la población. Tanto diputados como senadores, sólo trataban cómo podían sacar a los jueces de la Corte Suprema e implantar a otros de los suyos, para evitar que siguieran tratando la grave corrupción cometida por el kirchnerismo.

 

Tanto serían los “arreglos”, que involucraba también a los piqueteros que les entregaban planes para exigirles que los acompañaran a las manifestaciones, con obligación de asistencia y amenazas de quitarles el plan si faltaban.

 

Fue tan triste que la podíamos comparar con el gobierno del proceso militar, con la diferencia de la inseguridad, asaltos, escuelas sin funcionar y lo poco que lo hacían era para “adoctrinar”” a niños y adolescentes para convertirlos en verdaderos soldados del kirchnerismo, donde los pobres niños, tratados para hacerlos burros, pero sin orejas.

 

Por suerte y justicia cayó Milei, que en un día sacó leyes que rigieron durante muchos años, como la de alquileres y tantas otras que favorecían a los narcotraficantes, con el peligro que significaba para los adolescentes y ciudadanos que eran asesinados.

 

Los seguidores del kirchnerismo eran tan faltos de inteligencia, que pretendían defender a los piqueteros, sin siquiera conocer las leyes y la Constitución. Claro reclamaban: Pero cómo si antes podíamos cortar calles y nadie les decía nada y ahora no entendían, claro les habían leído la Constitución incompleta, donde decía que toda persona tiene el derecho a manifestarse, pero no le leían lo que seguía que decía, “siempre y cuando no entorpezcan a los que circulan libremente por las calles o van con sus colectivos a sus respectivos trabajos” que ese es un delito mayor que el de manifestarse.

 

Y así reclamaban por sus derechos, sin ver que esos derechos terminan donde comienzan los de los demás.

Les estoy escribiendo en un idioma claro y simple para que intenten aprender.

 

Ahora puede ser que la Justicia tome al toro por las astas y meta presos a tantos delincuentes como la Cristina y sus secuaces, claro como en algunos momentos del proceso militar donde impusieron la Pena de Muerte. Lo que no llegó a nuestro país como Ley, pero igual la aplicaron sin Ley y sin piedad, como el caso Nisman, para evitar ser juzgados por corrupción y traición a la Patria, y como estos muchos casos más para la analogía.

 

Pero apareció un arco iris en nuestro horizonte, presagiando el final del kirchnerismo y la cuerda que arrojó Milei para evitar que cayéramos todos al inmenso abismo… Todos lo mirábamos con dudas y hasta lo creíamos loco; pero su intelecto iba quedando a la vista, con una ansiedad de probar el cambio.

 

Apenas fue elegido por la mayoría del Pueblo, se volcó a trabajar de una manera inesperada y coherente, demostrando sus intenciones. Hoy nos maravilla el número de decisiones tomadas en tan corto tiempo para eliminar gastos del fisco y la fuerza indispensable para llevar adelante semejante programa, a pesar de los cacerolazos por los DNU que ni siquiera pudieron leer. Los manifestantes, cuando se les preguntaba por qué los piquetes no sabían qué contestar.

 

Todo el daño posible de quienes no gobiernan ni dejan gobernar, como de costumbre, sólo queriendo desacreditar a lo que el pueblo ya le dio el visto bueno para que se aplicara todo lo necesario para terminar con el enemigo:  la inflación latente y el kirchnerismo.

Gordio y su nudo  23-12-23
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 921

 

“Tu nivel más alto de ignorancia lo alcanzas cuando rechazas algo sobre lo cual no sabes nada”.

Wayne Dyer

 

El autoimpuesto límite de extensión me impide realizar un análisis pormenorizado del decreto de necesidad y urgencia (DNU) con el cual Javier Milei, emulando a Alejandro Magno, cortó de un sablazo el infernal nudo de leyes y normas intrincadas y confusas, de regulaciones y trabas a la actividad económica y de privilegios que nos han traído hasta este estado de postración y decadencia infinita; carente de apoyos propios en el Congreso, optó por poner en juego todo el poder que recibió de la ciudadanía. A partir del miércoles, nuevos aires de libertad y progreso circulan por nuestro país. Y el Presidente ya ha adelantado que esto que vimos es sólo el principio.

 

Hace apenas trece días –diez hábiles- que él y Victoria Villarruel se alzaron con el 56% de los votos (14 millones) contra el peronismo unido, que hizo la peor performance de su historia; todo el arco de la izquierda, ésa que tan agresiva se muestra en la calle, recogió únicamente 700.000 sufragios. Pero parece que a los perdedores el juego democrático los tiene sin cuidado y ya, descaradamente, van por la destitución de un presidente al que no pueden, por cierto, acusar de mentir para vencerlos.

 

La explicación es clara: han sido golpeados en su órgano más sensible, el bolsillo, que han llenado durante tantos años con el manejo de las obras sociales sindicales y la intermediación en la ayuda social a la pobreza. La libertad de elegir la obra social, por ejemplo, es un puñal en el corazón de los dirigentes sindicales, pero mejora el servicio de salud a los afiliados, terminar con la industria del juicio lastima intereses de abogados y corporaciones, pero permite a las pymes contratar nuevos empleados, acabar con las autorizaciones para operar en comercio exterior pone fin a la corrupción que tanto encareció los productos importados, etc.

 

El extenso DNU produjo una reacción sorprendente: la velocidad con que fueron leídas sus noventa carillas por quienes, segundos después de que Milei concluyera su mensaje, comenzaron a golpear cacerolas; se ve que ha mejorado sensiblemente la comprensión de textos. Bromas aparte, una  sólida mayoría de argentinos demostró en las urnas que es muy consciente de la necesidad de desactivar la enorme cantidad de bombas de fragmentación que dejó la tríada de los Fernández² más Sergio Massa y, en especial, de la urgencia que reviste encontrar solución a los gravísimos problemas que nos aquejan; una muestra no menor es el fallo de la Juez Loretta Preska  que exige que la Argentina garantice, antes del 10 de enero, el pago de US$ 16.000 millones por la impericia intencional de Axel Kiciloff para enriquecer a Cristina Fernández. Sin embargo, distintos legisladores salieron a rasgarse las vestiduras en los medios con la unánime queja por no haber convocado a sesiones extraordinarias al Congreso y enviar los proyectos de ley.

 

Si se hubiera hecho así, no hubiera bastado todo este mandato presidencial para alcanzar sus objetivos, aquéllos que descarnadamente anunció durante la campaña electoral y ratificó en su discurso de asunción ante el pueblo. Ahora, el DNU sólo podrá ser derogado si ambas cámaras del Congreso resolvieran anularlo íntegramente, una regla impuesta en 2006 por Cristina Fernández; con que sólo una no lo hiciera, conservará total vigencia mientras la Justicia no falle, eventualmente, declarando inconstitucional alguno de sus artículos. El cinismo se vio cuando, con la caradura que tanto los caracteriza, fingieron olvidar cuántos sapos tragaron, ante iguales actitudes del Poder Ejecutivo durante los veinte años de kirchnerismo (Néstor firmó 267 DNU’s, Cristina Fernández 123 y Alberto Fernández 145), mientras delegaban al presidente de turno inmensas potestades legislativas; uno de los más conspicuos quejosos fue el mismo que, ante un pedido de desafuero de Cristina Kirchner por sus múltiples procesamientos por corrupción, la blindó con el inmoral argumento de la disciplina partidaria.

 

Patricia Bullrich ganó la primera escaramuza contra un Partido Obrero sin obreros y sólo pocos trabajadores informales y muchos pobres extranjeros. Pero creer que venció la guerra que desatarán los damnificados sería pecar de iluso; no se han librado aún las verdaderas batallas, traducidas en manifestaciones masivas, paros nacionales (ya la CGT y las CTA están planificando el primero) y hasta atentados contra los medios de producción, como tantas veces sucedió en el pasado. Y el riesgo de que aparezcan disturbios generados por infiltrados de todos los colores, como se vio en Chile, en Ecuador y en Perú, no debe descartarse sin más.

 

Me preocupan algunas omisiones del DNU, tal como el inaudito régimen de protección a las empresas de montaje de Tierra del Fuego y, sobre todo, las enormes “cajas” que aún quedan en manos del pero-kirchnerismo, como AySA, Enarsa, etc.; si se transformaran en prendas de negociación de apoyo político, el Gobierno perdería rápidamente sustento. Lo mismo sucedería si se mantuviera la inhabilitación para querellar para la UIF y la Oficina Anticorrupción que dispuso la administración anterior, tal como parece desprenderse hoy de los dichos del Ministro de Justicia. Todos estaremos dispuestos a tolerar el ajuste, siempre y cuando se persiga penalmente a los corruptos y se fulmine el gasto político improductivo.

 

Sólo me queda rogar a Dios que renueve su ancestral paciencia con los argentinos, que nos esforzamos en tropezar tantas veces con la misma piedra e insistíamos en suicidarnos; si tenemos la templanza necesaria para atravesar este túnel, aunque sea apretando los dientes, habremos dado un paso crucial hacia un futuro irreversible. Con esa esperanza en el corazón, tengan usted y todos los suyos una muy feliz y santa Navidad; y para los presos políticos, esos ancianos militares que nos salvaron del terror, pido con urgencia la prisión domiciliaria, injustamente denegada por venganza.

Falsos Impacientes 16-12-23
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 920

 

“Sólo los locos y los solitarios pueden permitirse el lujo de ser ellos mismos. Porque los solitarios no necesitan complacer a nadie, y a los locos no les importa ser comprendidos”.

Charles Bukowski

 

Ante lo dramático de la herencia recibida y sus urgencias, Javier Milei no podía aspirar a la luna de miel que acompaña los primeros tramos de cualquier gobierno, pero, como muchos periodistas hacen, exigir soluciones inmediatas para la crítica situación actual a sólo seis días de su asunción es, sin duda, malintencionado. Mientras los Fernández² roían sin piedad salarios y jubilaciones, generaban hiperinflación con estancamiento, destruían el empleo, la salud y la educación, la CGT y las CTA no concretaron siquiera una huelga general, pero ya se paran de manos para proteger sus inicuos privilegios frente a quien no puede ser responsabilizado del zafarrancho y debe enmendarlo; pero, claro, aquéllos eran titulares de una de las múltiples franquicias peronistas, a las cuales todo se disculpa.

 

El Presidente aprobó el primer examen al no mentir ni vender fantasías a la sociedad, incurriendo así en el mismo error –ocultar la realidad- de Mauricio Macri, aunque estoy convencido de que, cuando pronosticó dos años de trágica malaria, lo hizo con la esperanza de un sensible acortamiento de ese lapso; si lo lograra, después de haber pronosticado un apocalipsis económico-social, se convertiría en Superman.

 

Pese a la inédita debilidad parlamentaria que se deriva del formato tan unipersonal de su triunfo electoral, Milei está dando muestras de un formidable pragmatismo, y la primera muestra de ello fue arrebatarle a la condenada Cristina Fernández el imperio que construyó en el Senado, impidiéndole concretar la maniobra con la que buscaba ubicar, como tercero en la línea sucesoria, a una integrante de su asociación ilícita. Esa necesidad de construir gobernabilidad explica la integración de este tan heterogéneo primer gabinete de ministros; de todas maneras, es indispensable que el Presidente imponga límites morales a la incorporación o perpetuación de funcionarios provenientes de la anterior administración.

 

El “teorema de Baglini” demostró su vigencia con la morigeración de varias de sus propuestas electorales más controvertidas. La tan áspera realidad y la necesidad de obtener legitimidad de ejercicio (la de origen es indiscutible en razón del apoyo del 56% del electorado), han comenzado a limar las uñas del “león”. De todas maneras, algunas de esas políticas (dolarización, cierre del Banco Central, etc.), hoy diferidas, seguramente volverán a primer plano tan pronto el éxito acompañe a su gestión.

 

Pero esa probabilidad, debido a la enorme exigencia a que será sometida la sociedad en los próximos meses, dependerá de que ésta, convocada una vez más a ajustarse el cinturón sobre una ya tan delgada cintura, compruebe que el ajuste sobre la “casta” y el gasto político es real y palpable, y que los responsables de la terrible situación actual no siguen impunes. Interpelará a la Justicia hasta lograr que actúe con celeridad en la persecución penal del desquicio y la corrupción, y exigirá resultados; así como votó un cambio austero en el manejo de la cosa pública, también lo hizo para terminar con los mantos de olvido que siempre hemos extendido sobre las anteriores administraciones.

 

Las malas noticias judiciales siguen lloviendo, merecidamente, sobre Cristina Fernández y su más íntimo entorno. La atribución del sillón en el Consejo de la Magistratura a Luis Juez implica un nuevo equilibrio en ese crucial organismo, y se ha completado la integración de los tribunales orales federales que llevarán los juicios que más la preocupan: “Hotesur/Los Sauces”, “Cuadernos”, “Ruta del dinero K” y “Memorándum con Irán”, es decir, que se iniciarán el próximo año, y ya ha perdido los fueros.

 

Para evitar que el tiempo invalide la persecución es necesario modificar el Código de Procedimientos Penal de modo que el doble conforme (Tribunal Oral y Cámara de Casación) permita enviar a la cárcel a los condenados, sin depender de recursos ante la Corte Suprema, a la cual el zaffaronismo transformó en tercera instancia. Pero también revisar cuanto se ha hecho en los viciados juicios de “lesa humanidad”, que continúan siendo el vehículo para la venganza contra los militares que derrotaron a la subversión, amén de generar pingües indemnizaciones para sus supuestas víctimas.

 

Otro aspecto remarcable de lo acontecido desde el domingo se refiere a las relaciones exteriores y, sobre todo, a nuestro alineamiento geopolítico. La presencia en la toma de posesión de Volodimir Zelenski fue un gesto de enorme importancia porque constituyó una clara reversión de las incomprensibles (si olvidamos su posicionamiento ideológico) actitudes de Alberto Fernández. Nadie duda de que debemos y necesitamos comerciar con todos los países, pero eso no puede significar convalidar la violación de los verdaderos derechos humanos, la sangrienta represión a la libertad de expresión y a los opositores y minorías raciales ni, menos aún, la agresión militar gratuita a otras naciones.

 

Hoy se nos convoca nuevamente a poner el hombro, con esfuerzo y dolor, para resucitar a una Argentina a la cual una banda delictiva, elegida para gobernarnos durante dos décadas por una sociedad mayoritariamente idiotizada por el populismo, el clientelismo y la buscada falta de educación, ha puesto en estado de coma. Sólo Dios sabe si podremos lograrlo, pero, sin duda, vale la pena intentarlo; en especial, si debiéramos explicar a nuestros descendientes qué hicimos mientras la Patria moría.

Amanece la Libertad 09-12-23
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 919

“Diciembre me gustó pa ’ que te vayas”. José Alfredo Jiménez

Mañana, con la asunción de Javier Milei de la Presidencia de esta maltrecha República, la sociedad respirará en libertad, después de dos décadas de mordazas (con excepción de los años de Mauricio Macri), pero con un pronóstico de fuertes tormentas para el futuro inmediato. El discurso inaugural deberá contener un prolijo inventario de la herencia que recibirá, la peor desde 1983, ya que así mostrará su respeto por una tan castigada ciudadanía a la cual se le pedirá que asuma los enormes sacrificios que requerirá reconstruir tanto la economía, cuanto la educación, la salud, la seguridad cotidiana, la defensa nacional, el orden público y el tejido social, todos universos destruidos por el kirchnerismo hasta los cimientos.

El león libertario está dando muestras de un pragmatismo inédito en el difícil armado de un gobierno que necesita traducir los votos de catorce millones de ciudadanos en fuertes espaldas políticas y legislativas para obtener las sanciones de las leyes que le permitan encarar las reformas que, al haber sido explícitas en la campaña, le permitieron triunfar en el ballotage. Me parece de una ingenuidad absurda reclamarle, como hace el periodismo, mantener una virginal pureza que sólo significaría debilidad en un Congreso tan adverso como se vio el jueves; espero que lo entiendan los jóvenes, siempre impacientes, cuando la realidad imponga demorar el cumplimiento de algunas metas propuestas con tanto énfasis hasta ahora.

El lunes comenzará la resistencia violenta de quienes se presumen a priori afectados por el cambio radical que resulta indispensable producir en la reducción racional del gasto público, llevado al paroxismo por el populismo clientelista, al cual habremos despedido el domingo como se merece, sin honores, pero con alivio y enorme desprecio. Para diseñar esa trinchera, el martes se reunieron los cabecillas de la CGT, de las dos CTA, incluyendo a Roberto Baradel, máximo responsable de la catástrofe educativa que ha condenado irremisiblemente al fracaso a varias generaciones de chicos, con los corruptos gerentes de la pobreza, es decir, los mismos que estuvieron en silencio cuatro años, mientras los Fernández² y Sergio Massa licuaban salarios y jubilaciones a golpes de inflación y latrocinio.

Anunciaron que combatirán en la calle, seguramente durante las fiestas navideñas, para sostener sus incomprensibles privilegios, esos que la sociedad les retaceó en las urnas, llevando al peronismo a la peor derrota de su historia. En un paso de comedia que pretende replicar la tragedia de los 70’s, dicen estar dispuestos a sembrar muertos, una acción que habitualmente desestabiliza a los gobiernos. Pero esta vez se enfrentarán a Patricia Bullrich quien, mostrando su grandeza personal y política, habrá asumido uno de los cargos más peligrosos de la administración, aunque cuente con la lealtad y la confianza de todas las fuerzas de seguridad federales, quizás con excepción de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), colonizada –como otros organismos- por La Cámpora.

Espero que los fiscales, bajo el comando interino de ese gran señor que es Eduardo Casal, a quien sugiero que el nuevo gobierno proponga efectivizar, promuevan denuncias penales contra todos y cada uno de los funcionarios que, durante tantos años, han saqueado al Estado dejándolo exánime; muchos de ellos permanecerán en sus cargos, y actuarán como quinta-columnas para poner palos en las ruedas y complicar la nueva gestión con vistas a su rápida destitución. La Justicia deberá acabar con la impunidad habitual, actuando con celeridad para evitar que, como siempre sucede, el tiempo malgastado imponga la prescripción de las acciones.

El ejemplo más concreto y trágico de la responsabilidad de quienes se van es el juicio que la Argentina perdió, por la estatización de YPF y la mala praxis de Axel Kiciloff, en los tribunales de Nueva York y que significó una condena de US$ 16.000 millones; en la medida en que, al menos, el 30% de ese monto irá a las empresas de los Eskenazi, testaferros de Cristina Fernández, significará un nuevo y descomunal enriquecimiento para la familia Kirchner, titular de esta asociación ilícita organizada para defraudar al Estado; no es un detalle menor que la defensa de los intereses nacionales estuviera, en los últimos cuatro años, a cargo de Carlos Zannini, cómplice necesario de esa monumental estafa.

Sería necesario impedir que Alberto Fernández, Massa y tantos otros canallas se fueran al extranjero sin rendir acabada cuenta de todo lo que han hecho para contribuir a la muerte de miles de compatriotas durante la pandemia, extender la rampante corrupción, profundizar la crisis económico-social, vaciar las arcas públicas, dilapidar dinero a manos llenas para sostener la apetencia presidencial del Ministro de Economía, llevarnos a la hiperinflación y dejar más bombas cebadas a la próxima administración. Si Dios y la Patria esta vez concretaran su siempre prometida y nunca efectivizada demanda, resultaría más digerible para la sociedad transitar el dificultoso y empedrado camino hacia el futuro prometido.

Acompañar a Milei y a Victoria Villarroel desde el Congreso a la Plaza de Mayo es una verdadera obligación republicana para la ciudadanía que, previsiblemente, se verá conminada en breve a parar los pies a todos aquéllos que, sin escrúpulos, buscarán el rápido fracaso del libertario, cualquiera sea el costo generalizado de intentarlo, para volver al poder.

“No me atosiguéis” 02-12-23
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 917

“Yo me conformaría con que el corazón de los argentinos tuviera tres cosas: honestidad, responsabilidad, solidaridad”. René Favaloro

Mi emocionado abrazo a los grandes vencedores del domingo, Javier Milei y Victoria Villarruel, a los que sumo, sin dudar, a Mauricio Macri y Patricia Bullrich, que consiguieron reencausar hacia los libertarios a gran parte de los votantes de JxC y garantizar su triunfo con el aporte de miles de fiscales. Gracias a Dios, la Argentina se encamina a la reconstrucción de la mano de la austeridad en la conducción del Estado, la libertad de los ciudadanos y la seguridad jurídica para permitir las inversiones esenciales.

La resonante victoria del candidato libertario fue la constatación de que en América, finalmente, los pueblos han despertado y los vientos soplan en contra del Foro de San Pablo y su pretensión de extender el “socialismo del siglo XXI”, el proyecto populista y autoritario que, en su hora, organizó Luiz Inácio Lula da Silva con la complicidad de Néstor y Cristina Kirchner, Evo Morales, Hugo Chávez y Rafael Correa; aún lo integran Daniel Ortega (Nicaragua), Miguel Díaz-Canel (Cuba), Xiomara Castro (Honduras), Gustavo Petro (Colombia), Nicolás Maduro (Venezuela), Luis Arce (Bolivia), Andrés López Obrador (México) y, pese a su vocación democrática, Gabriel Boric (Chile). Ese huracán ya se llevó puestas esas ansias con la derrota en la Constituyente chilena, el triunfo de la oposición colombiana en las elecciones municipales, la victoria de Daniel Noboa sobre el correísmo en el ballotage ecuatoriano y ahora en la Argentina, mientras que resultaban imposibles quimeras en El Salvador, Paraguay y Uruguay, países que ya habían rechazado el progresismo empobrecedor que, durante muchos años, habilitó la fundación de Unasur y otros conglomerados regionales sectarios.

El resultado del domingo constituyó el mejor escenario, al menos por ahora, para Cristina Fernández, porque consiguió retener la crucial Provincia de Buenos Aires y varios municipios clave y, a la vez, impedir que el Aceitoso la convirtiera en víctima de un inevitable matricidio. Pero la monumental golpiza que recibió el peronismo en todo el país (en el feudo de Axel Kiciloff triunfó sólo por un lastimoso 1,47%) fue de tal magnitud que, por ser la gran e indisimulable responsable, no se le permitirá eludir el pago de la factura que siempre el famoso movimiento presenta a sus mariscales derrotados. En breve veremos una nueva configuración del poder en el PJ, pues los gobernadores de ese signo serán, aunque sea a desgana, mucho más colaborativos con el nuevo Presidente que quienes aún militan en el kirchnerismo duro, fascista y ladrón.

El connotado círculo rojo, formado por los empresarios “expertos en mercados regulados”, aspiraba y apostaba a un triunfo de Sergio Massa para conservar los zoológicos y bañeras en los cuales tanto tiempo cazó y pescó (las ensambladoras de Tierra del Fuego son un ejemplo paradigmático) siempre en perjuicio de una sociedad que toleró su genética corrupción, pagando altos precios por sus productos malos, escondido detrás de fórmulas de nacionalismo berreta y proteccionismo absurdo. Resulta cómico ver cómo sus integrantes se rasgan ahora las vestiduras frente a las propuestas de libertad que trae Milei, anunciando la pérdida de puestos de trabajo (que fueron incapaces de generar pese al cierre casi total de la economía) si se vieran obligados a competir.

¿Y dónde estaban los eternos y absurdamente enriquecidos dirigentes sindicales mientras el trío de los Fernández² y Massa arrasaba la economía, destruía salarios y jubilaciones, nos llevaba al borde de la hiperestanflación, la pobreza bien medida al 50%, la indigencia al 15% y desaparecía a la clase media que antaño era su clientela? Hoy, ya antes de que asuma Milei, se muestran espantados y profieren amenazas sólo porque ven peligrar sus privilegios de casta. Las mismas actividades preventivas están desplegando los gerentes de la pobreza, acosados por la probabilidad de verse desplazados de su papel de intermediarios en la cadena de la felicidad de los planes.

A algunos, como Pablo Moyano y otros energúmenos se les soltó la cadena, en especial a Pablo Biró, que se siente dueño de Aerolíneas Argentinas y menta a muertes en la calle, por lo que ya fue denunciado penalmente por el Fiscal Carlos Stornelli. Y tal como suponíamos, Massa ha empezado a recorrer el mismo camino, acusado por María Eugenia Talerico y Daniel Sabsay, con razón, de administración fraudulenta por la forma en que dilapidó dinero público para sostener su candidatura.

Lo realmente positivo es que Milei, que está dando permanentes muestras de autoridad y honestidad, pese a ser el Presidente con menor apoyo legislativo propio de la historia dispondrá de la colaboración de gobernadores, diputados y senadores del PRO y del peronismo republicano para obtener las leyes que necesitará para sacarnos de estas arenas movedizas que, hace tantos años, engullen nuestro destino.

Habrá que hacer sacrificios extremos, pero tiene detrás de sí los catorce millones de votos que obtuvo el domingo pasado; y cuenta ya con gente capaz y experimentada en muchas áreas de gobierno, especialmente en seguridad (narcos y “mapuches”, ¡teléfono!) y defensa por si los repugnantes especímenes que se adueñaron del Estado –sobre todo de la educación pública- y sus empresas quisieran repetir sus pasadas “proezas”.

Nota N° 918

“De nada debe huir el hombre prudente tanto como de vivir según la opinión de los demás”. San Basilio

Resulta verdaderamente absurdo el espectáculo que está brindando la prensa, en todas sus formas, al hacer suyos los rumores que circulan, muchas veces generados por los propios interesados, acerca de los nombres que formarán parte del primer equipo ministerial de Javier Milei a partir del 10 de diciembre, cuando se hará cargo del Ejecutivo. El Presidente electo ha confirmado ya a algunos, pero, todos los días, aparecieron teóricos nombramientos que, cual estrellas fugaces, se apagaron de inmediato.

Me parece razonable que el libertario se haya comportado de ese modo por dos razones. La primera es que, si en medio del tembladeral de fin de ciclo que estamos viviendo, producto tanto de la inédita crisis socio-económica cuanto, paradójicamente, de la enorme derrota que sufrió el peronismo en el ballotage, cualquier designación prematura hubiera sometido al elegido a un enorme desgaste ya que, como se ha visto, el Gobierno saliente hubiera buscado hacerlo responsable del descalabro actual en su área de responsabilidad; en la medida en que no hubo apuradas decisiones oficiales, no pudo personalizar esas malas intenciones.

Por otra parte, y en la medida en que Milei carecerá de significativos bloques parlamentarios propios, me parece probable que se inaugure un nuevo formato de poder, con una participación en él mucho mayor del Congreso en desmedro del habitual presidencialismo. Si fuera así, el nuevo Presidente estará obligado a construir una fuerte alianza de gobierno, que supere a la meramente electoral como fue en su momento Cambiemos. La natural consecuencia de esa modificación sería la participación de otros partidos que, como sucede en los sistemas parlamentarios europeos y aún en Brasil, reciben la pública responsabilidad de áreas del Gobierno, a punto tal que, cuando un ministro renuncia, el Presidente pide al partido que lo propuso originalmente que elija a su sucesor. Es por eso que, si Milei hubiera confirmado anticipadamente nombres, hubiera mostrado su juego en una mesa de tahúres y mafiosos. Déjenlo negociar y armar su equipo en paz y no lo atosiguen con su impaciencia; restan sólo ocho días para que todas las actuales incógnitas sean definitivamente reveladas.

De todos los casilleros aún vacantes, además del Presidente del Banco Central, me preocupa, y mucho, el área de Defensa. El kirchnerismo y el trotskismo ya están formando sus tropas y haciendo las maniobras previas para el combate que, tal como han anunciado sus portavoces más violentos, pretenden librar en la calle desde el día uno de la nueva gestión. En los últimos veinte años (la gestión de Mauricio Macri, con Germán Garavano y Claudio Avruj, nada hizo para modificar ese rumbo), esta hipócrita sociedad permitió la inicua persecución a las fuerzas armadas, enviando a la cárcel y a la muerte a sus ex integrantes que vencieron en la guerra que la democracia ordenó contra el terrorismo, que la había provocado, hace casi cincuenta años. Con ese penoso antecedente, agravado por la aplicación retroactiva de leyes penales, la derogación de otras por el propio Congreso que las había sancionado, la indefinida duración de las prisiones preventivas, la manipulación bastarda de los juicios, será muy difícil exigir subordinación y obediencia debida a oficiales que, como es natural, nacieron en democracia.

Y todos hemos visto, en sepulcral silencio, como los miembros de las fuerzas de seguridad eran imputados y procesados por cumplir simplemente su deber frente a los delincuentes, inclusive a aquéllos disfrazados de mapuches; recordemos, por ejemplo, que los prefectos fueron perseguidos por el falso asesinato de Santiago Maldonado, y el policía Luis Chocobar por disparar a quien había dejado discapacitado a un turista en La Boca. La única que respaldó, sin medias tintas, el accionar de los involucrados fue Patricia Bullrich que, por su bien ganado prestigio, fue designada Ministro de Seguridad de la nueva gestión, y contará con la confianza de sus subordinados al momento de hacer cumplir la ley e imponer el orden.

Y esta conducta resultará indispensable pues, tal como reconoció el Presidente electo al regreso de su viaje a Washington, la catastrófica herencia que recibirá, que ya ha comenzado a denunciar enfáticamente, nos llevará a una estanflación por un período de entre 18 y 24 meses, con todo el impacto social que eso significa, en especial para los más pobres de nuestros conciudadanos, con lo cual las aberrantes organizaciones sociales encontrarán una justificación para sus marchas y piquetes.

El desastre que generaron Axel Kiciloff, con su criminal estatización de YPF, y Sergio Massa, con sus delictuales acciones para intentar llegar a la Presidencia, y Miguel Pesce, con su explosión en seguros de cambio (dólar futuro) que implicó nuevos negocios para sus amigos y más y más graves problemas para la nueva administración, ameritan que la Justicia tome cartas en el asunto y, en su momento, haga recaer sobre él todo el peso del Código Penal, amén de obligarlo a responder con su patrimonio personal; allí resultará crucial la presencia de Rodolfo Barra, designado Procurador del Tesoro –jefe de todos los abogados del Estado- en reemplazo de Carlos Zannini, cómplice esencial del saqueo kircherista. Sólo así, cuando se demuestre que se acabó en serio la impunidad y que los ladrones pagarán sus culpas, podrá pedirse a la sociedad que soporte las medidas económicas necesarias para, simplemente, volver a la superficie desde el fondo del mar en que nos encontramos desde hace tantas décadas.


Vientos y Mariscales 25-11-23
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 917

“Yo me conformaría con que el corazón de los argentinos tuviera tres cosas: honestidad, responsabilidad, solidaridad”. René Favaloro

Mi emocionado abrazo a los grandes vencedores del domingo, Javier Milei y Victoria Villarruel, a los que sumo, sin dudar, a Mauricio Macri y Patricia Bullrich, que consiguieron reencausar hacia los libertarios a gran parte de los votantes de JxC y garantizar su triunfo con el aporte de miles de fiscales. Gracias a Dios, la Argentina se encamina a la reconstrucción de la mano de la austeridad en la conducción del Estado, la libertad de los ciudadanos y la seguridad jurídica para permitir las inversiones esenciales.

La resonante victoria del candidato libertario fue la constatación de que en América, finalmente, los pueblos han despertado y los vientos soplan en contra del Foro de San Pablo y su pretensión de extender el “socialismo del siglo XXI”, el proyecto populista y autoritario que, en su hora, organizó Luiz Inácio Lula da Silva con la complicidad de Néstor y Cristina Kirchner, Evo Morales, Hugo Chávez y Rafael Correa; aún lo integran Daniel Ortega (Nicaragua), Miguel Díaz-Canel (Cuba), Xiomara Castro (Honduras), Gustavo Petro (Colombia), Nicolás Maduro (Venezuela), Luis Arce (Bolivia), Andrés López Obrador (México) y, pese a su vocación democrática, Gabriel Boric (Chile). Ese huracán ya se llevó puestas esas ansias con la derrota en la Constituyente chilena, el triunfo de la oposición colombiana en las elecciones municipales, la victoria de Daniel Noboa sobre el correísmo en el ballotage ecuatoriano y ahora en la Argentina, mientras que resultaban imposibles quimeras en El Salvador, Paraguay y Uruguay, países que ya habían rechazado el progresismo empobrecedor que, durante muchos años, habilitó la fundación de Unasur y otros conglomerados regionales sectarios.

El resultado del domingo constituyó el mejor escenario, al menos por ahora, para Cristina Fernández, porque consiguió retener la crucial Provincia de Buenos Aires y varios municipios clave y, a la vez, impedir que el Aceitoso la convirtiera en víctima de un inevitable matricidio. Pero la monumental golpiza que recibió el peronismo en todo el país (en el feudo de Axel Kiciloff triunfó sólo por un lastimoso 1,47%) fue de tal magnitud que, por ser la gran e indisimulable responsable, no se le permitirá eludir el pago de la factura que siempre el famoso movimiento presenta a sus mariscales derrotados. En breve veremos una nueva configuración del poder en el PJ, pues los gobernadores de ese signo serán, aunque sea a desgana, mucho más colaborativos con el nuevo Presidente que quienes aún militan en el kirchnerismo duro, fascista y ladrón.

El connotado círculo rojo, formado por los empresarios “expertos en mercados regulados”, aspiraba y apostaba a un triunfo de Sergio Massa para conservar los zoológicos y bañeras en los cuales tanto tiempo cazó y pescó (las ensambladoras de Tierra del Fuego son un ejemplo paradigmático) siempre en perjuicio de una sociedad que toleró su genética corrupción, pagando altos precios por sus productos malos, escondido detrás de fórmulas de nacionalismo berreta y proteccionismo absurdo. Resulta cómico ver cómo sus integrantes se rasgan ahora las vestiduras frente a las propuestas de libertad que trae Milei, anunciando la pérdida de puestos de trabajo (que fueron incapaces de generar pese al cierre casi total de la economía) si se vieran obligados a competir.

¿Y dónde estaban los eternos y absurdamente enriquecidos dirigentes sindicales mientras el trío de los Fernández² y Massa arrasaba la economía, destruía salarios y jubilaciones, nos llevaba al borde de la hiperestanflación, la pobreza bien medida al 50%, la indigencia al 15% y desaparecía a la clase media que antaño era su clientela? Hoy, ya antes de que asuma Milei, se muestran espantados y profieren amenazas sólo porque ven peligrar sus privilegios de casta. Las mismas actividades preventivas están desplegando los gerentes de la pobreza, acosados por la probabilidad de verse desplazados de su papel de intermediarios en la cadena de la felicidad de los planes.

A algunos, como Pablo Moyano y otros energúmenos se les soltó la cadena, en especial a Pablo Biró, que se siente dueño de Aerolíneas Argentinas y menta a muertes en la calle, por lo que ya fue denunciado penalmente por el Fiscal Carlos Stornelli. Y tal como suponíamos, Massa ha empezado a recorrer el mismo camino, acusado por María Eugenia Talerico y Daniel Sabsay, con razón, de administración fraudulenta por la forma en que dilapidó dinero público para sostener su candidatura.

Lo realmente positivo es que Milei, que está dando permanentes muestras de autoridad y honestidad, pese a ser el Presidente con menor apoyo legislativo propio de la historia dispondrá de la colaboración de gobernadores, diputados y senadores del PRO y del peronismo republicano para obtener las leyes que necesitará para sacarnos de estas arenas movedizas que, hace tantos años, engullen nuestro destino.

Habrá que hacer sacrificios extremos, pero tiene detrás de sí los catorce millones de votos que obtuvo el domingo pasado; y cuenta ya con gente capaz y experimentada en muchas áreas de gobierno, especialmente en seguridad (narcos y “mapuches”, ¡teléfono!) y defensa por si los repugnantes especímenes que se adueñaron del Estado –sobre todo de la educación pública- y sus empresas quisieran repetir sus pasadas “proezas”.

Schiaretti, No es Superman, sino “El Hombre Araña”   24-11-23 

por Alberto A. Anselmi

El “Hombre Araña” araña todo lo que puede, será por eso tantas obras, rutas, escuelas, hospitales, porque sin hacer rutas, aunque no se arreglen las viejas, sin hacer escuelas, aunque no pongan maestros, sin hacer hospitales, aunque no pongan médicos ni insumos, habiendo hecho el hospital modular de Mina Clavero, trayendo excepcionalmente todos los instrumentales para combatir la pandemia, que les sirvió para inaugurar (con los mismos instrumentales) otro centro de salud con el mismo “verso”, de la misma manera que entregaron nuevos móviles policiales, para después llevarse la mitad para hacer campaña en otro municipio.

Pero el gran “curro”, las troncales del gas, prometidos por este mismo gobierno en las manos de De La Sota hace 24 años y todavía no llega a los habitantes de Traslasierra por lo que fuera denunciado, por quien escribe esta nota, en la Justicia Federal ante el Fiscal General Enrique Senestari y luego imputado en “El Lavajato” por este delito de coimas en Brasil y Estados Unidos, donde el propio empresario propietario de Odebrech confesó como arrepentido por las coimas que entregaban al dúo De La Sota- Schiaretti por cada obra que le daban.

También las coimas por la instalación de cañerías para traer el agua desde el dique Los Molinos a Córdoba y que el propietario de la empresa, Aldo Boggio confesara como arrepentido que entregaba, en todas las obras que le dieron las correspondientes “coimas” a Schiaretti.

Pero esto no es lo único sino sólo una parte de todos los hechos de corrupción que se llevaron a cabo, sin hablar de las viviendas para Villa Cura Brochero, prometidas hace 24 años en cada campaña política, o sea cada 4 años, en 1998 las prometía De La Sota en el Club Peñarol de Brochero, en la segunda campaña, en el mismo lugar, pero con 5.000 choripanes de por medio, el gobernador se disculpaba diciendo que Brochero no tenía los terrenos pero que ahora  la provincia le regalaba los terrenos para hacer las 100 viviendas que tanto necesitaba Brochero (infinidad de aplausos  en Peñarol, saboreando los chorizos).

Pero cuatro años más, ya gobernaba Schiaretti, quien ante nuestra pregunta afirmó, “yo no prometí las viviendas, porque cuando  yo lo prometo lo hago y ahora lo prometo yo y haré las viviendas. Y así transcurrieron muchas campañas más y por eso Schiaretti le puso a este Periodista Anselmi, guardaespaldas, que según los mismos amenazaban y justificaban diciendo que no le hiciera preguntas al Gobernador, quizás porque no querían le volviera a preguntar sobre las viviendas, las que “Lucho” Oliva les agradeciera tantas veces los gestos tan comprometidos de los gobernadores durante los años de tantas inauguraciones de promesas.

Y las mismas promesas, también agreguemos las cloacas, prometidas hace también 24 años y todavía nadie recibe ese servicio que ahora deberá afrontar el Dr. Luis Quiroga, próximo Intendente de Mina Clavero; desde tantos años también se llevaron a cabo como promesas de campaña, sí porque Schiaretti inauguraba “promesas”. Las mismas promesas, decía, se hicieron por el Hotel de 5 Estrellas, que prometieron (para ganar votos) en el lago La Viña, el pavimento del camino al museo Rocsen, jamás realizado ni un metro.

De un lado del Obelisco, está la marea azul y roja, están los disfraces y la música inconfundible del Hombre Araña. Del otro lado, persisten las quejas, los cánticos y los carteles contra Sergio Massa y el reclamo de los militantes mileístas de La Libertad Avanza por una "boleta única" en el balotaje del domingo 19 de noviembre.

Todos tenemos esperanzas de un buen gobierno y esta es la oportunidad de Javier Milei, ¿Podrá ser el nuevo San Martín, el mismo que libertó América del Sur, nuestra Fe avanza…

No va más Nota del 18-11-2023 publicada 20-11-23
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 916

“El miedo sólo sirve para perderlo todo”. Manuel Belgrano

La campaña del miedo que el oficialismo ha desplegado no ha tenido, según las dudosas encuestas disponibles, el éxito esperado ya que el promedio de todas ellas muestra ganador al candidato libertario. Tampoco ha cuajado la insólita pretensión de Sergio Massa de que olvidáramos su complicado y tan contradictorio pasado y disfrazarse de candidato capaz de encarnar un cambio diferenciándose, al igual que hace Cristina Fernández, del fracasado y corrupto gobierno que comparte y cuya jefatura de facto ejerce desde hace más de un año. Es que el hartazgo que embriaga a una sociedad tan rota, producto de la voluntad kirchnerista de pauperizarla para dominarla, supera a la incógnita o al temor que suscita un curioso personaje, un desconocido recién llegado que, a través de las redes sociales, ha adquirido la gran probabilidad de representarla.

Quienes estamos preocupados por una eventual reedición, en peor versión y por veinte años más, de cuanto vivimos bajo el kirchnerismo, debemos instar a nuestros amigos y conocidos a votar positivamente, aunque lo hagan tapándose la nariz por el disgusto de tener que optar por un mal menor; la abstinencia y el voto en blanco favorecen a Massa, triunfador en la primera vuelta. El Gobierno, que se negó a postergar el fin de semana largo con la intención de perjudicar a Javier Milei presumiendo que muchos de sus electores lo aprovecharían para viajar absteniéndose de votar, tuvo una mala noticia: las reservas hoteleras cayeron verticalmente, confirmando el compromiso cívico que la ciudadanía ha asumido en esta crucial instancia.

La última bola de esta ruleta se lanzará mañana a la noche, y con eficiente fiscalización mediante, espero que los argentinos hayamos dado vuelta a una de las páginas más trágicas de nuestra historia, que comenzó cuando Eduardo Duhalde, en 2002, literalmente remató la Presidencia de la República y Néstor Kirchner, que para ello disponía de los hurtados y famosos fondos de Santa Cruz, hizo la mayor oferta. Espero tanto un triunfo de Milei cuanto en que la diferencia a su favor sea lo suficientemente importante como para no tener que esperar, por varios días, el resultado del escrutinio definitivo, a cargo de la Justicia, o sea, de la Cámara Nacional Electoral.

Con el análisis de la apertura de los datos finales sabremos si Cristina Fernández, después de haberse garantizado la Provincia de Buenos Aires y el ingreso de innumerables diputados y senadores adictos, amén de muchos gobernadores e intendentes, jugó en serio a favor de Massa, un cínico que necesariamente deberá intentar un matricidio para ser el nuevo macho alfa del peronismo. A ella, ¿qué le conviene más?, ¿un mandatario que, con su triunfo, se habrá transformado en dueño de la lapicera y del PJ u otro, que por su debilidad legislativa estará obligado a negociar cada ley?

En esta larguísima campaña electoral que terminó el jueves hemos visto surgir de las cloacas las peores inmundicias, tanto en la proliferación de gravísimos episodios de patoterismo provincial, corrupción (Insaurralde, Chocolate Rigau, etc.) y mafioso uso de los servicios de inteligencia estatal para perseguir a opositores, periodistas, jueces y hasta propia tropa, cuanto en la reiterada tentativa de colonizar al Poder Judicial mediante la fantochada del juicio político a los ministros de la Corte Suprema. Sólo la masiva pobreza y la inducida ignorancia que padece nuestra ciudadanía, que le impide pensar en algo más que subsistir, ha permitido que Massa, cómplice de ese bastardo ataque y directo responsable de la catastrófica situación económica y de la imparable inflación, sorprendiendo al mundo entero, haya conseguido ingresar al ballotage.

Si el candidato libertario fuera el ganador, a Massa le espera un largo recorrido por los tribunales, diseñado por la gran cantidad de denuncias por la desvergüenza con que ha violado todas las normas electorales, apropiándose de los muchos recursos y resortes del Estado para sostener su candidatura y para denostar a su adversario; con esa amoral conducta, además, arrasó (3 puntos del PBI) con la ya destruida economía nacional. Quienes moran en Comodoro Py poseen narices capaces de competir con los mejores perfumistas del mundo, y una percepción privilegiada para anticipar hacia dónde se moverán las veletas que coronan el edificio.

El perverso calendario electoral deja escasos veinte días a la transición (si se trata de signos políticos distintos) y prometen ser más que agitados y peligrosos, tanto en una economía en recesión y al borde la hiperinflación, cuanto en lo social, por la proximidad de las fiestas de fin de año, una época en que las carencias siempre son mayores y más angustiantes. Dudo que un perdedor Aceitoso resigne su cargo de Ministro de Economía y, seguramente, estará tentado a arrojar sal sobre las ruinas que heredará su sucesor, mientras el kirchnerismo y sus cómplices más violentos (barrabravas, soldaditos del narco, Vatayón Militante, patotas sindicales y anarco-trotskistas) pondrán en duda una transferencia pacífica del mando.

Pero, con el sillón de Rivadavia, Milei se hará con el mando de todas las fuerzas armadas y de seguridad federales, y podrá apoyarse en el prestigio que en ellas tiene su compañera de fórmula, Victoria Villarruel, y más aún en la confianza y el carisma que distinguen a Patricia Bullrich, quien ha tenido la nobleza de sumarse a la gesta libertaria contra la cual perdió en la primera vuelta electoral, para controlar cualquier desborde.

Bs.As., 18 Nov 23

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Enrique Guillermo Avogadro
Abogado

Democracia y Transparencia 16-11-23
por Diego M. Mestre

Democracia y Transparencia

Tribunal de Cuentas de la Provincia de Córdoba

 

El 25 de junio los cordobeses expresaron en las urnas claramente su intención. Eligieron a Martín Llaryora como gobernador para el período 2023-2027 y le concedieron a Juntos por el Cambio el control del Tribunal de Cuentas de la provincia tal lo establece la Ley 7630 Orgánica del Tribunal de Cuentas de la Provincia. Pero el peronismo de Schiaretti-Llaryora no deja de dar sorpresas desagradables y fuera de todo contexto normal, lo cual es desconocer la voluntad de los cordobeses manifestada a través del voto y a pesar de las voces que se alzaron desde diferentes sectores en defensa de la institucionalidad y la voluntad popular, a menos de 30 días del cambio de autoridades, envían, tratan y aprueban en la Legislatura de la Provincia de Córdoba, un conjunto de reformas que modifica el funcionamiento del Tribunal de Cuentas para vaciarlo de contenido, se pretende entre otras cosas eliminar el visado previo (se auditarán los gastos ya realizados) se pretende quitar agencias y organismos de la órbita de control del Tribunal de Cuentas; se quiere  dar vía libre para viajes, traslados, pasajes, y determinadas erogaciones e incorpora una categoría que acepta ciertos gastos sin comprobante que los respalde, entre otras aberraciones que restan facultades de control y que hacen a una total falta de transparencia. Si no hay nada para ocultar, no se comprende este apuro para modificar una ley que lo único que pretende es dar libertad de acción absoluta en el gasto al gobernador electo, quien ya sabe de éstos mecanismos de impunidad, tal lo hizo en la Municipalidad de Córdoba gobernando los 4 años en emergencia económica que él mismo declaro, otorgándose a sí mismo plenos poderes sobre los gastos de la administración. El único gesto que pretendo del actual gobernador Juan Schiaretti es que honre la investidura que le otorgaron los cordobeses y vete la modificación a la Ley que fue consumada el 16 del corriente, que han aprobado aprovechando la mayoría parlamentaria, que ya no tendrán desde el 10 de diciembre. Le pido un gesto de grandeza institucional para que respete la voluntad que expresaron los cordobeses en las urnas

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Diego M. Mestre

Pte. Comité Capital Córdoba UCR


¡Qué chiquero 2! 11-11-2023
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 915

“Con todo lo que se sabe, muchos volverán a ser votados y habrá que admitir que somos un país de mierda”. José Sacristán

El gravísimo episodio de espionaje ilegal sobre un montón de personas relevantes del oficialismo y de la oposición que explotó en las manos de Sergio Massa a días del crucial ballotage, volvió a poner sobre el tapete el asesinato del Fiscal Alberto Nisman y reviste características truculentas para la democracia, aún para ésta tan maltrecha que vivimos los argentinos, pero ¿tendrá relevancia al momento de votar? ¿Cuánto incide en el ánimo de los ciudadanos, de cara a la inminente elección, la generalizada corrupción que se expone, diariamente, a cielo abierto?

Si la respuesta puede medirse en función de lo sucedido en la primera vuelta, substanciada en la estela del yacht “Bandido”, con el cual se paseó el camporista Martín Insaurralde por el Mediterráneo con una felina modelo, deberíamos concluir que muy poco, ya que éste consiguió entronizar a su heredero, Federico Otermin, como Intendente de Lomas de Zamora, mejorando nada menos que en 50.000 votos los resultados obtenidos en las PASO. No debemos olvidar, además, que el delfín es uno de los principales manchados por los “chocolates” de la Legislatura provincial.

El porqué de esa irracional conducta de los ciudadanos de a pie ante las urnas sólo puede explicarse si recordamos la gigantesca y tan exitosa fábrica de pobres que ha sido el kirchnerismo, que aplasta a nuestro país desde hace veinte años. Quienes se limitan a intentar sobrevivir en medio de la miseria más atroz, sin agua ni cloacas, sin seguridad y sin asfalto, sin educación y sin salud, en manos del violento narcotráfico, sólo pueden pensar en lo inmediato: ver cómo hacen para comer ellos y sus hijos con ingresos que la desbordada inflación deteriora a ojos vistas y ya son comparables a los de Haití. Así, la corrupción generalizada no entra en el ángulo de su mirada ni de su pensamiento, como tampoco lo hace el largo plazo y, como natural consecuencia, cambian su voto por un colchón, unas chapas o una bicicleta, entregando así el futuro a estos crápulas que, como se saben impunes, exhiben sin vergüenza sus fastuosas vidas.

La chapucería y, sobre todo, la monumental impericia que han demostrado estos personajes (si los mandan a espiar, tocan el timbre) es un balde de agua helada sobre las pretensiones de Cristina Fernández de poner en la picota a los jueces que, en breve, deberán decidir, si no sobre el bien oculto botín robado a las arcas públicas, al menos sobre su libertad y la del tan laborioso y reelecto Máximo Kirchner. Todo el mamarracho del juicio político a los ministros de la Corte Suprema se derrumbó porque su principal impulsor, el Diputado Rodolfo Tailhade, aparece claramente como jefe de esta franquicia blue de la Agencia Federal de Investigaciones.

Seguramente, en el debate de candidatos a Presidente que se realizará mañana, Javier Milei interpelará duramente al Aceitoso al respecto, ya que uno de los esenciales engranajes -Fabián “Conu” Rodríguez- de esa pestilente maquinaria aún revista, y en un cargo relevante, en las filas de la Dirección General Impositiva, la mega base de datos que el Gobierno utiliza para apretar a los ciudadanos molestos y a las empresas díscolas, y que depende del propio Massa. Además, los dos diputados que responden a éste en la Comisión de Juicio Político (Ramiro Gutiérrez y Micaela Morán) han permitido a la canalla kirchnerista contar con el quórum necesario para su payasesco show contra los jueces supremos, y demorar el dictamen de esa Comisión hasta después del ballotage para no afectar más sus chances electorales, y quizás también como una tentativa de extorsión a las víctimas.

Si, como espero, el Peluca triunfa el 19 de noviembre, el Aceitoso comenzará a frecuentar los pasillos de Comodoro Py, y los muchos amigos que ha cosechado, por las buenas o por las malas (con carpetazos alimentados por estos espías), en los tribunales federales deberán esforzarse para intentar evitarle muchas noches de insomnio. Ha violado todas las normas electorales y, para solventar su campaña, ha manoteado sin pudor alguno tantos dineros públicos que agravó aún más el estado agónico de la economía nacional; ayer mismo, el Jefe de Gabinete (el candidato a Vicepresidente, Agustín Rossi) y el Ministro de Economía (el mismo Massa) ampliaron el gasto de este año en casi $ 400.000.000.000. = (cuatrocientos mil millones de pesos). Y, por si fuera poco, habrá llegado el momento en que deberá explicar a los jueces y fiscales, que girarán como veletas por los nuevos vientos políticos, cómo ha construido su incalculable fortuna.

Precisamente, ante la inminencia del ballotage, siguen vigentes algunas preguntas cruciales: en la medida en que los gobernadores, intendentes, diputados y senadores ya han obtenido o reocupado sus sillas, ¿pondrán en movimiento, con la misma intensidad, el pesado y carísimo aparato peronista para beneficiar a Massa, capaz de cualquier traición? La renovada liga de mandatarios provinciales, ¿querrá empoderar a un nuevo macho alfa con estas características para que los lleve a la rastra? Cristina Fernández, que ha logrado quedarse con la Provincia de Buenos Aires para, desde allí, hostigar al futuro gobierno nacional, ¿ayudará a que su futuro, pero inevitable asesino político se haga con el poder para borrarla del mapa? Y el paranoico e hijísimo Máximo, ¿seguirá mirando sin reaccionar cómo sus más leales soldaditos van cayendo mientras los otros, ajenos a su “orga”, sobreviven? La moneda sigue estando en el aire, y las contradictorias encuestas que circulan por las redes no permiten superar la incógnita.

Sin Miedo 04-11-2023
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 914

 

“A veces, uno sabe de qué lado estar simplemente viendo quiénes están del otro lado”.

 Leonard Cohen

 

El mundo entero parece haberse aficionado a jugar al TEG, pero con armas cada vez más letales; más allá de la horrorosa incursión de Hamas en Israel, a través de la cual Irán está modificando todo el mapa político de Medio Oriente, y de la salvaje invasión de Rusia a Ucrania, que logra lo mismo en Europa, el clima bélico también ha llegado a Sudamérica. Así, algunos países de la región van frustrando las siniestras intenciones del Foro de São Paulo, pero, a la vez, otros ponen en riesgo la paz que, durante tantos años fue un privilegio del subcontinente.

 

Toca felicitar a la ciudadanía colombiana que, el domingo pasado, reaccionó sin miedo y comenzó a revertir el camino de destrucción que inició al elegir como Presidente a Gustavo Petro, el ex guerrillero de las FARC que integra el arco nefasto del “socialismo del siglo XXI”. Lo hizo en las elecciones regionales que la oposición ganó por amplísimo margen y, como perla, llevó a la Alcaidía de Bogotá a Carlos Fernando Galán, hijo de un candidato presidencial asesinado por Pablo Escobar Gaviria en 1989.

 

La misma reacción se percibe en Venezuela, donde el narco-régimen de Nicolás Maduro se ve, por primera vez, fuertemente cuestionado por el gran éxito (92%) alcanzado sin miedo por Corina Machado en las internas de la oposición. Cuando la dictadura aceptó las negociaciones en Barbados para garantizar elecciones libres, el mundo libre levantó algunas de las sanciones económicas impuestas; sin embargo, a pocos días de ello, el chavismo las vuelve a motivar anulando los resultados de esas elecciones, persiguiendo a su vencedora y, además, buscando una insensata guerra contra Guyana por la región de Esequibo, para insuflar un instinto nacionalista que logre aglutinar en su apoyo a la opinión pública. ¿Algún parecido con la Argentina?

 

En Chile, el bastión socialista de buenos modales, el gobierno de Gabriel Boric está nuevamente jaqueado en el proceso de reforma constitucional, en el cual la derecha ha impuesto sus criterios y mandado al arcón de los malos recuerdos las exóticas propuestas de instalar una nación plurinacional y suprimir al Senado. Bolivia, el modelo que pretendió imitar la izquierda chilena, se ha transformado en la base terrorista regional de Irán, como Venezuela, y el gobierno de Luis Arce está emitiendo pasaportes a iraníes que pasan a nuestro territorio por fronteras que son verdaderos coladores, olvidando que el país de los ayatollahs fue el responsable de los peores atentados que sufrimos, los de la Embajada de Israel y la AMIA.

 

Volviendo a la Argentina, el Aceitoso “vende” haber ganado ya el ballotage que se disputará dentro de dos semanas, pese a ser el máximo responsable de la tragedia socio-económica que vivimos. En pos de ese hipotético triunfo, devastó aún más la tierra arrasada en que ha convertido al país con su “plan platita 3” y con la degradación de la democracia que implica la “campaña de miedo” que instrumentó utilizando las empresas públicas. Pero la realidad es bien distinta, ya que la gran mayoría se expresó en contra del proyecto de Sergio Massa, que sólo concitó el apoyo del 37% del electorado, en la peor performance del peronismo en toda su historia; seguramente, teme que la mayoría republicana ponga fin a sus sueños.

                                                                   

He sido desde aquí duro crítico de las propuestas más disruptivas de Javier Milei, y no me arrepiento de haberlo hecho. Sin embargo, ahora no sólo lo apoyo, sino que milito activamente a favor de su candidatura. Y lo hago por dos razones muy simples: la primera, es que estoy convencido que necesitará negociar para adquirir una gobernabilidad que la escasez de legisladores y la carencia de gobernadores propios le retaceará y, así, su conducta podrá ser controlada por el Congreso y por la Justicia; y la segunda, más determinante, surge de observar el tren fantasma de quienes rodean al Aceitoso y su mujer, Malena Galmarini, mientras recuerdo cuán peligrosos son, ya que coinciden tanto en su amoralidad cuanto en su riqueza mal habida, producto de su rara relación con el narcotráfico.

 

Esta nueva mutación del peronismo transporta en su vagones a los peores líderes gremiales (ver, Hugo Moyano y Roberto Baradel), los eternos señores feudales de las más pobres provincias (Gildo Insfrán, Osvaldo Jaldo y Gerardo Zamora), los abyectos “barones” del Conurbano (con Martín Insaurralde portando la incombustible bandera), los empresarios prebendarios y corruptos, y hasta los integrantes de ese extraño radicalismo transformado en bolsa de empleo público (Ricardito Alfonsín, Gerardo Morales, Martín Lousteau, Emiliano Yacobitti, Miguel del Sel).

 

Por todo eso, y en especial por el daño terminal que significaría para el país extender, al menos por otros veinte años, un sistema de gobierno tan corrupto y nefasto como el que perfeccionará y extremará Sergio Massa si se hiciera con el poder. Pero, así como ya podemos dejar de tener miedo a que la región entera se vista de rojo, también debemos actuar con coraje y decisión para conseguir que ese saludable hálito que la recorre llegue a la Argentina. Recuperarnos de esta prolongada enfermedad llevará tiempo y dolor, pero, estoy seguro, podemos lograrlo y recuperar el futuro para nuestros hijos y nietos, evitando que se vean obligados a emigrar para intentarlo y encontrarlo fuera.

El Voto Consciente 31-10-2023
por Cristian Caón

Nos encontramos ante un momento decisivo en la política argentina, donde el 19 de noviembre se perfila como una fecha determinante para definir el futuro de nuestra nación. En ocasiones como ésta, recordamos las palabras de figuras emblemáticas de nuestra historia política, quienes siempre abogaron por la firmeza de convicciones y la defensa de los valores nacionales.

 

Leandro Alem, el incansable defensor de la política, nos enseñó que "la política es una pasión sublime y el pueblo, el soberano". En momentos de decisiones trascendentales como el Ballotage, es crucial que nuestros votos reflejen esa pasión por la política y el deseo de servir al pueblo.

 

Hipólito Yrigoyen, el "caudillo del pueblo", sostenía que "la democracia no es la ley de los pocos, sino la ley de todos". Al votar conscientemente, estamos defendiendo la democracia en su verdadero sentido, asegurando que todos sean representados, y que nuestros líderes sean responsables ante cada uno de nosotros.

 

Arturo Illia, un presidente recordado por su integridad y honestidad, nos legó la idea de que "la política no es una ciencia fría; es una pasión y se rige por el corazón". En el Ballotage, donde las decisiones pueden parecer difíciles, recordemos que el corazón debe guiar nuestra elección, basándonos en nuestros ideales y principios.

 

Raúl Alfonsín, el líder de la transición democrática, decía que "la democracia es la forma de vida que más respeta la dignidad del hombre". Cuando enfrentemos el dilema del Ballotage, recordemos que debemos mantener nuestra dignidad al no comprometer nuestros valores.

 

En estas circunstancias, la sabiduría de estos líderes históricos nos insta a tomar decisiones con convicción y coherencia. No renunciemos a nuestros principios, hagamos que nuestro voto refleje el deseo de un futuro político en armonía con los valores que han construido la Argentina que amamos. La política argentina merece líderes que abracen y defiendan esos valores. El 19 de noviembre, votamos con el corazón y la dignidad, siguiendo la tradición de aquellos que lucharon por una Argentina mejor.

 

Optar por no elegir ninguna de las dos opciones es un acto de responsabilidad cívica. Representa la voz de aquellos que se niegan a comprometer sus convicciones por conveniencia. No es un voto en blanco, sino una declaración de que demandamos candidatos y políticas que estén a la altura de las expectativas y necesidades de la sociedad argentina.

 

Este acto, a menudo subestimado, es fundamental para recordar a los líderes políticos que su mandato es servir al pueblo y que su legitimidad depende de ofrecer propuestas y soluciones que respeten los valores de la nación. Es un recordatorio de que la democracia se nutre de la diversidad de opiniones y perspectivas, y que el voto es una herramienta poderosa para expresar descontento y disentimiento.

 

El Ballotage es una oportunidad para enviar un mensaje claro y contundente a aquellos que buscan liderar nuestro país. Es un llamado a la responsabilidad, a la autenticidad y a la ética en la política. No debemos conformarnos con menos de lo que merecemos. La política argentina merece líderes que abracen y defiendan los valores de justicia, solidaridad, educación y salud pública.

 

El 19 de noviembre, cuando te enfrentes al Ballotage, recuerda que tu voto es tu voz. No renuncias a tu capacidad de influir en el destino de Argentina. Si ninguna de las opciones te convence, elige la opción de la conciencia, elige hacer oír tu voz, elige recordar a los políticos que deben estar a la altura de nuestros valores y principios. La política argentina merece un futuro más brillante y más acorde con los anhelos de todos los ciudadanos.

Por qué 28-10-2023
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 913

“En política los crímenes se perdonan, los errores nunca”.

Me equivoqué totalmente en mis previsiones sobre los resultados del domingo pasado; que les haya pasado a muchos no me consuela, porque tantos años viviendo en este régimen ladri-populista me hubieran debido enseñar algo. No tuve en cuenta la enorme capacidad de movilización del aparato peronista cuando se pone en juego el poder y, desde él, seguir saqueando al país hasta la extenuación; olvidé también la importancia de las manos que hurtan boletas de los adversarios, facilitada por la total ausencia de fiscales libertarios, en otra zancadilla del eterno Luis Barrionuevo.

Tampoco consideré el síndrome de Estocolmo que afecta a los más pobres y miserables de nuestros conciudadanos, tan desesperados por los siguientes minutos de su castigada existencia que no piensan siquiera en el mediano plazo y, por regalos que pagan ellos mismos con impuestos e inflación, vuelven a entregar el futuro de sus hijos y nietos, que nunca podrán salir del barro y acceder a bienes tan elementales como el agua potable y las cloacas, la educación y la salud. La campaña del miedo, desplegada diez días antes y nuevamente ahora, fue sumamente eficiente en esos estratos sociales, y el uso obsceno de los recursos públicos para apoyar al nuevo mascarón de proa terminó de cerrar el maloliente paquete.

Colaboró claramente la increíble incapacidad de la oposición para explicar qué impacto tendrían las medidas que propone y, sobre todo, para unificar candidaturas en la crucial Provincia de Buenos Aires, donde el lamentable ombliguismo de los dirigentes, entregando ese bastión político tan relevante, permitió la supervivencia del kirchnerismo más cerrado. A partir del triunfo del carísimo e incapaz Axel Kiciloff, su heredero putativo, acompañado por muchos “barones” del Conurbano que recuperaron municipios hasta hoy en manos de la oposición, Cristina Fernández dejó de preocuparse por la puñalada trapera que, como cuenta la historia en miles de ejemplos, le habría asestado Sergio Massa para sacarla definitivamente del juego y convertirse en el nuevo macho alfa del peronismo.

Pero no está todo perdido. Muy por el contrario, gracias al muy loable y patriótico gesto de Patricia Bullrich y Mauricio Macri, tenemos la enorme posibilidad de hacer que Javier Milei gane el ballotage (lo separaron sólo seis puntos porcentuales del Aceitoso) y, para eso, todos tenemos que ir el 19 a votar y hacer un enorme esfuerzo para fiscalizar en las zonas más densamente pobladas. Cuando se me pregunta si creo que casi todos cuantos se abstuvieron en la primera vuelta acompañarán al líder libertario, mi respuesta es afirmativa, porque el, pero-kirchnerismo puso toda la carne al asador hace una semana, con gobernadores e intendentes jugando muy fuerte por sus propias elecciones, todas las cuales ya se han disputado, inclusive las de senadores y diputados. ¿Seguirán moviendo sus aparatos y gastando fortunas para ello cuando ya agarraron la sortija?

No sé si Milei –no comparto muchas de sus propuestas- será capaz, aún con ayuda del PRO, de hacer un exitoso gobierno y, menos aún, si podrá llevar a la práctica sus proyectos más disruptivos bajo el control de un Congreso tan atomizado como el que lo recibirá, pero no tengo ninguna duda de que es necesario hacer hasta lo imposible para frenar a Sergio Massa. Porque no quiero que se siga endeudándonos en condiciones secretas, que se mate impunemente a los fiscales, que nos alineemos con los peores regímenes totalitarios, que el Estado siga siendo el botín de políticos de toda procedencia; que se siga subsidiando con el hambre de los pobres los lujos de Malena Galmarini en AySA y de La Cámpora en Aerolíneas Argentinas, que el narcotráfico -socio del poder- siga asesinándonos y, definitivamente, no quiero en mi vida más personajes como Máximo Kirchner, Martín Insaurralde, Chocolate Rigau, Cristóbal López, Lázaro Báez, Hugo Moyano, Roberto Baradel, Claudio Scapolan, Walter Bento y tantos otros.

Aunque pueda resultar atractiva la tentación de permitir que la bomba neutrónica. que con tanto ahínco ha cebado, explote en las propias manos del Aceitoso, no debemos olvidar que una gran abstinencia en el voto de los ciudadanos permitió a Hugo Chávez, en 1999, empobrecer intencionalmente a la clase media, instalar una dictadura y entronizar luego a Nicolás Maduro como heredero. Los parecidos entre ambos países no serán entonces meras especulaciones si, por desinterés o falsos pruritos principistas, permitimos que el amoral Massa, que carece de todo escrúpulo, se imponga porque, como allí sucede, todos los que aún no lo hacemos pasaremos a depender del Estado para mínimamente sobrevivir y los políticos se enriquecerán aún más, implantando aquí algo similar al Cártel de los Soles, dueño y señor del narcotráfico, asociados a Irán y Rusia, a Nicaragua, Cuba y Honduras. Y con él llegarán también sus carroñeros amigos empresarios “expertos en operar en mercados regulados”, puesto que el país se habrá convertido en una pecera y en un zoológico en los que lucrar sin competencia alguna.

Y por todo ello le ruego concurra a las urnas y vote positivamente, es decir, no lo haga en blanco sino por Javier Milei, porque corremos el peligrosísimo riesgo de entregar otros veinte años de nuestra vida y de las de nuestros descendientes a un matrimonio que, por donde se lo mire, será mucho peor que los tan nefastos y saqueadores Néstor y Cristina. A quien no esté convencido de esto, sugiero leer “Massa confidencial”, de Christian Sanz, director del sitio Tribuna de Periodistas, que describe en detalle al aterrador personaje; se trata de material tan revelador y explosivo que ninguna editorial quiso publicarlo; lo pongo a disposición de quien lo solicite, por correo o WhatsApp.

Uñas Comidas 21-10-2023
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 912

“Cuando el fanatismo ha gangrenado el cerebro, la enfermedad es incurable”. François-Marie Arouet (Voltaire)

Dejo asentado mi agradecimiento a la República del Ecuador que, el domingo y de la mano de Daniel Noboa, rechazó en ballotage el regreso del autoritario y corrupto correísmo al poder. Propinó así duros golpes al Foro de São Paulo y al Grupo de Puebla, esos clubs de tiranos y falsos progresistas que quieren imponer el “socialismo del siglo XXI” en la región.

La Argentina, con los ojos vendados y envuelta en una impenetrable niebla, se prepara para comenzar a definir mañana su destino durante los próximos cuatro años. Todas las probabilidades, a 24 hs de esta elección crucial, están abiertas, pese a los gritos de triunfo de todos los rincones. Los analistas de opinión pública no consiguen predecir que harán los once millones de ciudadanos que, en las PASO, se abstuvieron de concurrir a las urnas, o votaron en blanco; se trata del 25% de los habilitados y superan los porcentajes que obtuvieron todos los precandidatos que compitieron.

Como conté recientemente, quemé gran parte de mi biblioteca cuando Sergio Massa, directo y canallesco responsable de la mayor catástrofe socio-económica que pueda recordar, que nos ha puesto a las puertas de una nueva hiperinflación, que endeudó al país brutalmente y sigue haciéndolo, que ha llevado a la pobreza (bien medida) al 50% y al 15% de indigencia, que es cómplice del rampante narcotráfico y de la violencia despiadada, logró participar, con posibilidades, en las elecciones generales. Si entrara al ballotage del 19 de noviembre, mandaré al fuego al resto de mis libros.

En especial ahora, cuando brotan como hongos en un cementerio los monumentales escándalos de corrupción que lo golpean sin pausa, a caballo de la injustificable riqueza que exhiben ahora los “barones” del Conurbano, como antes lo hicieron los señores feudales del peronismo provincial y, claramente, los organizadores y jefes de la asociación ilícita que llegó al poder en 2003. En las redes, dicen que “encontrar un kirchnerista honrado y decente es más difícil que ponerle un calzoncillo a un pulpo”.

La sorpresiva performance de Javier Milei me llamó la atención por razones opuestas, ya que obedece básicamente al hartazgo de una juventud que, con razón, no ha encontrado respuestas a sus problemas y frustraciones en los políticos de mi generación. El libertario ha creado una nueva religión e impuesto sus irracionales dogmas a sus ignorantes fieles; la discusión interna está vedada y quienes cuestionan algunos de sus psiquiátricas propuestas son enviados por el líder a la hoguera, aunque se trate del Papa Francisco, de economistas disidentes o de periodistas preguntones.

Pero ese edificio tan vertical y monolítico sufre los embates destructivos del fuego amigo. El propio “león” libertario y los poquísimos nombres aparentemente confirmados para ocupar lugares de privilegio en un eventual gobierno suyo, baten sin cesar contra sus paredes con declaraciones que, en plena campaña electoral, semejan graves dislates. Proponer que los padres tengan derecho a desconocer a sus hijos, que se rompan relaciones diplomáticas con el Vaticano, que se venda Vaca Muerta, que se privatice el mar, no parecen ser demasiado racionales a la hora de intentar pescar en la enorme pecera de los indecisos y los abstinentes.

Por otra parte, la sorprendente presencia de tanta “casta” en las listas de candidatos, en el armado electoral y en los financistas del espacio, habilitan las sospechas de que, en realidad, se trata de un caballo de Troya del mismo peronismo reciclado, aunque suene verosímil la versión que dice que se le fue de las manos a sus inventores. Y las estruendosas derrotas que ha sufrido La Libertad Avanza cada vez que se ha presentado a elecciones provinciales, con su consecuente carencia de gobernadores propios y de bancadas significativas en el Congreso, complicarán su gobernabilidad, en especial cuando intente aplicar sus ideas más disruptivas, que siempre serán sometidas a control de constitucionalidad por la Corte Suprema.

Patricia Bullrich ha renacido después del inesperado (pero justificado por la salvaje interna que protagonizó Juntos por el Cambio) sopapo que recibió en las PASO. Ha abierto su oferta y la ha transformado en un real equipo de gobierno, en especial con la beneficiosa (aunque tardía) incorporación de Horacio Rodríguez Larreta a su eventual gobierno. Cuenta con mandatarios en las provincias más importantes y con multitud de legisladores que hasta podrían ser la nueva primera minoría en el Congreso y, sobre todo, no le cabe sospecha alguna de vínculos con la corrupción.

Ese escenario hace que los argentinos estemos royéndonos las uñas mientras esperamos el escrutinio del domingo, pero mi otra grave preocupación pasa por qué sucederá –cualquiera sea el resultado- a partir del lunes 23. La economía está prendida con alfileres y me pregunto si resistirá, sin estallar, hasta la segunda vuelta electoral, cuatro semanas después. Y cuando ese esa explosión se produzca, y más temprano que tarde lo hará, hasta dónde llegará la onda expansiva y con qué violencia.

Si Massa no lograra entrar al ballotage, ¿renunciará como Ministro de Economía o reimpulsará su política de tierra arrasada?; siendo joven, ¿querrá preservar su futuro? ¿Qué pasará con el peso?, ¿podrán destinarse los escasos dólares disponibles a pagar indispensables importaciones para la salud y la industria o se seguirán dilapidando en beneficio exclusivo de los amigos “expertos en operar en mercados regulados”? ¿Permanecerán los Fernández² en sus cargos o saldrán huyendo para intentar no ser alcanzados por el incendio que provocaron?

¿Podremos dormir a partir del domingo a la noche? Depende de nosotros, de nuestra presencia en las urnas y de cuánto valoremos a la República y sus instituciones.

¡Qué chiquero! 14-10-2023
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 911

"Mejor que decir es hacer porque, al hacerlas, las cosas se dicen solas". Micaela Stojadinovic

Ante todo, mi profundo horror y claro repudio ante las criminales e inhumanas acciones de Hamas, esa organización fanática que promueve el odio y disemina muerte, sobre el territorio y los habitantes de Israel, que lucha por sobrevivir. Ninguna guerra puede justificar las atrocidades que todos hemos visto. La situación en Medio Oriente, si el régimen del autoritario Benjamín Netanyahu respondiera vengativamente, atacando a la población civil de la Franja de Gaza, algo absolutamente inmoral y demencial (no se combate a los caníbales comiéndoselos), se complicará aún más y el mundo entero, ya desquiciado por las guerras, de las cuales la invasión de Rusia a Ucrania es sólo la más visible, será todavía más peligroso.

Mañana se juega una carta importante en la región, ya que competirán en ballotage los candidatos a la Presidencia del Ecuador; se trata de la abogada Luisa González y el empresario Daniel Noboa. Y digo que reviste una trascendencia especial ya que la primera representa nada menos que a Rafael Correa, el ex Presidente condenado por corrupción y prófugo en un exilio dorado en Bélgica; como tal, si ella triunfara, el Foro de São Paulo y, dentro del mismo, el kirchnerismo, se verían robustecidos en su nefasta intención de extender el dominio del cínico “socialismo del siglo XXI”.

Debemos recordar que algunos de sus miembros (Cristina Fernández, Miguel Díaz-Canel, Nicolás Maduro, Evo Morales, Daniel Ortega, Andrés López Obrador, Gustavo Petro y Luiz Inácio Lula da Silva) no sólo no condenaron el salvaje ataque de Hamas, sino que son claramente socios de los ayatholas iraníes, que financian y arman a esos terroristas y a sus colegas de Hezbollah, autores de los peores atentados (Embajada y AMIA) registrados en nuestro país...

En el terreno local, las peripecias penales de los miembros de la asociación ilícita que nos gobierna –por nuestra exclusiva responsabilidad- tienden a agravarse con el transcurso de los días. Lamentablemente, no me refiero a la Justicia argentina, siempre remolona y dependiente de los vientos políticos, sino a los jueces de Uruguay y de Estados Unidos, tal como describió Carlos Pagni en su nota del jueves en La Nación.

El lunes 24 de septiembre, días antes de conocerse el “Bandido-gate”, denuncié a Martín Insaurralde ante los Tribunales platenses por defraudación a la administración pública y enriquecimiento ilícito, en razón de la división de su sociedad conyugal, saldada con el escandaloso pago a Jesica Cirio de US$ 20 millones. El Juzgado de Garantías 3, de La Plata, se declaró incompetente y giró el expediente a su colega 1, de Lomas de Zamora el cual -sin sorprenderme- ni siquiera me ha citado a ratificar la denuncia, el paso inicial de todo proceso penal.

En cambio, se acelera el trámite de otra denuncia formulada por Graciela Ocaña ante la Justicia uruguaya, que ya está investigando a las sociedades por las cuales transitaron los fondos requeridos para desinteresar a la modelo. Por su parte, la jurisprudencia norteamericana ha establecido hace tiempo que sus tribunales son competentes cuando se utilizan dólares y, sobre todo, cuando éstos circulan a través de su sistema bancario. Pagni hizo un quirúrgico análisis de varios sucios movimientos de actuales o antiguos funcionarios kirchneristas y las actuales pesquisas, ya a cargo del Juez Julián Ercolini, permitirán conocerlos en profundidad, generando nuevos escándalos.

¿Cuál será el verdadero impacto de estas revelaciones sobre el caudal de votos de Unión por la Patria, en especial en la crucial Provincia de Buenos Aires? La profunda preocupación al respecto ha llevado al, pero-kirchnerismo a lanzar otra lamentable campaña clientelista, repartiendo a mansalva heladeras, bicicletas, cocinas, colchones y chapas para las viviendas precarias de su electorado pretendidamente cautivo; si pudiera aprender de la historia reciente, sabría que un esfuerzo similar no impidió su estruendoso fracaso en las legislativas de 2021.

Por otra parte, hablaría mucho peor de nosotros como país si, a pesar de todo ese chiquero en cuyo barro se revuelca el oficialismo a diario, Unión por la Patria y su Aceitoso candidato conservaran un 25/30% de los votos. Y qué decir si Axel Kiciloff, tan manchado de chocolate y que tan caro nos ha costado con sus desaguisados internacionales, cuyas monstruosas facturas seguirán llegando, lograra su reelección en una provincia en la cual las normas son el hacinamiento en viviendas precarias, la falta de agua y cloacas, la inseguridad cotidiana, el rampante narcotráfico, la estragada educación, la inexistente salud, la politización de los gremios docentes y la enquistada corrupción.

Sigo creyendo que las encuestas que UxP divulga no son más que globos inflados para darse ánimo e intentar, para entrar en el ballotage, retener un voto que claramente huye, a caballo de una inflación cada vez más desbocada (12,7% en septiembre, superando hasta a la destruida Venezuela) por las toneladas de billetes que el Ministro/candidato hace llover sobre una ciudadanía que, cada vez, los rechaza a mayor velocidad, dando nuevo impulso a la devaluación del peso que ya tiene, irremediablemente, un piso de $ 1000 por dólar. El desquicio que Sergio Massa ha hecho con la ya desmadrada economía que heredó es de tal magnitud, que ha llevado a la pobreza a un inédito 50% y a la miseria a un apabullante 15%, y debiera impedirle alcanzar ese objetivo.

Estos ocho días que faltan para las elecciones obligan a quienes aspiramos a un país en el que la ley sea respetada, la democracia valorada y la república preservada, a realizar mayores esfuerzos para evitar que, nuevamente, la sociedad elija el abismo, cada vez desde un escalón inferior.

Pájaros Perdidos  07-10-2023
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 910

“El sexo está en todos lados, salvo en la sexualidad”. Jean Baudrillard

Una verdadera bandada de elegantes cisnes negros sobrevuela y depone sobre la campaña oficialista a escasos quince días de las cruciales elecciones nacionales. Al affaire de Chocolate Rigau, uno más de los muchos que intervienen en la cadena de corrupción en la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires y al escandaloso tema de los millonarios contratos suscriptos por Silvina Batakis en el Banco de la Nación, que se intentó minimizar con el despido de su Gerente General, se sumó la bomba de fragmentación del periplo sexual, digno de un magnate, del ahora ex Jefe de Gabinete del Gobernador Axel Kiciloff.

Mientras todo el pero/kirchnerismo está tratando de organizar cortafuegos y encapsular el tembladeral generado por las fotos y videos que publicó Sofía Clerici (habría que agradecérselo, porque impidió el rápido archivo del caso) sobre Martín Insaurralde, que no tuvo empacho en exhibirse ostentado montañas de dinero robado, ayer se agregó otro episodio similar que, esta vez, afecta a Gustavo Menéndez, el histórico Intendente de Merlo, de licencia mientras lo reemplaza su hermana, y actual Presidente del Grupo Bapro, que fue denunciado por enriquecimiento ilícito, o sea, por esa enfermedad endémica que, salvo raras excepciones, ha afectado siempre a toda la dirigencia del PJ.

Visto el sideral saqueo del que fue víctima el país entero durante la gestión del matrimonio patagónico y ahora, en la medida en que toda esta inmundicia explota mientras la Provincia de Buenos Aires llora el hambre de 56% de sus chicos, y la Argentina tiene al 40% de su población bajo la línea de pobreza y al 12% sumido en la indigencia, me pregunto si no cabe, ahora sí, la calificación de delitos de lesa humanidad, tal como la define el artículo 7 del Tratado de Roma, porque es innegable que la magnitud de la corrupción está exterminando a una enorme proporción de nuestros conciudadanos.

Si así fuera, cabría imputar a todos los integrantes de la organización ilícita que coorganizó y comandó Cristina Fernández, incluyendo a Axel Kiciloff por el inédito costo que implicó su penosa gestión como Viceministro de Economía (entre otros, los US$ 16.000 millones del juicio por YPF en que el país acaba de ser condenado) y a Carlos Chino Zannini, Procurador del Tesoro, el cual, con el propósito de permitir a su jefa robar otros US$ 5.000 millones, desistió de las medidas pedidas para demostrar que, detrás de los Eskenazy estaban los propios Kirchner y, así, evitar la condena.

Pese a que los graves episodios de corrupción han traído a la memoria colectiva otros (las fiestitas de Olivos, la bastarda y artificial guerra en la compra de vacunas que tantas vidas costó, el vacunatorio VIP), creo que las preocupaciones del oficialismo por el costo político de esos inoportunos escándalos no debieran ser demasiado importantes, ya que la oposición, salvo honradísimas excepciones, guarda un estruendoso y cómplice silencio en relación con la corrupción rampante que brota, con la fortaleza de fin de ciclo, por todos los poros de los gobiernos de los tres niveles.

En una notable demostración de la vigencia del síndrome de Estocolmo, el viernes pasado la CGT, la CTA, los movimientos sociales y hasta la izquierda lograran llevar mucha gente a aplaudir al máximo responsable del infierno en que transcurre su penosa existencia. El Aceitoso que promete hacer, si es electo Presidente, lo contrario de las catastróficas medidas que adopta hoy, y que dice saber qué se debe hacer para terminar con la devaluación del peso y la pobreza que él mismo provoca, recibió su baño de multitudes artificiales, transportadas hasta la Plaza de los Dos Congresos por centenares de ómnibus pagados por sus eternos explotadores.

En el primer debate, la ávida ciudadanía esperaba ver a los candidatos presidenciales hablar sobre los problemas que la agobian, exhibir sus proyectos y mostrar las lacras de sus contrincantes; sin embargo, nada de eso se produjo en las más que aburridas dos horas de ese acartonado y condicionado espectáculo. Inexplicablemente, los contendientes parecían señoritas tomando el té y con inusitada prudencia, ninguno de ellos hizo la menor mención, en los cuestionamientos a Massa, de los escándalos de Chocolate, Batakis o del impúdico viajero. Por ello, el amperímetro político no registró variación alguna tras tan educada discusión.

Patricia Bullrich, principal blanco de los ataques sospechosamente concertados del oficialismo y de los libertarios, en un pacto que debiera denunciar, desperdició una magnífica oportunidad para mostrar que no todos son lo mismo, como no es igual su proceder, y que encabezará un gobierno con un comportamiento ético estricto y en verdad diferente a este chiquero de descarada corrupción; espero que mañana, en el segundo y último debate, se ponga esos borceguíes que tanto la distinguen de las mujeres que circulan sobre altos tacos, como actrices destacadas o meras acompañantes, en este deprimente escenario político.

No digo, porque sería más que tonto hacerlo, que sea fácil o agradable vivir en la Argentina, pero estoy convencido de que vale la pena seguir peleando para que vuelva a serlo, para que podamos convivir en paz y recuperar el futuro para nuestros hijos y nietos.

Mugre 30-09-2023
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 909

“Incluso en la muralla más compacta se abre alguna grieta (o al menos tenemos esa esperanza, cosa que ya significa mucho)”. Ryszard Kapuściński

En el inexorable final –el índice de confianza en el Gobierno de la Universidad di Tella lo muestra en el peor registro desde 2001- de esta trágica etapa durante la cual el kirchnerismo destruyó hasta las ruinas que quedaban de la Argentina, la inmundicia aflora y se muestra, impúdica, en todas las grietas de la realidad. Pero cuando más repugnante resulta es el momento en que se miden la pobreza y la indigencia que el vergonzoso saqueo del Estado ha provocado; aún con los análisis correspondientes al primer trimestre del año (antes de la torpe devaluación y el nuevo estallido inflacionario actual) informados esta semana, el panorama es pavoroso porque, detrás de cada número, hay millones de personas que ni siquiera pueden acceder a una alimentación mínima, en especial los chicos, 56% de los cuales se encuentran en esa situación.

Los negociados fabulosos con la obra pública y con YPF, que tanto nos costarán aún, la impúdica utilización de los recursos financieros y materiales oficiales para apuntalar al Ministro/candidato, la malversación de caudales públicos, la obscena emisión de pesos, la salvaje caída del poder adquisitivo de salarios y jubilaciones, la inseguridad ciudadana, la expansión del narcotráfico y la violencia derivada de las guerras entre bandas, la inexistencia de movilidad social ascendente y la falta de futuro, la obligada emigración de los mejores y más preparados jóvenes, la degradación de la educación, la ideologización de los gremios y el atropello a las instituciones de la República son algunos de los hitos que marcarán estas dos décadas.

El saber que se encuentra ante una encrucijada definitiva para su destino político está llevando a Sergio Aceitoso Massa a incendiar todo a su paso y dejar tierra arrasada; si pierde las elecciones, la monumental crisis que dejará a su sucesor permitirá al, pero/kirchnerismo volver a las andadas y emular los sucesos de 2001 (hoy la situación es infinitamente peor) con helicópteros y violencia en las calles y, si las gana, ya verá a qué nueva magia recurrir para sobrevivir a su propia herencia.

El episodio de Julio Segundo Chocolate Rigau y su detención anulada en La Plata iluminó la generalizada corrupción imperante en el Congreso y en la legislatura provincial con inusitada fuerza; y el estruendoso silencio de todas, todas, las fuerzas políticas tanto frente el caso lo confirmó. La saga de contrataciones en el Banco de la Nación recién comienza y tiene enorme difusión en la prensa y demandará años su conclusión, quizás tantos como los que insumió dilucidar el recorrido de las valijas chavistas de Guido Antonini Wilson para la campaña de 2007 de Cristina Fernández, que culminó el miércoles con la única condena a prisión de Claudio Uberti, titular de la “embajada paralela” en Caracas.

No tuvo similar repercusión el escándalo del divorcio de Martín Insaurralde, actual Jefe de Gabinete de Axel Kiciloff, quien habría pagado a su última mujer, Jessica Cirio, la escalofriante cifra de US$ 20 millones, después de serles reclamados US$ 50 millones, montos que denotarían el inexplicable patrimonio de un tipo que nunca trabajó fuera del Estado; por ello, formulé una denuncia penal en su contra, que fue caratulada como Causa IPP N° 06-00-050776-23, con intervención de la UFIJ N° 6 y el Juzgado de Garantías N° 3 Departamental, de La Plata.

Esos lastimosos hechos resultan casi infantiles si se los compara con la conducta del, pero/kirchnerismo en el Senado donde, arrastrado y baboso, se sometió al capricho más exótico de la envejecida reina. La aprobación de la renovación de la designación de la ex Juez Ana María Figueroa fue una nueva humillación que infligió Cristina Fernández a los machos-alfa provinciales para demorar aún más las causas judiciales que tanto le preocupan: Hotesur/Los Sauces y Memorándum con Irán. La anciana ex integrante de la Cámara de Casación podrá optar ahora entre varios caminos, pero todos ellos confluyen en el Corte Suprema, el árbitro final de la constitucionalidad de leyes y resoluciones, que reiterará que aquélla está irremisiblemente jubilada.

La sesión que detonó este nuevo conflicto de poderes entre el Legislativo y el Judicial tuvo, como es sabido, algunos ingredientes remarcables, como el apoyo de senadores que se presumía díscolos para lograr el quórum y la conspicua ausencia de la Senadora Lucila Crexel, de Neuquén y de Juntos por el Cambio, por entonces en Alemania, que habilitó el voto de doble de su colega Claudia Ledesma Abdala de Zamora, en su carácter de Presidente alterna de ese H° Aguantadero, para el desempate.

Las razones que dio justificar su tan notorio faltazo no pueden ser menos creíbles: representaba a la Argentina en un transcendental foro académico sobre el cambio climático, ignoraba que se hubiera convocado al Senado y los gastos los afrontó con su propio peculio. Tan flagrantes mentiras harían sonrojar a un niño: el encuentro, si existió, no tuvo difusión alguna; todos los medios de prensa informaban que Cristina estaba buscando hace semanas esa sesión; y ningún legislador paga nunca nada, ya que el abultado presupuesto del que dispone el Congreso le permite pagar los dislates de sus miembros. Vimos, sin duda, un caso más de alguien que es invitado a estar en el extranjero cuando se trata de una crucial votación; por ejemplo, el periplo que encaró el Senador Alejandro Díaz Bialet, segundo en la línea sucesoria, para despejar el camino al Diputado Raúl Lastiri, tercero y yerno de José López Rega, para asumir la Presidencia de la República en 1973.

Nunca, en mis muchos años de vida, creí que vería a mi Argentina despeñarse hasta este punto (que todavía no es el fondo del precipicio), ni imaginé que, en medio de esta sideral catástrofe, Massa pudiera conservar un 20% de adhesión; esas fueron las razones por las cuales quemé, recientemente, tantos libros de ciencia política, de sociología y de economía.

Darnos cuenta       26-09-2023

Por Edgardo Rodríguez

Muchos argentinos asistimos perplejos a ver la misma película que se viene repitiendo por décadas, salvo contados intervalos, que nos va llevando hacia un abismo, que nunca llega, por la pericia de algunos dirigentes, el trabajo de muchos sectores productivos y por la inmensa riqueza de nuestro suelo. Pero hemos llegado a un punto, en el que realmente se hace difícil no gritar BASTA a tanta manipulación, tanto maniqueísmo, tanta banalidad, tanta propuesta oportunista y falta de contenido.

 

Un alarmante hecho que nos ocurre como sociedad, es que nunca terminamos de cerrar heridas sobre acontecimientos importantes de nuestra historia, lo cual nos lleva a repetir los mismos errores y fracasos. En los ´80 sentí que eso terminaba, en el gobierno de Raúl Alfonsín, con el histórico juicio tanto a Las Juntas Militares, como a los guerrilleros-subversivos. Fue un paso que daba la esperanza de que estábamos cerrando por primera vez, un capítulo muy doloroso de nuestra historia en el ámbito de la justicia y propiciado por el poder político, encabezado por el presidente Alfonsín. Nunca quedo claro, porque, cuando se creó la CONADEP, y se invitó a integrarla los diferentes sectores de la sociedad, el peronismo NO participo.

 

Cuando parecía que por fin habíamos superado las heridas de la convulsionada y trágica década de los ´70, por la vía de la legalidad, aparece un candidato que, prometiendo la famosa Revolución Productiva, gana las elecciones de año 1989, ciertamente en un contexto socio-económico complejo y una vez en el gobierno ejecuta todo lo contrario, y lo reconoce. Más allá de los cambios económicos y sociales, los cuales se pueden discutir, lo grave es se empieza a desandar el camino que la Justicia había cerrado con los juicios más arriba mencionados INDULTANDO a los unos y los otros, con el argumento de la pacificación nacional…

 

Años más tarde, y después de la explosión de la convertibilidad, justamente implementada por el gobierno del presidente Menem, aparece el peronista transversal, Néstor Kirchner (2003), cuyo gobierno se apropia de los derechos humanos y lo convierte en bandera del kirchnerismo-peronismo (el mismo que no quiso integrar la CONADEP), eso abre la puerta a desandar definitivamente el camino logrado con los juicios de los ´80, pero con la gravedad de comenzar un relato parcial de lo ocurrido, peor aún, contando dentro de su gobierno con ex guerrilleros. Claramente acá hubo ejércitos paramilitares que actuaron en contra de la República, y el accionar de la Fuerzas Armadas que actúo en consecuencia avalado por el poder político de entonces.

 

Lo cierto, fue que los juicios y las condenas de los ´80, sólo fueron para algunos miembros de las Fuerzas Armadas y de seguridad, como así también para los integrantes de las fuerzas revolucionarias. Se juzgó y condenó a personas por delitos cometidos, no a las FFAA y de seguridad como Instituciones. Lo preocupante, es que así como el pero-kirchnerismo  ubica a los militares del lado de los malos y reivindica de esa manera el accionar subversivo, la compañera de fórmula del candidato Javier Mileikowsky Lucich (Javier Milei, tal como se presenta), se pronuncia en el extremo opuesto, sobre este tema,  y en esa mezcla de conceptos, postulan al gobierno del presidente Menem como el mejor de la historia, es más, incluyen en sus filas a varios políticos integrantes de aquel gobierno, sumando a esto, los “acuerdos” de Milei con eternos capos sindicales, entonces, la CASTA es selectiva?

 

Surge preguntarse ¿Cuáles son las reales propuestas de Javier Mileikowsky Lucich? ¿Cuál es el verdadero contenido de las mismas? ¿Porque volver sobre los ´70? De las propuestas iniciales, la mayoría se saben imposibles de aplicar en este contexto, la dolarización (ni EE UU la sostiene), ya no se habla del tema venta de órganos, la libre portación de armas se plantea, en otros términos, dinamitar el BCRA, ya no es inmediato, etc. etc. Debería replantear a la sociedad sus propuestas, porque las que hizo inicialmente, ya no son tales, salvo como mera expresión populista, con lo cual estamos ante un conjunto de propuestas imposibles de llevar a la práctica y totalmente vacías de contenido. Ni su emblema de ir contra la casta es sostenible.

Por el lado de UP, es inconcebible que el candidato integrante y Ministro de Economía, de este gobierno que está en el poder desde hace cuatro años, proponga que van a hacer algo diferente. En 2019 dijeron que volvían para ser mejores y fueron peores, y lo son porque su concepción de país es ésta, actúan de manera ideológica y parcial, sin programa de gobierno, y para justificar su accionar nefasto, apelan justificarlo echando culpas a los otros, al FMI, al gobierno de Cambiemos y hasta a la sequía (cualquier administración seria hubiera tomado medidas anticipándose, la tecnología es para eso), la pandemia (que fue mundial y todos la superaron), etc. No hay mucho para agregar, las consecuencias están a la vista.

Sobre las propuestas de JxC, podemos estar de acuerdo o no, con algunos puntos, pero lo cierto es que es la más lógica y posible de aplicar, sobre todo teniendo en cuenta las actuales circunstancias por la que atraviesa nuestro país. Crisis económica y social de grandes magnitudes, tal vez la más grave de la historia, si la vemos en toda su magnitud, para lo cual se requiere decisión política, claridad de conceptos y equipos técnicos para llevar adelante esas decisiones.

No es tiempo de especulaciones, con los actuales y altísimos índices de pobreza (más de 40%), indigencia (casi 10%), un endeudamiento récord (más de 400 mil millones de dólares), falta de insumos, sin reservas en el BCRA, una inflación alarmante y en ascenso (casi 140% anual), cepo cambiario, el sistema de salud colapsado, los narcos sin control, la delincuencia en niveles intolerables, la educación atrasada, con altos índices de deserción, en resumen, una sociedad muy complicada, que necesita ser ordenada para poder avanzar y realizar los cambios que se necesitan para mejorar la vida de todos los argentinos.

25-09-23

 

Edgardo Rodríguez

Dirigente UCR Córdoba Capital

Embarrados 23-09-2023
por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 908

“Una parte de la comunidad que se iba anestesiando y que al final, con fatiga republicana, bajaba las alarmas morales”. Jorge Fernández Díaz

Pensaba iniciar esta columna describiendo las penurias que afectan a Cristina Fernández en razón de los recientes fallos de la Justicia, pero la escandalosa situación vivida el jueves en La Plata me imponen otro comienzo. No es para menos, porque la vergonzosa actuación de los dos camaristas que invalidaron la detención de Julio Segundo Chocolate Rigau, el puntero del PJ atrapado en flagrancia mientras retiraba fondos de un cajero automático con montones de tarjetas de cobro de empleados fantasma de la Legislatura bonaerense, enciende fuertes luces de alarma sobre la democracia misma.

Si miramos el mismo escenario hacia atrás varias décadas y desde otro ángulo, comparando los legisladores que entonces integraban el Congreso de la Nación –Palacios, Repetto, del Valle, Justo, Balbín, Sabattini y tantos otros- con la runfla que hoy ocupa sus bancas, deberíamos ponernos a llorar. En general, no sólo carecen de la más mínima formación intelectual, sino que son por completo incapaces de cumplir el rol para el cual han sido elegidos por los ciudadanos: representarlos. Hace mucho tiempo que no se ven tan distantes a los políticos de las necesidades más urgentes de sus representados; las más que escasas sesiones que los reúnen sólo sirven para designar jueces tan venales como aquéllos en componendas de baja estofa y para complicar la vida de sus mandantes, trabando aún más una economía que, con su servilismo repugnante frente al Ejecutivo de turno, tanto han deteriorado, amén de costar verdaderas fortunas al erario público.

¿Cómo explicar, entonces, a los más jóvenes lo esencial que es la democracia republicana cuando, desde la iluminada vidriera principal, tan nefastos personajes exhiben sin pudor su complicidad con el saqueo más inmundo, al cual protegen y encubren disfrazados de magistrados? Precisamente, por este tipo de cosas, tan frecuentes en nuestro país (recordemos a la Fiscal entrerriana Cecilia Goyeneche, destituida por haber logrado la condena del ladrón ex Gobernador Sergio Uribarri), se inclinan ahora por el candidato presidencial de La Libertad Avanza, que promete descuartizar a la “casta” con una sierra mecánica (a esta altura, y dadas sus nuevas alianzas con lo peor del massismo y del sindicalismo, dudo que siquiera lo intente) y dinamitar los organismos del Estado.

Volviendo a mi intención original, la semana no pudo ser peor para Cristina Fernández y la troupe de delincuentes que integran la asociación ilícita que co-organizó y hoy encabeza, y que incluye a los más altos cargos de la actual administración: el ex Secretario Legal y Técnico de la Presidencia y actual Procurador del Tesoro de la Nación y, como tal, cabeza de los abogados del Estado (Carlos Chino Zannini), y el Secretario de Justicia (Juan Martín Mena), un Diputado y Presidente del PJ de la Provincia de Buenos Aires (Máximo Kirchner), amén de varios que estuvieron durante los gobiernos kirchneristas anteriores, como Julio de Vido, Roberto Baratta y tantos otros.

Luego de ser expulsada de ella la okupa Ana María Figueroa, que se había atrincherado en su despacho a la espera de un ilusorio acuerdo del Senado para la extensión de su rol de Juez, la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal, aplicando el más elemental criterio jurídico y el sentido común, revocó los absurdos sobreseimientos que, sin realizar los juicios orales y públicos en los cuales las pruebas hubieran sido expuestas y los argumentos defensivos desplegados, habían sobreseído a tantos gangsters y traidores a la Patria. Me refiero, claro, a las causas denominadas “Hotesur-Los Sauces”, donde están procesados la señora del Calafate, su hijo y varios cómplices y testaferros, y “Memorándum con Irán”, que afecta en igual medida a ella y a quienes fueron gestores y artífices de tamaño disparate.

En el primer caso, se trata de las coimas que, bajo la forma de inexistentes alquileres de habitaciones en el imperio hotelero que creó, con ese específico propósito, la familia Kirchner, les pagaron Cristóbal López y Fabián de Souza, los recordados ladrones de siderales impuestos, y Lázaro Báez y sus hijos, convertidos en multimillonarios en un día. El otro, originado por la denuncia del asesinado Fiscal Alberto Nisman, versa sobre la traición a la Patria y a su Constitución que constituyó la firma de ese acuerdo, cuya existencia fue negada hasta el infinito cuando lo descubrió Pepe Eliaschev, para otorgar impunidad, a pedido de Cuba y Venezuela, socios de Irán en la región, a los terroristas que volaron la sede de la AMIA y causaron la muerte de 85 argentinos y heridas a 300, aproximadamente.

Para entender un poco más, debemos recordar que el memorándum incluía el levantamiento de las alertas rojas de Interpol sobre los altos funcionarios iraníes imputados como autores intelectuales y materiales del atentado y, sobre todo, la creación de una comisión binacional de juristas que, en los planes de los organizadores, se colocaba por encima del Poder Judicial argentino y revisaría lo actuado por éste en la investigación. O sea, los propios acusados decidirían su destino. ¿Puede creerse tamaña traición? Ambas causas irán, por los recursos extraordinarios que interpondrán los abogados de los imputados, a la Corte Suprema; sin embargo, me atrevo a afirmar que fracasarán, puesto que el alto Tribunal sólo se avoca al estudio de los casos cuando se trata de sentencias definitivas que ponen fin al proceso, lo cual obviamente no sucede en estos casos. En resumen, el año próximo todos ellos deberán sentarse en los banquillos de acusados, expuestos ante la sociedad que convirtieron en víctima de sus zafarranchos.

La frutilla del indigesto postre que Cristina Fernández está obligada a degustar fue una resolución de la Corte que determinó la constitucionalidad de la “ley del arrepentido” y, con ello, convalidó las declaraciones de decenas de empresarios en la causa “Cuadernos”, que confesaron haber pagado monumentales coimas a la familia Kirchner, en valijas y bolsos que volaban hacia la Provincia de Santa Cruz y fueron allí guardadas en billetes de euros de alta denominación; sostengo que después fueron canjeados por diamantes en Angola, en la ridícula visita presidencial de 2012.

¡Quemé los libros!        16-09-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 907

“Un estúpido es un estúpido. Dos estúpidos son dos estúpidos. Diez mil estúpidos son una fuerza histórica”. Leo Longanesi

Transformé en cenizas los primeros volúmenes de ciencias políticas cuando aparecieron líderes que tenían éxito electoral, en la región y en el resto del mundo, a pesar de sus propuestas tan disruptivas y hasta autoritarias. Por ello, recibí con calma la vertiginosa irrupción de Javier Milei en nuestro escenario político. Pero el fuego tomó nuevo impulso cuando arrojé más libros al observar, atónito, como una alianza de partidos (Juntos por el Cambio), que tenía asegurado su triunfo hace pocos meses, decidió privilegiar una salvaje confrontación entre sus propios candidatos y poner así en serio riesgo la probabilidad de consagrar a uno de ellos en octubre.

Pero el miércoles volví a arrojar muchísimos a la chimenea cuando nuestro país ingresó, resignadamente, al pabellón psiquiátrico global: ¡el Gobierno en pleno, encabezado por el propio Meme Presidente, hizo una huelga contra la oposición! Aquí ese acto realmente fascista, convocado para intentar la misión imposible de acercar votos al candidato oficialista, no llamó la atención porque, el día anterior, la eternizada cúpula de la CGT, acompañada por Máximo Kirchner y otros líderes kirchneristas, que tan ominoso silencio ha guardado durante los últimos cuatro años mientras la inflación se espiralizaba (12,4% mensual y 150% anual), la pobreza alcanzaba nuevos records (48%), el hambre campeaba y el poder adquisitivo de los salarios se derrumbaba, en especial en el caso de los trabajadores informales, concretó una marcha a Plaza de Mayo para aplaudir al Ministro/candidato, principal responsable de tamaña catástrofe.

Las estanterías que destiné a los estudios electorales, conservan aún manuales que, presumo, podré conservar después de octubre. Son aquéllos que aseguran que, en esta desastrosa coyuntura socio-económica, las chances de Sergio Massa de llegar a la Casa Rosada son por completo nulas, aunque siga, en su doble rol de Presidente de facto y candidato, endeudándonos (la deuda en Leliqs alcanza ya a la friolera de dos billones de pesos) y tirando pornográficamente montañas de papelitos sin valor, propios y ajenos, a la calle. Creo que él mismo está convencido de que lo espera un negro futuro y, por eso, ha detonado un “plan bomba” cuyas consecuencias mediatas sabe que no deberá afrontar; la irresponsabilidad con la que actúa, debiera sí acarrearle derivaciones penales, aunque supongo que no sucederá.

En julio de 2018, escribí una columna (https://tinyurl.com/dvusrx4c) en la que denuncié que, detrás de los “fondos buitre” que acaban de obtener contra la Argentina una enorme sentencia –¡US$ 16.000 millones!- (o sea US$ 340 por cada habitante, aunque sea recién nacido, carezca de vivienda, de agua y cloacas, de salud y educación o ni siquiera pueda alimentarse regularmente) estaban la propia Cristina Fernández, actual Vicepresidente, y sus hijos. El próximo gobierno debería impulsar la causa penal que investiga lo sucedido, que duerme desde hace años en el despacho del remolón Juez Ariel Lijo. Quizás así podríamos evitar, al menos, que una parte (US$ 4.800 millones, por el 30% del juicio que se reservaron los Eskenazy cuando le “vendieron” el derecho a Burford Capitals), vuelva a engordar los tan angurrientos bolsillos de los Kirchner o de sus testaferros, si éstos, como se dice en los mentideros, hubieran “mexicaneado” a la abogada exitosa tras la muerte de don Néstor.

El monumental desaguisado de la expropiación se ejecutó mientras ella se desempeñaba por segunda vez como Presidente y el subnormal Axel Kiciloff ejercía como Viceministro de Economía, y fue votado con algarabía por una gran mayoría de nuestros imbéciles legisladores (la lista detallada, en https://tinyurl.com/yrfma6nw), muchos de los cuales no sólo habían festejado con vivas y risas el default de 2002, sino que aún siguen medrando en el H° Aguantadero. La presencia estelar de Carlos Chino Zannini, cómplice necesario en el saqueo de los Kirchner, en todo el proceso (era Secretario Legal y Técnico en 2012 y ahora es Procurador del Tesoro y, como tal, “casualmente” responsable de la defensa de los intereses argentinos en el juicio de Nueva York), lo convirtió en tragedia cuando desistió de cuestionar ante la Justicia española el negocio Eskenazy/Burford por falsedad y corrupción, como sí había hecho Bernardo Saravia Frías, su antecesor en el cargo durante la administración macrista.

La gestión de Kiciloff como responsable de la economía cristinista, además de esa montaña de dinero, ya nos costó el pago a Repsol por US$ 10.000 millones (intereses incluidos) y los nefastos acuerdos que firmó con el Club de Paris, reconociendo hasta los intereses punitorios, que siempre son condonados al regularizar la situación de la deuda. Esta misma semana, sin vergüenza, relacionó el fallo con la campaña electoral, diciendo que es parte de la lucha de los maquiavélicos poderes sinárquicos contra las fuerzas “nacionales y populares” que, aseguró, encabeza Cristina Fernández.

En un país medianamente serio, después de tantos desastres provocados por sus ruinosas gestiones, el Aceitoso y el Chiquito, no podrían siquiera estar en libertad; sin embargo, como Argentina es tan neciamente excepcional, no sólo lo están, sino que participarán en las elecciones y, peor aún, es probable que este Gobernador tan delirante y costoso logre su reelección; si fuera así, obviamente motivará la grandiosa quema final de libros de mi biblioteca. Mientras tanto la oposición, en lugar de unificarse para echarlo a patadas de la Provincia de Buenos Aires, sigue demostrando que es férreamente ombliguista y suicida.

Golazo al relato        09-09-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 906

“Quien controla el pasado, controla el futuro. Quien controla el presente, controla el pasado”. George Orwell

El acto de recordación de las víctimas del terrorismo que realizó el lunes la candidata a Vicepresidente por La Libertad Avanza, Victoria Villarruel, en la Legislatura porteña fue lo más destacado de la semana y constituyó un golpe demoledor para el edificio de silencio y tergiversación de la historia que construyó el kirchnerismo. Durante veinte años ininterrumpidos –el gobierno de Mauricio Macri nada hizo para evitarlo- se instiló en la juventud un falso relato de lo que sucedió en la Argentina y se le inculcó la inventada cifra de 30.000 desaparecidos. Se le hizo creer que nada había pasado aquí antes del 24 de marzo de 1976, cuando unos militares dementes, bajados de un plato volador, salieron a matar a jóvenes idealistas que, en lugar de armamento de guerra y una estructura militar semejante a la del Ejército, portaban flores, cantaban canciones de paz y amor y hacían turismo estudiantil a Cuba, Vietnam, Argelia, Libia y Líbano.

Así, se exculpó a las organizaciones terroristas de los miles de atentados con bombas, los asesinatos de cientos de compatriotas (civiles, niños, policías, empresarios, militares, sacerdotes, dirigentes gremiales, etc.), los ataques a unidades de las fuerzas armadas y comisarías, los robos a bancos, los secuestros extorsivos, etc., que cometieron inclusive durante el gobierno democrático del Gral. Juan D. Perón y su viuda, elegidos por más del 60% de los votos. Simétricamente, también se “olvidaron” los atroces crímenes cometidos por la Triple A, esa organización paramilitar creada, armada y financiada desde el poder para combatir en las calles y matar a los “zurdos”, enemigos de la derecha peronista.

Quienes nacieron desde esos años violentos no saben que el ERP se lanzó a una guerra de guerrillas a imitación de Cuba, con la pretensión de transformar a la Provincia de Tucumán en un Estado beligerante en 1975, y que fue el Gobierno nacional, en democracia, quien ordenó al Ejército actuar para aniquilarlo. Pero, sobre todo, se borró de la historia, de un plumazo, el enorme apoyo civil, incluyendo al mismo PJ y a los sindicatos, que tuvo el golpe militar que encabezó el Tte. Gral. Jorge R. Videla.

Durante el gobierno de Raúl Alfonsín se llevó a juicio a las miembros de las juntas del Proceso (1976/1983) y se los condenó; los jueces dijeron, en su sentencia, que habían combatido en una guerra. Contemporáneamente, fueron encarcelados varios jefes guerrilleros, tales como Mario Firmenich, Fernando Vaca Narvaja y Enrique Gorriarán Merlo. En el mismo período, fueron sancionadas las leyes “de obediencia debida” (exculpaba a los subordinados y responsabilizaba a los jefes superiores) y “de punto final” (puso un límite temporal a la formulación de denuncias contra los militares). Los terroristas volvieron a las andadas en enero de 1989, cuando coparon el Regimiento Mecanizado 3, en La Tablada, con un enorme saldo de muertos; quien comandó la recuperación del cuartel, el Gral. Alfredo Arrillaga, fue juzgado y condenado por “lesa humanidad”, mientras que a los atacantes se les conmutaron las penas. Más tarde, el Presidente Carlos Menem indultó a todos ellos, militares y terroristas, en su afán por pacificar al país...

Pero llegó don Néstor a la Casa Rosada y, por el pacto que firmó con Horacio Perro Verbitsky, se garantizó el apoyo de los organismos de derechos humanos (tuertos); así se dotó de unos fueros simbólicos que le permitieron saquear con impunidad el país. El nuevo Presidente hizo arrodillar al Congreso y éste derogó las leyes mencionadas y, de tal modo, se reinició la persecución a quienes habían derrotado al terrorismo. La Corte Suprema, por boca de Ricardo Lorenzetti, informó sin vergüenza que esa política era un tema ¡consensuado entre los tres poderes del Estado!

A partir de entonces, se abrieron dos caminos paralelos. Por un lado, se mandó a la cárcel, mediante juicios amañados encabezados por verdaderos asesinos togados, con testigos falsos que confiesan haber construido una “memoria colectiva” y en los que se ignoran todas las pruebas de inocencia, a cerca de tres mil ancianos (algunos llegan a los 100 años), muchos (805) ya muertos en cautiverio y con prisiones preventivas que superan, en promedio, los 9 años (el máximo legal es de 3 años, y sólo para los casos en que pueden ponerse en riesgo la investigación o exista peligro de fuga). Por otro, se organizó una gigantesca defraudación al Estado bajo la forma de monumentales indemnizaciones (superan los US$ 4.000 millones) a quienes dicen haber sufrido cárcel, torturas o exilio, algo que ha sido denunciado, infructuosamente, por José D’Angelo y Luis Gasulla en varios libros.

Villarruel pretende, además del reconocimiento y la reparación a las víctimas de la guerrilla, como hizo Uruguay (siempre un ejemplo), que esos crímenes también sean considerados de “lesa humanidad” y, consecuentemente, imprescriptibles. Y tiene razón porque, contra lo que aúllan las Madres, las Abuelas y los Hijos de los subversivos y más allá de la negativa de la Juez Romilda Servini de Cubría a aceptarlo así, el Pacto de Roma (2004), aplicado con retroactividad a los militares, define como tales, no sólo al terrorismo de Estado, sino a aquéllos delitos cometidos por organizaciones armadas, financiadas e instruidas por Estados extranjeros, como fue el caso de Montoneros y ERP en nuestro país.

El riesgo de un cambio en el criterio de los jueces, siempre atentos a los nuevos vientos que llegan desde la política, para tantos terroristas que, décadas después, siguen actuando y aún pretenden destruir a la Argentina con reivindicaciones de falsos derechos mapuches, y que amenazan con reaccionar con violencia en las calles si la oposición triunfa, es la verdadera razón de la virulenta reacción que se vio y oyó en los medios kirchneristas.

¿Y cuando no pueda?       02-09-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 905

“Cuanto más ignorante es el hombre, más obediente es y mayor y más absoluta es la confianza que pone en quien lo dirige”. Pierre Josep Proudhom

La sorpresa que produjo el porcentaje de votos que obtuvo Javier Milei en las PASO fue tan fuerte que ocultó que, incluyendo a los ausentes y al voto en blanco (34%), los grandes competidores obtuvieron 20% (LLA), 19% (JxC) y 18% (UxP). Lo más llamativo fue que Sergio Massa, el candidato y Ministro de Economía, aún en medio del inconmensurable desastre que su gestión ha provocado, disparando la inflación a la estratósfera, produciendo una desesperante recesión, despeñando a tanta gente por el acantilado de la pobreza, y en la absoluta soledad en que lo dejaron Cristina Fernández, los gobernadores e intendentes peronistas, lograra conservar un 27,28% de los votos positivos, aunque fuera el peor desempeño del PJ en su historia. Pero los incendiarios índices de agosto y septiembre, que se publicarán antes del 22 de octubre, le impedirán estar presente en el (hoy) previsible ballotage.

Patricia Bullrich fue, sólo en apariencia, quien mayor castigo en las urnas recibió, en especial porque, hasta poco tiempo antes, JxC era el claro espacio ganador, una chance que perdió por la impúdica exhibición de sus salvajes disputas internas. Sin embargo, el apoyo de los partidos que integran la coalición y la presentación de un sólido y numeroso equipo económico, que ya ha anunciado su plan, para acompañarla en una eventual gestión presidencial, más las expectativas de crecimiento en energía, minería, tecnología y agroindustria, me permiten albergar alguna esperanza en la recuperación de su caudal electoral, aunque conservo una grave preocupación por la suerte de la Provincia de Buenos Aires.

Pero nada obsta a que debamos considerar como altamente probable que sea Milei quien se lleve la copa y, por ello, resulta imprescindible pensar qué pasaría en un gobierno encabezado por el líder mesiánico de un partido absolutamente unipersonal, un sumo sacerdote que ha encandilado a tantos con mensajes económicos incomprensibles para la mayoría y, sobre todo, transformados en dogmas incuestionables, so pena de recibir fuertes e histéricas agresiones. Muchas de las medidas que postula esta neo-religión requerirían modificar la Constitución, y chocarán de frente contra las atribuciones provinciales; ¿con qué respaldos legislativos contaría para avanzar? ¿Cómo negociaría, para obtenerlos, con la denostada “casta”? Puesto que ya sus listas de candidatos a legisladores y concejales están colmadas de massistas, menemistas y sospechosos “amigos” corruptos, amén del confeso apoyo del kirchnerismo para cuidar sus votos, ¿cuál es el costo que debería afrontar si se viera obligado a pagar tantos favores?

Sus primeros apóstoles ya han relativizado sus ideas más extremas y las han diferido en los tiempos de aplicación; así, los primeros desencantados tan pronto asumieran serían los más pobres de sus conversos, que expresaron en las urnas su enojo y sus justificadas quejas, y verían disiparse las ilusiones de rápidas mejoras por los milagros prometidos por su profeta. En un ejemplo concreto, me pregunto cuántos de quienes hace sólo 19 días optaron por el libertario creen que la dolarización, que propuso como inmediata (ahora la ha diferido, al menos, por dos años), significará volver a la convertibilidad de los 90’s y, con ello, que los pesos de sus salarios se transformarán en igual cantidad de dólares.

Con la preocupante personalidad que muestra sin pudor, ¿cómo reaccionaría frente a los frenos que las instituciones –Poder Judicial y Congreso- impondrían a sus demagógicas pretensiones, ¿tan parecidas a las del populismo que dice repudiar? En la misma medida en que conocemos sus controvertidas recetas económicas, ignoramos qué piensa hacer con la seguridad y con el narcotráfico, temas que han tomado un trágico protagonismo y que atraviesan a todas las clases sociales y a todas las jurisdicciones, impulsados por conspicuos asesinatos.

En política exterior, tampoco aporta Milei racionalidad alguna. Ha dicho, públicamente, que rompería relaciones con China y otros regímenes autoritarios y criminales, y que separaría a la Argentina del Mercosur, desvinculándonos de Brasil; o sea, se negaría a hacer negocios con nuestros dos principales socios comerciales. De ser así, ¿qué mercados encontraría para nuestros productos exportables? Sus manifestaciones inducen a pensar que confunde los intereses permanentes de la Argentina con un nuevo alineamiento ideológico, simplemente opuesto al actual, tan condenable.

Nuestro gran problema es la absoluta carencia de seguridad jurídica, que espanta a los inversores nacionales y extranjeros, que necesitamos tanto como el aire que respiramos para salir de esta decadencia en la que estamos inmersos desde hace tantas décadas. Sin ser economista, presumo que el bi-monetarismo (en realidad, la libre elección de la moneda en que se realizarán todas las operaciones) que propone Bullrich producirá, rápidamente, una mejora en ese aspecto, ya que generaría mayor actividad al movilizar una porción importante de los dólares que los argentinos tenemos guardados en cajas de seguridad y colchones varios; una vez garantizada ante el exterior el cumplimiento de los contratos, sin duda llegarán muchos interesados en comprar activos en un país que, en precios internacionales, está verdaderamente barato.

Para ello, y de triunfar Patricia en las urnas, le sugiero no emular a Mauricio Macri y su fallida lluvia de inversiones y, en cambio, negociar con los gobernadores de las provincias con recursos mineros y energéticos, proponiéndoles algo similar a lo que hizo Luiz Lula da Silva cuando, al asumir su primer mandato, enfrentó una inédita salida de capitales: constituyó un fideicomiso con las acciones que poseía el Estado de compañías que cotizaban en bolsas internacionales y lo puso bajo jurisdicción de los tribunales de Nueva York para garantizar el fiel cumplimiento de los contratos. La fuga terminó en 48 horas y las inversiones extranjeras fluyeron nuevamente hacia Brasil, impulsando su continuo crecimiento.

Espejos raros       26-08-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 904

“Aquellos republicanos eran gente derrotada …, pero no vencida”. Arturo Pérez-Reverte

Desde las PASO, las tan desprestigiadas empresas encuestadoras están mostrando un harto previsible crecimiento en la intención de voto de Javier Milei, y algunas llegan al extremo de pronosticar al candidato anarco-libertario un éxito en primera vuelta. Eso impone preguntarnos a quién se parece más, ¿a Mauricio Macri o a Cristina Fernández?

En la medida en que está fuera de discusión que expresa el hartazgo y la bronca de una ciudadanía herida hasta lo más hondo y cuyo tejido social ha sido completamente rasgado, la cuestión pasa por desentrañar si el espectáculo que diariamente nos brinda ante cada micrófono que se le pone delante es genuino o se trata sólo de una construcción voluntaria –luego descartable- para captar el voto de los muchos descontentos con el presente, aterrados por la falta de futuro.

En estos días, no sólo él mismo ha reducido en algo su agresividad, sino que quienes lo rodean y ocuparían cargos relevantes en su eventual administración, amén de contradecirse entre ellos en la explicación de sus recetas, han comenzado a explicar que muchas de sus medidas, anunciadas como inmediatas originalmente, en realidad se implementarán en “generaciones” sucesivas, inclusive en otros períodos presidenciales y hasta en décadas por venir. Propuestas como dolarizar de inmediato la economía, romper relaciones con China y salir del Mercosur, dinamitar el Banco Central, terminar con los subsidios sociales, echar a los empleados públicos innecesarios o liberar totalmente la portación de armas, por ejemplo, ahora se relativizan o se postergan para un incierto porvenir.

Pero hay rasgos de su personalidad que, si son verdaderos, debieran producir graves urticarias en la piel de los republicanos, sobre todo porque las matemáticas demuestran que no dispondrá de tantos legisladores propios como para sancionar en soledad las leyes que necesite, salvo que negocie con la “casta”. Tampoco sus reiteradas agresiones a periodistas y a quienes, desde la política, cuestionan sus posturas más extremas, permiten esperar con cierta tranquilidad la probabilidad de su investidura como primer mandatario. Con sólo recordar cómo se comportaron los antiguos líderes, Cristina y Mauricio, cuando cada uno de ellos ejerció el poder, la pregunta de a quién se parece más tiene suficiente justificación.

Imaginemos, ¿qué haría Milei, si llegara a la Presidencia, con la prensa libre?, ¿realmente pretende validar con democracia directa –el cacareado referéndum- sus aspiraciones legislativas si éstas no fueran sancionadas por el Congreso?, ¿cómo reaccionará cuando la Corte Suprema ponga necesario freno a las medidas inconstitucionales que pretenda implementar? Peor aún, considerando que con tan escasos legisladores propios estará siempre a tiro de un juicio político, como sucedió con Pedro Castillo (Perú) y Dilma Rousseff (Brasil), ¿qué estará dispuesto a hacer para conservar el poder?

Otro candidato, el Aceitoso Sergio Massa, ya no sabe qué conejo mostrar, toda vez que los que su galera contenía están todos muertos, asesinados por la altísima inflación, la enorme emisión monetaria, la imparable deuda en pesos, la creciente pobreza y la angustiante miseria, la rampante corrupción y el clarísimo descontento social motivado por el monumental deterioro del poder adquisitivo de salarios e ingresos informales. Esta semana fue el rimbombante anuncio de un arreglo con el FMI que, contra la versión oficial, no permitirá grandes intervenciones en el mercado cambiario. Todos esos factores convierten en altamente probable que el peronismo, al que finge representar, resulte ausente en un casi inevitable ballotage; precisamente por eso tanto la emperatriz de Calafate cuanto el pato rengo a cargo de la Presidencia formal guarde tanto silencio, con el sueño de no ser alcanzados por tamaña catástrofe electoral.

¿Por qué será que no me sorprende que, en un irreversible ocaso, un gobierno que ha convertido a la ideología en su instrumento basal de su política exterior pretenda, a pocos días de su partida, convertirnos en socios nada menos que de Irán, el Estado terrorista que tantos argentinos mató, y de quienes pretenden transformarse en opositores de Occidente en un mundo bipolar? No rechazo “vincularnos” a los BRICS, como a todo y cualquier conglomerado de países, pero sí a “asociarnos” a quienes se declaran enemigos, al menos económicos y monetarios, de los Estados Unidos y, en el camino, violan y asesinan a sus ciudadanos. Ahora, la Argentina tiene por delante un nuevo problemón, como el que tuvo Macri con China en las represas de Santa Cruz: si aceptara la invitación, compartiría la membrecía nada menos que con el país que concretó en el nuestro los atentados terroristas de la Embajada de Israel y la AMIA; por el contrario, si rechazara ingresar, sin duda ofendería a los socios originales, en especial a Brasil, que realizó ingentes esfuerzos para lograrlo.

El claro y franco apoyo de Horacio Rodríguez Larreta a la candidatura de Patricia Bullrich, y el inminente anuncio de un prestigioso gabinete económico que encabezaría Carlos Melconian e integran Hernán Lacunza, Luciano Laspina y otros notables permiten albergar esperanzas en que la ciudadanía reaccione a tiempo, no entregue su suerte a alguien que presenta en su personalidad tantos rasgos mesiánicos y compatibles con peligrosas patologías, y la convierta en Presidente. Ella ha conseguido conservar las díscolas voluntades del radicalismo, asegurando así la continuidad de Juntos por el Cambio en la historia argentina. No es poco, en un país tan raro como el nuestro, que ha enterrado a numerosos proyectos políticos virtuosos.

Sentido común, capacidad, firmeza y transparencia       23-08-2023

Por Edgardo Rodríguez

Más allá de la actividad y postura ideológica de cada uno, hay una uno de los tantos valores que hemos perdido como sociedad, y debemos recuperar de manera urgente: EL SENTIDO COMÚN. Sintetizando su definición es: “La capacidad para juzgar razonablemente las situaciones de la vida cotidiana y decidir con acierto”. Básicamente es lo que puede hacer que nuestras vidas dentro de la sociedad sean de una u otra manera, porque si bien somos por definición individuos únicos y con poder de decisión propia, dependemos, en cada etapa de la vida, de otros, desde niños en nuestros hogares, en el colegio, y así mientras vamos creciendo, pero, en definitiva, de quienes gobiernan.

Entrando en el campo de los gobernantes, que con sus decisiones rigen el ámbito donde se desarrolla nuestra vida cotidiana, vemos una falta de empatía, conocimiento e incapacidad alarmantes, más aún cuando no solo no se reconocen los terribles errores de gestión, si no que se culpa a cualquiera. En el caso de un presidente, se debe rodear de personas con conocimientos técnicos adecuados en cada área, para ejecutar las acciones propuestas de manera eficiente. Vistos los resultados, es evidente que eso no nos viene pasando. Corrupción, gobiernos ideologizados, gobernantes ineptos, no han hecho más que hacernos retroceder y peor aún, dividir a la sociedad para su provecho.

Para ubicarnos en tiempo y espacio, y poder entender mejor la realidad, debemos decir que en el mundo existen alrededor de 206 países, los que convivimos en el mismo planeta, pero que nuestro actual gobierno nos dice que las cosas sólo nos pasan a nosotros, esto es desde 2003 (llegada al poder del kirchnerismo), pero esta vez, quedo expuesta la falacia. Hay al menos dos acontecimientos mundiales, que afectaron y afectan al mundo entero: la pandemia por el COVID-19 y la invasión de Rusia sobre Ucrania.

Los países del mundo han aplicado diferentes acciones y soluciones para salir de la crisis. Tomemos como ejemplo a nuestros vecinos, quienes ni económicamente, ni socialmente han sido afectados como lo estamos nosotros. Nos quieren hacer creer que todos los males son exclusividad de Argentina, en lugar de reconocer la ineptitud, inhabilidad e incapacidad para gobernar, se limitan y recurren a la infantil e inmadura postura de echarle la culpa al otro, sea quien fuere, actores internos o externos. Según los dichos del actual gobierno, el desastre económico y social monumental que padecemos, son responsabilidad exclusiva del gobierno anterior por haber contraído deuda con el FMI.

Para entender mejor, la deuda pública Argentina supera los U$S 400 mil millones y el gobierno anterior solicito U$S 43 mil al FMI para pago de compromisos, el resto ¿No condiciona? Y por caso ¿Los juicios millonarios que debemos afrontar por las expropiaciones de YPF y Aerolíneas Argentinas, quien las paga? Recurrir al FMI no es bueno, se acude cuando un país está en una situación financiera tan complicada que es la única manera de financiarse a tasas de interés aceptables. Para llevarlo al campo cotidiano, si una familia gasta más de lo que le ingresa, pide prestado para financiarse, llega un punto en el que no tiene capacidad de pago, ya los bancos no le prestan, entonces debe recurrir a usureros, o ajustar los gastos e incrementar sus ingresos, este ejemplo que tal vez sea grosero, pero sirve para graficar, en este caso el FMI sería un amigo o pariente que nos presta dinero, pero que nos dice: loco te ayudo, pero ajusta tus cuentas e incrementa tus ingresos…

El mundo no entiende, como un país con nuestra historia, reconocido mundialmente por haberse destacado en diferentes áreas, este en esta situación. Sólo se explica porque desde hace 90 años se instauro una lógica, una forma de gobernar (salvo honrosas y aisladas excepciones) que socavo los cimientos de la república y de la sociedad, esto sólo ha traído decadencia y confusión de valores, de derechos y falta de obligaciones, degradación de la educación, la cultura del trabajo, la producción, la economía, inseguridad, en resumen, se ha destruido el tejido social. Y peor aún, teniendo grandes y variados recursos naturales, no hemos sido capaces de explotarlos en favor de nuestro bienestar.

Hoy estamos ante la gran oportunidad, el gran desafío de hacerlo, es lo que el mundo entero está reclamando. Necesitamos gobernantes con SENTIDO COMÚN, sin extremismos, con capacidad, firmeza y conocimiento para realizar los cambios que la mayoría de los países del mundo han hecho e integrarnos a la economía mundial. Reconocer nuestros propios errores, sincerarnos, para cambiar la lógica que nos llevó a esta decadencia, volver a los valores de la república, a la independencia de las instituciones, a la cultura del trabajo, a los valores de la educación que nos pusieron como ejemplo en el mundo. Cambios profundos, no indiscriminados. Hay que modificar y optimizar, no eliminar. Que el rol y los recursos del Estado se canalicen básicamente a salud, educación y seguridad. Modernizar y transparentar todas las áreas que sean necesarias, pero sin perder de vista que detrás de cada número hay un ser humano.

El desinterés de gran parte de los ciudadanos no es casualidad, algo lo provoco, es momento de revertirlo. Necesitamos asumirlo como sociedad, sin discursos extremistas, sin enfrentar, pero AVANZAR. Hay responsables de que estemos en esta situación, que de ellos se ocupe la justicia. Hoy es tiempo de modernizar, transparentar, ir contra mafias enquistadas en los diferentes estamentos del poder y de la sociedad, sectores que están “cómodos” y sacan provecho de estas situaciones en detrimento del resto. El camino es con dirigentes probos y con experiencia, debe incluir a todos, menos a los que formaron parte de la decadencia, para no ser más de lo mismo. No hay salvadores mágicos, debemos salir juntos y con la participación de todos los ciudadanos de bien.

Edgardo Rodríguez

Dirigente UCR Córdoba Capital

Mar Incógnito       19-08-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 903

“Con la esperanza de mejorar las vidas de las generaciones futuras, me adentro en estos años que me quedan no con nostalgia de todo lo que ya no existe sino con la emoción por lo que todavía está por venir”. Hernán Díaz

Los resultados de las PASO han obligado a la Argentina navegar en un mar embravecido como pocas veces antes, tal vez desde 1946, cuando Juan Perón se impuso a todo el arco político, desde el más rancio conservadurismo hasta el comunismo prosoviético. El monumental crecimiento de La Libertad Avanza, (LLA), en realidad sólo de su personalísimo líder, que pintó de violeta casi todo el país, sorprendió y apabulló a propios y extraños -en especial a aquellos “expertos en mercados regulados” que tanto apoyaron a Sergio Massa para conservar sus quintitas y negocios- al confirmar que el electorado se dividió en tres tercios separados por tan pocos puntos (menos de 3%) que dejaron a todos en un virtual empate técnico. Ello impidió que se produjera la consecuencia benéfica de un triunfo claro de la oposición republicana, que hubiera atraído a manadas de compradores e inversores a un país cuyos activos, públicos y privados, tienen precios de remate.

Los intendentes, y los gobernadores que ya habían logrado conservar sus feudos provinciales, tampoco lo acompañaron en las PASO, y cortaron boletas para despegar su suerte, exitosamente, de la fórmula presidencial de Unión por la Patria (UxP), convertida en un salvavidas de plomo. Así, dejaron a Massa solo, y el, pero-kirchnerismo perdió 6 millones de votos; aunque todos ellos cambien de actitud, los malos datos económicos que se seguirán recibiendo hasta octubre no permitirán al oficialismo soñar con alguna recuperación. Juntos por el Cambio (JxC), afectada por sus disputas a cielo abierto, también mermó su caudal en 1,5 millón y fue derrotada en provincias que había conquistado recientemente en las elecciones locales.

Comenzaron así a soplar vientos huracanados, provocados por la desordenada devaluación que, sin plan de estabilización, con gran emisión y sin coordinación, el mismo lunes arrojó el Aceitoso sobre la tan frágil realidad nacional; el termómetro más sensible, el dólar blue, escaló pavorosas cimas y, con su impulso, los precios se dispararon y cayeron más sectores de la clase media en la pobreza, y más pobres se desplomaron en la miseria. Los índices de inflación de agosto y septiembre, que todos suponemos alcanzarán los dos dígitos, impactarán bajo la línea de flotación del candidato del oficialismo y, con certeza, causarán un incalculable daño a sus apetencias de disputar el casi inexorable ballotage.

Por la licuación de las lealtades a los partidos políticos, y sólo se mantienen a los clubes de fútbol o las religiones (casi como la que propone Milei con sus tan disruptivos dogmas), los electores ya no obedecen ciegamente a los líderes como antaño; así, debemos considerar todas las probabilidades que pueden darse en octubre, donde todos los finales están abiertos. Quienes votaron por LLA como mera expresión de ira y protesta, ¿dejarán de hacerlo porque ya cumplió esa misión o, algo mucho más probable, se sumarán otros, atraídos por el éxito del libertario, corriendo en auxilio del vencedor? Quienes lo hicieron por Juan Grabois, ¿lo harán por Massa o virarán alguna formación de izquierda? Los que eligieron a Juan Schiaretti ¿se sentirán tan peronistas como para ayudar al Aceitoso? Quienes acompañaron a Horacio Rodríguez Larreta, ¿respaldarán a Patricia Bullrich? Y lo mismo en la Ciudad de Buenos Aires, ¿quienes optaron por Martín Lousteau apoyarán a Jorge Macri, que le ganó la interna exactamente por un punto porcentual, o ayudarán a Leandro Santoro, el candidato a Jefe de Gobierno de UxP, también de origen radical?

Lo único cierto, al menos por ahora, es que no parece demasiado probable el triunfo de alguno de los candidatos en primera vuelta, salvo que el libertario reciba un fuerte aluvión de votos triunfalistas; o sea, hasta noviembre no se elegiría al futuro presidente, y en ese turno electoral sólo podrán estar Massa, Bullrich y Milei. Entonces, sobre esa base, imaginemos las ecuaciones posibles y hagámonos las preguntas pertinentes, es decir, cómo se comportará en el ballotage quien haya elegido a un perdedor en las generales de octubre. Con el dólar y la inflación en estos niveles, todavía es posible, pero sumamente improbable, que el Aceitoso supere la primera vuelta, pero, de todas maneras, considerémoslo.

Si el último round de noviembre fuera disputado entre él y Patricia, creo que los votantes de LLA acompañarán a ésta, y viceversa, o sea, que si quienes disputaran fueran Massa y Milei, quienes nos inclinamos por JxC lo haremos por Javier. Ahora, si fueran Milei y Bullrich quienes llegaran, ¿qué harán los muchachos de UxP? Estoy convencido que convertirán al excéntrico líder en presidente, básicamente porque apostarán a su fragilidad y, consecuentemente, a que resultará más fácil de destituir. Pienso que, si Javier llegara al ballotage, ganará y, si no lo hiciera, triunfará Patricia. El problema central de LLA será su debilidad en el Congreso, lo cual obligará a negociar cada ley o entrar en una espiral de confrontación institucional, de más que complicado pronóstico.

En cualquier caso, cualquiera de los dos últimos tendrá en octubre una fuerte prueba para su futura gobernabilidad y el dominio de la calle, pues entonces se decidirá, sin ballotage, quién mandará en la Provincia de Buenos Aires y su crucial Conurbano que, no olvidemos, se encuentra demasiado cerca de la Plaza de Mayo y su subliminal significado. A ambos les conviene, en defensa propia y salvo que sean suicidas y asesinos seriales de quienes queremos vivir en una República, que caiga derrotado el inefable Axel Kiciloff, que aspira a ser reelecto, aunque sea por un solo voto.

De lograrlo, será el garante del bunker de La Cámpora y el trotskismo para la resistencia violenta contra el próximo gobierno y los cambios dolorosos que éste deberá inexorablemente realizar; esas amenazas ya las están profiriendo lenguaraces canallas, como Anímal Fernández, Juan Cabandié, y tantos más. En esa medida y aunque ahora parezca diluirse esa propuesta, me pareció sumamente positivo que Carolina Píparo, candidata de LLA, que salió tercera, haya invitado a Néstor Grindetti, su competidor de JxC, que obtuvo el segundo puesto, a reunirse para acordar cómo impedirlo. 

De criminales y ausentes      12-08-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 902

“El destino, que es ciego a las culpas, suele ser despiadado con las mínimas distracciones”. Jorge Luis Borges

Los asesinatos de Morena, una niña de once años, y del médico Juan Carlos Cruz han agregado dramatismo a la previa electoral y se convirtieron en sendos cisnes negros para el oficialismo de la Provincia de Buenos Aires, tanto como lo fue el de Cecilia en la del Chaco. Sin embargo, fueron sólo una infinitésima muestra de lo que sucede en el Conurbano bonaerense donde, todos los días mueren decenas de chicos y grandes, muchos de ellos indocumentados y, por tanto, no registrados por el Estado, en manos de la droga y la violencia que la circunda. Que esas muertes no se cuenten, permite que las luces se concentren casi exclusivamente en Rosario y la sangre que baña sus calles. Pero la realidad es otra: las bandas de narcotraficantes minoristas están fuera de control allí y discuten territorios a tiro limpio, mientras que aquí, a escasas cuadras de la Plaza de Mayo, la complicidad política y policial las ordena y evita, so pena de perder esa esencial protección, que las balaceras iluminen la penosa realidad.

El kirchnerismo ha destruido todo, absolutamente todo y, si vencieran sus candidatos en las elecciones, seguiría haciéndolo. Y cuando digo “todo” me refiero, principal pero no exclusivamente, a la sociedad comercial que mantiene con las grandes organizaciones internacionales de productores y distribuidores de todas las drogas, que les ha permitido operar en la Argentina impunemente, a punto tal de transformarlo, de un país de tránsito, en uno caracterizado por su fuerte consumo. Las derivaciones están tan expuestas que hasta resulta redundante enumerarlas, pero las generaciones de niños y jóvenes que tienen ya el cerebro dañado irremediablemente por el terminal paco y que, por ello, resultan irrecuperables para la educación y el trabajo, se han convertido en un pasivo que pesará muchísimo en el futuro.

Otra parte importante de ese “todo” son el garantismo y el abolicionismo penal que, por obra y gracia de Raúl Zaffaroni, impregnan a toda la Justicia y permiten que los malvivientes sean permanentemente liberados por jueces y fiscales “comprensivos”; basta recordar los 4500 criminales, presos por homicidio y por delitos sexuales, que fueron excarcelados con la excusa de la pandemia de Covid. Cada vez que un hecho delictivo nos conmueve, nos enteramos de los terribles antecedentes de los imputados, la mayoría de ellos reincidentes. Es imposible olvidar sus canalladas, como fueron el “Vatayón Militante” o “Hinchadas Unidas Argentinas”, para encuadrar a los delincuentes más recalcitrantes y a los barrabravas del fútbol en las bastardas estructuras kirchneristas.

El abyecto clientelismo y el populismo que utilizaron ambos integrantes del matrimonio patagónico para mantenerse en el poder durante tanto tiempo terminó con la cultura del trabajo y del esfuerzo que justificó, desde la llegada de los primeros inmigrantes, la movilidad social ascendente que nos caracterizó durante décadas. Y el monumental saqueo al que nos sometieron, aupados por el irracional apoyo que así obtuvieron, nos ha dejado postrados e indefensos, convertidos en miserables mendigos globales. En el camino, prostituyeron la educación, destruyeron la salud pública, intentaron terminar con la libertad de prensa y el imperio de la Constitución y la división de poderes, vaciaron las arcas del Estado, convirtieron al peso en papel pintado, empobrecieron al 40% de nuestros conciudadanos, abrieron indiscriminadamente las fronteras para nutrir las filas de sus fieles, y persiguieron a las fuerzas armadas y de seguridad para impedirles cumplir sus esenciales misiones de defender la integridad territorial y de imponer el orden con el monopolio estatal de la violencia.

De la mano del Aceitoso Sergio Massa, Cristina Fernández buscará mañana perpetuarse para continuar con la demolición de la Argentina, ya peligrosamente cerca de la inviabilidad como país independiente. Pese a lo vital que resultarán tanto las PASO cuanto las elecciones nacionales para evitarlo, las celebradas hasta ahora en las provincias muestran una abstención más que preocupante. Resulta incomprensible que, con la excusa de un desinterés o de una frustración permanentemente, los ciudadanos renuncien a ejercer su derecho de elegir a quienes deberán representarlos para mejorar sus miserables vidas o para evitar que los sigan perjudicando.

Es falso, de falsedad absoluta, que todos los que aspiran a un cargo sean iguales. No son lo mismo quienes han probado, en el ejercicio del poder, su irrestricto respeto a la República y a las leyes que aquéllos que, durante tanto tiempo, han intentado destruirla desde adentro y, mucho menos, que los que se han enriquecido sin tasa ni medida. No son lo mismo los delegados de una condenada por defraudar al Estado y hurtar de sus arcas miles de millones de dólares, que aquellos que sostienen que todos somos iguales ante la ley, sin privilegios de casta. No son lo mismo quienes impidieron por ideología y negocios la oportuna llegada de las vacunas, que los que sufrieron en carne propia esas canalladas.

Por lo demás, tampoco es real que la abstención o el voto en blanco sean inofensivos, porque sin duda pueden significar padecer al kirchnerismo por otro período presidencial como mínimo; siempre, en todos los casos, benefician a los peores, porque su porcentaje de voluntades favorables se calcula sólo sobre los votos válidos. Como lo recordó Carlos Manfroni el miércoles en La Nación, en 2005, cuando la oposición se retiró de la competencia como protesta por su manipulación, Venezuela tuvo una abstención del 75% y Hugo Chávez se hizo de la Asamblea con el 90% de los votos válidos; las trágicas consecuencias están a la vista.

Todos debemos ser conscientes del peligro que corre la República en estas dramáticas horas, y saber que sólo nosotros podemos salvarla. Por eso, asumamos la responsabilidad de cumplir con la mínima tarea que la democracia nos impone y vayamos mañana a votar. Nada puede distraernos y nada nos justificará si dejamos que la Argentina caiga, definitivamente, al abismo de la Historia porque, si así sucediera, nuestros nietos nos preguntarán en algún futuro cercano: “Abuelo, ¿qué hiciste tú para impedirlo?”. ¿Qué responderemos entonces?

Dura Campaña      05-08-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 901

“La historia a menudo es producto de la irreflexión. Es una hija bastarda de la estupidez humana, el fruto de unas mentes obnubiladas, de la idiotez y de la locura”. Ryszard Kapuściński

He firmado un manifiesto público pero ignoraba que se haría público bajo el título “La Cultura apoya a Patricia Bullrich”; siendo mi hijo homónimo Ministro de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires, se ha generado una enojosa confusión de identidades (https://tinyurl.com/3r28sv2a) que me resulta imprescindible aclarar.

Debe ser complicado para el Aceitoso, en su triple rol de fracasado Ministro de Economía, de Presidente de facto y de pre-candidato presidencial hacer campaña electoral, en especial si, después de tantos años de populista y suicida congelamiento, sube brutalmente las tarifas a días de las PASO. Quien se ha hecho con el poder absoluto por la defección de Alberto Fernández y por el prudente silencio de la Vicepresidente y, con esas decisivas armas, ha logrado triplicar la inflación anual, impulsar la cotización del dólar de $ 290 a $ 570, llevar la pobreza al 42%, más que duplicar la deuda pública, y pulverizar el poder adquisitivo de salarios y jubilaciones, todo ello en sólo un año de gestión, no puede soñar con triunfar en las elecciones de octubre. Y qué decir de la enorme corrupción que ha organizado para enriquecerse aún más. Imaginemos cuánto más daño podría hacer si la ciudadanía le concediera otros cuatro años al frente del país.

Ella está demasiado ocupada con su propia situación penal como para estar en el día a día de la contienda política (algo que hasta Sergio Massa agradece). Esta semana, soportó una nueva prueba de su pérdida de poder cuando intentó, infructuosamente, reunir al Senado para designar casi setenta magistrados en múltiples fueros y jurisdicciones, además de la prórroga por cinco años en el ejercicio de su cargo (integrante de la Cámara Federal de Casación Penal, que preside) para Ana María Figueroa; de todas maneras, volverá a intentarlo a partir del lunes. Cristina Fernández ha puesto el acento sobre esta última pretensión, pero la está usando como cañita voladora, para que nos distraigamos mirándola volar mientras logra su principal objetivo: modificar la integración del Consejo de la Magistratura, el organismo que designa y destituye a los jueces.

Mientras tanto, la brutal impericia de Massa y la presión del kirchnerismo para que acentúe -pese al pobre resultado que obtuvo el “plan platita” en el 2021- el reparto indiscriminado de dinero y bienes (y también drogas) para intentar mejorar la performance electoral de Unión por la Patria, han llevado a la economía al borde de un nuevo precipicio. Los argentinos hemos sobrevivido a una infinita sucesión de graves crisis, pero, con cada una de ellas, hemos descendido un escalón y, a veces, varios de golpe, tal como prueba nuestra decadencia de los últimos ochenta años.

Con el préstamo (un salvavidas de último momento, después de mendigarlos por el mundo entero) de US$ 775 millones de Qatar, otro de US$ 1000 millones de la Corporación Andina de Fomento, los últimos mendrugos del swap chino y algunas (no confirmadas) maniobras con las reservas de oro, el Aceitoso logró pagar, ya al borde del KO, al FMI las cuotas adeudadas. Con relación a los US$ 7500 millones en DEG prometidos por el staff del FMI habrá que ver qué sucede en el board del organismo, donde Alemania y Japón se opondrán frontalmente a ese desembolso, por más que esa cifra sólo sirva para devolver estos préstamos de cortísimo plazo y pagar las cuotas que vencerán antes de las elecciones nacionales. Pero, así como es casi seguro que tendrá esos fondos, no conseguirá dólares frescos para intervenir en el mercado de cambios y evitar que se desmadre todavía más, algo que siempre sucede en los períodos preelectorales.

Si Juan Grabois redujera el voto al Aceitoso al 20%, ¿Cristina Fernández y su hijo, el jefe nominal de La Cámpora, ¿se pondrían tristes o contentos? La pregunta suena razonable porque ella, a quien nadie puede tomar por imbécil, sabe que, si Massa alcanzara la Presidencia, lo primero que hará será acuchillarla por la espalda, como hacen todos los herederos del mundo con los líderes que les traspasaron el mando. Así como las PASO traen una enorme carga de incógnitas, dado el enorme porcentaje de ausentismo y la falta de certezas acerca del comportamiento de los más jóvenes, la verdadera elección de octubre aporta las suyas. Si la oposición no logra hacerse con quórum propio en el H° Aguantadero, la gobernabilidad y la posibilidad de ejecutar los cambios indispensables estarán en serios problemas. Y qué decir si Unión por la Patria consigue la reelección del carísimo Axel Kiciloff en la Provincia de Buenos Aires, ya que la convertirá en el bunker para la resistencia final.

Con el férreo cepo implantado para frenar importaciones (salvo para los “expertos en mercados regulados”, claro) la profundización de la recesión está cantada y con la enormidad de pesos que el Banco Central está poniendo en la calle, cualquier cálculo que se realice sobre la inflación resultará optimista. Así, la pobreza seguirá aumentando y encenderá nuevas luces rojas en el tablero socio-económico del país. Esas alertas llevan a preguntarse no sólo qué pasará en la semana que se inicia, la última antes de las PASO, sino qué sucederá en los escenarios posibles hasta octubre. Si las cifras del lunes 14 auguraran una inevitable derrota en las elecciones nacionales, ¿continuará Massa en el Ministerio?; y si así fuera, ¿qué estará dispuesto a hacer el kirchnerismo después de haber anunciado, a través de Axel Kiciloff, el Cuervo Larroque y otros energúmenos, que habrá violencia y sangre en las calles si Juntos por el Cambio gana? ¿Resultará posible tomar el té y negociar con quienes ahora quieren destruir la democracia desde adentro, rechazando resultados adversos?

Lamer el fondo      28-07-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 900


“Necesitamos una nación donde la corrupción no sea una forma consentida de gobernar”.

 Javier Díaz Canseco

 

El 7 de julio de 2018, publique una nota, “Cristinita, ¿otros US$ 5.000 millones?” (https://tinyurl.com/dvusrx4c) contando el sideral daño que sufriría la Argentina por el populismo, el autoritarismo y la falta de escrúpulos de la familia Kirchner, probado todo ello por el proyecto de ley para expropiar el 51% de las acciones de YPF, que había sido sancionado por el Congreso con una enorme mayoría de votos, incluidos muchos de los que ahora se rasgan las vestiduras desde la oposición. Describí cómo redundaría en beneficio de Cristina Fernández y sus hijos, que recibirían en sus ya ahítas arcas una parte sustancial de la indemnización que el país debería pagar a los accionistas no expropiados (casualmente sus testaferros, la familia Eskenazy), simplemente por no obedecer la norma del estatuto de la empresa que establecía que, al hacerse alguien con el control de la misma, debía ofertar a los restantes socios comprar también su parte.

 

No repetiré aquí todo cuanto dije en esa nota y en otras similares que pueden leerse en mi blog (egavogadro.blogspot.com) y sólo diré que la sentencia que nos condenó a pagar la indemnización reclamada por Burford y Templeton –de la cual los Eskenazy y, por consiguiente, los Kirchner, participarán con el 30%- ha sido dictada hace tiempo y que ahora sólo resta determinar el monto; ambas partes lo han estimado entre US$ 5.000 millones y US$ 16.900 millones, y la Juez Loretta Preska sólo debe fijar el importe entre ambos extremos.

 

Cuándo se le preguntó al entonces Ministro de Economía y actual Gobernador de la Provincia de Buenos Aires precisamente por qué habían omitido cumplir esa regla, respondió que el Gobierno no era tan imbécil como para respetar ese tipo de acuerdos; Fernando Marull ha calculado (https://tinyurl.com/5445xdae) que, si la sentencia fuera por un promedio entre los límites, las bravuconadas de Axel Kiciloff (Repsol, Club de París, holdouts, etc.) nos habrán costado la friolera de US$ 45.000 millones. Hasta los fondos de inversión que habían comprado bonos de deuda atados al crecimiento del PBI han entablado juicios en Estados Unidos y Europa porque, para evitar pagar los cupones por la realidad de nuestra economía, recurrimos al original método de alterar las estadísticas del INDEC.

 

Durante el gobierno de Mauricio Macri, el Estado opuso en su defensa la falsedad y la ilegalidad del contrato de venta del 25% de YPF, pero, cuando asumieron los Fernández² y designaron a Carlos Chino Zannini como Procurador del Tesoro, éste se hizo cargo del caso; tratándose de un prominente integrante de la asociación ilícita que saquea al país desde hace veinte años, que hayamos perdido el juicio no debe sorprendernos, ya que redunda en más enriquecimiento para la jefa de la misma. Total, con las apelaciones del caso, será la próxima administración argentina quien deberá pagar los daños. Me pregunto si no ha llegado el momento en que el H° Aguantadero sancione una ley que disponga la realización de un “juicio de residencia” a todos los funcionarios importantes que, así, se verían obligados a responder con sus propios bienes a las costosísimas consecuencias de su impericia, de su negligencia o, sobre todo, de su dolo.

 

Finalmente, el Aceitoso obtuvo su tan demorado acuerdo con el staff del FMI, que será elevado a consideración del Directorio para su aprobación, si es que la obtiene, en una reunión que se celebrará recién después de las PASO; la letra chica no dice aún si Sergio Massa dispondrá de algunos dólares para intervenir hasta octubre en el mercado de cambios, que tantos disgustos le produjo esta semana. Ha trascendido que el Ministro de Economía y pre-candidato presidencial pagará al organismo el lunes los ya vencidos US$ 2.700 millones utilizando yuanes del swap vigente con China; dado que todas las negociaciones con Beijing son inexplicablemente secretas, no sabremos, quién sabe por cuánto tiempo, qué gravosas concesiones habrá hecho para obtener la autorización necesaria.

 

Lo único seguro es que las recientes medidas económicas traerán consigo un fuerte estímulo a la depreciación del peso; la postergación en la fecha de publicación, por el Banco Central, de las expectativas del mercado (REM) para después de las PASO habla a las claras de la certeza que tiene el Gobierno acerca de la espiralización de la inflación, a la cual ningún “precio justo” o coerción policial ha podido, ni podrá, domeñar. Es que el salvaje ritmo de emisión monetaria, indispensable para atender al nuevo “plan platita” y a la bola de nieve de los intereses de la deuda pública es uno –no el único- factor de degradación de nuestra moneda y, con ella, de las condiciones de vida de la población.

 

Más ahora, después de tantas elecciones en provincias y en el mundo (España es un claro ejemplo), descreo de todas las encuestas, pero estoy convencido que Unión por la Patria, el pretencioso nuevo nombre que ha adoptado el kirchnerismo, conserva un importante caudal de votos, algo absolutamente irracional en este contexto de alta inflación, de inseguridad, de complicidad con el floreciente narcotráfico, de pobreza y miseria, de falta de salud y educación, de rampante corrupción y de absoluta impunidad. De todos modos, y a pesar de las quejas de sus más irreductibles fieles, es mejor que Cristina Fernández no aparezca en la campaña electoral del Aceitoso; no vaya a ser que los argentinos recuerden que, mientras ella percibe ilegalmente más de diez millones de pesos mensuales de jubilación y pensión, tantos de ellos deben hacer interminables filas a la intemperie para recibir unos mendrugos con que paliar temporalmente el hambre.

Im -¿Posibles?      22-07-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 899

“Donde antes habitaban la perseverancia y el ingenio, ahora deambulan la apatía y la desesperación. Donde antes reinaba la autosuficiencia, ahora ocupa su lugar un sometimiento mendicante”. Hernán Díaz

En un país simplemente normal, alguien como Sergio Massa no podría presentarse siquiera como candidato a portero de un prostíbulo. Sin embargo, por alguna de esas múltiples razones que convierten a la Argentina en un ejemplo nefasto para el mundo, no es tan descartable como debiera la probabilidad de que se transforme en el próximo presidente. Y ello habla muy mal de nosotros, ya que hubiéramos debido aprender, y mucho, de las experiencias generadas por el peronismo siempre mutante.

Sin embargo, sigue teniendo un núcleo duro de votantes, que padece del síndrome de Estocolmo, entre los más perjudicados por su fracasada gestión, en especial en el Conurbano bonaerense. Allí, por múltiples razones históricas, políticas y delictivas, el Estado ha abandonado a los ciudadanos: no hay luz, agua corriente, educación, seguridad, salud, vivienda, e impera el narcotráfico y la violencia. Que un tipo que ha llevado la inflación al 140% anual y el dólar a $ 525 aún tenga el apoyo de los gerentes de la pobreza, de la CGT y del trotskismo llama la atención del mundo entero. Hoy la Argentina, en manos de estos canallas desde hace más de veinte años, se encuentra 6° entre los países más miserables del globo.

Es innegable que las salvajes peleas a cielo abierto de la oposición coadyuvan a sostener las esperanzas de Unión por la Patria. Por ello, me permitiré formular una propuesta a los dos contendientes dentro de Juntos por el Cambio que anuncien que, de triunfar en las PASO, ofrecerán al perdedor un cargo importante en su futuro gobierno: ¿la Jefatura de Gabinete a Horacio Rodríguez Larreta?, ¿el Ministerio de Seguridad y Defensa a Patricia Bullrich? Con eso, las dudas sobre el comportamiento de los votantes de cada uno en las generales de octubre se disiparían rápidamente y la imagen de verdadera unidad se vería solidificada.

Más allá de las permanentes contradicciones y contorsiones que exhibe el Aceitoso sin pudor, cabe recordar tres recientes hitos de su tradición de inveterado mentiroso: 1) dijo que China había enviado una carta al Directorio del FMI para apurarlo a cerrar el acuerdo con la Argentina, y fue desmentido hasta por la Directora General, Kristalina Georgieva; 2) dijo que el gasoducto Kirchner se había construido pese a la oposición del FMI, pero rápidamente se conocieron los documentos que demuestran que el organismo recomendó priorizar esa obra para mejorar la situación de las reservas monetarias; y 3) dijo que economistas de Juntos por el Cambio habían reclamado al FMI no ayudar a nuestro país hasta después de las elecciones; no sólo fue una flagrante falsedad, probada por su negativa a dar nombres, sino que permitió recordar (https://tinyurl.com/bdhrv4cw) que el peronismo, oficialmente, intentó perjudicar al gobierno de Mauricio Macri.

Los empresarios “expertos en operar en mercados regulados”, con la permanente vocación por cazar en el zoológico y pescar en la bañadera, siguen apoyándolo, sobre todo con mucho dinero, pero también operando en la prensa en su favor. Están convencidos de la prosperidad que lloverá sobre ellos si consigue ganar las elecciones, al continuar el saqueo de la mano de licitaciones amañadas, de permisos de importación digitados y vendidos, de protecciones inicuas y de corrupción generalizada.

Nuestros padres y nosotros mismos, que ya somos mayores, en general abdicamos de nuestro rol político de clase dirigente, al cual estábamos destinados por educación y por herencia, ese papel que sí asumió responsablemente la generación del 80 haciendo grande al país, y entregamos la administración de nuestro bien más preciado (la Patria) a cafres de todos los colores; obviamente, a nadie podemos echar la culpa de lo sucedido y la historia nos imputará por haber permitido, sin reaccionar, la fatal y terminal decadencia de la Argentina.

El país dejó de soñar, entonces, con ser una Nación y se conformó con ser un mero consorcio, en el que no obedecemos el reglamento de copropiedad ni sus reglas de convivencia (la Constitución), que establecen cuándo debemos sacar la basura, por dónde pueden circular las mascotas o los horarios prohibidos para los ruidos molestos y, por supuesto, no respetamos los derechos de los otros copropietarios (los ciudadanos), entre otros, a circular libremente. El día en que se generalizó el lema “sálvese quien pueda” y se internalizó la pregunta “¿dónde está la mía?”, nos condenamos a la insignificancia y, en último término, a la inviabilidad.

Hoy el mundo, que en razón de la prepotencia asesina de Vladimir Putin (prohibió la circulación de buques graneleros en el Mar Negro) se encuentra nuevamente al borde de una monumental hambruna, no puede permitirse por mucho tiempo más que los incompetentes y egoístas argentinos terminemos de arruinar un territorio tan despoblado, con capacidad para alimentar a 500 millones de personas, feraz en recursos naturales de todo tipo, en agua dulce y en energías renovables. En la medida en que nuestro país no se hundirá en el mar, resulta imaginable que su superficie actual sea desmembrada y repartida entre los países vecinos y entre las potencias globales que, aún con las dificultades derivadas de la presencia de 47 millones de incorregibles argentinos (¿por qué no pagarnos para que nos vayamos?), administren eficientemente sus enormes potencialidades.

Diezmos Aceitosos      15-07-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 898

“Siendo mediocre, a fuerza de saber humillarse se alcanza todo”. Pierre Auguste Caron de Beaumarchais

Sergio Massa sabe que Patricia Bullrich es su peor enemigo y, para esmerilarla, no duda en recurrir a los muchos recursos estatales, como ha sido la intervención de su ONG, ordenada por su lacayo, Ricardo Nissen, respaldado por el inefable Martín Soria, Ministro de in-Justicia. Pero su última intervención verbal contra la Piba causó fuerte escozor en las filas de la “generación diezmada” ya que, como un insulto, la acusó (es falso) de haber integrado Montoneros. El desplazado Eduardo Wado de Pedro había sido escogido para competir por Cristina Fernández precisamente por ser hijo de dos asesinos de esa agrupación, que murieron combatiendo en la guerra civil que asoló nuestro país entre los 60’s y los 90’s, provocada por la sanguinaria actuación de terroristas adoctrinados, armados y financiados por Cuba, Argelia, Vietnam, China y Líbano; o sea, el Aceitoso tocó una dramática cuerda en la guitarra que templó el kirchnerismo desde 2003.

La pantomima que protagonizó el Gobierno el 9 de Julio resultó vomitiva. Asistimos a una nueva payasada de los integrantes de ese triunvirato compuesto por un don nadie que tardíamente se calzó las botas, por una envejecida reina que ve el poder escurrírsele entre los dedos y sólo aspira a la resistencia, y por el personaje más inescrupuloso de cuantos ha producido esta tierra, tan fecunda para engendrarlos como proclive a ser sometida por estos crápulas. No sólo usaron una obra pública para hacer ilegal campaña política, sino que, sin ponerse colorados, “inauguraron” un tramo no terminado de un gasoducto, abriendo una falsa canilla. Realmente, dan vergüenza ajena, aunque debería ser de todos nosotros ya que, por acción de unos y omisión de otros, el kirchnerismo conserva un volumen electoral inexplicable pero no desdeñable.

Esta semana, pese a ello, sufrió dos derrotas estruendosas. No logró cerrar el anunciado acuerdo con el FMI lo cual nos pone al borde del precipicio, ni consiguió reunir al Senado para prolongar hasta los 80 años la estadía de Ana María Figueroa, tan creyente de su relato, en la Cámara Federal de Casación y, además, designar a un montón de jueces adeptos, como pretendía la emperatriz del Calafate.

La perenne pulsión por el poder del peronismo obliga a sus más encumbrados actores a tragar muchos sapos. Hoy, cuando necesita de la solidaridad de otros integrantes de esa estafa monumental llamada “Patria Grande”, bajo cuya carpa se acomodan el Foro de São Paulo, el Grupo de Puebla y demás vociferantes del “Socialismo del Siglo XXI”, no duda en apoyar sin fisuras a las dictaduras más sangrientas de la región, amparándose cínicamente en el principio de no intervención en los asuntos internos de otros países. Pretende que olvidemos, impulsados por su tan eficiente aparato de propaganda, que esos aliados fueron actores principales en los recientes dramas terroristas de Perú y Bolivia, como antes lo hicieron en Chile, Colombia y Ecuador.

¿O no vimos sus largas manos en los disturbios que destruyeron Lima, Santiago, Quito, Bogotá o La Paz? ¿Quién, sino ellos mismos, llevaron a la cárcel a Jeanine Añéz Chávez después de los ataques de los cocaleros de Evo Morales? ¿Quiénes suspendieron al Paraguay como miembro del Mercosur porque se oponía al ingreso de Venezuela y así lo lograron? ¿Quiénes usan la teoría del lawfare para proteger a Luiz Inácio Lula da Silva, Cristina Fernández, Pedro Castillo y Rafael Correa? ¿Quiénes callan, cómplices, ante los asesinatos, las torturas, la expulsión de sus propios ciudadanos más allá de sus fronteras y las proscripciones de adversarios de Daniel Ortega, Nicolás Maduro o Miguel Díaz-Canel? ¿Quiénes se asocian internacionalmente con los regímenes sanguinarios de Rusia, ¿China e Irán, capaces de exterminar a sus enemigos, aún en el exterior? ¿Quiénes, mientras montan movimientos feministas para destruir desde adentro a las sociedades, callan cuando se impide a Corina Machado participar en las elecciones venezolanas o cuando el poder mata a mujeres que saben demasiado en el Chaco, en Tucumán, en Caracas o en La Habana? ¿Quiénes han amasado inmensas fortunas, han saqueado los recursos naturales y llevado a sus sociedades al infierno de la pobreza y la marginalidad?

Pero no hay impostura que dure eternamente, y los mitos ya no son vendidos tan fácilmente a la ciudadanía latinoamericana que, en todas partes, como sucede en Italia o España, comienza a despertar y obliga a sus políticos –ha pasado con Gabriel Boric y Gustavo Petro- a privilegiar sus compromisos éticos sobre el alineamiento automático con los canallas dictadores de la región.

Por falta de espacio en ésta, en otra nota hablaré de los otros muchos diezmos que recibe el Aceitoso, esos que le han permitido ser tan rico. Por hoy, sólo me resta afirmar que Sergio Massa y su feliz cónyuge/socia Malena Galmarini, si llegaran al poder, convertirán a Néstor y Cristina Kirchner en aprendices del saqueo y del autoritarismo; sin duda, serán mucho peores que sus maestros.

Faltan 29 días para que se sustancien las PASO, que, no lo dudo, llevarán a la oposición al gobierno. Las terribles circunstancias socio-económicas que atraviesa la Argentina obligarán a actuar de forma bien distinta al gradualismo, y la resistencia en la calle, fogoneada por el peronismo y su aliado estratégico, el trotskismo, será inevitable; es por eso que, cuando votemos, deberemos pensar muy bien quién creemos que tiene el simple coraje de imponer la ley, toda ella, para controlarla y reducirla.

Conejos muertos o falsos     08-07-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 897

“Una mentira da media vuelta al mundo mientras la verdad aún se está calzando”. Ken Follett

Sergio Massa ha hecho de su vida un remedo de Mandrake, el Mago, y debo reconocer que no le ha ido mal. A fuerza de una ambición desmedida, de zarpazos, codazos, traiciones, vicios más o menos ocultos e inmundas complicidades de empresarios venales, logró alzarse con la candidatura presidencial de Unión por la Patria (UxP), pese a que su devaluada jefa debe estar aterrada con la probabilidad de un triunfo electoral de su nueva marca; la historia, esa que tanto le gusta, enseña que, de ser así, lo único esperable en un futuro inmediato sería un matricidio.

Sin ponerse colorado, su equipo de campaña anunció, urbi et orbe, que había cerrado un trato con el FMI y que la semana pasada, concretamente el lunes, una misión encabezada por su Viceministro, el inefable y tan arrepentido Gabriel Rubinstein, viajaría a firmarlo con el staff, como medida previa a su aprobación por el Directorio del organismo. En el escabroso camino, consiguió que China –vaya uno a saber a qué costo y con qué exigencias, ya que todo es secreto- le permitiera usar un tramo del swap vigente para pagar las cuotas vencidas con yuanes.

Pues bien, nada de eso existió y no hay expectativas de que acontezca en los próximos días. Ante la terrible escasez de divisas que padece el Banco Central, el Aceitoso ya anunció que los pagos correspondientes a julio (US$ 2.700 millones) se harán sólo a fin de mes, o sea, si llegan fondos del propio FMI para efectivizarlos. A la vez, está intentando chantajear aún más al organismo, que tan condescendiente ha sido con el kirchnerismo, pero ahora exige una devaluación, haciendo presión sobre Joe Biden e intentando sumar a Egipto, con problemas similares a los de Argentina, aunque menores, y amenazando con un default que perjudicaría a todo el mundo.

La situación es tan grave que, si el Ministro dejara de pagar al FMI, tendría un efecto cascada sobre otras entidades multilaterales, tales como el Club de Paris, el Banco Mundial o la Corporación Andina de Fomento, sumando problemas a los ya existentes con los importadores, incluidos aquéllos “expertos en operar en mercados regulados” que aceptan la increíble voracidad -¿estarán juntando para la campaña del Aceitoso?- de quienes deben autorizar el acceso a los dólares necesarios para pagar sus compras de insumos, y con la recesión que ya se nota en todos los campos.

Pero Massa, en su triple rol de presidente de facto, de jefe de la cartera económica y de precandidato, no se arredra e intenta ocultar sus múltiples fracasos con un despliegue de hiperactividad, mostrándose en los más diversos escenarios regionales –como cuando fue a buscar la foto con Luiz Inácio Lula da Silva- o locales. Mañana mismo, y con la prometida –hasta ahora- aparición conjunta de los Fernández², inaugurará el tramo Tratayen-Salliqueló del gasoducto llamado -¡qué originalidad!- Néstor Kirchner.

La enorme campaña publicitaria que ha desplegado el Gobierno al respecto (independencia energética, ahorro de divisas, soberanía, federalismo, tiempo record en su construcción, costo final), no puede ser más mentirosa. El caño actual, todavía ni siquiera terminado (70%), sólo servirá, realmente, cuando entre en servicio el siguiente hasta la frontera con Brasil, aún no emprendido. Además, la licitación convocada en 2019 por Mauricio Macri para que lo hicieran capitales privados fue anulada y todo el proceso fue encomendado, con dinero público, a Enrasa, conducida por un mocoso de La Cámpora que lo único que sabe de la actividad es encender las hornallas de la cocina; esa demora -¡26 meses!, comparable a la del tren a Mendoza que, reinaugurado por el auto percibido Presidente, tarda más que hace cien años- le costó a la Argentina una cifra monstruosa.

Por, sobre todo, se hace el olvidadizo respecto al pavoroso daño que las sucesiones de desaguisados cometidos con YPF causaron, y aún lo hacen, al país. Todo comenzó cuando Carlos Menem privatizó la empresa y, para convencer a Kirchner y a otros gobernadores de apoyar la ley, “recalculó” las regalías que correspondían a las provincias petroleras. Entonces, el finado consiguió más de US$ 1.000 millones, los desaparecidos “fondos de Santa Cruz”. Curiosamente, el miembro informante de la ley de privatización fue Oscar Parrilli, el mismo “pelo…” (Cristina Fernández dixit) que luego impulsó la estatización que ella promovió.

Ya Presidente, Kirchner decidió robarse el 25% de YPF y, para lograrlo, congeló las tarifas a los productores, “convenciendo” a Repsol de “venderle” –sin plata- ese porcentaje a los Eskenazy, sus testaferros. Con ese estrangulamiento, cayó la producción de gas, afectando especialmente a YPF que, tal como preveía en ese contrato tan especial, distribuyó todas sus utilidades como dividendos y, así, dejó de explorar nuevos yacimientos, con lo cual la Argentina perdió el autoabastecimiento energético, tan duramente logrado. A partir de entonces, los ductos construidos para exportar gas debieron invertir el sentido de los flujos para importarlo y, cuando no fue suficiente, comenzamos a traer innumerables buques con gas licuado, dando lugar a una gigantesca corrupción.

Todo ello será escamoteado mañana por el oficialismo, cuando la trifecta gobernante se autocelebre y permita al cada vez más Aceitoso Massa coronarse como héroe nacional, aunque su corona sea de cartón pintado y el nuevo conejo falso huela tanto a podrido.

Que Dios ayuda a los malos …     01-07-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 896

“Los jueces de mármol nunca comprendieron que a veces la vida te obliga a matar”, Oscar Larroca

Sergio Massa logró, a fuerza de audacia propia y desesperación de sus socios, aterrados ante la alta probabilidad de atravesar un penoso desierto, imponer su precandidatura presidencial; al hacerlo demostró, aunque era innecesario, la impotencia actual de Cristina Fernández. La PresidenteVice se vengó –una diminuta venganza- recordándole, en la cara y en público, que su real heredero era Eduardo Wado de Pedro, que fue desechado por presión de gobernadores feudales, “barones” del Conurbano, gordos sindicalistas y algunas organizaciones sociales.

Debería llamar la atención que quienes fingen ser los representantes de los más damnificados por la inflación rampante, hoy apoyen sin cortapisas al responsable de ella. Pero, si observamos en detalle el estruendoso silencio con el que permitieron y acompañaron, sin realizar protesta alguna, el deterioro del salario docente (¡teléfono para Roberto Baradel!), la dramática pérdida de poder adquisitivo de las remuneraciones de los trabajadores registrados, la represión a los qom y tantas otras salvajadas (varios asesinatos, incluido el del Fiscal Alberto Nisman) que ha perpetrado el kirchnerismo en las últimas dos décadas, nada debería sorprendernos.

El Aceitoso no tendrá paz, sea que gane o pierda en las elecciones. Si triunfara, algo que todos los manuales políticos describen como imposible, heredaría la pesadísima realidad, esa que ha construido con su ignorancia y su incapacidad para controlar la inflación y su simétrico éxito en incrementar la pobreza, en producir una innegable recesión, en endeudar al Estado a tasas geométricas y en barrer bajo la alfombra los problemas derivados de la terrible carencia de divisas para hacer frente a las obligaciones de la deuda pública y la asumida con los importadores, que hoy se estiman en US$ 30.000 millones. Y deberá negociar los indispensables ajustes con un Congreso poblado de irracionales kirchneristas duros y de cambiemitas y libertarios, por muy sensatos que se vuelvan éstos algún día.

Para llegar con algún aliento a las PASO, a cuarenta y cuatro angustiosos días de distancia, está tratando de cerrar un inviable acuerdo con las grandes cadenas de supermercados que implique un congelamiento de precios hasta entonces, suponiendo que bastará luego para vencer en las elecciones nacionales el innegable apoyo del círculo rojo “experto en operar en mercados regulados”, la genial frase que acuñó Antonio Brufau, CEO por entonces de Repsol, para justificar la “venta” del 25% de YPF a la familia Eskenazy, que tantas veces he descripto aquí.

La esperanza empresarial se basa en los fuertes contactos y amistades que tiene el Aceitoso con personajes de la calaña de José Luis Manzano, Daniel Vila, Cristóbal López, Fabián de Souza y tantos otros próceres de la “patria contratista”. Pero cometería un grave error si diera por seguro que, como consecuencia de la adhesión de esos empresarios corruptos, sólo dispuestos a cazar en el zoológico y pescar en la bañadera, llegarían los votos de los ciudadanos de a pie, ya que hoy pesan más en la gente las redes sociales que los medios de prensa tradicionales.

Quedan enormes interrogantes pendientes: el mismo que trajo hasta aquí la catástrofe económico-social que se abate sobre nosotros, ¿podrá ofrecer un mejor mañana al electorado?; si así fuera, ¿por qué no aplica su receta ahora mismo?; ¿hasta cuándo permanecerá en el timón del palacio de Hacienda?; ¿quién se sentará, si se va, en esa silla eléctrica?; y la más importante, ¿qué impacto tendrá su postulación en el staff del FMI, al cual ruega con desesperación para que le suministre fondos frescos?

Por lo demás, no es seguro que la devaluada emperatriz de Calafate prefiera el triunfo de alguien que, aunque corra con sus colores, no será nunca su títere y, por necesidad, la traicionará para fundar su propia dinastía, tal como hicieron Néstor Kirchner y ella misma con Carlos Menem y Eduardo Duhalde a partir de 2003. Y si perdiera, podría transferirle la responsabilidad primaria de la derrota.

Que hoy estemos hablando de la probabilidad, aunque sea remota, de que Massa se convierta en el próximo presidente habla muy mal de Juntos por el Cambio (JxC), la alianza que se suicida en cuotas en las sanguinarias peleas públicas de sus líderes, que prefieren luchar entre sí en el barro a ofrecer propuestas de gobierno, y hasta de La Libertad Avanza (LLA), cuyo mesiánico y unipersonal jefe perdió volumen electoral en cada oportunidad en que ha competido en elecciones provinciales.

Tal como escribió ayer Carlos Manfroni en La Nación (https://tinyurl.com/2p8zvzkb), todos los candidatos opositores, salvo Patricia Bullrich (JxC) y Victoria Villarruel (LLA), deben a la sociedad en su conjunto un claro posicionamiento respecto al lacerante tema de los presos políticos, esos ancianos que defendieron a la República de la criminal subversión terrorista de los 70’s. Y hacerlo se transformó en urgente, ya que resultará imposible seguir ignorando esa grave situación y, a la vez, ser obedecido para quien gobierne a partir de diciembre cuando deba ordenar reprimir la violencia y el salvajismo con que las necesarias reformas serán enfrentadas en la calle, tal como sucedió durante el ejercicio revolucionario que todos vimos en Jujuy en estos días.

El que avisa no es traidor      24-06-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 895

“¿Se puede gestionar esta nación carnívora y mafiosa sólo con diálogo, café y cortesía?”. Jorge Fernández Díaz

El kirchnerismo, resignado al pésimo resultado - ¿tercero cómodo? - que obtendrá en las próximas elecciones, algo que confirmó con la postulación de la fórmula indudablemente perdedora de Eduardo Wado de Pedro y Juan Manzur, y ante la eventualidad de no haber sido escuchado cuando sus voceros más agresivos –Pablo Moyano, Juan Grabois y Eduardo Valdéz, entre otros- verbalizaron sus amenazas contra una futura administración no peronista, ha iniciado una nueva gimnasia subversiva y revolucionaria. Mal que le pese a las almas buenas y sensibles, convencidas de la necesidad de dialogar con todos los sectores políticos, aún con aquéllos que sólo buscan destruir a la República desde adentro para conservar el poder, esta semana demostró que no sólo es imposible sino, además, inconducente. ¿Cómo se puede negociar y acordar con alguien que nos apunta con una pistola y está dispuesto a matarnos para lograr sus objetivos?

Gerardo Morales, Gobernador de Jujuy, no es un personaje que me caiga precisamente simpático. Sin embargo, le reconozco el coraje con que, ley en mano, puso fin al Estado paralelo y mafioso que Milagro Sala había instaurado allí, patrocinado con ilimitados fondos nacionales (utilizando el mismo método que usó con los “Sueños Compartidos” de Hebe Bonafini y Sergio Schocklender y con los emprendimientos de Jorge Coqui Capitanich y su socio, Emerenciano Sena) y que contó con el siempre irracional apoyo del trotskismo violento.

El candidato –Carlos Sadir- apoyado por el mandatario jujeño ganó el 4 de mayo las elecciones provinciales con el 49,52% de los votos, imponiéndose a los postulantes peronista (22,32%) e izquierdista (12,81%); o sea, la población apoyó la gestión actual a punto tal de permitirle más que duplicar a su más cercano contendiente. Sin embargo, Jujuy fue incendiada por quienes no toleran el juego democrático ni respetan la voluntad popular; una reforma constitucional, aprobada por todo el arco político en la Legislatura, les sirvió como excusa para pasar a la acción.

Sobre un reclamo docente por mejores salarios, manos negras soliviantaron a los pacíficos indígenas de la Puna para que tomaran rutas y resistieran, a como diera lugar, los intentos de liberar el tránsito internacional; en este caso, se usó la oposición a las explotaciones de litio. Pero como eso no bastó para generar un caos con gran repercusión en la prensa nacional, llegaron a la capital provincial ingentes contingentes de bárbaros y asesinos transportados y financiados en efectivo por el Gobierno nacional. Como era previsible, dispuso para ello de delincuentes liberados con la excusa del COVID, soldaditos del narcomenudeo, barrabravas, falsos mapuches, terroristas de Montoneros y ERP y miembros del Sendero Luminoso peruano, del PCC brasileño y del MAS boliviano de Evo Morales, y demás indeseables que han sido beneficiados por la asociación ilícita que todavía nos gobierna, socia del tráfico internacional de drogas.

Los hechos de Jujuy han servido a Unión por la Patria (UxP), la nueva marca del Frente de Locos, para quitar de la portada de los diarios y de los noticieros de TV el atroz crimen del Chaco, que enterró los delirios presidenciales de Capitanich, pero también a Juntos para el Cambio (JxC), que consiguió reunir a todos sus caciques en una foto de familia en apoyo a Gerardo Morales y dio así una prueba de unidad, tan reclamada después de tantos episodios de despiadada pelea interna. Mañana, en Córdoba, después de abortar la tentativa de incorporar a Juan Schiaretti a la alianza opositora, esa unidad será nuevamente puesta a prueba.

Sólo esta noche, a las 23:59, conoceremos las cartas definitivas que se jugarán en las PASO. Conociendo los prostibularios antecedentes de ambos, ¿resulta paranoide preguntarse si toda la dura pelea que se escenificó alrededor de la precandidatura de Scioli no será, realmente, una puesta en escena urdida y que el Pichichi, que tantas y tan graves humillaciones soportó en el pasado, sea el verdadero delfín de Cristina Fernández, que así intentaría, como lo hizo con Alberto Fernández en 2019, “venderle” a la sociedad un personaje de historieta, más dialoguista y contemporizador pero, en el fondo, un esbirro obediente?

Mientras tanto, ¿qué habrán prometido a Sergio Massa para que no abandone el tan escorado barco del Ministerio de Economía? No tiene, precisamente, un fácil futuro para su gestión, ya que la imposibilidad de hacer frente con fondos propios a las obligaciones con el FMI (US$ 2.700 millones este mismo mes) y la demora del organismo –por la férrea oposición de Alemania y Japón- en ceder a su pretensión de anticipar fondos de libre disponibilidad para intervenir en el mercado de cambios y así evitar una devaluación, ponen a la Argentina ante un escenario de default catastrófico. Todos los anuncios triunfalistas que ha efectuado el Aceitoso hasta ahora (el swap con China, los préstamos del nuevo banco de los BRICS, el apoyo financiero de Brasil, etc.) se han mostrado falsos, aunque le hayan permitido ganar tiempo. ¿Le alcanzará para llegar a las PASO sin un estallido?; aun así, ¿qué pasará entre agosto y noviembre?

Hoy, los “mercados” creen que, sin ser candidato, podrá dedicar todos sus esfuerzos a administrar bien la economía. Sin embargo, lo dudo toda vez que, como se vio antes de las elecciones provinciales sustanciadas hasta ahora, el Gobierno giró a los distritos donde gobierna el PJ ingentes fondos como ATN. ¿Qué le exigirá el kirchnerismo ahora, cuando se juega la vida?

Schiaretti pretende apropiarse de todo    21-06-2023 

por Alberto A. Anselmi

El curanderismo del Gobernador Schiaretti, nos da una muestra más de sus mentiras, como queriendo apropiarse de cualquier oportunidad. En este caso publicó con un coqueto libelo entre los suyos; el descubrimiento que hemos hecho nosotros de que El Cura Brochero celebraba misas y daba ejercicios espirituales que tanto beneficio brindaba a los presos de la cárcel San Martín de la ciudad de CÓRDOBA y que en su primer momento lo rechazaba, insistiendo en tirar abajo esa cárcel, realmente histórica y santa.

Pero lo que pasaba y, que él sabía muy bien que lo habíamos descubierto nosotros, en nuestra tarea de investigación con nuestro Periódico “La Voz de Mina Clavero” Director: Alberto Anselmi; la creadora de las “Cabalgatas Brocherianas”, la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero” presidida por el extinto y benemérito, Dr. Oscar Raúl Sasso, lamentablemente fallecido. Sasso fue quien consiguió que Carina Edith Villafañe Batica, tomara la gran responsabilidad de investigar durante meses los Archivos en parque Sarmiento de Córdoba en Los Archivos Históricos de la Provincia de Córdoba. Carina estuvo trabajando arduamente durante meses buscando en los diarios de la época del Santo, hasta que ocurrió, fue un 13 de abril de 2016 a las 17 horas, después de tanto trabajo y dedicación.

Ella fue la real descubridora, quien estuvo “quemándose las pestañas” en los Archivos, hasta que después de tanto llegó el “Aleluya Eureka” (lo encontré) y La voz de Mina Clavero fue el primer medio que lo difundió, orgulloso de que Carina es y fue Corresponsal de nuestro Periódico. También hicimos con ella la difusión desde los estudios de canal 10 de Córdoba para todos los medios cordobeses de información, y a través de Internet para todo el mundo, y a los medios de Traslasierra. Quien les habla Alberto Anselmi es miembro integrante desde los principios de esta misión de la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero”, participando y difundiendo el sacrificado trabajo de todas las Cabalgatas Brocherianas, que tuvo que hacer prohibir usar el término “Cabalgatas Brocherianas”, propiedad del Dr. Sasso y los miembros de “La Vuelta del Guerrero” (por lo que nadie lo puede utilizar, si no es autorizado por La Vuelta del Guerrero). Se le prohibió a la Iglesia Católica y al Gaucho usurpador de títulos Aprile (quien publicaba que tenía todos los derechos reservados).

Los únicos que tenemos los datos oficiales de “Los Caminos de Brochero” SOMOS NOSOTROS” QUE CON EL GRAN GUÍA (HOY DESAPARECIDO) el Gran altruista dispuesto a dar su vida por defender los hechos reales de nuestro Santo, Oscar Raúl Sasso, quien puso su vida en riesgo y su salud que lo llevó a la muerte. También tuvimos en los principios la gran colaboración del entonces Gobernador Dr. Ramón B. Mestre, fallecido también.

La infamia de Schiaretti no tiene límites, sólo piensa en negociar para beneficio propio, procesado por coimas con Odebrech de Brasil y por coimas con la empresa que tiene a su cargo el acueducto “Dique los Molinos” – Córdoba, en Argentina. Este último párrafo es sólo para demostrar su imagen ante el mundo.

Ahora nuestra sospecha de que quiera hacer otro negociado con lo que no participó, con la vida de nuestro Santo José Gabriel Brochero. Cuando nosotros descubrimos que Brochero celebraba Misas para los presos en la Cárcel San Martín de la ciudad de Córdoba, brindando también Ejercicios Espirituales y que nosotros publicamos con todos los detalles en nuestra ediciones de 2016 y que en ese momento le pedimos al Gobernador Schiaretti, NO tire abajo esa cárcel, porque insistía en llevar adelante obras en el lugar, quizás por otro negociado y que tuvimos que denunciar a cuanto organismo fuera necesario y más aun teniendo en cuenta que esa cárcel se había convertido en un lugar SAGRADO, por toda la Magnífica y Altruista labor desarrollada por nuestro querido Santo.

Y así conseguimos se suspendieran las obras que estaba desarrollando en el lugar. Ahora aparece publicando un libelo con tapa dura, detallando el descubrimiento de estos hechos, firmando por su Presidenta de la Agencia Córdoba Cultura, la primera nota de presentación y Schiaretti, también participó el Vicegobernador de Córdoba, pero en ningún lugar manifiestan quién o quiénes fueron los descubridores de semejante noticia. Schiaretti me conoce profundamente y me quiere tanto que cuando viene a Mina Clavero me pone guardaespaldas para no permitirme le haga preguntas en las entrevistas. También conoce al Dr. Oscar Raúl Sasso, quien fue el iniciador de las Cabalgatas Brocherianas, sin fines de lucro y con el único y gran objetivo, de redescubrir y realizar el relevamiento de los caminos que recorría Brochero, como así también, de los lugares y acciones realizadas por el hoy San Brochero, con absoluta seriedad y compromiso, utilizando la Cátedra de Geodesia de la Universidad de Córdoba para ese relevamiento y las Cabalgatas Brocherianas no fueron para ver qué sentía nuestro Santo cuando pasaba por allí (como decía Aprile cuando le preguntaban y decía que él había creado las Cabalgatas) sino que nuestros gauchos y devotos de Brochero iban a trabajar, con pala, pico y pisón, redescubriendo esos senderos de herraduras que hacían para poder transitar mejor y servir a los carros y cabalgantes y algunos pequeños autos que se atrevían a recorrer, por esos caminos de herradura, que tampoco pasaban por el hoy bautizado falsamente como el Camino del Peregrino que transitaba Brochero. Una total mentira que sólo sirve para confundir a los fieles.

Marca devaluada      17-06-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 894

“Soy un mentiroso muy sincero”. Federico Fellini

El circo de tres pistas en que se ha convertido la política nacional no deja de producir espectáculos que, a fuer de ser sinceros, todos los días nos permiten recuperar la capacidad de asombro, esa característica fundamental de la niñez.

Si no fuera por lo trágico, el nombre elegido por la emperatriz del Calafate para cambiar la denominación de su frente electoral movería a risa: sólo una caradura tan grande como ella, condenada por haber ejecutado el proceso de corrupción más prolongado y voluminoso de la historia argentina, podría ahora llamar a su banda de delincuentes “Unión por la Patria” (UxP). Si algo faltaba para comprobar cuán devaluado está el poder de Cristina Fernández fue, precisamente, esta inútil pretensión de diferenciarse del fracasado Gobierno, entronizado por ella misma con un sabatino tuit con la marca “Frente para Todos”, a pocos días de inscribir las alianzas.

Esa pérdida de valor no es nueva, ya que fue expuesta por todos los gobernadores al separar sus elecciones provinciales de la nacional, ante la certeza de que una monumental debacle es el único destino posible para un oficialismo que ha cometido tantos desaguisados en materias tales como pobreza e indigencia, inflación, endeudamiento, recesión, cepos para todos (excepto, como siempre, para los “expertos en mercados regulados”, que crecen como hongos ante cada prohibición), inseguridad ciudadana, narcotráfico, educación, salud, etc.. Por si fuera poco, un cuatro de copas como Alberto Fernández la desafió abiertamente al presentar un candidato –Daniel Scioli, insistente titular del sector Fe y Esperanza del peronismo- para frenar un dedazo de su PresidenteVice en las PASO.

Si la presencia de Pichichi en las primarias continúa vigente el próximo sábado a medianoche, cuando se deberán inscribir las candidaturas, deberíamos alquiler balcones para contemplar qué hace, finalmente, Sergio Massa y qué consecuencias se derivan de su accionar. Hasta entonces, el Aceitoso seguirá pretendiendo ser el candidato de unidad de la asociación ilícita y, públicamente, ha amenazado con renunciar a su cargo de Ministro de Economía si esa condición no le fuera concedida; conociendo al personaje, su vocación por llegar al sillón de Rivadavia y su falta de principios, dudo que lo haga, sobre todo si lo compensan con algún cargo muy relevante para su mujer y socia, Malena Galmarini.

A contramano de la corriente con la que sueña para que lo deposite en la Casa Rosada, producto de la desesperación de Cristina Fernández ante la probabilidad que su facción no ingrese al ballotage, Massa sufre por la falta de resultados de su gestión. Más allá de los reiterados y rimbombantes anuncios triunfalistas, no los ha obtenido del FMI, que demora en las respuestas que necesita con urgencia, ni en Brasil y China, donde no ha obtenido logros significativos. Pero, muy especialmente, sabe de la desconfianza y la urticaria que provoca su figura en la jefa de la asociación ilícita, que lo considera, justificadamente, capaz de cualquier traición.

Aún se barajan en la nueva UxP otros nombres de ilustres desconocidos o reputados ladrones, como los de Eduardo Wado de Pedro, Axel Kiciloff, Juan Grabois, Agustín Rossi, el trabajador Máximo Kirchner y hasta el trío mafioso formado por Guillermo Moreno, Luis D’Elia y Alberto Samid, pero ninguno de ellos ofrece garantías de éxito a la banda.

Juntos por el Cambio (JxC) ha conseguido conservar todos los pies dentro del plato de la unidad y la sangre no llegará al río, lo cual es un gran logro. Hoy las fundaciones que representan a los cuatro partidos que integran esa alianza (Pro, Unión Cívica Radical, Coalición Cívica y Peronismo Republicano), a los que se han sumado las formaciones que responden a José Luis Espert y Margarita Stolbizer, han podido, no sin grandes esfuerzos, ponerse de acuerdo en el programa de gobierno que aplicará la coalición si llega al poder; sólo les resta, y no es poco, discutir el ritmo que imprimirán para llevar adelante las esenciales reformas que el país requiere.

La tercera pista del circo la ocupa, por mérito propio, Javier Milei, que viene de soportar penosas derrotas en las elecciones provinciales sustanciadas hasta ahora y una grave y muy crítica diáspora de quienes se agrupaban localmente bajo sus banderas. Insisto en que, si este líder de un movimiento amorfo y básicamente unipersonal entrara al ballotage, muy probablemente se convertirá en el próximo Presidente, ya que votarán por él quienes resulten terceros, que lo elegirán como el mal menor.

Pero, sin duda, tendrá enormes problemas de gobernabilidad; no tanto porque carece de los cuadros necesarios para ocupar los cargos más relevantes de la administración pública, ya que siempre habrá voluntarios para correr en ayuda del vencedor, sino principalmente porque, al no haber obtenido suficientes votos en los comicios provinciales, no contará con un bloque de diputados –y qué decir de senadores- capaz de sostener sus proyectos de ley en el Congreso y gravitar en ese plano. Entonces, necesitará de una enorme cintura política, que no parece ser una virtud que lo acompañe, para obtener los respaldos extra-partidarios necesarios para aprobar las reformas que propone.

Vengo de pasar unos días en la República Dominicana, donde vive un hijo mío hace diecisiete años y donde tengo un nieto. El país, que visito con gran frecuencia, es muy pequeño en comparación con la Argentina y con pocos recursos naturales, aunque crece a pasos agigantados. Se destaca, sin embargo, en algunos planos fundamentales: hay estabilidad económica y no hay inflación; y si bien hay pobreza, se trata de una pobreza digna, y no hay miseria, puesto que la comida está al alcance de la mano, como sucede en casi todos los países cálidos. Sobre todo, no se vive en medio de un clima de violencia social e individual como sucede aquí; nunca he visto, por ejemplo, que se produzcan enfrentamientos en la calle por meros incidentes de tránsito, pese a lo enloquecido del tráfico. Así, Ezeiza puede ser visto, así como la puerta de retorno al infierno, más que la única salida.

Locos bajitos     10-06-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 893

“El que hoy te compra con su adulación mañana te venderá con su traición”. Proverbio español

Si hubiéramos creído en las afirmaciones triunfalistas del Aceitoso y Kirchnerito, el dúo tan dinámico que se fue a China, los problemas del Banco Central y, consecuentemente, del Gobierno ya estarían solucionados. Sin embargo, nada fue cierto, mal que le pese al equipo de Massa y, en cambio, es muy probable que los costos que los argentinos deberemos afrontar para responder a las exigencias de Xi Jinping sean extremadamente gravosos.

El nivel de las reservas, que ya estaban en rojo furioso antes del viaje misional de estos aspirantes a Súper Agente 86, zapatófono incluido, seguirá cayendo en picada e impulsando la fuerte recesión que ya se percibe en las góndolas y en la restricción a las importaciones de insumos tan básicos como medicamentos. En China se les explicó claramente a nuestros enviados que deberán esperar para recibir fondos frescos reales, más allá de una pequeña ampliación del swap para importar desde China, y las negociaciones con el FMI se han demorado, a punto tal que el Ministro de Economía, con la lapicera enarbolada para firmar el adelanto de anticipos por el que ruega, ha debido postergar su periplo a Washington hasta un momento más propicio.

Más allá de los aspectos económico-financieros de la alocada diplomacia argentina, me parece necesario recordar que nada menos que Henry Kissinger, un reconocido optimista, acaba de decir en público que un conflicto armado entre China y Estados Unidos es previsible en los próximos cinco años, lapso que coincide exactamente con el establecido por Beijing para reincorporar por las armas a Taiwan, un aliado estratégico de Occidente en el sudeste asiático, a su territorio continental.

La Argentina apareció en las mesas de arena de los estados mayores occidentales en razón de la base científico-militar que Cristina Fernández permitió construir en Neuquén -con cesión de soberanía incluida- al tiránico régimen chino; imaginemos qué puede suceder ahora que el reelecto Gobernador de Tierra del Fuego, el kirchnerista Gustavo Melella, firmó un decreto por el que autoriza a empresas de ese origen, todas bajo control del Ejército Popular, un memorándum para implantar en su territorio una gran fábrica de fertilizantes químicos y un puerto multipropósito, o sea, comercial, pesquero y militar, con proyección clara hacia el Atlántico sur, el tráfico bioceánico y la Antártida.

Lo más dramático es que el próximo Gobierno, que será la cabeza de un país David flaco y consumido, se deberá enfrentar a una potencia Goliat más que robusta y fuerte, por lo cual le resultará casi imposible desarmar los acuerdos que hayan firmado estos crápulas traidores, tal como sucedió con las no prioritarias represas Kirchner y Cepernic, en el río Santa Cruz.

Ni los más serios encuestadores pueden hoy hacer pronósticos con alguna posibilidad de convertirse en realidad. Esto se debe a varios factores que convergen: la dudosa veracidad en las respuestas que obtienen; la apatía social frente a la política, o sea, el crecimiento de la abstención; la permanente sensación de ajenidad, en relación con las necesidades sociales, que los dirigentes de todos los orígenes despiertan; y la “liquidez” de las fidelidades partidarias, en especial entre los más jóvenes.

El kirchnerismo está metido en un brete del que le resultará más que difícil salir: no puede prescindir de Massa como Ministro porque, tal como dijo su mujer, si él se va sería el final (coincido) pero, para permanecer, exige ser su único candidato presidencial; a ello se oponen el resiliente no-Presidente, y Daniel Scioli y Juan Grabois, que se niegan a renunciar a sus postulaciones, y a la insistencia de la necesidad de primarias se sumaron Hugo y Pablo Moyano con treinta de sus fieles gremios. ¿Bastará el devaluado dedo de Cristina Fernández para resolver ese intríngulis?

Si hubiera varios candidatos en las primarias del Frente de Locos, quienes voten, por ejemplo, por Daniel Scioli en las primarias, ¿lo harían por Wado de Pedro en las nacionales?, ¿y viceversa? Los votantes de Horacio Rodríguez Larreta, ¿acompañarían luego a Patricia Bullrich?, ¿y viceversa? Después de la primera vuelta real, si el Frente, como se cree probable, sale tercero, ¿por quién se inclinarán la mayoría de sus electores?

Con ese juego tan abierto de probabilidades, no es en absoluto descartable que Javier Milei llegue a la Presidencia, en especial después de los daños que produjo en la intención de voto –sobre todo en Córdoba- a favor de Juntos para Qué la pretensión de Horacio Rodríguez Larreta y Gerardo Morales de incorporar al peronismo de Juan Schiaretti a la coalición, a escasos días de la presentación de alianzas y a dos semanas de las candidaturas; creo que fue un error de enorme magnitud, ya que hubiera podido intentarse hace meses y discutirse con amplitud, o esperar a que se realizaran las elecciones para sumar voluntades.

Mi mayor preocupación radica en la falta de consensos de la oposición en la Provincia de Buenos Aires, en la cual Axel Kiciloff podría obtener su reelección con sólo alcanzar un 25% de los votos. No debemos olvidar que, aunque el futuro Gobierno nacional cerrara la canilla de transferencias para domesticarlo, un eventual ahogo financiero en La Plata haría explotar al Conurbano, que está a poquísimas cuadras de la Casa Rosada, como todos comprobamos diariamente con los piquetes y acampes de las organizaciones sociales, que podrían volverse salvajes y violentos.

¿A cualquier precio?     03-06-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 892

“Una paz nunca es honrosa para el vencido”. Jean Lartéguy

Entre la enorme cantidad de nubarrones que se ciernen, amenazadoras, sobre la Argentina, la que más me preocupa es la que se deriva el viaje a China que está realizando Sergio Massa, inexplicablemente acompañado por Máximo Kirchner, el tan laborioso hijísimo bi-presidencial. La nueva humillación impuesta al auto-percibido Presidente con el estreno de la nueva y carísima joya de la flota de aviones oficiales por el Ministro de Economía y por su ex-mayor enemigo interno, constituye al mismo tiempo un irracional gesto de derroche de un Estado quebrado que va a pasar la gorra.

Superada la anécdota, vamos a lo importante. El Aceitoso y su nuevo socio turista tienen un objetivo básico, conseguir las divisas que el Banco Central necesita tanto como una transfusión de sangre, sea en yuanes, reales o dólares, que permitan coronar con éxito el famoso “plan llegar”, al menos hasta las PASO. Pero encuentran dificultades cruzadas.

La primera es que el organismo internacional, al cual se le ha pedido adelantar en junio o julio todos los giros previstos para el segundo semestre para pagarse a sí mismo, está demorando su resolución, en especial porque países importantes, como Alemania (que se encuentra en recesión) y Japón, no quieren prestar más dinero de los impuestos de sus ciudadanos a un deudor recalcitrante como la Argentina y, tampoco, logra el acuerdo de los funcionarios de su staff sobre qué porcentaje podría ser “de libre disponibilidad”, o sea, como herramienta para intervenir en los mercados de divisas local.

Es más que razonable porque, si el Gobierno argentino actúa tan irresponsablemente como siempre y dilapidara esas divisas (ingresó, durante el gobierno de los Fernández², la friolera de 110.000 millones de dólares y hoy las reservas son negativas en once mil), caería en default con el propio FMI. Y por si eso fuera poco, tanto Cristina Fernández cuanto Máximo Kirchner despotrican permanentemente en su contra, acusando al organismo de ser el único responsable de la inflación y de la recesión.

La segunda es que Brasília, tal como le explicó con sorna Lula da Silva en la cara a Alberto Fernández, no está dispuesta a prestarnos fondos sin garantía, ni siquiera bajo la forma de un swap. Para intentar obtenerla del Nuevo Banco de Desarrollo, recién creado por los BRICS, que será presidido por Dilma Rousseff, la destituida (por utilizar “contabilidad creativa” en las cuentas públicas, algo usual en los gobiernos kirchneristas en la Argentina) ex Presidente de Brasil, otorgue ese aval o un préstamo, algo prohibido por el estatuto del propio banco, se fueron a China nuestros Batman y Robin.

La tercera, y en esto radica mi mayor preocupación, es que todos los contratos de financiación que firma China contienen una cláusula específica de confidencialidad para evitar que trasciendan sus condiciones y sus tasas de interés, ambas leoninas. A simple título de ejemplo, basta señalar que Montenegro pidió un préstamo a Beijing para construir una autopista, que fue construida por empresas y con obreros chinos; cuando no pudo pagarlo, Xi Jinping se quedó con el camino; y eso mismo ha sucedido alrededor del mundo entero, donde China se ha hecho de puertos, centrales eléctricas, yacimientos de minerales estratégicos y hasta bases militares, como la que el kirchnerismo le entregó, con cesión de soberanía, en Neuquén.

Es probable que China acepte ampliar el swap, el acuerdo para pagar en monedas locales –sin usar dólares- los intercambios comerciales entre ambos países, y hasta liberar una porción del mismo para permitirle a Massa seguir postergando la devaluación que le exige el FMI, pero no será inmediato; los tiempos orientales son sensiblemente distintos a los nuestros y es difícil que se adecuen a las urgencias argentinas. Según parece el mayor logro de la carísima misión del dúo dinámico será la promesa de una empresa china de invertir US$ 1.000 millones, en yuanes, en el noroeste argentino.

Hoy Beijing tiene interés estratégico en aumentar su presencia en la Argentina, a través de la construcción de las represas Kirchner y Cepernic y de una central atómica (sería la primera para exhibir su tecnología), la administración de la esencial Hidrovía, un puerto pesquero y militar en Tierra del Fuego, la geopolítica en el Atlántico Sur y la Antártida, la concesión del sistema 5G (sospechado de espionaje en Occidente), el litio, la pesca y los alimentos, etc... ¿Cuántas y qué gravosas concesiones estará dispuesto a hacer el kirchnerismo en fuga para obtener los favores de Xi Jinping, a quien lo une además una sumisión ideológica?

¿Se puede pedir mayor patología psiquiátrica que perorar contra la Constitución Nacional y la descripción que la misma hace del Poder Judicial por ser una “rémora monárquica”, como dijo Cristina Fernández el 25 de Mayo, y a la vez adherir sin tapujos ni fisuras a dictaduras como las que encabezan Xi Jinping, Nicolás Maduro, Miguel Díaz-Canel, Daniel Ortega, Vladimir Putin o los ayatollahs? Eso es lo que hicieron, esta misma semana, tanto Massa y Máximo cuanto Alberto Fernández, acompañando a un Lula da Silva que está volando sin escalas hacia el ridículo de abjurar de su propia historia democrática.

Merece destacarse, en la reunión de Brasília que buscó dar nueva vida a la extinta UNASUR, la actitud del chileno Gabriel Boric, un claro exponente de la joven izquierda latinoamericana, quien –con el más que esperable acompañamiento del uruguayo Luis Lacalle Pou, al cual la televisión pública brasileña le censuró el discurso pero lo grabó y consiguió difundirlo por YouTube- repudió claramente el respaldo que el resto de sus colegas de la región dieron al criminal régimen venezolano.

Entre ambos, arruinaron la fiestita organizada por Lula da Silva y su Foro de São Paulo, ya que dejaron en claro que es profundamente inmoral disculpar, en nombre de una presunta ideología común, las permanentes y generalizadas violaciones a los derechos humanos, la persecución a la prensa y, sobre todo, los crímenes de lesa humanidad que comete a diario, tal como hacía su predecesor, el asesino heredero de Hugo Chávez Frías.

Bastardos apropiadores     27-05-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 891

“El castigo del mentiroso no consiste en lo más mínimo en que nadie le crea sino en que él no puede creerle a nadie”. George Bernard Shaw

Como muchos, la mayoría abrigados en sus casas y algunos miles soportando una inclemente lluvia para expresar su adoración a la diosa pagana y falsa que disertó el jueves, vi y escuché desde aquí un discurso psicótico y repetitivo que no merecería siquiera dedicarle demasiado tiempo útil. De todas maneras, la bastarda apropiación de la fecha patria con que el penoso acto del kirchnerismo, sumando en el escenario a grandes y emblemáticos personajes del terrorismo subversivo, celebró los veinte años de inmundo saqueo al que sometió al país entero, puso fuertes y denunciantes reflectores sobre el resto de los dirigentes políticos y sociales, que no fueron capaces de celebrar, como hubiera correspondido, un nuevo aniversario de la Revolución de Mayo y generar así una imagen distinta.

En resumen, su “pueblo elegido” fue defraudado porque esperaba ver a su propio Moisés bajar del monte Sinaí del Calafate con sus nuevas tablas de la ley kirchnerista en las manos, renunciando a la auto-proscripción y convertida en candidata o, al menos, enterarse de quiénes serían los favoritos (Eduardo Wado de Pedro, Sergio Massa, Axel Kiciloff, el hijísimo Máximo) para heredarla, pero tuvieron que volver a sus míseros hogares desilusionados, tan golpeados y empobrecidos por la inflación, con hambre, sin salud, sin seguridad, sin cloacas ni agua potable como antes de ir a la plaza pero, además, empapados y sin futuro.

Después de lo que pasó anteayer, resulta absurdo negar la centralidad que conserva Cristina Fernández en el universo político nacional, pero, a la vez, destacar que la desesperación que la embarga la llevó a descender aún más al barro con el lenguaje, al calificar de “mamarracho” a la Corte y gritar que la prensa independiente sólo decía “boludeces”. Y demostró, sobre todo, que los signos de interrogación de una nota –“Triste, solitaria y ¿final?”- que escribí el 25 de febrero pasado, ya resultan superfluos; las más que notorias ausencias de importantes gobernadores, intendentes, sindicalistas, etc., así lo certifican. Pero también merece ser calificada de patética, en especial cuando comenzó a llover copiosamente y simuló comparecerse de la situación de los fieles cooptados por su absurda iglesia, diciendo que le encantaban las tormentas, con sus privilegiados apóstoles protegidos bajo techo mientras que ellos se encontraban a la intemperie.

Por lo demás, si los fantásticos logros alcanzados entre 2003 y 2015 descriptos por ella hubieran sido ciertos y no un gran camelo destinado a una clientela que, para hacerla suya, debiera carecer de memoria, si los salarios y las jubilaciones hubieran sido tan altas, si había tanto trabajo, si no existía la inflación ni la deuda, hubieran sido ciertos, ¿por qué perdió su partido las elecciones presidenciales? ¿O en su mente enferma, esa derrota se debió sólo al error de designar tan malos candidatos a la Casa Rosada como Daniel Scioli y Carlos Chino Zannini, y Anímal Fernández a la Provincia de Buenos Aires? En resumen, miente descaradamente y, además, siempre elige mal a sus mariscales.

En este sentido, ruego a Dios porque quien asuma en diciembre no repita los graves errores de Mauricio Macri, que faltó el respeto a la sociedad ocultando las neutrónicas bombas que había recibido y así condenó irrevocablemente al fracaso a su gobierno, habilitando el regreso de la mafia saqueadora. Cuando quiso, muy tardíamente, por cierto, informar acerca de la realidad de la herencia maldita, esa misma que hoy reivindica la eterna sacerdotisa de la corrupción, publicó “El estado del Estado”, un mamotreto que nadie leyó y que, a esa altura, careció de sentido.

A mi modo de ver, el gran perjudicado por los dichos de la Vicepresidente es el _Aceitoso Ministro de Economía, quien para sobrevivir como candidato necesita indispensablemente de alguna ayuda externa que sostenga su “plan llegar”. De todas maneras, tampoco es que le vaya a resultar fácil acceder a la categoría de único ungido que pone como condición esencial para presentarse: además de la indomable inflación que lo golpea en la cara, La Cámpora lo detesta y Cristina, con toda razón, desconfía de él y descree por completo de la posibilidad de convertirlo en un nuevo títere. Mañana partirá hacia China con un invitado al menos raro, Máximo Kirchner, a intentar que Beijing abra una vez más la dolorosa hucha con la que abastece de yuanes a economías exhaustas, a las cuales impone condiciones tan duras y humillantes que todos los acuerdos que firma son estrictamente secretos. Después de las represas del río Santa Cruz –Kirchner y Cepernic-, el litio, una nueva central nuclear, la administración de la Hidrovía y la base militar instalada en Neuquén, ¿qué más pedirá ahora?

Al mismo tiempo, y en medio de una más que complicada renegociación con el FMI, donde Japón y Alemania no están en absoluto de acuerdo con la tolerante postura de Joe Biden con respecto a nosotros, Massa debe haber recibido como un balde de agua helada las belicosas posturas que enunció Cristina Fernández el jueves contra el organismo, cuando prácticamente propuso caer en default y lograr luego un drástico cambio en el cronograma de pagos de la deuda, vinculándolos con las exportaciones argentinas. ¿Está tan rematadamente loca como para llevar al país a una posición de no retorno y hacer explícita la tierra arrasada que quiere entregar a quien resulte vencedor en noviembre? ¿Cree, por ventura, que luego de empujar a la Argentina al abismo, llegarán a rescatarla China, Rusia, Brasil o Irán?

Mientras esa penosa comedia de enredos se desarrolla en el escenario visible para el conjunto de la ciudadanía, entre bambalinas los problemas se agudizan y el Banco Central, día tras día, se ve obligado a apretar la horca que el cepo cambiario ha colocado en el cuello de la economía real. Los depósitos de particulares, en dramático goteo, van abandonando los bancos y reduciendo, consecuentemente, los encajes que éstos deben mantener en la entidad rectora, que está indebidamente utilizando por el rango negativo en que se encuentran las reservas. La inflación de mayo, que será anunciada el 14 de junio, difícilmente se encuentre por debajo del dramático 10%, si es que no lo supera, y los pasivos remunerados –Leliqs y bonos de deuda- ya exigen, por los enormes intereses que se ve obligado a ofrecer el Estado en sus licitaciones semanales, una creciente emisión que, pese a que es reabsorbida precisamente con los mismos instrumentos, no tiene otra posibilidad que espiralizarse, mientras la actividad se sigue paralizando.

Todos los economistas que trabajan en los planes económicos que anunciará la oposición están, al día de hoy, literalmente aterrados, por las cifras publicadas porque saben que, además, encontrarán bajo la alfombra muchísimos datos negativos que ignoran y que comprometerán gravemente, con certeza, la recuperación del país. Y no deben olvidar que, para que aparezcan las esenciales inversiones, sean de argentinos o extranjeros, el principal factor será recobrar un imán fundamental: la seguridad jurídica, tan claramente inexistente durante el kirchnerismo. Tal vez, para colaborar en ese proceso, no estaría mal imitar lo que hizo Lula da Silva en 2003, cuando su llegada al poder hizo entrar en pánico a propios y extraños: constituyó un fideicomiso en garantía de los contratos, con todas las acciones de empresas privadas que estaban en manos del Estado, y lo sometió a la jurisdicción de tribunales extranjeros, con un éxito inmediato.

Milei quizás pueda, pero ¿quiere?     20-05-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 890

“Cada uno ve lo que pareces, pero pocos palpan lo que eres”. Nicolás Maquiavelo

Todos los días, en el mundo entero, se confirma el “teorema de Baglini” que, básicamente, postula que, cuanto más lejos se encuentra un candidato de acceder al poder, más radicales son sus propuestas y, cuanto comienza a percibir la probabilidad de acceder al poder, las va morigerando.

Sin embargo, un personaje tan excéntrico y enigmático como Javier Milei, pone en duda esa hipótesis. A semejanza de lo que sucedió con Donald Trump, Vladimir Zelensky o Jair Bolsonaro, según todas las encuestas podría acceder a la segunda vuelta electoral y acabar así con el monopolio absoluto que las dos grandes coaliciones, escasamente pegoteadas por su adhesión u oposición al kirchnerismo, han ejercido sobre el escenario político nacional. Esta probabilidad fue imaginada hasta por Cristina Fernández al confesar públicamente que espera un escenario de tres tercios y la consecuente necesidad de un ballotage, en cual ya no está tan segura de la participación de su fuerza política.

Desde su repentina irrupción en el horizonte de los medios, el mesiánico líder de La Libertad Avanza no ha cesado de enumerar las disruptivas y, a veces, hasta revulsivas acciones que encararía si fuera Presidente; y ahora, cuando podría estar en condiciones de triunfar –en principio, al menos, tanto los votantes del Frente de Locos cuanto los de Juntos para Qué se inclinarían por él si el candidato propio quedara excluido de la segunda vuelta electoral- no sólo no las aligera para los paladares más reactivos, sino que sigue sosteniéndolas públicamente, con gritos destemplados y malos modales.

La democracia directa vía consultas populares para suplir una segura oposición del Congreso, la fuerte reducción del gasto público, la modificación de la educación pública gratuita aplicando un sistema de vouchers, el arancelamiento de la salud en los hospitales estatales y en las residencias médicas, la gestión público(seguridad)-privada(hotelería) del sistema penitenciario, la privatización de empresas deficitarias, la derogación de la ley del aborto y establecer la protección al niño desde la concepción, el fin de la educación sexual obligatoria en las escuelas, la eliminación de subsidios, la libre portación de armas, el tráfico legal de órganos, la dolarización con o sin canasta de monedas, “dinamitar” el Banco Central, la aplicación de una política inmigratoria racional, la unificación de los ministerios de Defensa y Seguridad para habilitar a las fuerzas armadas a actuar en conflictos internos, etc., son sólo algunas de las propuestas a las que me refiero; adelanto que con muchas de ellas coincido totalmente.

Milei contradice a tal punto al mencionado teorema que resulta necesario preguntarse si él mismo, que obviamente carece de estructura territorial para apuntalar su candidatura, de un contundente equipo técnico para asumir los cargos principales de la administración pública (que, de todas maneras, se zanjaría por la vocación tan argentina de correr presurosos en auxilio del vencedor), de la cantidad de fiscales necesarios en todo el país para defender sus boletas y carecerá de un número importante de legisladores, lo cual lo obligaría a negociar permanente sus leyes, quiere llegar ahora a la Presidencia o sólo incorporar una treintena de diputados (en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires) para hacer crecer fuertemente su espacio de derecha y condicionar al próximo gobierno, reservándose (como seguramente hará Sergio Massa en sus antípodas) para el siguiente turno electoral, dentro de cuatro años.

El jueves, Cristina Fernández fue la única actriz en un show conducido por un muy reciente y fanático converso; obviamente, no se le formularon preguntas incómodas pero, aun así, después de reiterar sus muletillas habituales (los medios concentrados, el “partido judicial”, la inexistente proscripción, el FMI como único responsable de esta estanflación que nos lacera), hizo algunos guiños menos previsibles: ponderó en Sergio Massa haberse hecho cargo de la “papa caliente”, pero aclaró que en los únicos en quienes confía completamente son su tan laborioso hijo Máximo, Eduardo Wado de Pedro y Andrés Cuervo Larroque.

O sea que, tal como suponíamos, el innegablemente audaz Aceitoso,__ aún si quisiera sostener una candidatura imposible en medio del caos económico en que el demencial populismo sin dólares del modelo kirchnerista y su propia impericia nos han sumido, no podrá contar con el dedo dictador de la jefa del espacio para apuntalar sus pretensiones; éstas, por lo demás, habían encontrado un auto-límite importante en la necesidad de disputar las PASO con otros contendientes, ya que una de sus condiciones excluyentes era ser ungido como único representante del Frente de Locos.

Mucho más preocupante en el discurso de Cristina Fernández fue su deslegitimación previa al gobierno que asumirá en diciembre al cual, por estar ella “proscripta” y extender ese estado a todo el peronismo (para fundamentarlo utilizó los vetos judiciales a las inconstitucionales re-reelecciones de Sergio Uñac y Juan Manzur) negará representar al “pueblo”, tal como hicieron ya varios de sus más salvajes lenguaraces, como el ínclito asesor papal Juan Grabois o Mario Secco, Intendente de Ensenada, quienes directamente amenazaron al futuro y proyectan hacerlo saltar por los aires mientras corren ríos de sangre en las calles, en caso de que el Frente perdiera las elecciones, algo altamente probable. Me sigue sorprendiendo que ningún fiscal tenga el coraje de denunciarlos por apología del delito y por alzarse contra las instituciones, una conducta en la que ha incurrido hasta el propio Caracol que se auto-percibe Presidente.

Arde el Frente de Locos    13-05-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 889

“La pobreza no se rebela. Encontraréis situaciones de rebeldía sólo cuando la gente pobre alberga alguna esperanza”. Ryszard Kapuściński

La vertiginosa realidad no da respiro en la Argentina, y los precios de los balcones que se alquilan para asistir al espectáculo que brinda subieron bruscamente el martes, cuando la Corte Suprema de la Nación dictó una medida cautelar que suspendió las elecciones a Gobernador y Vice en San Juan y en Tucumán, en las cuales los eternos Sergio Uñac y Juan Manzur (éste ya desistió y postula a un subordinado) pretendían re-reelegirse con permiso de las respectivas cortes provinciales, siempre subordinadas al poder político local. ¿Podrían aparecer otros fallos similares ante otras candidaturas “irregulares” cuando éstas se concreten?

El Frente de Locos se incendió porque leyó esa resolución como una reacción del máximo Tribunal ante el funambulesco juicio político que tramita, sin destino, en la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados, y quedó aterrado ante otros inminentes fallos que preocupan mucho a Cristina Fernández, como la probable revocatoria de la Cámara de Casación del insólito sobreseimiento, resuelto sin hacer el juicio oral, que la benefició, con sus hijos y decenas de cómplices, en la causa “Hotesur-Los Sauces”.

El auto percibido y totalmente desdibujado Presidente, al día siguiente, emitió por cadena nacional un breve mensaje en el cual, como es habitual en él, desconoció los principios más elementales del derecho y, en algunos tramos, mintió descaradamente, mientras se alzaba contra las instituciones de la Constitución; entre otros dislates, exigió al “pueblo” salir a las calles para impedir que el supremo Tribunal ejerza el rol que nuestra carta magna le atribuye y, arrastrándose una vez más, sostuvo que su Presidente-Vice es una perseguida política, y no una corrupta condenada con toneladas de pruebas. ¿Habrá un fiscal que lo impute penalmente por haber incurrido en tantos flagrantes delitos, antes o después de dejar su cargo?

El escandaloso índice de inflación dado a conocer ayer por el INDEC (8,4% en abril), que anualizada llega ya a 150% y amenaza con espiralizarse, implica que muchos más argentinos cayeron en esta abrumadora pobreza provocada por veinte años de populismo kirchnerista (bien calculada, supera el 50%, con especial incidencia en los chicos), y que se suma a la inseguridad cotidiana que padecen, nos obliga a preguntarnos por qué no ha estallado ya una sociedad que tantas veces lo ha hecho en el pasado, sobre todo durante gobiernos no peronistas. ¿Le faltará, como chispa para encenderla, la ilusión a la que se refiere el escritor y periodista polaco en el epígrafe de esta nota o, simplemente, están en el gobierno quienes siempre han promovido la violencia y los saqueos? Más allá de exigir revisar las paritarias cada vez con más frecuencia, el estruendoso silencio de la CGT, que hizo innumerables paros salvajes a Raúl Alfonsín, a Fernando de la Rúa y a Mauricio Macri, parecería dar la razón a la segunda hipótesis.

Lo que, sin duda, determina esta medición de la depreciación de la moneda, que se acentuará en mayo por la incidencia de los incrementos en servicios públicos, alquileres, medicina privada, etc., es la definitiva muerte –salvo que llegue un improbable chaparrón de dólares de libre disponibilidad- de los sueños de Sergio Massa de convertirse en el próximo Presidente por ser el único candidato del Frente de Locos. Éste, por lo demás, a contramano de la pretensión del Aceitoso de evitar la competencia interna sin llegar a las PASO, algo que hasta Alberto Fernández resiste, todavía parece estar dispuesto a presentar matungos perdedores tales como Daniel Scioli, Eduardo Wado de Pedro, Juan Grabois, Axel Kiciloff, etc., y tampoco ha decidido aún si el trabajador Máximo Kirchner se postulará como Senador por la Provincia de Buenos Aires, si su madre sostuviera –algo por demás improbable- su auto-proscripción total, para mantener la destacada presencia de ese tan ilustre apellido en las boletas.

El domingo pasado dejó otros interrogantes que, tal vez, sólo tal vez, puedan comenzar a responderse mañana, cuando otras tres provincias bajo administraciones kirchneristas –Salta, La Pampa y Tierra del Fuego- elegirán gobernador. La fuerte derrota del candidato de La Libertad Avanza en La Rioja, pese a tener un apellido teóricamente tan convocante allí como el de Menem, mostró con meridiana claridad la falta de estructura territorial que afecta a Javier Milei y, en la medida en que exhibe su condición de líder mesiánico de un movimiento unipersonal, pone en justificado cuestionamiento su capacidad para administrar el país en caso de triunfar en noviembre. Si en Tucumán, cuando sea que se realicen las elecciones después de la cautelar de la Corte que las suspendió, y en las cuales su candidato es Ricardo Bussi, se repitiera esta penosa performance, también se pondrá en discusión su probabilidad de acceder al ballotage y la veracidad de las encuestas que señalan su desmesurado crecimiento en intención de voto, que podría transformarse en una mera expresión de protesta, sin concreción efectiva en las urnas.

Pero, a la vez, probará lo acertado de Cristina Fernández al haberlo elegido como sparring, puesto que es un fuerte divisor del voto opositor al kirchnerismo, al menos en las PASO. Un dirigente “bullrichsta”, Joaquín de la Torre, da los pasos correctos al intentar llegar a un acuerdo con el líder libertario en la crucial Provincia de Buenos Aires, pero Juntos para Qué sigue, en una actitud suicida, sin ponerse de acuerdo en una candidatura unificada y, así, pone en valor la perspectiva del Frente de Locos de retener allí el poder y transformarla en el bunker para la tan anunciada resistencia violenta contra la próxima administración nacional.

Nota N° 888

“Gran parte de las dificultades por las que atraviesa el mundo, se debe a qué los ignorantes están completamente seguros, y los inteligentes llenos de dudas." Bertrand Russell.

Hace mucho que recomiendo a mis sufridos lectores comprar cascos porque, según creía, lloverían piedras sobre esta devastada Argentina; pues bien, el momento llegó y hoy, por el fracaso ya irremediable de este adefesio inventado por Cristina Fernández para ganar las elecciones en 2019, los cascotes caen sin piedad sobre todos nosotros. El desmesuradamente audaz Sergio Massa, quien suponía contar con un enorme paraguas para evitar los golpes, ve cómo se diluyen sus ensoñaciones presidenciales al ritmo de esta tan descangallada economía que, sin pausa, reduce a la pobreza y a la indigencia a miles de nuestros conciudadanos diariamente, en especial en los bolsones en que el kirchnerismo reinaba.

La insólita actitud del INDEC al anunciar que demoraría la publicación del índice de inflación de abril hasta después de las elecciones en varias provincias y tuvo que recular en chancletas, hizo que todos supiéramos que será superior al 8% (algunos piensan en 8,8%), empujó hacia arriba la presión devaluatoria y hacia abajo las siempre presentes ensoñaciones presidenciales de Massa, que se equivocó fiero cuando pronosticó, precisamente para el mes pasado, un porcentaje que comenzaría con 3.

Hoy, esos desflecados sueños dependen de varios hechos, todos de altamente improbable ocurrencia: convertirse en candidato único del Frente de Locos (donde lo necesitan pero no lo quieren y sí desconfían); un fuerte y muy demorado anticipo de los desembolsos del FMI previstos para el segundo semestre (que estaban pactados para pagar al propio organismo, y no para intervenir en los mercados, y que los funcionarios se resisten a otorgar); la ampliación del swap con China para pagar importaciones de ese origen (las propias exportadoras lo rechazan, ya que quieren cobrar en dólares); la implementación de un intercambio compensado, en pesos y reales, con Brasil (que requeriría de una inexistente garantía del Banco Nacional de Desenvolvimiento Social); o un apoyo masivo del banco de los BRICS (tiene el apoyo de Lula da Silva a través de Dilma Rousseff, que lo preside, pero carece de consenso entre los miembros).

Mientras tanto, el Banco Central argentino, obligado por Cristina Fernández a no convalidar la inevitable devaluación, ve como se escurren entre sus débiles dedos las escasísimas divisas de las que dispone, producto del fracasado plan “soja III”, de la terrible sequía y de la notoria impericia de los operadores oficiales. Massa, siempre tan audaz pero retrógrado por carecer de herramientas financieras para reparar el casco del escorado Titanic, recurre a los mismos métodos persecutorios que caracterizaron al peronismo desde que, en su segunda presidencia, su fundador descubrió que el dinero acumulado durante los años de bonanza se había terminado.

El patoterismo del Ministro de Economía, si bien tiene mejores modales aquellos de los que hacía gala, pistola en mano, el recordado Guillermo Moreno, no se limita a los procedimientos policiales en casas de cambio y agencias de bolsa, a los aprietes de la UIF o de la Aduana y a las amenazas rimbombantes que profieren sus esbirros. También llega (tal como hizo don Néstor -q.e.p.d.- en el caso de YPF/Repsol) a la apropiación de bienes y empresas nacionales a precio vil, siempre en sociedad con algunos “expertos en mercados regulados”, que antes se llamaban Eskenazy, y ahora Vila, Filiberti o Manzano; cuando sus apetencias no son atendidas, los capitales y sus dueños deben emigrar. Es público y notorio que una de las fuentes de los ingentes recursos financieros necesarios para tales “operaciones” es la mega corrupción que impera en la zona que controla Matías Tombolini, Secretario de Comercio, dada la arbitrariedad con que se otorgan o deniegan los permisos de importación con dólares “oficiales”.

En medio de ese tétrico panorama de inflación galopante y ya clara recesión, de desaparición de la movilidad social ascendente, de pobreza y miseria, de destrucción de la educación y de la violencia generada por el narcotráfico, y de la impudicia con la que Juntos por el Cambio dirime en público sus diferencias, se recorta la figura cada vez más inevitable de Javier Milei. Coincido con una frase de Luciana Vázquez (“Las encuestas son ese género literario con el que nos entretenemos mientras llega el futuro”), pero la unanimidad entre quienes elaboran análisis de opinión en marcar el fuerte crecimiento del líder anarco-libertario hace que resulte creíble.

Ya no es para nada descartable que, en un escenario de tres tercios, poco más o menos, Milei acceda al ballotage; si eso sucede, y dado que tanto los votantes del Frente de Locos cuanto los de Juntos para Qué votarán por él para impedir la victoria del enemigo natural, es probable que el economista antisistema logre sentar sus reales en el sillón de Rivadavia. A partir de entonces, todo es imaginable: que la clara falta de equipos que lo afecta sea suplida con los que siempre acuden en malón en auxilio del vencedor, que se vea obligado a negociar con un Congreso duro, que las medidas que adopte sean resistidas con violencia en la calle, etc., etc. Una vez más, se justificará alquilar balcones.

No puedo evitar dedicar un párrafo a este mundo del revés donde un terrorista devenido Ministro de Defensa (Jorge Taiana), haya sancionado a un condecorado héroe de la guerra de Malvinas y de la recuperación del Regimiento de La Tablada (el señor General Rodrigo Soloaga), desplazándolo como jefe de los oficiales retirados del arma de Caballería, por haber cometido el imperdonable pecado de expresar su solidaridad con los militares que pagan con injusta cárcel la culpa de haber derrotado a las mismas criminales organizaciones armadas que integraba aquél canalla en la guerra civil que asoló nuestro país hasta 1990. Espero, con pocas ilusiones, que la vergüenza invada las almas de esta sociedad tan hipócrita y que, finalmente, los vientos que desatará el cambio de gobierno hagan girar las crueles veletas de los tribunales federales de todo el país, que siguen persiguiendo con saña a quienes tanto les debemos.

Al final, llovieron piedras    06-05-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 888

“Gran parte de las dificultades por las que atraviesa el mundo, se debe a qué los ignorantes están completamente seguros, y los inteligentes llenos de dudas." Bertrand Russell.

Hace mucho que recomiendo a mis sufridos lectores comprar cascos porque, según creía, lloverían piedras sobre esta devastada Argentina; pues bien, el momento llegó y hoy, por el fracaso ya irremediable de este adefesio inventado por Cristina Fernández para ganar las elecciones en 2019, los cascotes caen sin piedad sobre todos nosotros. El desmesuradamente audaz Sergio Massa, quien suponía contar con un enorme paraguas para evitar los golpes, ve cómo se diluyen sus ensoñaciones presidenciales al ritmo de esta tan descangallada economía que, sin pausa, reduce a la pobreza y a la indigencia a miles de nuestros conciudadanos diariamente, en especial en los bolsones en que el kirchnerismo reinaba.

La insólita actitud del INDEC al anunciar que demoraría la publicación del índice de inflación de abril hasta después de las elecciones en varias provincias y tuvo que recular en chancletas, hizo que todos supiéramos que será superior al 8% (algunos piensan en 8,8%), empujó hacia arriba la presión devaluatoria y hacia abajo las siempre presentes ensoñaciones presidenciales de Massa, que se equivocó fiero cuando pronosticó, precisamente para el mes pasado, un porcentaje que comenzaría con 3.

Hoy, esos desflecados sueños dependen de varios hechos, todos de altamente improbable ocurrencia: convertirse en candidato único del Frente de Locos (donde lo necesitan pero no lo quieren y sí desconfían); un fuerte y muy demorado anticipo de los desembolsos del FMI previstos para el segundo semestre (que estaban pactados para pagar al propio organismo, y no para intervenir en los mercados, y que los funcionarios se resisten a otorgar); la ampliación del swap con China para pagar importaciones de ese origen (las propias exportadoras lo rechazan, ya que quieren cobrar en dólares); la implementación de un intercambio compensado, en pesos y reales, con Brasil (que requeriría de una inexistente garantía del Banco Nacional de Desenvolvimiento Social); o un apoyo masivo del banco de los BRICS (tiene el apoyo de Lula da Silva a través de Dilma Rousseff, que lo preside, pero carece de consenso entre los miembros).

Mientras tanto, el Banco Central argentino, obligado por Cristina Fernández a no convalidar la inevitable devaluación, ve como se escurren entre sus débiles dedos las escasísimas divisas de las que dispone, producto del fracasado plan “soja III”, de la terrible sequía y de la notoria impericia de los operadores oficiales. Massa, siempre tan audaz pero retrógrado por carecer de herramientas financieras para reparar el casco del escorado Titanic, recurre a los mismos métodos persecutorios que caracterizaron al peronismo desde que, en su segunda presidencia, su fundador descubrió que el dinero acumulado durante los años de bonanza se había terminado.

El patoterismo del Ministro de Economía, si bien tiene mejores modales aquellos de los que hacía gala, pistola en mano, el recordado Guillermo Moreno, no se limita a los procedimientos policiales en casas de cambio y agencias de bolsa, a los aprietes de la UIF o de la Aduana y a las amenazas rimbombantes que profieren sus esbirros. También llega (tal como hizo don Néstor -q.e.p.d.- en el caso de YPF/Repsol) a la apropiación de bienes y empresas nacionales a precio vil, siempre en sociedad con algunos “expertos en mercados regulados”, que antes se llamaban Eskenazy, y ahora Vila, Filiberti o Manzano; cuando sus apetencias no son atendidas, los capitales y sus dueños deben emigrar. Es público y notorio que una de las fuentes de los ingentes recursos financieros necesarios para tales “operaciones” es la mega corrupción que impera en la zona que controla Matías Tombolini, Secretario de Comercio, dada la arbitrariedad con que se otorgan o deniegan los permisos de importación con dólares “oficiales”.

En medio de ese tétrico panorama de inflación galopante y ya clara recesión, de desaparición de la movilidad social ascendente, de pobreza y miseria, de destrucción de la educación y de la violencia generada por el narcotráfico, y de la impudicia con la que Juntos por el Cambio dirime en público sus diferencias, se recorta la figura cada vez más inevitable de Javier Milei. Coincido con una frase de Luciana Vázquez (“Las encuestas son ese género literario con el que nos entretenemos mientras llega el futuro”), pero la unanimidad entre quienes elaboran análisis de opinión en marcar el fuerte crecimiento del líder anarco-libertario hace que resulte creíble.

Ya no es para nada descartable que, en un escenario de tres tercios, poco más o menos, Milei acceda al ballotage; si eso sucede, y dado que tanto los votantes del Frente de Locos cuanto los de Juntos para Qué votarán por él para impedir la victoria del enemigo natural, es probable que el economista antisistema logre sentar sus reales en el sillón de Rivadavia. A partir de entonces, todo es imaginable: que la clara falta de equipos que lo afecta sea suplida con los que siempre acuden en malón en auxilio del vencedor, que se vea obligado a negociar con un Congreso duro, que las medidas que adopte sean resistidas con violencia en la calle, etc., etc. Una vez más, se justificará alquilar balcones.

No puedo evitar dedicar un párrafo a este mundo del revés donde un terrorista devenido Ministro de Defensa (Jorge Taiana), haya sancionado a un condecorado héroe de la guerra de Malvinas y de la recuperación del Regimiento de La Tablada (el señor General Rodrigo Soloaga), desplazándolo como jefe de los oficiales retirados del arma de Caballería, por haber cometido el imperdonable pecado de expresar su solidaridad con los militares que pagan con injusta cárcel la culpa de haber derrotado a las mismas criminales organizaciones armadas que integraba aquél canalla en la guerra civil que asoló nuestro país hasta 1990. Espero, con pocas ilusiones, que la vergüenza invada las almas de esta sociedad tan hipócrita y que, finalmente, los vientos que desatará el cambio de gobierno hagan girar las crueles veletas de los tribunales federales de todo el país, que siguen persiguiendo con saña a quienes tanto les debemos.

¿Qué hacemos con esta Mafia?   30-04-2023 

por Alberto A. Anselmi

Qué era peor; nuestros militares, que nos hicieron mucho daño, o nuestra Casta Política que nos llevó a esta miseria en este país con mayores riquezas terrícolas en el mundo y donde los presos son las víctimas. Parece que muchos todavía no se han dado cuenta que estamos al borde de un inmenso abismo que nos lleva a convertirnos en una Rusia, o China, o Cuba, o Venezuela, o tantos otros expuestos a una esclavitud permanente. Parecería que la mayoría de los argentinos somos brutos, porque este gobierno, antes de que los votaran, promocionaban que querían aplicar la política de Venezuela, Rusia, el comunismo, el socialismo o la izquierda. Acaso no sabíamos cómo estaban viviendo los habitantes de esos países, conde no tenían libertad para nada, no podían salir del país ni manifestarse porque los mataban por manifestarse o los hacían desparecer o metían tras las rejas. La falta de educación que tanto embrutece a las nuevas generaciones, convirtiéndolos en verdaderos robots de fácil manejo y de fácil convencimiento para conseguir sus votos. En este país de ignorantes, la solución para unas elecciones justas, para lograr un verdadero progreso y bienestar, sería el voto selectivo, o sea que vayan a las urnas sólo los que haya podido acceder a una educación que los instruya. Podría ser que los que no llegaron a supera r e l secundario no puedan votar.

Esto daría como resultado que el que vote pueda razonar, qué es lo mejor, o al menos, menos malo y así, nunca hubiéramos llegado al sufragio populista. El ser humano si no tiene educación se convierte en “Bestia” y eso significa convertirse en animal irracional, o sea sin inteligencia, sólo con poder de memoria, que comen como los perros, de la mano del amo. (un ejemplo, comer de los bolsones, o recibir un sándwich en las manifestaciones de campañas políticas, o recibiendo unas chapas, ladrillos o colchones). No somos todos iguales, somos lo que nos hacen, deberíamos tener categorías, entonces los delincuentes criminales no podrían ser juzgados con la misma vara cuando matan y al poco tiempo los liberan, debería quitarle puntos por los antecedentes, como con el registro de conducir, pero si usted mata a un asesino que entró en su casa con arma en mano o no y amenaza atacar a uno de sus hijos. Usted va preso y lo juzgan con las mismas leyes que al criminal, manifestando que el criminal estaba drogado y no sabía lo que hacía y usted consciente de lo que hacía se come media vida entre las rejas, no habiendo sido culpable. Así estamos hoy, con la Jefa de la Mafia que dejó en la miseria al país, premiando a sus cómplices, los políticos que actuaron con ella y todavía está en libertad, mientras el pobre que no pudo pagar un impuesto está preso. Lo dejo con esta pequeña incertidumbre para que piense y razone, con una mano en su corazón. Sería bueno que se produzcan esos pequeños cambios. Nos gustaría su opinión. Aquí no tiene que pagar impuestos ni coimas...

¡Qué puercas desilusiones!    29-04-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 887

“Nuestra Patria no puede albergar a unos lobos políticos que han saqueado el país”. Ryszard Kapuściński

Esta semana dejó dos fantasías frustradas: Alberto Fernández no tiró su renuncia sobre el escritorio de Cristina Fernández, y ésta aceptó que su centralidad ya es historia. El Caracol cedió el control del tablero de comando a Sergio Massa, que ya ocupa todo el horizonte y, humillado hasta la médula, soporta las trompadas discursivas que su propio espacio político no cesa de propinarle; ¿cuáles y cuán graves serán los secretos del aún Presidente que el kirchnerismo conserva y que le permiten extorsionarlo para evitar que abandone el cargo y tire por la cabeza a su Vice la responsabilidad final del naufragio?

El escuálido acto del jueves sólo pudo realizarse en un teatro; ¿se requiere mayor confirmación de la incapacidad de La Cámpora y de algunos “barones” del Conurbano de convocar a las masas y llenar plazas y avenidas? No dijeron ‘presente’ los gobernadores ni muchos intendentes importantes que, en otras épocas, hubieran corrido a postrarse ante el altar de su diosa. Lo lamentable fue que no aparecieran varios camiones celulares para transportar a tantos delincuentes facinerosos que ocupaban las principales butacas y las cámaras mostraban sin pudor.

En el escenario, la obra que se representó no cumplió con las expectativas de la militancia presente. Yo suponía que, haciendo gala de su tradicional esquizofrenia, despotricaría contra el FMI, pero se limitó a reiterar sus viejos discursos en los que atribuyó al organismo la responsabilidad de la inflación, pero, sobre todo, a ensalzar el ruinoso “desendeudamiento” que concretó su marido muerto obligándose, a una tasa sideralmente mayor, con su hoy compañero en el infierno, Hugo Cháves, con quien compartió el lucro –para ellos- del monumental negocio. La actitud suicida de Máximo Kirchner, que votó en contra del acuerdo con el FMI, no fue emulada por su madre, que es consciente de cuánto significa esa única tabla para la ilusoria salvación de su proyecto político.

En cambio, me pareció patético que escogiera a Javier Milei como nuevo sparring. Sin nombrar a Domingo Cavallo, a quien criticó sin memoria, gratitud ni piedad, ni al líder de La Libertad Avanza, mostró su profunda preocupación ante la probabilidad de que su Frente de Nadie termine tercero en la carrera presidencial; si esto sucediera, el kirchnerismo habrá desaparecido como fuerza política, aunque logre conservar la Provincia de Buenos Aires como bunker para la resistencia violenta. Cabe preguntarse, de todas maneras, a qué se debió el furibundo ascensor con el que posicionó al líder libertario como principal contendiente electoral: ¿fue pánico genuino o mera especulación política, para hacer que le reste más votos a Juntos por el Cambio? En cualquier caso, Milei debería agradecerle tal deferencia.

Sus fieles se fueron con las manos vacías porque, pese a los insistentes cánticos que lo exigían, la auto proscripta jefa no se pronunció sobre una eventual candidatura suya a cargo alguno. La señora puede ser -de hecho, lo es- casi todo, pero no se la puede comprar por tonta y, si aspirara a un cargo ejecutivo (Presidente o Gobernador, por ejemplo), correría un enorme riesgo de perder y, de ese modo, quedar a la intemperie frente a los jueces; es inminente, y sumamente preocupante, la resolución de la Cámara de Casación que podría revocar el inaudito fallo de un Tribunal Oral que resolvió absolverla –junto a sus hijos y varios cómplices- sin realizar el juicio en la causa Hotesur-Los Sauces, en la que se investigó y probó la forma en que la familia Kirchner recibía los retornos de la obra pública.

Sergio Aceitoso Massa se ha transformado en el único candidato real del Frente de Locos, básicamente por la nulidad de los otros. Pero la realidad argentina y sus mercados, aún con el FMI jugando con nuestra camiseta para evitar que volvamos a caernos del mapa y, en el camino, arrastremos a muchos otros países o nos regalemos a China a cambio de peligrosas concesiones, no creo que permita demasiadas fabulaciones presidenciales al Ministro de Economía. Es joven, es audaz pero no estúpido, sabe que tendrá nuevas oportunidades apoyado por el establishment prebendario y corrupto, experto en operar en “mercados regulados”, y no estará dispuesto a jugar tan promisorio futuro en una aventura con un final demasiado incierto.

Estuvo a nada de despeñarse cuando el dólar tocó $ 500 y, aunque retrocedió luego, nadie está dispuesto a jurar que la corrida haya terminado, o que cese la caída de depósitos en el sistema financiero. No quedan más que US$ 1.500 millones reales en el Banco Central, aptos para sólo una semana de importaciones y los diferentes cepos están provocando una recesión que ya golpea fuerte. Y abril es altamente probable que haya cerrado con una inflación superior al 8%, o sea, continúa la aceleración que, anualizada, llega al 150%.

Del famoso swap chino, restan sólo US$ 1.000 millones disponibles; y dudo que la generosidad y la paciencia del FMI habiliten el adelantamiento de los fondos previstos para el segundo semestre, como ruega Massa, porque además de la oposición de Alemania y Japón a seguir financiando nuestros disparates con el ahorro de sus ciudadanos, los funcionarios internacionales -Cristalina Georgieva incluida- estarían exponiéndose a sanciones graves a título personal.

Beto, ¡rompe!    22-04-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 886

“Hay dos clases de hombres: los que viven hablando de las virtudes y los que se limitan a tenerlas”. Antonio Machado

 

Ayer, un rastrero y humillado Alberto Fernández pateó el hormiguero y decidió, empujado por La Cámpora, el Instituto Patria y un PJ que aún confía en el dedazo de Cristina Fernández, renunciar a su precandidatura presidencial y, con ello, se transformó definitivamente en un pato rengo, un rol que nadie dejó de adjudicarle desde el momento mismo en que ella lo nominó, con un tuit, para encabezar la fórmula presidencial de este experimento que, una vez más (como cuando eligió como ingredientes de sus mágicas recetas a Julio Cobos y a Amado Boudou), falló a su diseñadora. Creo que el más sorprendido fue el arco oficialista, que no pensaba en que esa resignación se produjera con tanta anticipación.

El kirchnerismo, del cual se autopercibe coautor el auto percibido Presidente y desde su origen nacional, fue un proyecto de poder basado, como en el famoso “síndrome de Estocolmo”, en la destrucción de todos y cada uno de los pilares de una sociedad como la nuestra: educación, cultura, trabajo, mérito individual, esfuerzo, permeabilidad social ascendente, devastadora política inmigratoria, etc.. Merece que le preguntemos para qué lo hizo: ¿sólo para robar o para intentar un bastardo proyecto imperial, disfrazado de progresismo y de socialismo del siglo XXI? Lo real es que, cualquiera haya sido su intención, lo ha conseguido a través de dos décadas, y el precio que pagaremos para corregir tanto daño será aterrador.

Alberto, ahora, está buscando el teléfono de las aplicaciones de pedidos a domicilio pues sabe que, desde hoy nI siquiera le servirán un café siquiera en la Casa Rosada u Olivos, razón por la cual antes de emitir el curioso video auto celebratorio, ordenó planchar su traje azul, ya que tiene pensado, para aliviar el calvario que padecerá hasta diciembre, recorrer el mundo antes de entregar el mando. Es una verdadera pena que, además, no le haya tirado la renuncia a la Vicepresidente por la cabeza, porque eso sí que hubiera sido un gesto históricamente trascendente y, además, hubiera obligado a su dueña a optar entre asumir en directo la responsabilidad del naufragio o huir hacia un paraíso castro-chavista.

Tengo para mí que la siguiente rata en escapar será Sergio Massa, invocando una norma que obliga a los candidatos a abandonar sus cargos oficiales para no inclinar la cancha. Muy a pesar de la pésima opinión ética (“Sueños Compartidos”, su amistad con Coti Nosiglia y José Luis Manzano, su matrimonio con Malena Galmarini y sus negocios con el zar del cloro, la enorme cantidad de dinero “desaparecida” –así como el testigo que lo denunció- en el robo a su casa, y los “bolsos” que mueve la mujer de su Secretario de Estado, Matías Tombolini, la atribuida propiedad de algún campo importante en la Provincia de Buenos Aires, sus relaciones con el Fiscal Scapolan, destituido el martes por su protección a narcotraficantes, el innegable uso de inside information y miles de etcétera) tengo del Aceitoso, un apodo que merece su actitud política, lo sé suficientemente vivo tanto como para intentar no pagar por el ya inevitable fracaso como Ministro, cuanto para ensoñarse con delirios de triunfos electorales con una inflación que volverá a tocar el 8%, un dólar real a $ 442, una pobreza del 40%, un deterioro gigantesco del poder adquisitivo de salarios y jubilaciones y una recesión que ya está entre nosotros.

La semana pasada dije aquí que Luiz Inácio Lula da Silva le estaba haciendo al Gobierno Argentino, con su notorio giro geopolítico hacia Moscú y Beijing, sustentada en su visita a Xi Jinping y su recepción a Serguéi Lavrov, el canciller ruso. El FMI y la administración de Joe Biden tienen fundamentado interés en no provocar el derrumbe de la Argentina, puesto que podría contagiar a un mundo fragilizado por las guerras, frías o calientes, y por la competencia tecnológica y militar entre China y Estados Unidos, que condiciona las relaciones exteriores de todos los países y que promete extenderse por décadas. Pero, con la deserción de México y Brasil del llamado “Occidente”, nos hemos tornado, por necesidad y obediencia debida, en el país más importante de América del Sur para liderar, si eso resultara posible, una postura más amigable hacia el famoso Norte.

La relación que mantenemos con ese Norte amerita la contratación de una caravana de ambulancias para trasladar a un psiquiátrico a Cristina Fernández, que involucró a Estados Unidos en el más que sospechoso atentado contra su vida, y a Máximo Kirchner y sus secuaces de La Cámpora, que públicamente insisten en boicotear y repudiar los acuerdos financieros con el FMI, los únicos salvavidas disponibles en el catastrófico Titanic en que han convertido, intencionalmente, al país.

¿Qué candidatos presidenciables le quedan al peronismo?: ¿Massa, que no querrá postularse porque debería llegar a las elecciones con estos catastróficos números económicos?; ¿Daniel Scioli, un fracasado vocacional y un panqueque apto para todo servicio, al que habría que preguntarle por El Faro, en Carmelo, entre muchos otros escondites?; ¿Wado de Pedro, un rico pero desconocido terrateniente, a quien le juega en contra su tartamudez?; ¿Axel Kiciloff, el injustificable y costosísimo negociador internacional, que pareció estar drogado en la apertura de las sesiones ordinarias de la Legislatura bonaerense?; ¿Juan Grabois, el asesor papal, permanente okupa de propiedades privadas y violento protector de los pseudomapuches?; ¿Santiago Cúneo, un energúmeno impresentable?; ¿Guillermo Moreno, el patotero armado, carísimo falsificador de estadísticas?

Pueden seguir las nominaciones, pero, si son así de atractivas, no podrán llegar al Oscar o siquiera triunfar en Gran Hermano. El tema, como siempre, pasa por la Provincia de Buenos Aires, donde se gana –sin ballotage- por un voto y los candidatos actuales de Juntos por el Cambio o de La Libertad Avanza no parecen –según todas las encuestas, en las que descreo respalden o refuten lo que creo- tener posibilidades de arañar la absolutamente inexplicable e injustificada potencia electoral de su actual Gobernador, que ha empeorado terriblemente las cifras de educación y salud, de asesinatos y robos, de narcotráfico, de violencia y de degradación social, sobre todo en el trágico Conurbano bonaerense.

Ushuaia, 22 Abr 23

Balcones más caros    15-04-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 885

"Si la reforma es visualizada como transitoria, los afectados la resistirán; mientras que, si consideran que llegó para quedarse, se ajustarán a las reglas de juego". Juan Carlos de Pablo

El epígrafe responde, sin proponérselo, a la afirmación de Anímal Fernández: si el Frente de Todos (FdT) perdiera las próximas elecciones, correrán ríos de sangre en la Argentina, ya que, a su entender, el pueblo enfrentará con violencia los necesarios cambios políticos, económicos y sociales que deberá encarar quien resulte vencedor. Constituye un delito, tipificado en el artículo 226 bis del Código Penal, y ya ha sido denunciado ante la Justicia. ¡Qué enorme diferencia con la lección de civismo que dieron esta semana Julio Sanguinetti y Pepe Mujica en Buenos Aires!

Siempre recomendamos alquilar balcones para contemplar, desde un lugar seguro y exterior, una realidad nacional que, como espectáculo, no deja de sorprender; recordemos una frase de autor anónimo: “La Argentina es un país donde, si te vas por una semana, todo habrá cambiado; pero, si vuelves después de veinte años, encontrarás todo igual”. Pero ahora el mundo, evidentemente celoso por el éxito teatral que aquí se da, incorpora títulos alternativos para tentar a un público ansioso de novedades.

Cuando, en 2003, George W. Bush invadió Irak, invocando la necesidad de impedir que Saddam Hussein usara unas terribles armas de destrucción masiva nunca encontradas, Eduardo Galeano, desde Uruguay, sostuvo que la verdadera razón radicaba en la decisión del tirano de retirar el petróleo del mercado del dólar y transarlo en otras divisas; de haberse concretado esa medida, la economía norteamericana se hubiera precipitado al abismo, toda vez que su moneda, la más codiciada del mundo, justifica su valor en su capacidad para ser la unidad de cambio internacional y en la confianza que el resto del globo tiene sobre la fortaleza de su economía, a punto tal que le permite exportar su inflación doméstica.

Hoy, esa situación, magnificada, parece estar reproduciéndose en medio del conflicto pre-bélico entre Estados Unidos y China, ya que ésta está abandonando la divisa norteamericana para sus transacciones internacionales y, en esa decisión, parecen interesados en acompañarla sus socios en los BRICS, o sea, Brasil, Rusia, India y Sudáfrica. Si a ese panorama tan conflictivo le sumamos la penetración de China en Sudamérica, incentivada por el notorio giro que Luiz Lula da Silva ha impuesto a relación de Brasil con el gigante asiático, y las maniobras militares que llevan adelante las grandes potencias frente a Taiwan, el mundo debería también alquilar palcos.

Precisamente, el preocupante viaje que está realizando Lula a Beijing, acompañado por Dilma Rousseff, ahora Presidente del banco de los BRICS, para cerrar acuerdos constituye un inesperado favor que la casualidad le hizo a nuestro inefable Sergio Massa, que se arrastra por los pasillos de Washington para obtener los favores de la administración de Joe Biden en su relación con el FMI y, en general, con los organismos multilaterales de crédito y con los aliados internacionales de los Estados Unidos, como Arabia Saudita, que otorgó a nuestro país un crédito por US$ 500 millones para infraestructura y, mientras se aplica, sirve para aumentar las reservas.

Mientras Massa junta millas como pasajero frecuente, aunque muchas veces viaje en aviones privados de sus amigos, La Cámpora hace aquí como que se opone al acuerdo con el FMI, que fue un verdadero salvavidas que la oposición tiró al Gobierno cuando un siempre irresponsable Máximo Kirchner se negó a votarlo en el Congreso. Y digo que Lula le hizo un favor porque el vuelco de Brasil hacia China le permite a Alberto Fernández mostrarse liderando la posición pro-Estados Unidos en la región, aunque generen sonoros y complicados ruidos la base científico-militar china en Neuquén y las aspiraciones de Xi Jinping de quedarse con la hidrovía, la próxima licitación del 5G, una central nuclear y un puerto en Tierra del Fuego.

Los atronadores índices de depreciación del peso (el de marzo, 7,7%), mal llamada inflación, dieron muerte a las pretensiones de Massa de convertirse en el único candidato del FdT al cual, aun apretándose la nariz, los fieles kirchneristas votarían, en una imaginada repetición del mágico tuit con que Cristina Fernández entronizó a Alberto Fernández; pero las razones de ese entierro radican no sólo en el fracaso económico de este inventado Mandrake al cual no le quedan ya conejos vivos en la galera, sino en la justificada desconfianza acerca del cumplimiento de los juramentos de lealtad e impunidad que le serían impuestos. ¿Y si se le diera por respetar sus viejas promesas de meter presos a los corruptos y echar a los ñoquis de La Cámpora?; a la luz de lo presuntamente prometido por el auto percibido Presidente actual y, sobre todo, de la insólita capacidad del Aceitoso para sobrevivir, el agnosticismo se justifica ampliamente.

El jueves, la manifestación de los más enfervorizados kirchneristas ante el Palacio de Justicia, convocada para protestar contra la inexistente proscripción que afectaría la candidatura de su diosa, probó su incapacidad de construir nuevos liderazgos, que los lleva a implorar que ella retroceda de su histérica renuncia y autoexclusión y lo indispensable que resulta su nombre en las boletas electorales, sobre todo en la crucial Provincia de Buenos Aires, para servir como anzuelo en la furiosa pesca de votos, disputada ahora con Javier Milei, y evitarles la más que probable humillación de salir terceros en las presidenciales y, con ello, la inhumación definitiva de este prolongado y dañino capítulo de nuestra historia reciente, tan lleno de mentiras, relatos, estafas y desfalcos.

Apocalyse Now    08-04-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 884

“En días tales, la casualidad vive sus momentos más gloriosos: se convierte en la auténtica reina y señora de la historia”. Ryszard Kapuściński

Pese al dolor que naturalmente invade a su familia, sólo fue uno más de los que todos los días sufren los más pobres, pero el asesinato de Daniel Barrientos, un conductor de colectivos en La Matanza, parece haber sido la gota que derramó el vaso de la angustia generalizada que, sin fisuras, reina en los conurbanos de todo el país; La inseguridad es allí algo todavía más preocupante que la inflación, pese a que ésta destruye a la sociedad hasta sus cimientos, en especial porque es debajo de la pirámide donde más hiere.

Cuando a ese sangriento episodio se sumó la reacción destemplada y violenta de Sergio Berni y Axel Kiciloff, que apelaron al sempiterno complot opositor-sinárquico en contra del proyecto nac&pop que fingen encarnar, la indignación siguió subiendo y los espontáneos coparon titulares y redes. Y estalló definitivamente cuando se montó un operativo swat digno de una película de clase B para detener a trabajadores, presuntos agresores del patético Ministro que se autopercibía Superman.

Cristina Fernández, demostrando una vez más la desconexión con la realidad que la afecta, se fue a la banquina cuando comparó la tragedia real con el sospechoso atentado del que fue objeto: “tuve más suerte que él, porque no salió la bala”. A pocos meses de las cruciales, fue un torpedo que abrió un enorme rumbo bajo la línea de flotación del Titanic en que se ha convertido ya el Frente de Todos, un tremendo agujero por el cual se fugan, en tropel, los votos de sus enclaves más fieles, que han dejado de ser interpretados por el peronismo; cada vez se justifica más calificar a este proyecto de populismo saqueador como triste, solitario y final.

Volando por debajo del radar ciudadano -un penoso remedo de las hazañas de nuestros gloriosos aviadores en Malvinas-. que sólo registra las cotidianas aflicciones personales que nos tienen a tan mal traer, la maltrecha Argentina sufrió en las últimas semanas los monumentales bombazos que llegaron desde los tribunales de Nueva York y de Londres. Las sumas comprometidas son de tal magnitud que, prácticamente, equivalen a nuestra secular deuda con el FMI.

Sin duda alguna, las causas eficientes de semejante desastre son la soberbia y la impunidad del kirchnerismo, pero, sobre todo, la manifiesta incapacidad de quien sueña con ser reelecto como Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, el mismo que, como Ministro de Economía de la emperatriz del Calafate, negoció tan ruinosamente con Repsol, con los holdouts y con el Club de Paris y falsificó las estadísticas para esconder el crecimiento del PBI. Aunque las decisiones políticas no sean justiciables, la Argentina alguna vez debería responsabilizar personal y patrimonialmente a quienes la representan mal y le infieren tantos e irreparables perjuicios.

El FMI, una vez más, se puso anteojeras para revisar el cumplimiento de las metas fijadas en los acuerdos de refinanciación y, de esa manera, abrió nuevamente su generoso bolsillo, fingiendo no notar la inventiva de Sergio Massa y su equipo de mentirosos que, con tanta eficacia, hacen “contabilidad creativa”. Aunque no constituyó una sorpresa, el Aceitoso sacó de su inagotable galera otro conejo muerto, ahora denominado “soja III”, que permitirá a algunos sectores del complejo agro-industrial vender al Banco Central sus dólares a $ 300, para lo cual el Gobierno nuevamente deberá imprimir centenares de miles de millones de papelitos de colores, dando nuevo impulso a la incontrolable inflación.

Aclaro que no creo en las supuestas informaciones que proporcionan las encuestas porque muchas empresas, todavía lejos de las elecciones, dicen lo que sus clientes quieren y pagan y luego, más cerca, las ajustan para no comprometer su prestigio, porque todas dan cuenta de un enorme porcentaje de entrevistados que se niegan a responder y porque nadie sabe a qué numero llegará la abstención, expresión clara del hartazgo social.

Hace algunas semanas, en esta columna enumeré los tres escenarios en que se desarrollará un ya casi seguro ballotage: 1) Juntos por el Cambio (JxC) vs Frente de Todos (FdT); 2) Javier Milei vs FdT; y 3) JxC vs Milei. Hoy, si bien los tres siguen claramente vigentes, el resultado final se ha modificado dado que, si bien los dirigentes de las coaliciones siguen recitando el viejo mantra “el que gana gobierna y el que pierde acompaña”, no es seguro que los votantes obedezcan a las cúpulas partidarias; así, el comportamiento final de los electores seguirá siendo una incógnita.

Me refiero, por ejemplo, al caso en que se diera la variante 1; ¿por quién optarían quienes apoyaron a Milei en la primera vuelta?, ¿sería lo mismo para ellos que fuera candidato del FdT Daniel Scioli, Wado de Pedro o algún nuevo invento de Cristina Fernández, y Patricia Bullrich u Horacio Rodríguez Larreta, en JxC; y así hasta el infinito. En especial porque, en medio del fracaso del Gobierno en todos los campos, ya no parece tan disparatado imaginar que el FdT pueda resultar tercero.

Como se ve, el final sigue abierto y, por la sensación de fatalidad que impera en el ánimo de todos los dirigentes del oficialismo ante la inminencia de una bestial y previsible paliza en las urnas, nada resulta descartable en el futuro, por muy trágico que pueda resultar dados los antecedentes que exhibe el peronismo en su historia. Mientras tanto, feliz Pascua de Resurrección, Jag Sameaj Pésaj o Ramadan Mubarak, según sea su creencia.

Un Club Raro   01-04-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 883

“Nunca pertenecería a un club que admitiera como miembro a alguien como yo”. Groucho Marx

La semana pasada, en ocasión de la reedición de la estafa kirchnerista de los derechos humanos, Cristina Fernández volvió a insistir con su inventada proscripción para movilizar a sus soldados (“luche y vuelve” por quien nunca se fue sino que, en ese momento, ejercía la Presidencia) y motivarlos a sacar de la mochila sus bastones de mariscal para generalizar el operativo clamor; lo hizo desde una tribuna que compartió con sus socios del Club del Lawfare: Evo Morales, Rafael Correa, Luiz Lula da Silva, etc.; la excepción fue José Pepe Mugica, que nunca fue acusado de ladrón.

Para desazón de la emperatriz del Calafate, presentaron solicitudes de admisión a ese extraño club otros candidatos (Benjamín Netanyahu, Donald Trump y Jair Bolsonaro), que sufren la perversa persecución de la ley, de los jueces y de la prensa libre. Si fueran rechazados podrían quejarse al INADI por la discriminación sufrida, pero, si fueran aceptados, ¿utilizarán el argumento del inmortal Groucho para negarse a ingresar? Sería razonable, porque los miembros originales no podrían ser peores. El espíritu de nuestra emblemática condenada por corrupción sufrió un golpazo al saber que legisladores norteamericanos pidieron para ella sanciones personales y pecuniarias que, de ser dispuestas por el Congreso, confirmarían que se trata de una paria internacional; rápida, acusó al “norte” de ser cómplice del “partido judicial y mediático” que la acorrala.

Ayer la saqueada Argentina fue víctima, una vez más, de la rapacidad de la alegre banda creada y dirigida por don Néstor (qepd). La Juez Loretta Preska falló, como era previsible, a favor de Burford por la “nacionalización” de YPF. Sostengo, como tantas veces lo he hecho en estas notas desde entonces, que oculto detrás de ese “fondo buitre” están los Eskenazi, que “compraron” el 25% de la empresa petrolera sin poner un dólar e hicieron perder a nuestro país el autoabastecimiento energético, y que la siniestra familia era sólo testaferro del muerto y de su viuda; ahora, si otras instancias confirman el fallo, Cristina, Máximo y Florencia Kirchner embolsarán una bonita suma que podría llegar a los US$ 20.000 millones, y cuando lleguen los embargos, lo de la Fragata Libertad será una pavada.

Mauricio Macri, con su previsible renuncia a cualquier candidatura en octubre, pateó con fuerza el hormiguero del Frente de Todos el cual, en un juego de espejos de la actitud de Cambiemos entre 2015 y 2019 –una especulación bastarda, la califiqué entonces-, lo había elegido como sparring. Sin él en el campo de juego, se cayó como un piano la famosa apelación kirchnerista -“Ah, pero Macri”- que tanto le rindió entre sus obnubilados seguidores. Ahora, el FdT deberá reacomodar su discurso y, además, tratar de contener la fuga de voluntades que se percibe diariamente en gobernadores, intendentes y legisladores.

Las cifras de pobreza (39,2%) e indigencia (8,1%), con marcado incremento en los chicos (54%), divulgadas el jueves, y pese a que corresponden a fin de 2022, sumadas a las que se refieren a la confianza en el Gobierno (UTDT), no sólo dan cuenta del fracaso de la presente administración sino que no reflejan la verdad de lo que sucede hoy, con los tres meses en que hemos convivido con una creciente y ya desmadrada inflación; cuando se dé a conocer el índice de inflación de marzo –superior al 7% y cercano al 8%- se verá que las cifras son mucho más dramáticas.

La imposibilidad de revertir la caída hacia el abismo, a pesar del inusitado apoyo que recibe de un FMI aterrado ante la posibilidad de que un default generalizado de la Argentina agrave la crisis en que vive el mundo, hace que Sergio Massa se vea obligado a renunciar a su sueño presidencial, como sucedería con cualquier Ministro de Economía que deba mostrar un panorama parecido y hasta sus eternos socios, los poderosos kirchburgueses “expertos en mercados regulados”, lo han comenzado a abandonar. Su destino está atado a que Alberto Fernández termine su período constitucional sin que todo salte por el aire, pero sabe que la verdadera lluvia ácida llegará entre las PASO y las generales. Se autopercibía Mandrake hasta que se murieron todos los conejos de su galera

Las absurdas comparaciones de Javier Milei con Adolf Hitler, que hicieron en una llamativa coincidencia SS Francisco, que siempre confirma su lealtad al peronismo, y Alberto Fernández, pueden dar lugar a algunas especulaciones: ¿está preocupado el FdT ante la probabilidad de salir tercero en las elecciones por la debacle económica?, ¿prefiere su triunfo a la alternativa de un candidato de JxC vencedor? En cualquier caso, siendo La Libertad Avanza un partido casi personal e imaginando que ganara en el ya seguro ballotage, ¿cuántos gobernadores tendría, cuando ya 16 provincias separaron sus elecciones?, ¿cuántos legisladores obtendría en la primera vuelta?, ¿podría gobernar en soledad o debería buscar una alianza para hacerlo?; si así fuera, ¿con quién buscaría una concertación?

La semana pasada apelé a la racionalidad de Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza para que, mediante un acuerdo en la crucial Provincia de Buenos Aires, impida un eventual triunfo del candidato del FdT (¿Axel Kiciloff o la propia Cristina Fernández?), que la convertiría a su territorio en un peligroso foco de resistencia. Alguien me dijo que no me preocupara puesto que, si el Gobierno nacional le cerrara la canilla de las transferencias del Tesoro, la Provincia estallaría; olvidó que, si esa explosión se produce, lo haría primero en el terrible y empobrecido Conurbano, a escasos metros de la Casa Rosada.

Las mentiras de la Iglesia sobre Brochero  29-03-2023 

por Alberto A. Anselmi

Ya se ha convertido en una costumbre de algunos miembros de la Iglesia de mantener escondidas las pruebas, como en el caso del testamento realizado por nuestro Santo poco tiempo antes de morir, el propio Arzobispo Monseñor Juan Guillermo Durán, historiador oficial sobre la causa de Brochero y defensor del Testamento del Cura Brochero. Durán ya nos había informado sobre la verdad del ocultamiento y la no difusión del testamento por parte de la Iglesia Católica Esta misma Iglesia le negó a nuestro Santo se cumpliera su propia voluntad de ser sepultado en el cementerio de Santa Rosa del Río Primero, su pueblo natal, por no desprenderse de los restos secuestrados en el templo de Villa Cura Brochero por los beneficios económicos que esto le brindaría y que los habría llevado a esconder el Testamento Real, firmado el 15 de noviembre de 1910, a muy pocos años antes de su muerte.

A partir de unos apuntes que, amablemente, nos facilitara el 21 de marzo de 2014, el Pbro. Dr. Juan Guillermo Durán, Miembro de la Academia Nacional de Historia, intentaremos una semblanza del Cura Santo. Elegimos comenzar por el final, su Testamento, quizás por aquello de que las vidas contempladas desde el final, la muerte, adquieren la nitidez de la peripecia terminada.

Otra especulación fue con el nombre “Cabalgatas Brocherianas”, creada y registrada por la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero” permitiendo que lo usara como su titular el especulador Daniel Aprile, mencionando falsamente que tenía todos los derechos reservados sobre su titularidad. La Iglesia lo seguía usando hasta que la Justicia la intimó para que dejara de usar esa denominación perteneciente a la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero” Que fuera presidida por el gran altruista, Dr. Oscar Raúl Sasso y a quien le debemos casi todo lo descubierto sobre lo recorrido y la construcción de los caminos de herradura, relevados en su totalidad por el Doctor Sasso, con la gran ayuda de la Universidad de Córdoba y su Cátedra de Geodesia. Y lo acompañaba también el Ejército. Cabe destacar que las tareas realizadas por la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero” estaban basadas en el trabajo de Canonización del Cura Brochero (Positio Supervirtutibus) autoría del Presbítero Dr. Carlos Heredia. Para mayor información visite la página web https://www.cabalgatabrocheriana.com.ar/

Lamentablemente hemos perdido a esta persona tan poco reconocida por la Iglesia.

Al perder su vida Sasso hemos perdido el emblema de la sabiduría y la dedicación por la vida de nuestro grande, José Gabriel del Rosario Brochero y así que todos puedan acceder a la verdad y el ejemplo que nos dejó, importándoles, más que nada que los malos cambien trabajando para lograr ser hombres de bien, a tal punto que en la cárcel San Martín, donde con nuestro equipo hemos descubierto que nuestro Cura había estado allí y le brindaba ejercicios espirituales a los presos en esa cárcel, fue tan generadora de educación y buena voluntad que los mismos detenidos pedían al Gobernador (tenemos sus cartas de solicitud) que en todas las cárceles se dieran esos ejercicios que habían cambiado su vida para bien.

Todo esto fue descubierto por nuestra querida historiadora Carina Villafañe Batica, quemándose las pestañas en los Archivos Provinciales hasta el Eureka final de tan noble tarea. Carina también descubrió, trabajando además para nuestro Periódico, el Testamento de Brochero, al que hizo certificar y oficializar como verdadero, para entregárselo al Intendente de Santa Rosa del Río Primero.

No es necesario mentir para destacar a Brochero, con intereses foráneos y mezquinos, siempre pensando en más y más dinero, ahora con la tremenda mentira de que Brochero andaba por esos caminos de Villa Benegas, cuando ya se comprobó que es una gran mentira, que no hará bien al Santo, pero sí le brindará beneficios a esta casta. Sucedió que cuando el noble Sasso recorría las estancias, le permitían abrir las tranqueras y pasar, porque fueron los caminos de Brochero y porque Sasso, con el mayor de los respetos, obligaba a los cabalgantes de la “Cabalgata Brocheriana” a cuidar y mantener limpio los lugares que recorrían, pero cuando Aprile empezó a llevar a sus grupos que daban miedo, ensuciando y quemando árboles para hacer asados, tirando deshechos de comidas y emborrachándose, porque a ellos les permitían llevar vino y hacer escándalos y peleas entre ellos, hasta que los dueños de las estancias se cansaron y dijeron ¡Basta! Prohibiéndoles las entradas a sus predios, donde pasaba el Santo Barón.

Pero esos maleantes que entraban a los poblados mostrando las damajuanas vacías, borrachos y pidiendo vino, mientras la gente los miraba con terror.

Entonces, ni lerdos ni perezosos, pensaron en el camino, hoy bautizado como Del Peregrino y que les permitía circular por una ruta ahorrando cerca de 19 Km. Y recorriendo más de medio día menos de cabalgata y encima podían comercializar sus productos pasando libremente con camiones y Tafics y hasta volvían con medias reses que les regalaban y en vez de dárselas a los peregrinos se las guardaban o comercializaban.

A partir de esa instancia, fue que, en complicidad con el propio gobernador y la curia, decidieron inventar que por allí pasaba José Gabriel; gran beneficio para sus usufructos que ahora que patentaron todo lo que llevara por nombre Brochero, para así poder recibir también todos los beneficios de adornos o símbolos, referente al Cura Santo (pero al nombre “Cabalgatas Brocherianas” no pudieron).

Y también fue mentira que habían decidido cambiar el nombre a la Cabalgata Brocheriana, con motivo de la Santidad del Cura Gaucho. Pero mienten que fue por ello, sino porque la Justicia los condenó y amenazó a no usarlo porque estaba registrado a nombre de la verdadera Cabalgata Brocheriana o sea a nombre de la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero”, cosa que le ocurrió a otro malviviente y tramposo que no sólo lo usaba, sino que decía y publicaba que él tenía todos los derechos reservados. Míralo a don Aprile. Bueno quién no lo conoce…

Y el Dr. Oscar Sasso no quería denunciarlo porque Sasso no pretendía hacerle daño a nadie, pero a mí que escribo, me tocó imponerme, en ese sentido, para que lo haga, no sólo por mí, sino para todos los que participamos en esta misión desde el primer día, hace 26 años. Y el Dr. entendió que lo tenía que hacer en defensa de todos los que trabajamos, sólo por el interés de este trabajo santo para descubrir la verdad. Y bien que la descubrimos como que por el camino de Villa Benegas nunca jamás cabalgó Brochero, porque era imposible, al no existir ese camino cuando Brochero todavía no estaba enfermo e imposibilitado para salir a cabalgar luego.

El ex Obispo de Cruz del Eje, Santiago Olivera fue uno de los inventores de estas mentiras, ya se sabe que no fue trigo limpio y cuando me tocó entrevistarlo en el predio de la nueva Capilla de Brochero, cuando le dije que le había mentido a los fieles al decirles que por ahí había pasado Brochero y ese engaño hizo creer que era verdad y la gente al entrar al camino se arrodillaban para besar la tierra pensando que era cierto que nuestro Cura Santo había pisado ese suelo. Olivera me prometió que esa misma tarde al llegar la caravana a Giulio Césare, les iba a decir que Brochero no había pasado por allí. Cuando me lo dijo, estaba presente el Diácono Lasalla y el Secretario de la Asociación “La Vuelta del Guerrero, Luis Heredia. Doy Fe.

La última infamia ha sido darle similitud al Camino de Santiago de Compostela con el Camino del Peregrino. El gran papelón y mentira del que el mundo se reirá luego.

El pánico y los sapos  25-03-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 882

“El miedo mata más personas que las guerras”. George Patton

El estruendoso silencio del kirchnerismo ante el último manotazo de ahogado perpetrado por Sergio Massa que, al incluir el mítico Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), detonó una centrífuga sangría de votos del Frente de Todos (FdT), prueba que el terror a que todo explote antes de las PASO supera a la repugnancia que siente ante la sopa de sapos que está obligado a deglutir, y de la cual el arreglo con el FMI es un ingrediente esencial. Fue habilitado por un ilegal (porque el Congreso está funcionando) y sospechado de corrupción decreto de necesidad y urgencia del autopercibido Presidente.

Si bien el FGS es nada más que una entelequia, puesto que el pago de las jubilaciones y pensiones no depende de él sino del Tesoro, tiene un valor simbólico y universal mucho más fuerte que el que tuvieron las AFJP’s, antes del saqueo que concretaron Cristina Fernández y Amado Boudou sobre sus activos, en dinero y acciones; con éstas en sus manos, pudieron sentar a sus más fieles cómplices en los directorios de las grandes empresas.

Por la reacción de los mercados, medida por el fuerte aumento del riesgo-país y más allá de la favorable acogida que tuvo el zarpazo entre los bancos por el buen negocio que significó para ellos (otro sapo sumado a la sopa), no parece que el nuevo conejo salido de la galera de Massa tenga una razonable expectativa de vida; mucho menos en medio de la tormenta que se ha desatado en el mundo por la caída de grandes bancos en Estados Unidos y Europa, que no tiene visos de escampar a corto plazo.

En cambio, sí podemos tener la certeza de que las esperanzas del Ministro de Economía de ser el candidato de un FdT hipotéticamente unificado, ya naufragaron sin remedio y hasta el círculo infernal de los empresarios “expertos en mercados regulados” lo ha abandonado. Los 800.000 nuevos jubilados sin aportes logrados por La Cámpora no podrán compensar el drenaje que la pesificación forzada de los bonos producirá sobre las voluntades que acompañan al kirchnerismo, ya escasas como probó la pérdida de 40% de los votos entre 2019 y 2021. Creo que ese casillero será ocupado por el optimista Daniel Scioli, otro sapo difícil de digerir, pero siempre disponible para cualquier derrota.

El imparable derrumbe del poder adquisitivo de nuestra moneda encenderá nuevas llamaradas cuando se difunda el índice de precios del corriente marzo, que ya todos imaginan más cerca del 8% que del 7%. ¿Hasta cuándo resistirán los sectores más pobres el feroz impacto de la inflación?, ¿seguirán las masas calladas frente a la miseria creciente?, ¿en qué se han transformado las raídas banderas de la justicia social que el peronismo enarbolaba?, ¿con qué falso relato intentará seducir a la ciudadanía, harta de la inseguridad, de la corrupción y de la falta de futuro? Hoy, en la Argentina, es difícil que los votos acompañen al oficialismo tan sólo porque Néstor Kirchner pudo hacer populismo con dinero, tanto como que la actual fidelidad al peronismo se sustentara en las máquinas de coser y en las bicicletas que regaló la Fundación Eva Perón a sus abuelos.

La tristeza, la soledad y la finitud de Cristina Fernández se agravaron esta semana por la deserción de varios aliados, que deja a sus súbditos en minoría en la crucial Cámara alta. Ya no resulta segura para ella la protección de los fueros a los que accedería de resultar electa Senadora en noviembre, como bien puede explicarle Julio de Vido, que fue preso tan pronto le soltó la mano. ¿Escuchará el aún nonato operativo clamor de quienes pretenden que vuelva de su histérico renunciamiento a ser candidata a algo?, ¿optará, quizás, por postularse a la Gobernación de la Provincia de Buenos Aires?

En medio de la desolación que hoy muestra el FdT, derivada del famoso apotegma que dice que “el peronismo te acompaña hasta la puerta del cementerio, pero no se entierra contigo”, y dando imprudentemente por sentado que, como consecuencia, Juntos por el Cambio (JxC) ganará la Presidencia, cabe centrar nuestra atención en la esencial Provincia de Buenos Aires. No sólo se trata de la región con mayor y más salvaje concentración de pobreza e indigencia y el gran mercado del narcotráfico (sin olvidar que Rosario sigue batiendo records de muertos por la violencia asociada), sino que es el territorio soñado por el kirchnerismo para reunir a la tropa para la resistencia al próximo gobierno nacional.

Si JxC no consigue unificar una lista a Gobernador con La Libertad Avanza, el espacio del creciente Javier Milei, y dado que allí se gana por un solo voto, es altamente factible que el FdT pudiera lograr la victoria, sea con un reelecto Axel Kiciloff, sea con Cristina Fernández como candidata, con el enorme peligro que, para la gobernabilidad de los próximos cuatro años, eso significará. ¿Es inimaginable que, ante el inevitable ajuste de la macroeconomía que deberá poner en marcha quien resulte elegido Presidente, sean fogoneadas acciones violentas, como saqueos, apedreamientos, cortes de rutas, huelgas salvajes, etc.?

La historia grande de la Argentina no perdonará a quienes, por mirarse exclusivamente el ombligo, permitieran que tamaña catástrofe se hiciera realidad, justo cuando parece probable que podamos dar vuelta a nuestra prolongada decadencia nacional, aunque el camino resulte doloroso y empinado y el horizonte esté aún muy lejano.

Canallas de Exterior 18-03-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 881


“Puede haber en la oposición halcones y palomas, pero ninguna de esas aves plantea romper el sistema institucional ni crear una hegemonía”. Jorge Fernández Díaz

 

El kirchnerismo, priorizando siempre la ideología a los intereses nacionales, lo volvió a hacer. No bastaron los problemas que generó al intervenir en los asuntos internos de Chile (por la repudiable conducta del Embajador Rafael Bielsa y por el asilo al asesino Galvarino Apablaza), de Bolivia (por el apoyo al ex Presidente Evo Morales en el golpe contra Jeanine Añez), con Uruguay (por la radicación allí de las pasteras, que huyeron de Entre Ríos por las coimas que pedía el ex Gobernador, Jorge Busti) y hasta con Brasil (por la visita en la cárcel a Lula da Silva).

 

Ahora, por la complicidad criminal y política que existe –siempre con el invento del lawfare- entre Cristina Fernández y Rafael Correa, condenado por corrupción y fugado, hizo estallar la relación con Ecuador. En nuestra Embajada, a cargo de Gabriel Fuks, se refugió una ex Ministro, María Duarte, con sentencia firme en la misma causa del ex Presidente. Alberto Fernández pidió el salvoconducto para permitirle salir del país invocando falsas razones humanitarias, y Guillermo Lasso se lo negó fundado en los acuerdos que vinculan a ambas naciones.

 

Entonces, Duarte se esfumó y reapareció “milagrosamente” en la Embajada argentina en Venezuela, a cargo de Oscar Laborde, quien “por casualidad” había estado visitando a su colega de cargo y militancia Fuks. Escapó en un auto con inviolable patente diplomática, y las sospechas se agravan porque nuestro Embajador había pedido retirar la custodia policial y apagar las cámaras de seguridad. Pero no terminó allí la cosa, ya que el Caracol y el tan habilidoso Ministro Santiago Cafiero descaradamente mintieron en sus conversaciones con Lasso y con Juan Carlos Holguín, su Canciller. Resultado: Fuks fue expulsado y, en represalia, Argentina hizo lo mismo con Xavier Monge Yoder, Embajador ecuatoriano aquí.

 

Volviendo al escenario interior, la repugnancia que me produjo el juicio a militares que actuaron en 1975 en el Operativo Independencia y la coetánea sentencia que habilitó a las hijas de Mario Roberto Santucho, el asesino jefe del ERP, a cobrar una multimillonaria indemnización (lo describí en mi última nota), se agravó. Y no podía ser menos, ya que no quedan ex coimeros kirchneristas presos: el ladrón Ricardo Jaime, con montones de causas por corrupción y responsable de los 51 muertos de Once, fue excarcelado por infantiles razones de salud, mientras agonizan en las mazmorras de esta hipócrita sociedad muy ancianos soldados, a los que el sistema carcelario no puede brindar la más mínima atención gerontológica.

 

El anuncio de un índice de inflación del 6,6% para febrero (102% anual), y las estimaciones del mercado que la establecen superior al 7% -tal vez, cercana al 8%- en marzo, entierran los delirios de Sergio Massa, que se imaginaba ungido por Cristina Fernández y financiado por tantos empresarios “expertos en mercados regulados”, socios del Ministro en el saqueo y, quizás, hasta por los cárteles interesados en renovar sus vínculos con la política. Pese a que ella carece de candidatos competitivos, jamás confiaría en el Aceitoso puesto que éste, como todo heredero, podría rebelarse y cumplir sus viejas promesas de echar a los ñoquis de La Cámpora y meter presos a los corruptos (¿se auto denunciará por los muchos negociados que describió Carlos Pagni el jueves en La Nación?); coincidiría con el Caracol, que dijo pretender terminar con veinte años de kircherismo.

 

Hasta ahora, probando así la autoría intelectual de quienes, en 2001, obligaron a Fernando de la Rúa a renunciar, no ha habido asaltos a los supermercados ni estallidos violentos, a pesar del 50% por ciento de pobreza y del hambre imperante. Pero la desmadrada inflación está poniendo a la sociedad en grado de ebullición, como lo muestran la intemperancia con que reacciona cotidianamente en la calle y las espontáneas puebladas motivadas por los prolongados cortes de luz. El peronismo territorial está perdiendo la crucial batalla por el control social de los barrios carenciados y cediéndole ese puesto a los narcotraficantes, que dispensan justicia en los conflictos entre vecinos, dan trabajo y dinero a los jóvenes ni-ni, reparten alimentos y ejercen el monopolio de la violencia.

 

Las declaraciones que formuló el viernes el ridículo Senador Oscar Parrilli fueron intimidantes para el futuro institucional. Ese perro faldero de Cristina Fernández afirmó que, si su dueña no fuera ¡absuelta! antes de las elecciones en la causa que la condenó por concretar el mayor robo de la historia, quien resulte victorioso carecerá de toda legitimidad; o sea, amenazó a la República con nuevas andanadas de piedras y con el resurgimiento del terrorismo que, por lo demás, ya está presente en el territorio nacional, como bien saben en Villa Mascardi y El Bolsón.

 

Salvo que “convenzan” al subnormal Axel Kiciloff de aspirar a Presidente, ese puesto lo ocupará Daniel Pichichi Scioli. y Cristina Fernández de Hotesur reculará en chancletas de su auto proscripción para ser electa Senadora por Buenos Aires y conservar así los fueros que gozan tantos miembros del H° Aguantadero. Descreo de una postulación de Mauricio Macri, a quien veo sólo con intención de ser el “gran elector” de Juntos por el Cambio, e imagino que, en las PASO, competirán dos fórmulas, con Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta, cada uno acompañado por una figura de la UCR. La incógnita sigue siendo qué hará y qué suerte correrá Javier Milei; hasta ahora, no abre a la política su discurso, centrado en unas exóticas propuestas económicas, y a quien no se le conocen equipos técnicos ni candidatos provinciales, además de carecer, al menos por el momento, de un partido nacional para sustentar su candidatura.

Varas Repugnantes 11-03-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 880

 

"Cuando la patria está en peligro se recure a Dios y al soldado, cuando el peligro pasa, Dios es olvidado y el soldado … juzgado"

 

No he podido leer aún –tiene más de 1600 páginas- los fundamentos de la sentencia que condenó a Cristina Fernández a seis años de cárcel por el sideral saqueo (muy superior al monto señalado en el fallo) al que sometió a su propio país y, sobre todo, a los más pobres de sus coterráneos. De todas maneras, me obligó a reflexionar sobre otras situaciones que se dieron, por casualidad, esta misma semana; por ejemplo, la mayor pena (ocho años) impuesta a Enrique Blaksley por una estafa a privados, que alcanzó un volumen infinitamente menor, y a tantos otros delincuentes comunes.

 

Los fondos robados durante 17 años por los Kirchner (según Lilita Carrió, iguales a un PBI), que hoy sueñan en paraísos fiscales o, convertidos en diamantes en Angola, en cajas de seguridad de todo el mundo, son los que faltan en escuelas, hospitales, agua potable, salarios, viviendas, energía, puertos, caminos reales (no los de Lázaro Báez), armamento y elementos de movilidad y protección para las fuerzas de seguridad, tribunales y fiscalías, etc. Es decir, en todo aquello que nos convierte en un país del tercer mundo, ya capturado por el crimen organizado, cuyos enormes beneficios también ingresan, por la asociación que mantiene esta familia de canallas con la mafia; al respecto, recomiendo escuchar este esencial y breve reportaje: https://www.youtube.com/watch?v=OvBl6qFbsWU.

 

Pero dos hechos me produjeron asco e indignación. El primero: la Sala V de la Cámara Contencioso Administrativo Federal –Dres. Treacy y Gallegos Frediani- firmaron una escandalosa sentencia que concedió a las hijas de Mario Roberto Santucho (el asesino jefe del ERP que quería fusilar a un millón de personas), el derecho a cobrar una monumental cifra por la muerte de su padre, a la cual sumarán las que percibirán por haberse fugado a Cuba. O sea, continúa la estafa con esas indemnizaciones (US$ 3.500 millones) que denunció José D’Angelo en el libro cuyo acto de presentación fue prohibido por Cecilia Moreau, Presidente de la Cámara de Diputados, en un repudiado acto de censura.

 

El otro, el procesamiento de militares que actuaron en el Operativo Independencia, ordenado por el Poder Ejecutivo en 1975/76, durante la presidencia de Isabel Perón para combatir al ERP en la selva tucumana. La contradicción no puede resultar más flagrante: no es aplicable la prescripción a militares que obedecieron órdenes legales, por presuntos hechos cometidos hace nada menos que ¡48 años! El propio Caracol, en el tan patético como agresivo discurso del 1° de marzo ante el Congreso, anunció que esta inicua persecución, que sólo es venganza, continuaría.

 

Y todo ello ante el silencio cómplice de una sociedad hipócrita (radicales y peronistas, gremialistas, gobernadores y funcionarios, empresarios, ejecutivos y gente común) que, cuando la violencia, las bombas, los asesinatos, las desapariciones y los secuestros que se producían por miles le impedían vivir, llamaron a las puertas de los cuarteles para exigirles terminar, como fuera, con la pesadilla. Y que hoy, únicos chivos expiatorios, mira hacia otro lado mientras mueren diariamente ancianos en las mazmorras del régimen, que vocifera su falso apoyo a los derechos humanos.

 

No se recuerdan los 30 millones que mató Stalin con hambrunas forzadas en Ucrania y en sus gulags siberianos, o los muertos de Mao, Pol Pot y tantos otros “iluminados” que reciben la protección histórica de la izquierda, pero el 27 de enero se conmemoró el Día del Holocausto, que costó la vida a ¡6 millones de personas!, principalmente judíos. Por ese crimen fueron juzgados sólo 24 jerarcas y 3 de ellos resultaron absueltos. Desde 1960, todos los crímenes del nazismo, salvo los asesinatos, fueron declarados prescriptos por el Parlamento alemán, pero sólo fueron considerados “asesinos” los máximos dirigentes; los demás, sólo “cómplices” que recibían órdenes y, así, la prescripción los alcanzó en 1968.

 

En Argentina, y por menos de 9000 muertos y desaparecidos, en 1985 fueron juzgados los 9 miembros de las tres juntas que gobernaron de 1976 a 1983, y 4 fueron absueltos. Las condenas a Videla y Massera fueron graves (reclusión perpetua) y los demás (Viola, 17 años; Lambruschini, 8, y Agosti, 4) recibieron penas menores. En especial si se las compara con las que, habitualmente, reciben –prisión perpetua y, a veces, varias- quienes obedecieron sus órdenes, inclusive aquéllos que revistaban en los rangos inferiores de los respectivos escalafones, todas en juicios amañados, ilegales y plagados de testigos, falsos pero indemnizados, y con la tolerancia y la complicidad de los asesinos togados.

 

Con este Congreso y con esta Justicia, ¿obedecerán las fuerzas armadas una orden de reprimir al terrorismo, que ya se ha instalado nuevamente en todos los conurbanos del país, en el sur con los pseudo-mapuches más Montoneros, ERP, Sendero Luminoso y FARC, y en la Triple Frontera, con Hezbollah, Comando Vermelho y Primeiro Comando Capital? El Caracol ordenó a los batallones de ingenieros del Ejército construir casas y calles en las zonas más calientes y ensangrentadas de Rosario; los envió desarmados. Habrá que ver qué suceder si uno de ellos cae bajo las balas de los sicarios, tan decididos a concitar la atención de la prensa mundial con sus crímenes y atentados contra víctimas famosas.

Balcones se alquilan 04-03-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

.Nota N° 879

“En tiempos de engaños, decir la verdad es un acto revolucionario”. George Orwell

El espectáculo que, con formato de tragedia, se empeña en presentar la Argentina amerita comprar abonos permanentes salvo, claro, que usted aún viva aquí; si éste es el caso, recuerde cuánto hace que le recomendé comprar cascos, augurando que lloverían piedras. Los dos acontecimientos más relevantes de la semana –el discurso de Alberto Fernández en el Congreso y el tiroteo mafioso a un comercio de la familia de Lionel Messi- son una mínima parte del iceberg de ese siniestro show, pero obligan a plantearse dos debates trascendentes y urgentes: cuánto más daño a la República y a sus instituciones estará dispuesto a producir el kirchnerismo y a tolerar la sociedad en su conjunto, y cómo debe pararse ésta frente a la inseguridad que, a esta altura, le ha hecho perder hasta el sueño.

Los medios de prensa y las redes sociales han hecho una minuciosa vivisección del cobarde, injuriante y falso mamarracho que leyó Alberto Fernández, lo cual me ahorra repetirlo aquí. Pero sí me referiré al flagrante delito que cometió el Caracol. El artículo 109 de la Constitución, textualmente, dice: “En ningún caso, el Presidente de la Nación puede ejercer funciones judiciales, arrogarse el conocimiento de causas pendientes o restablecer las fenecidas”. ¿No fue eso lo que hizo al decir que Cristina Fernández no había tenido un proceso legal y que era injusta su condena, o cuando criticó la medida cautelar referida a los fondos hurtados a la Ciudad, ya que ambos procesos se encuentran en trámite? La causal de juicio político es innegable, y el pedido será formulado el martes.

A partir del miércoles, cualquier posibilidad de diálogo con el kirchnerismo quedó descartada. No se puede siquiera conversar con este hato de furiosos subnormales que, como ya quedó claro, buscan destruir la República, tal como la describe la Constitución. Buscarán refugiarse en diferentes bunkers para combatir desde allí, con la ayuda inestimable de las almas buenas y, sobre todo, de las quinta-columnas que habrán dejado en todos los estamentos del Estado, cualquier intento de cambiar este status quo que sólo nos llevará a seguir descendiendo, como país, al peor círculo del infierno. Nos toca transitar aún los nueve meses que faltan para el cambio de inquilino de la Rosada, y nada permite suponer que la violencia estará ausente durante la campaña.

El Caracol avisó que continuará con los juicios de persecución y venganza contra las Fuerzas Armadas y éstas, hartas de ser chivo expiatorio de una sociedad tan hipócrita, no estarán disponibles cuando suene la hora de la espada, indispensable para luchar, con la ley en la mano, contra la subversión en todas sus formas, se trate de pseudo mapuches, de viejos montoneros, de organizaciones terroristas (Sendero Luminoso, FARC, etc.) o de bandas de narcotraficantes (PCC, CV, etc.), incluyendo los “asesores” castrochavistas presentes en la Patagonia.

Para poder encarar eficientemente esa batalla, es imperioso que Juntos por el Cambio (JxC), por el método que sea (¿unas PASO no oficiales?), ponga fin a la novela turca que protagonizan sus pre-candidatos, unifique el discurso y defina ya mismo quién la representará en cada jurisdicción incluyendo, en la medida de lo posible, a los militantes de Javier Milei. El Frente de Todos (FdT) aún tiene las llaves de las mayores cajas del Estado y las usará para pavimentar, con un renovado “plan platita”, el camino hasta las elecciones, aunque ello signifique dejar tierra arrasada al sucesor de la emperatriz hotelera: simplemente, no tiene otras armas para competir por el cargo de Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, crucial para la guerra de guerrillas que está planificando.

Desde 2015, cuando se decía que La Morsa era el jefe del narcotráfico en el país, he venido sosteniendo que los verdaderos dueños eran los Kirchner. Dada la patológica afición al dinero que padecen, es imposible que le hayan cedido el sideral negocio a un mero lacayo; y allí radica la base del drama que hoy está ensangrentando a tantas ciudades del país. Por ejemplo, la Hidrovía, principal ruta de trasiego de estupefacientes, está a cargo del Instituto Patria, el fanático think tank de la arquitecta egipcia.

A la luz de lo que aquí está pasando, me parece que se abre otro debate imprescindible. Cuando se pregunta en la calle por los piquetes, la unánime respuesta es que debe terminarse con ellos, pero sin reprimirlos; ¿se supone que abandonarán las calles por amor al prójimo, cuando en ellas los gerentes de la pobreza tienen una fenomenal arma extorsiva? En esta Argentina tan demente, por la estupidez garantista de Eugenio Zaffaroni, el ex miembro de la Corte acusado de evasor fiscal y de destinar sus propiedades a la prostitución, las cárceles son meras colonias de vacaciones: a los presos les pagamos un salario y les permitimos el uso de celulares y el acceso irrestricto a Internet y, con lo cual siguen dirigiendo sus negocios y la sanguinaria violencia con que los protegen.

Esta misma semana, el Presidente de El Salvador, Najib Bukele, ocupó los titulares en todo el mundo por el modo –criticado, como siempre, por las entidades de derechos humanos de los delincuentes- en que ha rescatado a su país del terrible flagelo de las maras, las organizaciones criminales que lo habían hecho alcanzar siderales cotas de muertes con sus asesinatos. Inauguró una cárcel de extrema seguridad y trasladó a ella a los primeros seis mil detenidos a los cuales, no sólo les aplica un régimen riguroso de aislamiento, sino que las familias deben pagar su sustento. Su popularidad se eleva al 97% y, a pesar de su autoritarismo, ha salvado al país de las mafias.

Para combatir delitos graves (narcotráfico, terrorismo, trata de personas, lavado de dinero, contrabando de armas, corrupción activa o pasiva, etc.) y terminar con la complicidad de jueces, fiscales, funcionarios y policías, ¿por qué no imitar en alguna medida su proceder y construir establecimientos carcelarios federales en medio de la Patagonia, obligar a trabajar a los reclusos para pagar por sus uniformes y comidas e impedir sus comunicaciones? También habría que rotar permanentemente a los penitenciarios, para minimizar tentaciones y riesgos.

 Triste, solitaria y ¿final? 25-02-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 878

“Toda dictadura, sea de un hombre o de un partido, desemboca en las dos formas predilectas de la esquizofrenia: el monólogo y el mausoleo” Octavio Paz

Cristina Elisabet Fernández debe estar rumiando sus penas allá en su sureño lugar en el mundo mientras huele las calas recién plantadas en su jardín. Y no es para menos, ya que la semana no pudo traer peores noticias para sus aspiraciones políticas y, en el fondo, sumamente personales. Para una persona ya anciana, que carece por completo de amigos y que sabe cuánto la odian inclusive aquéllos que de ella dependen por el destrato permanente al que han sido sometidos desde siempre, que no tiene siquiera la posibilidad de tomar un avión comercial, ir al cine o comer en un restaurant, debe ser una experiencia casi letal.

Estela de Carlotto, Presidente de Abuelas de Plaza de Mayo, que tantos favores y miles de millones de pesos debe al kirchnerismo, se opuso a que la sesgada recordación del golpe de Estado de 1976 fuera usada por La Cámpora para reclamar contra una inexistente proscripción y, a la vez, aprovechar la masiva concurrencia de la izquierda para ocultar su nulo poder de convocatoria; nadie la acompañó cuando fue condenada por ladrona y, pese a contar con todo el aparato y el dinero del Gobierno para movilizar a la tropa, no hubo acto alguno para protestar contra esa falsedad. Claramente, el kirchnerismo necesita el nombre de Cristina Fernández en las boletas electorales, aun cuando sea solamente como candidata a Senadora, para traccionar votos. Creo que así será, aunque se vea obligada a retractarse del histérico renunciamiento que formuló al dictarse la sentencia penal en su contra; si no lo hiciera, quedaría a tiro de los Tribunales, a los que ataca sin tasa ni pausa con movimientos tan inmundos como el simulacro de juicio político a los miembros de la Corte.

La otra noticia, aún más grave para su imagen al interior del Frente de Todos (FdT), fue el rompimiento de su antes pétreo bloque en el Senado, que se sumó a la actitud de los dieciséis gobernadores que adelantaron las elecciones provinciales en sus feudos para evitar que una previsible catástrofe en las generales nacionales. En este tema caben todas las especulaciones porque la liberación de cuatro de sus esclavos permitiría a éstos aumentar sensiblemente el monto de sus “honorarios” cuando sus votos resulten esenciales para las necesidades del oficialismo; sin embargo, me tranquiliza en ese sentido la presencia en el nuevo bloque de la Senadora Alejandra Vigo, mujer de Juan Schiaretti, Gobernador de la indómita Córdoba. Lo notable fue que, con el Senador Guillermo Snopek (Jujuy) a la cabeza, los ¿independizados? atribuyeron a Alberto Fernández la culpa por su actitud, acusándolo de falta de federalismo, y no a la arquitecta egipcia, que siempre fue una déspota centralista y unitaria.

El Caracol, que sigue negándose a bajar su precandidatura para conservar algo de nafta en el tanque, ha decidido realizar giras proselitistas por el interior del país y, esta misma semana, las extendió a la Antártida, tal vez para buscar el voto de pingüinos más australes. Esa resistencia de parte de alguien que sabe imposible lograr la reelección en estas condiciones de inflación, narcotráfico e inseguridad, y el fracaso de todas las tentativas que realiza el Instituto Patria para doblegarlo y permitirse unificar la candidatura presidencial, me lleva a preguntarme si ambos, ella y él, tendrán disponibles recíprocos “carpetazos”, capaces de neutralizar al contendiente.

Las principales figuras de Juntos por el Cambio (JxC), continúan absortas en la contemplación de sus respectivos ombligos, sin percibir que la situación no permite esperar hasta las PASO de agosto para terminar con la destructiva competencia y tener un liderazgo unificado. A este ritmo, perderá la crucial Provincia de Buenos Aires, amén de otras jurisdicciones en las que ya aparece dividida y los feudales oficialismos conservan sus repugnantes mañas populistas, y comprometerá su fortaleza en el Congreso, indispensable para enfrentar la salvaje resistencia del peronismo cuando no gobierna y el violento accionar de la izquierda trotskista en la calle.

Que a los dos tanques más importantes de JxC –Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta- se hayan sumado inexplicables postulantes a la Presidencia, como María Eugenia Vidal, por ejemplo, resulta descorazonador. Ésta podría representar a la coalición en la Provincia de Buenos Aires, por sus buenos antecedentes como Gobernadora, y tendría muchísimas más chances de triunfar sobre Axel Kicillof que Cristian Ritondo, Facundo Manes o Diego Santilli; es más, si no se le hubiera impedido, en 2019, separar su elección local de la candidatura nacional de Mauricio Macri, es altamente probable que otra hubiera sido nuestra historia.

Porque, a esta altura de los acontecimientos y con Sergio Aceitoso Massa fuera de carrera por su fracaso económico, me parece razonable que nos planteemos las distintas alternativas que nos presentarán las elecciones generales en el ballotage, aun cuando algunas aparezcan hoy como más probables que otras: 1) Bullrich vs FdT (¿Daniel Scioli?); 2) Rodríguez Larreta vs FdT; 3) Bullrich vs Milei; 4) Rodríguez Larreta vs Milei; 5) FdT vs Milei. Así como no tengo dudas acerca de qué elegirán los votantes de JxC en la quinta opción, me pregunto: ¿qué harán los votantes de Milei, muchos de los cuales provendrán del Conurbano empobrecido, ante las opciones 1 o 2? y también, ¿y los fieles al FdT en los casos 3 o 4? En la respuesta que, al final, reciba cada uno de esos interrogantes estará signado el destino de la Argentina.

Nuestra opinión sobre Brochero y Compostela 24-02-2023 

por Alberto A. Anselmi

La Iglesia sigue usando mentiras sobre San Brochero, en este caso a la comparación del Camino de Santiago de Compostela con el Camino de tierra que une Mina Clavero y Brochero con la ruta 34 en Giulio Césare. 

Ese camino fue construido cuando nuestro Curita estaba enfermo para no volver a cabalgar y ese camino es de coches, mientras que Brochero sólo realizó caminos de herraduras o sinuosos. Al no existir ese camino (durante su vida útil físicamente) nunca pudo haberlo recorrido, sólo en sus itinerarios descubiertos por el Dr: Oscar Raúl Sasso, Presidente de la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero” creador de las “Cabalgatas Brocherianas”, El Instituto de Geodesia de la Universidad de Córdoba y el Ejército de Córdoba, que acompañaron a las  verdaderas  Cabalgatas Brocherianas, todos con su gran trabajo de relevamiento y señalización, registrado y aprobado por el Instituto Nacional de Monumentos y Antigüedades (único que puede hacerlo). 

Los verdaderos caminos de nuestro Santo eran recorridos por la Cabalgata Brocheriana y otros en su momento posterior, abriendo las tranqueras de los predios privados de la montaña, con el permiso al Dr. Sasso de hacerlo. Pero como otras Cabalgatas, como la de Aprile (Usurpador del Nombre “Cabalgatas Brocherianas”), cuando lo hacían dejaban toda la mugre y suciedad de desperdicios y defecación, por lo que decidieron no dejar pasar más si no van con Sasso, quien impuso siempre el respeto y la higiene de los participantes. 

A raíz de esta imposibilidad de recorrer los verdaderos caminos de Brochero, fue no tener “mejor idea” que inventar los nuevos caminos, que le facilitara el tránsito y le hacía mucho más corto el camino, donde además podían circular con utilitarios y camiones donde llevar productos para comercializarlos a beneficio propio. 

Todas estas historias las hemos difundido en nuestro periódico, relevando y recorriendo en todas las Cabalgatas a través de nuestros Periodistas y Corresponsales, y también con quien les escribe, habiendo sido nosotros iniciadores de estas Cabalgatas, con los salones de nuestra Editorial para reuniones con los integrantes de la Asociación y con el mayor de los orgullos y haciendo honor a ese gran hombre que se llamó: José Gabriel Brochero. 

Sería muy importante y justo que hoy llevara el nombre de Oscar Raúl Sasso alguna de las tantas obras inauguradas al respecto, teniendo en cuenta que sin Él no hubiera sido posible realizar su gran trabajo de relevamiento para conocer la verdad de los pasos del Curita Santo y más aún ahora, después de haber fallecido Sasso, verdadero altruista y exJuez Federal, que también relevó los caminos del nuestro Gran Prócer, el Gral. José de San Martín en sus cruces desde San Juan hacia Chile. 

Puede visitar el siguiente enlace Cabalgatas Brocherianas

¡Mamarrachitos míos!  18-02-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 877

“En nuestro presente, el pasado ocupa más lugar que el futuro”. Ryszard Kapuściński

Cuando Oscar Casco popularizó ese apodo en las telenovelas de los años 60’s, no podía imaginar cuán aplicable resultaría al momento actual de la política nacional, se trate de las dos coaliciones principales o de sus nuevos contendientes, la izquierda trotskista y el liberalismo antisistema. Ninguno de los dirigentes de esas fuerzas parece entender que, mirándose el ombligo con fijeza, cada vez se distancian más de los ciudadanos a los que aspiran representar en las próximas elecciones. ¿Verdaderamente creen que pueden continuar exhibiendo impúdica e impunemente sus deseos y apetencias personales ante una sociedad angustiada por la inflación y aterrada por la inseguridad, entre muchas otras y urgentes preocupaciones?

El Frente de Todos (FdT) es la única voz que sostiene la falacia de una inexistente proscripción y convoca a “romperla” en un acto que necesita masivo para convertirlo en un 17 de Oktubre que rescate a Cristina Fernández del arcón de la historia miserable de la Argentina y, sobre todo, de su ya inexorable futuro penal. Ayer circularon versiones que hablan de un arrepentimiento de la condenada por ladrona a su cacareado renunciamiento, pero descreo de esa posibilidad toda vez que, si se presentara como candidata a Presidente y perdiera, quedaría a la inmisericorde intemperie.

El FdT inauguró el carnaval el jueves con la mesa política que parió el Caracol con fórceps manipulados por La Cámpora. Por ahora, el inefable Rey Momo, auto-percibido Presidente, resiste la presión para renunciar a su imposible reelección y ha logrado meter al kirchnerismo, dueño de monumentales cajas estatales, en el brete que implica tener que callar sus críticas más feroces para evitar que todo explote ya y, a la vez, la imperiosa compulsión a usar los muchos fondos de los que dispone para financiar un aparato capaz de sostener sus muy escasas chances en este crucial año electoral. Sergio Aceitoso __Massa se imaginaba ungido por el envejecido dedo de la rapaz emperatriz hotelera, pero, ya convencido de la imposibilidad de triunfar exhibiendo índices como los ya inevitables 100% de inflación y 53% de pobreza, se reservará para otra oportunidad.

Juntos por el Cambio (JxC) muestra aún una unidad que, en verdad, se sostiene sólo por su antikirchnerismo. Que en la coalición coexistan un radicalismo socialdemócrata con presencia nacional, un partido como el PRO casi local y con cierta difusa ideología, un peronismo y un liberalismo republicanos y una agrupación tan personal como la CC de Lilita Carrió, dificulta la tarea no sólo a la hora de unificar candidaturas -aún dentro de cada partido- sino también de acordar un plan de gobierno y, en especial, la velocidad que se deberán imprimir a los cambios indispensables.

Pero, aún con esas complicaciones, JxC no debería esperar hasta agosto, con la esperanza de unas PASO que despejen el oscuro panorama que ofrece la insensata multiplicidad de candidatos y permitan dejar atrás los conflictos que hoy se ventilan entre ellos sin poner en riesgo esa unidad tan cacareada. Los tiempos de la ciudadanía son tan angustiantes que están generando un fuerte cuestionamiento al espacio común y a cada quienes pretenden representarla, y llevando crecientes caudales de votos a los marginales que, al menos en las –ciertamente poco fiables- encuestas, están ya sugiriendo el fin de la bipolaridad.

Si bien es lógico pensar que dependerá de quien resulte ganador en las primarias el tono y el ritmo con que el programa de gobierno de la coalición (si existiera por haber sido consensuado previamente) será ejecutado, es esencial que JxC enuncie ya los lineamientos generales del mismo porque, amén de mostrar así un respeto mayúsculo por el votante, permitirá a éste identificar, con calma y anticipación, cuál será el espacio que mejor representará sus intereses personales, última y permanente razón del voto.

Los libertarios muestran un crecimiento que, de ser real, resultaría irracional. Su carismático líder carece cuantitativamente de los cuadros necesarios –alrededor de 5000- para asumir de inmediato el control de una administración tan elefantiásica y, hasta ahora, no ha expresado un verdadero plan de gobierno sino drásticas y marketineras medidas -muy controvertidas, por cierto- que, además, nunca se han aplicado en algún país del globo. Pero cuidado porque, así como hoy aparece claro que, si la opción en el ballotage se planteara entre un candidato del FdT y otro opositor éste triunfaría, ¿qué podría suceder si el segundo turno se dirimiera entre un candidato de JxC y Javier Milei?

La semana pasada, hice una propuesta a cambiemitas y libertarios que, espero, no caiga en saco roto ya que sólo tiene por objeto mejorar las chances de la República en el complejo interior de la Argentina. Pensando básicamente en la trascendental Provincia de Buenos Aires pero también en el resto del país, la idea es que el espacio que tenga menores en cada distrito renuncie a favor del candidato a gobernador del otro para unificar a la oposición y terminar con los eternos feudalismos (Formosa, Chaco, Santiago del Estero, La Rioja, Catamarca, San Luis, Santa Cruz, etc.) tan perversos y dañinos, que violan todos los derechos humanos y compran la voluntad de sus ciudadanos con prebendas pagadas con dinero nacional, empleo público generalizado y obras faraónicas, mientras persiguen a los disidentes, se enriquecen sin tasa y empobrecen hasta el hambre a la población. Dije que aceptar esta sugerencia requería de un enorme patriotismo de parte de la dirigencia; ¿existirá aún esa grandeza?

Globos Pinchados   11-02-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 876

“Nada da más tristeza que ver cómo los adversarios del caudillo en el poder se desviven por buscar un caudillo que lo reemplace”. Guy Sorman

 Pese que el título puede remitir a los recientes incidentes de espionaje aéreo entre Estados Unidos y China, una vez más se refiere a lo que está sucediendo en nuestro país, siempre tan pródigo en intensidades.

En el interior del Frente para Todos (FpT), como todos percibimos, ha estallado una guerra cuyos contendientes son Cristina Fernández y su desesperación por la inminencia de una catástrofe penal, Alberto Fernández y su razonable deseo de que los mozos de la Casa Rosada le sirvan café hasta el final, Máximo Kirchner y la suya por conservar algo de la mítica zurda con que se fundó La Cámpora, y Sergio Massa y la banda que lo respalda, conformada por empresarios “expertos en mercados regulados” que buscan seguir haciendo negocios con “la nuestra” y por peronistas que buscan conservar poder y privilegios, aún al precio de consumir la pestilente sopa de sapos que acompaña desde siempre la historia política del Aceitoso.

Es innegable que el Caracol padece una afección psiquiátrica porque, de otro modo, no podrían explicarse sus afirmaciones insanas, tales como que los actuales reclamos sociales son la demora en acceder a los restaurants, o que sus éxitos sean su ideologizada y corrupta política de importación de vacunas que nos costó la vida de 125.000 compatriotas, la distribución prioritaria de los fármacos entre sus amigos VIP, sus dichos como que sólo China supera a nuestro país en crecimiento económico o la recuperación del empleo formal; sólo le resta decir que lo obligamos a hacer sus fiestas en Olivos. Pero, entre renuncias de sus pretendidos fieles y desplantes de sus ministros de propiedad ajena, no se pone los pantalones y renuncia al cargo para tirárselo por la cabeza a la arquitecta egipcia, ni acepta resignar su impostada actitud –otro globo aerostático- de precandidato, que complica el armado que busca, como hizo en 2019, el dedo de la PresidenteVice.

La renovada ilusión de Cristina de echar a la Corte Suprema para salvarse de la cárcel y, a la vez, escenificar una racionalidad unificadora tampoco parece viable, no sólo porque ya quince provincias peronistas adelantaron sus elecciones con respecto a la nacional, previendo una derrota fenomenal en ésta, sino porque, como en 2013 y 2015, surgió una alianza entre caciques como Juan Schiaretti, Juan Manuel Urtubey y Florencio Randazzo, dispuestos a extraer piedras de la misma cantera política.

Para los capitalistas prebendarios habituales, cómplices necesarios de nuestra decadencia, el globo que pretendió venderles el Ministro de Economía pierde helio por los agujeros que la imparable inflación le produce; su atrevida promesa de un índice que en abril comenzaría con 3 resulta de imposible cumplimiento y entierra sus probabilidades electorales. El martes, el INDEC dará a conocer el resultado de su medición de enero, que estará muy próximo al 6, y febrero promete cifras mayores de la mano de los aumentos en carne, energía, colegios, prepagas médicas, alquileres, etc. Y la recesión que está imponiendo a la economía para frenar la caída del peso es otro salvavidas de plomo para sus ensueños presidenciales.

Tampoco es que tuviera tan fácil lograr el respaldo a su candidatura de todo el FpT porque, mientras ata su suerte al apoyo del FMI (algo que se descuenta por el pánico a desatar una nueva crisis aquí que produciría ramalazos en todo el planeta emergente), la mitomanía camporista la obliga a seguir disparando con grueso calibre contra el acuerdo y contra los Estados Unidos, cuyo voto tiene tanto peso allí y se muestra indignado por los impúdicos ataques a la Justicia, que el Aceitoso habilita con el voto de los diputados que le responden. Pero tenía fe en que el espanto del kirchnerismo frente al desierto compensara su falta de amor.

Es esencial que los pre-candidatos de JxC digan ya clara y comprensiblemente cuáles son los lineamientos económicos, fiscales, sociales, laborales, políticos y de defensa y seguridad básicos que proponen para salir de este insoportable marasmo en que nos debatimos desde hace demasiadas décadas y volver a soñar con un horizonte feliz y con movilidad social ascendente, aunque el camino sea durísimo. Si no lo hicieran en las próximas semanas, continuará la sangría que hoy lleva agua a los molinos extremos de la derecha libertaria y de la izquierda trotskista.

Aunque hoy, de acuerdo con todas las mediciones, a nivel nacional el techo del FpT no supera el 30%, también es cierto que, en la Provincia de Buenos Aires, donde no hay ballotage y se gana por un voto, frente a una oposición atomizada entre Juntos por el Cambio (JxC) y Libertad Avanza (LA) es prácticamente seguro que Axel Kiciloff logrará la reelección. El kirchnerismo la transformará en el gran bunker para la resistencia. Y no exagero, porque también se refugiarán allí los movimientos piqueteros, los trotskistas infiltrados, los “trabajadores de la educación” del perverso Roberto Baradel, las bandas de narcotraficantes, los okupas violentos, las barras bravas y unidas, el “Vatayón Militante”, los sempiternos mamadores de la gran teta estatal, los perpetuos intendentes del Conurbano esquilmado y, si nos descuidamos, hasta los pseudo-mapuches.

Mi propuesta, entonces, es que el candidato de LA a la gobernación bonaerense compitiera con los de JxC en las PASO, lo cual requería de todos una enorme cuota de patriotismo, pero así la oposición unida vencería. Una carta que quizás permitiría llevar a buen término una negociación sería retirar los candidatos a gobernador en alguna provincia donde LA superara a JxC en las mediciones, y arrebatar así su sillón a algún señor feudal.

Si no hubiera en todos los dirigentes la grandeza que requiere una solución como la que propongo (u otra similar), el enorme costo que pagará el país con un nuevo triunfo del marxista Kiciloff, traducido en una complicada inestabilidad para la próxima administración, recaerá sobre las espaldas de quienes hayan privilegiado su miserabilidad y su ombliguismo, y lo pagarán en futuras elecciones si es que, para cuando éstas lleguen, la Argentina continúa existiendo tal como la conocemos.

¡Tira la renuncia, Alberto!   04-02-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 875

“No hay mayor desgraciado que el que cambia su forma de pensar para complacer al resto”. Donatien, Marqués de Sade

El baboso y arrastrado individuo que hoy ejerce de Presidente comenzó la presente saga cuando dejó de ser, en 2008, Jefe de Gabinete de Cristina Fernández y se transformó en el principal detractor de la emperatriz hotelera, a quien acusó durante una década de las peores cosas y de innumerables delitos. Al ser designado por un tuit de su víctima para encabezar la fórmula en 2019, creyó que la ya condenada por ladrona había hecho de la necesidad virtud y, por ser su única posibilidad de su retorno, había perdonado tantos agravios.

El sexo femenino se caracteriza por su infinita memoria, que impide que algo prescriba. Ahora, con el indudable fracaso de una gestión de la cual pretende inútilmente despegarse, esos recuerdos afloran y, desde los bastiones de La Cámpora, ella lo somete a humillaciones y desprecios que nadie, aun careciendo de principios morales, podría soportar. El último, y tal vez el más grave, estuvo a cargo de la nueva trifecta formada por Axel Kiciloff, Máximo Kirchner y Sergio Aceitoso Massa para bloquear a Alberto Fernández la intención de reelección.

Si, al menos, tuviera algún resabio de dignidad y ningún miedo a los carpetazos, el Caracol debería renunciar ya mismo y tirarle el Gobierno por la cabeza a la abogada exitosa. Al hacerlo, la pondría ante una terrible disyuntiva: asumir la Presidencia o renunciar, con todos los riesgos personales que implicaría esto último para su situación ante la Justicia penal. Si decidiera cumplir el mandato y asentar sus posaderas en el sillón de Rivadavia, quedaría nuevamente al frente de una crisis terminal que, por lo corto de la mecha, esta vez seguramente le explotaría en las manos impidiendo, como en 2015, pasarla intacta a un más que inocente sucesor.

Si se calzara la banda, y aun cuando los adelantos de las elecciones provinciales muestren hasta qué punto los señores feudales descreen de cualquier probabilidad exitosa en los comicios nacionales, se beneficiaría con el fin de la interna salvaje que hoy destruye al Frente para Todos, ya que su dedo recuperaría algunas facultades decisorias. Pero también acercaría el horizonte de violencia que, preveo, será su último recurso para intentar salir impune de sus delitos, porque, con seguridad, los actuales conflictos institucionales, pero sumando a otros importantes actores, se exacerbarían y la sociedad civil, al final, se vería obligada a salir de su tradicional abulia para resistir en la calle.

Amerita un párrafo la divulgación tan tardía de los datos provisionales del censo de 2022, en la medida en que prueba que, también en ese aspecto, Cristina Fernández robó para sostener su reinado sobre la Provincia de Buenos Aires, en la cual La Matanza resulta esencial. Para lograr inclinar tanto la cancha a favor de ese paupérrimo feudo con enorme cantidad de dinero -$ 85.000 millones en doce años-, no dudó en inflar descaradamente, en el censo de 2010, las cifras de su población en detrimento de los restantes municipios, ya que los recursos coparticipables se distribuyen en función de la cantidad de habitantes.

En medio del ruido –sólo importa a los más informados, como probó la escuálida asistencia a la protesta del miércoles ante el Palacio de Justicia- que genera el juicio político a la Corte Suprema, el kirchnerismo, con su mezcla pestífera de ideología y vana ilusión de financiamiento, sigue avanzando en la entrega de territorio nacional a China; comenzó a recorrer esa penosa deriva durante la Presidencia de la arquitecta egipcia con la concesión para la construcción de las represas - no prioritarias para el país- sobre el río Santa Cruz y, sobre todo, con la cesión de soberanía para una base militar en Bajada del Agrio, Provincia de Neuquén, con capacidad de intervenir en una eventual futura guerra espacial.

Ahora, a través del militante Gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, pretende permitir que Xi Jinping erija un puerto de apoyo logístico para las depredadoras flotas pesqueras chinas y, claro, militar. Así, no sólo perderemos más territorio, sino que se comprometerán nuestros derechos en la próxima renegociación del Tratado Antártico, amén de convertir a la Argentina en un objetivo bélico si se desatara un conflicto armado entre las grandes potencias, algo que no parece imposible si se observa qué está pasando en el Pacífico sur, principalmente alrededor de Taiwan.

Por lo demás, la experiencia mundial en la materia señala que la tan mentada “Ruta de la Seda” es, en realidad, una campaña de conquista armada con préstamos chinos impagables para puertos, represas, energía, puentes y autopistas, garantizados por verdaderas hipotecas sobre cada activo que, además, ya muestra defectos graves de construcción que ponen en peligro su sobrevida, tal como sucede en Ecuador, Angola o Montenegro.

Simultáneamente, el Gobierno entrega a los falsos mapuches enormes extensiones de tierra en Mendoza que -sólo por casualidad, claro- están sobre yacimientos de petróleo (20 pozos), mientras forma mesas de diálogo con estos usurpadores violentos y terroristas, pero se abstiene de convocar siquiera a los damnificados directos. Y envía a energúmenos rentados, encabezados por el asesino montonero Julio César Urien (que se suma a sus colegas Roberto Perdía y Fernando Vaca Narvaja, ya presentes) a provocar nuevos conflictos en el sur del país con invasiones a propiedades privadas. 

Entre patético y ridículo, ¿para qué elegir?   28-01-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 874

"Siempre hacen más ruido las latas vacías que las llenas. Lo mismo ocurre con los cerebros”. Truman Capote

Hace tres años, desde que aceptó encabezar la fórmula presidencial anunciada con un tuit de Cristina Kirchner, me pregunto qué pasará en la cabeza de Alberto Fernández. Porque, aún en medio de su ajetreada agenda –inaugura canchas deportivas, canta y compone, hace fiestas clandestinas, protagoniza papelones, funge de padre, estatiza la marihuana y se esmera en contradecirse- no puede ignorar el desprecio, no sólo de sus cotidianas víctimas, sino hasta de su ¿propio? espacio político, comenzando por la misma emperatriz, tan hortera y condenada por ladrona, que lo entronizó.

El último ultraje se lo propinó el inefable Eduardo Wado de Pedro, nada menos que su Ministro del Interior, que lo insultó públicamente por no haber sido invitado a participar de la reunión que mantuvo con Luiz Inácio Lula da Silva en ocasión de la reunión de la CELAC; que no presentara su renuncia ni fuera fulminado de inmediato con el despido, acredita tanto la nula relevancia que tiene quien hoy se auto-percibe Presidente de la República, cuánto cuál es la verdadera jefatura a la que responde el ofendido funcionario, una que jamás resigna casilleros de poder.

Además de los sopapos que recibió de Luis Lacalle Pou (Uruguay) y de Mario Abdo (Paraguay), previsibles, el más fuerte provino de Gabriel Boric (Chile), de izquierda, que condenó sin sutilezas a Venezuela, Nicaragua y Cuba por las violaciones a los derechos humanos, la política que el Foro de São Paulo pretende extender a toda la cacareada Patria Grande. Tampoco logró ser reelegido como Presidente pro tempore del conglomerado, cargo que quedó en manos del lacayo granadino del castro-chavismo.

Y su tan sobado colega, que dice quererlo, pero no come vidrio, quitó la red bajo el trapecio desde el cual el Caracol y el Aceitoso anunciaron una moneda común con Brasil y el financiamiento del BNDeS al futuro gasoducto –cuándo no- Néstor Kirchner, que seguirá durmiendo el sueño eterno, al menos hasta que cambie el gobierno de la Argentina. Con Lula, tampoco le fue mejor a la mandamás de la banda, que pretendía una reunión en su madriguera del Senado; fue abortada con una excusa tan frágil que fue desmentida, al día siguiente, con la visita privada a José Pepe Mugica en su chacra que realizó el Presidente de Brasil; es claro que no podía aparecer en una foto con alguien que, como él mismo, ha sido condenado por corrupción.

La vocera Gabriela Cerruti insistió en el ridículo cuando, hablando del duro comentario de SS Francisco a la situación económico-social, atribuyó la catástrofe exclusivamente a la gestión de Mauricio Macri, que fue la excepción de cuatro años en los dieciséis del kirchnerismo en el poder.

Por su parte, Sergio Aceitoso Massa parece haber perdido las dotes de mago que el empresariado “experto en mercados regulados” le atribuía y a las cuales los Fernández², muy a desgano, rogaban por su sobrevida política. La anunciada recompra de deuda externa, además de inexplicable e injustificable, no tuvo el efecto depresivo sobre las cotizaciones del dólar que esperaba y tampoco influyó en los mercados voluntarios de crédito, que siguen inalcanzables para la Argentina. Hay que sumar el claro error que cometió al jurar que, en abril, la inflación habría descendido al 3%; el índice de enero y los nuevos aumentos que seguirán en carne, prepagas, colegios, comunicaciones, energía, etc., garantizan la derrota de este audaz y fantasioso Mandrake. Es joven, y podrá reservarse para otra oportunidad, por lo cual no creo que se presente como candidato este año, aun cuando todos sus muchos “amigos/cómplices de negocios” insistan en convencerlo.

El Caracol sigue actuando como mascarón de proa del kirchnerismo, ávido de impunidad para su jefa. Al mamarracho del juicio político a los miembros de la Corte Suprema, que sabe de antemano condenado al fracaso, le sumó un enorme bochorno: por su orden, envió al Secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla Corti, a denunciar a la Argentina ante la Comisión competente de las Naciones Unidas. El funcionario, hijo de terroristas y caudalosamente indemnizado, fue en avión a Ginebra y volvió en cachetada; lo único que obtuvo fue un fuerte reclamo contra su propio Gobierno por sus ataques a la Justicia que, a criterio del organismo, atentan contra la división de poderes y tienden a consagrar el autoritarismo.

Claramente, a Cristina Kirchner se le están quemando los últimos papeles. No sólo no puede esperar tener éxito en su inmunda embestida contra el Poder Judicial, sino que éste la espera con peores noticias a partir de febrero, cuando reinicie su actividad. Emitirá fallos complicados para ella en las causas del memorándum con Irán y en la de Hotesur-Los Sauces (la peor, porque alcanza a sus hijos) y avanzará con velocidad en la causa Cuadernos, en la que está probadamente pegada. Y la formación del eje Juan Schiaretti-Juan Manuel Urtubey-Florencio Randazzo sumará penas a su Frente, que ya perdió cuatro millones de votos en 2021.

En los próximos días serán dictadas las sentencias contra la patota que asesinó a patadas a Fernando Báez Sosa y contra la pareja de lesbianas –la madre y su novia- que torturaron hasta la muerte, con inusitado ensañamiento, a Lucio Dupuy, de cinco años. Confieso mi indignación y mi repugnancia ante la diferente cobertura que han dado los medios (todos ellos) a ambos crímenes, invisibilizando al segundo; atribuyo la responsabilidad al fuerte lobby LBGTI, un colectivo que calla sobre la homofobia en Rusia o Cuba, protege inicuamente a sus miembros y, en el camino, destruye todos los valores de la sociedad en el mundo entero.

¿Qué hiciste mientras la Argentina moría? 21-01-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 873

“La tolerancia es un crimen cuando lo que se tolera es la maldad”. Thomas Mann

Esa pregunta, estoy seguro, nos la harán nietos cuando nuestro país haya dejado de existir como tal y sólo sea una más entre aquéllas naciones que cayeron en ese monumental plan criminal denominado “socialismo del siglo XXI”, y creo que ha llegado el momento en que todos, todos nos comprometamos para evitar ese futuro, ya casi inexorable. Tal vez, resulte oportuno repetirnos la despedida de Leónidas en las Termópilas: “Guerrero, ve a Esparta y dile que aquí hemos muerto por defender sus leyes”.

De una semana a otra, la situación institucional de la Argentina continúa deteriorándose por obra y gracia de la trifecta que nos gobierna. Cristina Fernández, más allá de los stands up a los que nos somete con cierta regularidad, se mantiene callada, pero Alberto Fernández y Sergio Massa compiten para lograr el favor de la condenada emperatriz hotelera e, intentando llevar a su altar la ofrenda más preciado -la impunidad de su corrupción-, están demoliendo la República, la Constitución y las instituciones. Un inexorable destino carcelario alcanzará, tarde o temprano, al Caracol, a Jorge Capitanich y a otros gobernadores y diputados que se alzaron contra la Corte Suprema, ejecutando un claro golpe de Estado.

Es preciso leer cuanto aquí sucede insertándolo en un marco regional en el que el Foro de São Paulo ha tomado nuevo vuelo y, generando conflictos violentos en todos los países, ha puesto bajo fuego graneado a sus frágiles democracias, empujándolas hacia regímenes autoritarios de izquierda, comprobadamente corruptos, asesinos y violadores seriales de derechos humanos. Las naciones donde ya lo han logrado son aliadas de las dictaduras de Rusia, China e Irán, recreando una guerra fría focalizada fuera de los territorios de las grandes potencias, similar a la que llevó a América Latina a un baño de sangre en la segunda mitad del siglo XX.

Hoy el castro-chavismo exporta la misma subversión, financiada, armada y entrenada por aquellas agresivas dictaduras terroristas y lo hace en una mesa donde hay un comensal que no estaba invitado en los 70’s: los grandes carteles de las drogas, que actúan tanto en los países productores cuanto en los distribuidores y consumidores, con verdaderos ejércitos criminales que disponen de una enorme cantidad de dinero y equipamiento militar de última generación. Utiliza, además, a movimientos indigenistas cooptados con promesas de acceso a la propiedad de tierras ricas en recursos naturales, que nunca serán cumplidas.

Colombia y Chile sufrieron ese embate en sus calles y la violencia desplegada llevó al triunfo, respectivamente, a Gustavo Petro y Gabriel Boric, candidatos de izquierda. El primero se adecuó a los mandatos del Foro y reanudó el vínculo con Venezuela; el otro, en cambio, fue fiel a sus principios, condenó al dictador Nicolás Maduro y lo está pagando con la violenta guerrilla mapuche instalada en el sur. Se intentó algo parecido en Ecuador cuando Lenín Moreno sucedió al prófugo Rafael Correa y todavía se insiste contra el actual mandatario, Guillermo Lasso, y la agitación continúa. Sobre los recientes hechos en Brasil, ya me expresé la semana pasada cuando dije que no constituyó un golpe de Estado y que el único beneficiado de lo sucedido fue Lula da Silva, fundador de la cataléptica UNASUR, del Foro de São Paulo, del Grupo de Puebla y también de la CELAC.

El MAS volvió al poder con el Presidente Luis Arce Catacora mediante un monumental fraude electoral que cambió los determinantes resultados de la opulenta región oriental del país, encarceló a la anterior Presidente, Jeanine Añez, y al líder de la oposición, Luis Camacho Vaca, Gobernador de Santa Cruz de la Sierra, y permitió que Evo Morales, su verdadero jefe y gran narcotraficante, convirtiera a Bolivia en la base del terrorismo continental que está detrás de las protestas que asuelan al vecino Perú.

Es allí donde veremos las próximas acciones del Foro y del Grupo de Puebla, entidades que, más de cincuenta muertos después, están llevando a cabo una multitudinaria “toma de Lima”. Cuando fue destituido Pedro Castillo Terrones –otro notorio peón de la izquierda regional- por organizar un golpe de Estado e intentar disolver el Congreso, fue sucedido por su Vicepresidente, Dina Boluarte; ésta ya dispuso adelantar las elecciones y acortar su mandato constitucional, pero no ha bastado, toda vez que el terrorismo continúa haciendo estragos.

Ahora llegarán a Buenos Aires los compinches de este monumental y peligroso desaguisado para reunirse en la CELAC. Nuestra ciudad recibirá a Lula da Silva y a los criminales Nicolás Maduro, Miguel Díaz-Canel y Evo Morales (no Daniel Ortega, que tiene una orden de captura internacional), a los cuales acompañarán delegados de China y otras dictaduras extra-continentales, interesadas también en participar del festín con nuevas bases militares y negocios de apropiación de materias primas, en un hecho que no puede menos que percibirse como apoyo a las maniobras kirchneristas para terminar con el estado de derecho en la Argentina.

Por eso, reitero la pregunta que nos harán en un futuro cercano: ¿qué estabas haciendo mientras la Argentina moría?; en la respuesta que entonces podamos dar está cifrado nuestro destino.

Llorar o luchar 14-01-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

 Nota N° 872

“Llora como una mujer lo que no supiste defender como un hombre”. Aisha bint Muhammad ibn al-Ahmar

Se cumplieron 500 años desde aquel 2 de enero de 1492, en que el último Emir de Granada, Boabdil el Chico, se rindió ante el Rey de Aragón, Fernando el Católico, poniendo fin a los ocho siglos del dominio musulmán en España. Cuando el moro abandonó la ciudad, su madre le descerrajó la frase que sirve de epígrafe. Viene a cuento porque, al menos en América Latina, nos enfrentamos a un similar desafío y, una vez más, estará en las manos de sus ciudadanos decidir qué actitud adoptar frente a los huracanados vientos que soplan desde el Río Grande a Tierra del Fuego y amenazan, desde todos los cuadrantes, a las frágiles democracias que habíamos sabido construir, con mucho esfuerzo, en las últimas décadas.

Hubiera preferido dedicar mi nota semanal a analizar qué pasó o está sucediendo en la región y, claro, en la Argentina, pero deberá limitarme a hacerlo, en razón del máximo espacio que me permito utilizar, sólo a Brasil y a mi país, porque aquí el kirchnerismo cerril y el Caracol que se autopercibe Presidente no nos dan tregua.

Hace miles de años, Esquilo dijo: “En toda guerra, la primera víctima es la verdad”. La criminal guerra de Rusia contra Ucrania y los recientes hechos de Brasilia lo confirman. Era previsible que se produjeran allí vandalismos dadas las enormes multitudes que se habían aposentado frente a las instalaciones militares en la capital, puesto que podían ser infiltradas (tal como hemos visto en Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia) por terroristas financiados desde el exterior. Las agendas del Foro de São Paulo, del Grupo de Puebla y de la CELAC en pos de reconstruir esa estafa denominada “socialismo del siglo XXI” no se detienen.

Resulta harto difícil imaginar que el Presidente ignorara qué situaciones de riesgo podrían vivirse y, sin embargo, nada se hizo para evitarlas. Me pregunté a quién benefició lo sucedido y la única respuesta que encontré fue que al propio Luiz Inácio Lula da Silva. Si bien éste triunfó sobre Jair Bolsonaro por escasísimo margen, los partidarios del derrotado (casi la exacta mitad del país) ganaron las gobernaciones de los más importantes Estados e incorporaron un número mayor de legisladores en el Congreso federal; o sea, Lula asumió con una marcada debilidad política.

Pero después de la invasión de los palacios de los tres poderes, no sólo cosechó un inédito respaldo internacional –hasta Joe Biden lo invitó a una reunión en Camp David este mismo mes- sino que la popularidad de su oponente cayó verticalmente en las encuestas nacionales, todo lo cual empoderó al mandatario y le permitirá imponer su propia agenda legislativa, con todo lo que ello implica para el futuro de esa “Patria Grande” que imaginaron todos los populistas de la corrupta izquierda regional. ¿Podría haber sido ese logrado objetivo la verdadera razón de lo que pasó?

Pero volvamos a la Argentina, ya que el Gobierno ha iniciado una batalla crucial, condenada de antemano al fracaso por las inexistentes mayorías especiales que exige la Constitución para concretarlas. Me refiero, claro, a los dos temas que Caracol Fernández incluyó –como rastrera ofrenda a Cristina Kirchner, que lo desprecia olímpicamente- en la lista de proyectos que tratará el Congreso en las sesiones extraordinarias a las cuales convocó: la remoción de todos los ministros actuales de la Corte Suprema y la ampliación del número de jueces en el alto Tribunal.

La Comisión de Juicio Político tiene mayoría kirchnerista, incluyendo a los tres que obedecen a Sergio Aceitoso Massa; que sus diputados apoyen la iniciativa oficialista impedirá que el Congreso logre quórum para tratar los proyectos legislativos que el Ministro de Economía necesita y eso torna incomprensible su actitud, salvo que sueñe con que Cristina Fernández lo elija como candidato en las elecciones presidenciales de octubre. Los payasos que conforman ese circo disponible le permitirán al Gobierno generar un gigantesco ruido mediático que, como siempre, resultará un tema ajeno para una enorme proporción de los ciudadanos comunes, angustiados por la inflación, la inseguridad y el narcotráfico, y hoy obnubilados con el juicio por el asesinato de Fernando Báez Sosa por una patota.

Las causas que se invocaron para el juicio político fueron la medida cautelar contra el manotazo de fondos a la Ciudad, la declaración de inconstitucionalidad de la composición del Consejo de la Magistratura y la aplicación de una ley general al caso de un preso político militar; o sea, por estar en desacuerdo con sus sentencias. El último tema merece un aparte, ya que cuando la Corte resolvió que correspondía a Luis Muiña utilizar el principio de la ley más benigna, el kirchnerismo y los organismos de derechos humanos tuertos tomaron las calles de Buenos Aires, y el Congreso sancionó una vergonzosa ley “aclarando” que no correspondía otorgar ese beneficio a los condenados por delitos de lesa humanidad en los simulacros de juicio habituales. Hasta Human Rights Watch, a quien no se puede tildar de favorecer regímenes de derecha, puso el grito en el cielo ante el inmundo ataque del Caracol contra la Justicia.

Creo que los republicanos no agradecemos lo suficiente a Mauricio Macri por la gira nacional que realizó después de las PASO de 2019 bajo el lema “Sí, se puede”; permitió que la diferencia final contra la fórmula de Fernández² fuera mucho menor de lo que se preveía; y la furibunda paliza que recibió el Frente para Todos en 2021 completó la tarea, ya que logró el milagro necesario para la supervivencia de la democracia al impedir que la banda delictiva que nos gobierna se hiciera con las mayorías legislativas que hubieran habilitado el “Vamos por todo” anunciado por Cristina Kirchner.

Ahora debemos elegir entre llorar y luchar, ya que ella está preparada para deslegitimar a su sucesor y evitar que pueda gobernar. La estrategia está cantada: si el pueblo no nos votó, fue porque la prensa y la Justicia lo engañaron, y no deberá reconocerse el resultado de las elecciones ni, claro, entregar los atributos del poder. ¿Le suena?

Perros nadando 07-01-2023

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 871

“Sin libertades somos un rebaño pastoreado por hienas”. Antonio Escohotado

La jauría que nos gobierna, tan cascoteada ella, está dispuesta a llegar a las últimas consecuencias para lograr su prioritario objetivo actual: la impunidad de la jefa de la banda delictiva que, con tanta saña, sigue saqueando al país. Y digo “actual” porque antes lo era la conservación de un poder que ya sabe perdido irremisiblemente. Para llegar a esa orilla, nadan en el mar de las instituciones dando manotazos caninos para no ahogarse.

A pesar de mi edad, la viuda de Kirchner y sus esbirros me permiten, diariamente, recuperar mi capacidad de asombro. Contribuye a ese efecto la pasividad de una sociedad que, a esta altura de los hechos, hubiera estallado en cualquier lugar del mundo. Geografías tan distantes como Santa Cruz de la Sierra o Teherán, Ayacucho o Trípoli, Bucarest o El Cairo, permiten comprobar cuanto digo.

Sin embargo, nada parece conmover a los argentinos. Que todos sepamos que mantiene su cargo una Vicepresidente condenada por corrupción y procesada en una decena de causas, y que la misma delincuente enriquecida percibe el equivalente a 150 jubilaciones mínimas y, además, pretende cobrar una multimillonaria retroactividad, un derecho que se niega a decenas de miles de ancianos paupérrimos cuyas sentencias favorables son apeladas hasta el infinito por el mismo gobierno que ella integra, y nada hagamos al respecto, habla a las claras de qué tipo de decadente sociedad hemos logrado conformar.

La enorme mayoría de nuestros conciudadanos no se entera de los inmundos ataques que el arrastrado y baboso caracol que ejerce la Presidencia sostiene contra la República y su Constitución: unos, porque prefieren no preocuparse por los acontecimientos políticos durante sus esplendorosos veraneos; los más, porque deben concentrar sus esfuerzos en meramente sobrevivir en una sociedad con 50% de pobreza y corroída hasta la médula por la inseguridad y el narcotráfico del cual es indudable socio el poder, y porque, al haber arrasado muchos gobiernos la educación pública, carecen de la instrucción necesaria para procesar la información.

La descarada ofensiva que Alberto Fernández ha desatado contra el Poder Judicial, en la que lo secunda esa otra jauría de perros formada alrededor de Jorge Capitanich, Gerardo Zamora y Ricardo Quintela, los bandidos victimarios de las provincias del Chaco, Santiago del Estero y La Rioja, respectivamente, debiera conmover a todos, porque están en juego nuestras más esenciales libertades. Si lograra su propósito –algo que parece hoy muy improbable- de remover a los ministros de la Corte Suprema, significaría que dispone de las mismas mayorías especiales que se requieren para designar a sus reemplazantes y, así, hacerse con la suma del poder público para ofrendarlo en el altar de la abeja reina hotelera quien, a pesar de todo, ignora olímpicamente el cortejo del zángano.

Éste, en esa danza sexual inconducente, recurre a las armas más innobles de su arsenal, y utiliza intervenciones claramente ilegales, arrimadas por ladrones con uniforme del Ejército, para sus ataques contra una oposición cuya mayor virtud, quizás la única y tal vez efímera, es la unidad. Mientras Cambiemos resista así con todas sus fracciones internas, no podrán los “putines” locales avanzar, y sobre el bunker de su comandante en jefe seguirán lloviendo misiles lanzados desde los tribunales, haciéndolo temblar hasta los cimientos. Febrero, en ese terreno, promete verdaderos diluvios, los mismos que tanto faltan en la pampa argentina.

Sergio Aceitoso Massa, apoyado por la nueva kirchner-burguesía, a la cual el Ministro condona deudas monumentales, debe hacer malabares con las cifras para seducir a un fácil FMI y evitar que todo salte por los aires antes de las elecciones, objetivos que claramente se ven comprometidos por los ataques del Ejecutivo sobre el Poder Judicial tanto en el escenario local cuanto global. Por ello, resulta curioso que haya ordenado a sus sicarios en la Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados acompañar la iniciativa presidencial. ¿Será porque ya da por perdida la batalla de la economía y, con ella, sus propios sueños presidenciales?

Si así fuera, los hechos le dan la razón. Pese a los rimbombantes anuncios que emite su gerencia de relaciones públicas, el catastrófico resultado de la suma de la inédita sequía, más el “plan platita” que le impondrán el Instituto Patria y La Cámpora en un año electoral (el apoyo de los gobernadores no será gratuito, y Axel Kiciloff necesitará una cantidad sideral para intentar conservar la Provincia de Buenos Aires), más la monumental emisión que se vio obligado a ordenar para atender a los intereses de las Leliq’s, implica que la inflación no cederá y, tampoco, aumentarán las reservas del Banco Central.

Finalmente, los primeros pasos del tercer mandato de Luiz Inácio Lula da Silva confirman los pronósticos que decían que los auxilios que la trifecta argentina esperaba recibir de Brasil llegarán con cuentagotas o nunca lo harán. Alberto Caracol Fernández fue a la asunción y, con la esencial ayuda de nuestro tan exitoso Embajador, Daniel Pichichi Scioli, lanzó a los cuatro vientos la idea de una moneda común, sugiriendo que se estaba avanzando en tal sentido. Sin embargo, el recién nombrado Ministro da Fazenda, Alberto Haddad, anunció que nada por el estilo estaba en la agenda económica de nuestro gigante vecino, o sea, un papelón más que, en modo alguno, desmerece la penosa trayectoria de la Cancillería kirchnerista.

Olor a calas 31-12-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 870


“Pero en ese país dispendioso y simulador también crecía un forúnculo que alguna vez habría de explotar: la pobreza”. Leonardo Padura


El martes, la reentrée de Cristina Fernández después de su condena por corrupción marcó el más que evidente principio del fin de su prolongado reinado sobre el peronismo más rastrero; me refiero, es obvio, a aquél que, por falta de un liderazgo verdadero y consciente del poder que le confería a ella su ascendiente sobre el Conurbano empobrecido, le perdonó tantas humillaciones con tal de conservar sus quintas y kioscos.

Como estaba escrito después de la espontánea y más que masiva concentración con la que fue celebrado en las calles el triunfo de la “scaloneta”, lo peor para la ajada imagen de la emperatriz hotelera fue el acto mismo ya que, en comparación, podría haberse llevado a cabo en una cabina telefónica y, en lugar de ómnibus, transportado a los fieles en una pequeña flota de Fiat 600. Sólo los muy, muy propios estuvieron allí, siempre prendidos a sus polleras para intentar sobrevivir en el desierto que los espera inexorable. Ella misma, postergando cualquier reacción hasta marzo, certificó la imposibilidad de hacerlos sacar de las mochilas sus bastones de mariscal y llevar a su imaginaria tropa a la victoria.

Sabiendo que quienes la escuchaban no cuestionan sus dichos o ni siquiera saben de qué habla, mintió descaradamente cuando estableció una línea de tiempo en la causa Vialidad para relacionarla con su propio derrotero político, y acusó a la Justicia de haberla demorado para que coincidiera con los calendarios electorales; el proceso se extendió tanto en el tiempo por las innumerables trabas, apelaciones, nulidades y chicanas, todas fracasadas, que interpusieron sus propios abogados. Insistir con que su “renunciamiento” no era tal, puesto se trata en realidad de una proscripción, tampoco fue una novedad, aunque sea rigurosamente falso.

Confieso que me equivoqué cuando aseguré tantas veces que la reina del Calafate generaría violencia en la calle para evitar que la tocaran los jueces, y cuando supuse que dispondría de ingentes batallones de narco sicarios, barrabravas, criminales liberados y patotas sindicales para defenderla. Por el contrario, la generalizada sensación de inevitable derrota está haciendo que las ratas desesperanzadas huyan del escorado buque: lo prueban los múltiples adelantos de las elecciones provinciales respecto a las nacionales y, sobre todo, las renuncias de Victoria Donda al comando del INADI, de Félix Crous (el caradura que desistió de su rol de querellante en todas las causas contra la emperatriz hotelera) al de la Oficina Anticorrupción, y de Betina Stein, al cargo de Directora del Banco Central, todos ellos incondicionales de la PresidenteVice.

Por su parte, Sergio Massa despidió, de muy mal modo, a Rodolfo Gabrielli como jefe de la Casa de la Moneda; ¿habrá sido por no imprimir billetes a la velocidad necesaria como para alimentar a los voraces pero efímeros conejos que el Aceitoso saca constantemente de la galera? El “éxito” del “plan soja II” sólo adelantó los ingresos normales del año próximo para cumplir las metas –dibujadas- con el FMI, pero obligó al Banco Central a comprar los dólares de $ 280 y venderlos a $ 180 y así impulsa una emisión descontrolada, ya que se suma al “plan platita 22” implementado para controlar la protesta social, sobre todo en el Conurbano bonaerense, con la intención de conservar allí el cargo de Axel Kiciloff y transformarlo en el bunker para la futura resistencia.

Claro que la inflación, de ese modo, no puede más que acelerarse: no es el dólar el que sube (menos de lo que debiera, si lo ajustáramos); es el peso el que baja por el exceso de papelitos de colores que inundan la economía. El Gobierno los absorbe con nuevas letras y bonos que, a su vez, duplican anualmente la deuda soberana por los siderales intereses que se ve obligado a pagar para atraer a los reticentes inversores.

La contrapartida siempre es la pobreza, que alcanza al 50% de los argentinos, un pavoroso porcentaje que el resto de esta sociedad tan, pero tan apática ya ha internalizado y con el cual parece dispuesta a convivir. Ignora que no puede seguir bailando en este endeble escenario pues el riesgo de que ese inaceptable e inmoral forúnculo reviente y se transforme en un cataclismo social es cada vez más inminente.

El 2022 resultó, en muchísimos aspectos, trágico. Las guerras nunca dejaron de existir, pero la cruel invasión de Rusia a Ucrania, cuyo fin parece aún lejano, produjo un sismo en la economía mundial por el aumento de precios de la energía y de los alimentos que provocará mayores tragedias humanitarias. Y la epidemia de Covid, que volverá a expandirse tan pronto los chinos (que han tenido recientemente 250 millones de contagios) comiencen a llegar masivamente a otras geografías, augura que también continuará nuestra angustia.

Pero, dado que somos amantes de las matemáticas y, por ello, a celebrar el cambio de calendario que hoy sucederá, sólo me resta desear el mejor 2023 posible para todos y nuestras familias, pese a tener la certeza de que no será demasiado amable, menos aún para los argentinos.

El Messías demostró su Poder 25-12-22

por Alberto A. Anselmi

La virtud genera virtudes, la corrupción genera más corrupción.

Las grandes virtudes de este muchacho, que cierra grietas con los adolescentes de nuestra generación, que aprehenden de Él, de ese Lío Messi, que sólo emite maravillas desde su Alma Pura y Bella, con su corazón de niño prodigio, al que un día su Salvador, desde la Madre Patria lo vino a buscar para darle lo que Argentina no podría darle. Lo hizo con una servilleta de papel en la mesa de un bar, como purificando a través de ella sus labios para decir Sí al que lo elevaría a lo más alto… y huay si lo hizo, fue como un Salvador que lo iba a ayudar a que creciera, con la venia de su padre, don Jorge Messi.

Y ahí comenzó todo, luego de haberlo descubierto y llegar a nuestra tierra como el gran Salvador. Y así comenzó, empezando por hacerlo crecer. Y “La Pulga” comenzó a estirar sus huesos, generando mayor solidez en ellos y altura, para estar acorde con su altura espiritual.

El Niño Precoz predicaba como el Mesías, pero no con su boca ni sus manos, sino con sus piernas, que se convirtieron en miles de rótulas y ventosas que absorbían esos balones del gran deporte mundial. Manejaba sus gambas como nadie en la historia pudo hacerlo. Mesías significa: “El Salvador o Liberador de un grupo de personas o de la humanidad”.

Además, la relación que tiene su apellido es con el siervo, que no es otro que el acrónimo (o sea extremo) en inglés que surge de usar la palabra cabra (GOAT). "Greatest Of All Time", cuya abreviación es G.O.A.T., se traduce como el mejor de todos los tiempos.

Ya en Rosario, la envidia de algunos que no eran de su club, Newell’s Old Boys, comenzaban a insultarlo como “pecho frío”. Jamás tuvo palabras con los que pretendían cargara con esa cruz. Pero Él cargó su estandarte de “gran niño argentino” con orgullo, sin odios ni rencores.

Messi es, no sólo el más grande sino el mejor de todos los tiempos en nuestro planeta, con su luto por los muertos vivos y su roja sangre para mostrar al mundo su gran virtud que agigantaba su gran humildad, que llegara a conseguir que tantos jóvenes se alejaran de drogas y vicios, encontrando el mayor destresante, a través de la esfera de cuero, que mejor que una religión, encontrara la dicha para ese Amor y el Amor para esa dicha.

Hoy este grande, que como una semilla brotó de nuestra tierra argentina, sirvió para que 5 millones de argentinos desde las calles y otros 40 millones más desde sus hogares, se pudieran unir, en un gran abrazo, ajenos a toda connotación política, no siendo genuflexo ante el poder corrupto que nos gobierna, mostrándonos dónde está la solución, sin grietas para sacar adelante, con la mentalidad de mediados del siglo 20 y esa cultura que perdimos cuando ya la teníamos en nuestras manos, siendo el mejor país del  mundo.

Hoy llegó nuestro Salvador Real en cuyo advenimiento hay puesta confianza desmedida. Que sea esta llegada, a través de esta Estrella Tercera, que iluminó nuestro planeta, la que nos permita ver ante este verdadero “Big Bang”, la gran explosión que elimine la altísima corrupción que fundió al Gran Pueblo Argentino.

Ahora, el Caracol es subversivo 24-12-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 869


“Cuando el poder del amor supere al amor por el poder, el mundo sabrá qué es la paz”. Jimmy Hendrix


En el terreno judicial, el horribilis annus de Cristina Fernández y sus cómplices parece no terminar nunca, y el próximo traerá, seguramente, noticias peores para su banda saqueadora. A su condena por corrupción, sumó la confirmación por la Corte Suprema de la prisión de Milagro Salas, la violenta y torturadora ladrona jujeña y, luego, agregó en pocos días el rechazo a la pretensión de Cecilia Moreau, Presidente de Diputados, de dejar sin efecto la designación de los representantes en el Consejo de la Magistratura. El peor broche fue el dictado de la medida cautelar que obliga a la Nación a dejar de aplicar la quita en la coparticipación federal que impuso unilateralmente, hace dos años, un decreto presidencial para calmar a la insubordinada Policía bonaerense y salvar a Axel Chiquito Kiciloff, custodio del futuro refugio de la emperatriz hotelera.

Sabíamos que ella no aceptaría tranquilamente la derrota en su sempiterna batalla contra la Justicia, pero que el profesor –no lo es, por cierto- de Derecho llegaría a tal extremo de bastarda sumisión y se incorporara sin chistar a los regimientos kirchneristas que tanto lo humillan probó, una vez más, la ruin catadura moral de Alberto Fernández. Por orden de la Reina Batata, los gobernadores del Chaco y de Buenos Aires, el único perjudicado por el fallo, y otros sátrapas provinciales, apretaron al Caracol y lo transformaron en un subversivo de tomo y lomo. En general, pensamos que los golpes de Estado sólo pueden ejecutarse contra quien está a cargo del Poder Ejecutivo, ignorando que los otros dos (Legislativo y Judicial) también pueden ser sus objetivos.

El jueves por la noche, al desconocer la medida cautelar de la Corte, detonó una crisis institucional que tendrá graves consecuencias. Se puso la Constitución de sombrero y, así, incurrió en varios delitos, todos imprescriptibles. Recurrió a los mismos argumentos políticos que han sido el andamiaje permanente de las operaciones de Cristina Fernández para alzarse contra la República y se colocó a tiro de los jueces –ya hay denuncias penales en su contra- y del Congreso, aunque allí no prosperarán los pedidos de juicio político contra el Presidente y la Vice, salvo que los representantes de las provincias que se negaron a acompañar esta gravísima payasada y estuvieron ausentes del cónclave sedicioso, voten a favor.

Me pregunto si el Caracol no se enteró de lo que hicieron mandatarios verdaderamente poderosos, como Donald Trump o Jair Bolsonaro, y hasta su amigo Pedro Sánchez quien, cuando el Tribunal Constitucional abortó sus avances para desmembrar a España y terminar con la democracia, se limitó a acatar el fallo. Claro que, en cambio, se habrá inspirado en el fallido autogolpe que intentó Pedro Castillo disolviendo al Congreso, pero debería recordar que varios presidentes peruanos están prófugos o presos.

Lo dramático de lo sucedido es que agravará la profunda crisis económico-social y afectará aún más a las eventuales inversiones que, aunque fueran a largo plazo (por ejemplo, Vaca Muerta), estaban ansiosas de llegar a nuestras playas por nuestra enorme posibilidad de atender a las acuciantes necesidades que este mundo, tan agobiado por los conflictos bélicos, está sufriendo: alimentos, agua potable, energía, minerales (litio, cobre, etc.). Ya se miraban con aversión la falta de seguridad jurídica que reina entre nosotros y los avances de un Gobierno que cambia permanentemente las reglas para favorecer a los amigos del poder y a quienes pagan coimas para obtener prebendas, pero esto supera a todo lo imaginable. Los mercados financieros reaccionaron con enorme preocupación al disparate institucional que las aspiraciones de impunidad de la emperatriz hotelera produjeron, y el efecto se vio en la fuerte depreciación del peso.

A Sergio Aceitoso ____Massa, el tercer miembro de esta penosa trifecta, sólo la preocupación de los Estados Unidos por el avance de Xi Jinping en la región –algo que ya tampoco se ve tan claro- le permite sortear, trimestre a trimestre, las exigencias de los acuerdos financieros cuyas metas incumplidas, pero dibujadas, son tolerantemente aceptadas por el FMI para no aparecer como el ogro que mandó a la Argentina al default. Debo reconocer que tiene muy mala suerte porque, además de la declinación de la economía china, principal comprador de nuestros productos, y la prohibición de devaluar la moneda que le impone el kirchnerismo, la inédita sequía que afecta a gran parte del país complicará más, si cabe, la situación cambiaria y, sin duda, llevará a una mayor brecha entre las diferentes –ya son quince- cotizaciones del dólar con que asombramos, una vez más, al mundo entero.

Desde el otro lado, desde la imaginada Patria Grande, el apoyo que creía Argentina poder recibir del Brasil de Luiz Inácio Lula da Silva, del Chile de Gabriel Boric o de la Colombia de Gustavo Petro –la Bolivia de Luis Arce tiene sus propios problemas graves- no se extenderá más allá de los gestos protocolares. Vladimir Putin y los ayathollas no son aliados que puedan exhibirse ante una opinión pública sensibilizada por la guerra contra Ucrania y las salvajadas que allí cometen los ataques rusos, y por la condena a muerte en la horca de un futbolista de renombre por el solo hecho de haberse manifestado a favor de la liberación de las mujeres en Irán, un hecho sobre el cual resuena con estruendo el silencio de nuestro Gobierno y de los organismos de derechos humanos y las asociaciones feministas.

En medio de este enloquecido escenario, esta noche renacerá Jesús y, con él, la esperanza de paz y amor universal, aunque aquí, cada vez, este enorme propósito parezca más lejano. Pese a todo, ¡feliz Navidad!

Los milagros que faltaban 17-12-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 868


“Algún oscuro botón será llamado a cargarte. Nadie quiere el estandarte si es lunga la procesión” 

Edmundo Rivero


El hecho que el Vaticano exigía para comenzar el proceso de canonización de la emperatriz se produjo esta semana: la recuperación, en sólo tres días, de su contagio de Covid, merece ser calificado de milagro. El 8 informó estar afecta da y creí que era una excusa para ocultar su pánico a que la pretensión de tener su propio “17 de octubre” fracasara porque el peronismo la abandonara, después de haberla acompañado en su caminata hasta la puerta del cementerio. El miedo quedó justificado cuando gobernadores e intendentes del Conurbano se reunieron con los grandes dirigentes de la CGT para organizar un peronismo sin Cristina.

Pese a que nadie puede prever la evolución de la enfermedad en cada caso, el acto previsto para el lunes 12, que contaría con la presencia de muchos gerontes de la izquierda ladrona hispano-americana con una multitud a sus puertas, fue pospuesto hasta el 19. Ella reapareció en el Senado, sin barbijo, sólo cuatro días después del resultado positivo del testeo, y la confirmación de mi sospecha fue la suspensión hasta marzo del evento, aduciendo problemas de agenda de los invitados internacionales.

Ese sainete muestra la pérdida de poder de Cristina Fernández tanto al interior del Frente para Todos cuanto frente a la sociedad en general; si ella, la única potencial candidata –no creo en su radical “renunciamiento”- con posibilidad de conservar el núcleo duro se ve tan escasa de adhesiones, ¿qué queda para el resto, Sergio Aceitoso Massa incluido? Porque Alberto Fernández cayó nuevamente en el ridículo convocando a un acto de autoelogio por sus invisibles logros y recibió, en respuesta, la insultante ausencia de gobernadores, ministros e intendentes.

Esta semana el Gobierno hizo nueva gala de su extravío en materia internacional, privilegiando la ideología de izquierda con que se disfraza por sobre los intereses de la Argentina. Inmiscuyéndose en los asuntos internos del Perú, donde su Presidente –Pedro Castillo- fracasó en su autogolpe y fue destituido por el Congreso con un recurso estrictamente constitucional, suscribió una misiva de apoyo al detenido ex mandatario acompañando a Andrés M. López Obrador (México), Gustavo Petro (Colombia) y Luis Arce (Bolivia); todo sea por una “Patria Grande” que se resiste a renacer.

Pero no terminó allí el desvarío. Concedió asilo a una ex Ministra del Ecuador, condenada en todas las instancias por corrupción, que está refugiada en nuestra Embajada en Quito desde 2020, y generó un grave conflicto diplomático con el Presidente Guillermo Lasso, ya que éste se negó a conceder la visa necesaria para que pudiera abandonar el país; con toda razón, sostuvo que los tratados internacionales no protegen a los ladrones.

Debe incluirse en ese sesgo tuerto la protección de nuestra Cancillería a regímenes que desprecian los más elementales derechos de sus pueblos en todos los foros internacionales, se trate de Cuba, Nicaragua, Venezuela, Irán o Rusia. Debe agregarse el estruendoso silencio de los organismos de derechos humanos, cooptados por el kirchnerismo para disfrazarse de izquierdista, aunque los dictadores latinoamericanos ahoguen en sangre los reclamos ciudadanos, Vladimir Putin sea un homófobo radical, bañe en sangre a Ucrania y envenene a sus adversarios, o los ayathollas cuelguen de grúas a quienes se atreven a protestar por sus asesinatos.

Otro milagro fue la burla a la sociedad derivada de la información del índice de inflación –un 4.9%- de noviembre, producto de la “contabilidad creativa” aplicada por el Aceitoso para mostrar el cumplimiento de las metas del FMI; logró ese triunfo midiendo precios de productos a los que resulta difícil acceder, aprovechando la transitoria caída en el precio de la carne motivada por la inédita sequía que obliga a liquidar rodeos, anticipando ingresos fiscales con el dólar soja I y II, imponiendo una fuerte recesión y apretando descaradamente a industriales y comerciantes.

No durará mucho esta pax massista con brecha cambiaria y hermético cierre de importaciones porque continúa imprimiendo para financiar el déficit, y los restantes náufragos de su Titanic siguen con su fiesta de gastos injustificables, aumentos en las plantas de personal, aviones presidenciales y “planes platita” para sostener candidaturas provinciales y municipales, mientras hipotecan el futuro de todos nosotros.

Corresponde una breve mención a los nuevos y fuertes reveses que el kirchnerismo sufrió en su guerra contra la Justicia, ya que es probable que los disgustos continúen pronto en ese terreno con los inminentes fallos que podrían revertir raros sobreseimientos a Cristina Fernández y sus hijos sin celebrar el juicio. La Corte Suprema ratificó la designación de los representantes de la Cámara de Diputados en el Consejo de la Magistratura, abortando así la tentativa de la obediente Cecilia Moreau para frenarla, y convalidó la condena a 13 años de cárcel a Milagro Sala, la violenta bandolera –una verdadera “Hood Robin”- que tanto tiempo mantuvo aterrada a toda la Provincia de Jujuy, a quien Alberto Fernández visitó recientemente para expresarle su aprecio y su respaldo.

El último milagro puede llegar mañana, cuando es altamente probable que la Selección nacional nos regale el premio mayor en Qatar; los argentinos, sobrevivientes de una amarga realidad que nos desespera día a día, necesitamos de un baño de alegría, aunque sea sólo futbolística y muy efímera y Lionel Messi y sus chicos pueden traérnoslo. ¡Ojalá así sea!

Leona herida y enloquecedora 10-12-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 867

“Todo soldado francés lleva en su mochila el bastón de mariscal”. Napoleón Bonaparte


Inmediatamente después de la sentencia que la condenó por la inédita corrupción y el monumental fraude al Estado que, organizados por su marido a imagen y semejanza de su gestión en Santa Cruz y que ella heredara y comandara, Cristina Fernández, una vez más, descerrajó contra la República y sus instituciones una nueva ráfaga de balazos; discutir si fue planificado o auténtico el demencial, angustiado y extraviado estado de ánimo que exhibió por televisión, resulta por completo irrelevante.

Llamó la atención que, en su furia, no dudara en tirar a las brasas la memoria de su “compañero de vida”, Néstor Kirchner, jurando que él era “amigo de negocios de Lázaro Báez” (sic) y no ella. En el mismo movimiento lo hizo con todos sus sucesivos -y leales hasta la humillación- jefes de Gabinete (Alberto Fernández, Sergio Aceitoso Massa, Anímal Fernández, Juan Manuel Abal Medina y Jorge Capitanich), preguntándose por qué no habían sido imputados en la causa, pese a ser los responsables de la ejecución del presupuesto nacional.

Mis pronósticos apocalípticos sobre las movilizaciones que, suponía, se realizarían el martes, cuando se leyó el veredicto, no se cumplieron. Pero la condenada recurrió a un léxico marcial, dijo ser víctima de un fusilamiento, y, auto-percibiéndose Napoleón, convocó a los peronistas a sacar de las mochilas sus propios bastones de mariscal. Que ella, que tantas veces lo llevó a la derrota (2013, 2015, 2017 y 2021), aún tenga tan importante peso específico entre los castrados señores feudales, barones del Conurbano y sindicalistas, demuestra que la decadencia nacional, de la cual el famoso “movimiento” fue principal artífice, también lo ha afectado.

Amén del coro habitual de irreductibles zánganos que actúan como voceros de la multiprofesional (abogada exitosa, reina hotelera, arquitecta egipcia y, ahora, el propio emperador) y multiprocesada Cristina Fernández, hubo una voz que, por sus nefastos antecedentes como enriquecido espía, reviste especiales características: el General César Milani pidió una “reforma revolucionaria de la Justicia” (sic) y convocó a un levantamiento popular y armado para dirimir en la calle el falso dilema kirchnerista “mafia o democracia”, inventado por ella para justificar su ansiada impunidad.

El lunes llegarían a Buenos Aires, en apoyo de la peligrosa fiera herida por la Justicia y, mal que le pese, también por la historia (como surge claramente de los titulares de toda la prensa mundial que dieron cuenta de su primera condena y de la vergüenza que significa para la Argentina que se mantenga en su cargo), la recua infame de ex presidentes que conforman el Grupo de Puebla, incluyendo al prófugo Rafael Correa, condenado por la Suprema Corte del Ecuador por ladrón, al ex Juez Baltasar Garzón, destituido por prevaricador por los Tribunales españoles, y penosamente a José Pepe Mugica, que se ha visto obligado –o está senil- a venir sólo a acompañar a una banda de delincuentes; desde Caracas, y como no podía ser menos, Diosdado Cabello se sumó.

Esos gerontes, que anhelan una “Patria Grande” encarnada en el criminal y megacorrupto socialismo del siglo XXI, sufrieron una baja en sus filas el miércoles, cuando el Congreso del Perú destituyó al Presidente Pedro Castillo y la Justicia lo mandó a la cárcel. Comparte su prisión con otro ex Presidente, Alberto Fujimori, huérfano de todo apoyo por ser de derecha; una vez más, el sesgado discurso de la izquierda internacional distingue entre hijos y entenados.

Rápidos para los mandados, los emasculados seguidores de nuestra PresidenteVice convocaron a una concentración de pobres subsidiados para respaldar -con los habituales argumentos de persecución y lawfare- a quien ha sido la causante de la miseria en que hoy sobreviven. ¿Tiene algo que ver la escasísima repercusión que la condena ha tenido entre la gente común con la postergación del evento invocando el contagio con Covid de Cristina Fernández? Que, cuando recién se la ha diagnosticado y no se conoce cómo será la evolución de la enfermedad, ya se haya fijado una nueva fecha (el lunes 19), permite todas las especulaciones; presumo que aspiran a ver a Lionel Messi levantar la copa y, con ella, a la llegada de una ola de alegría que lleve al “pueblo” a olvidar sus cotidianas y crecientes penurias y aceptar acompañarla en su bastardo combate contra la Ley.

Todo esto se reduce a gestionar un “operativo clamor” que le “impida” cumplir su enfática promesa de no presentar su candidatura a cargo alguno en las próximas elecciones, que tanto preocupó a sus seguidores; su nombre sigue siendo aún un inexplicable imán para una porción de votantes que, sin él en las boletas, abandonarían a los caudillos locales, que necesitan colgarse de su vestido para conservar sus inmundas canonjías.

De todos modos y salga pato o gallareta el lunes próximo, convénzase, ella impedirá que haya paz social en la Argentina por muchos años, todos los que deberán transcurrir hasta que quede firme esta sentencia y las muchas otras que la sucederán, que deba cumplir las sucesivas condenas que la esperan y que le sean decomisados los pocos bienes que puedan encontrarle. En ese arduo camino, con seguridad convertirá en un verdadero infierno la próxima gestión presidencial, que heredará todas las bombas sin explotar (¿pocas o muchas?) que el Aceitoso haya conseguido traspasarle con su famoso “Plan Durar”.

La República de sombrero 03-12-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 866


“Es habitual que los ciudadanos de las democracias liberales modernas –un gran número de los cuales ejerce el privilegio de la libertad para preocuparse más por la suerte de un equipo deportivo que por la política- queden impresionados por los fanáticos de otras culturas”. 

Max Hastings


Nuestra “emperatriz hotelera” está dispuesta a destruir lo que queda del país para buscar una ya imposible impunidad. El camino hacia el martes próximo, día elegido por el Tribunal Oral para dictar la sentencia en la causa Vialidad, que tendrá sólo consecuencias simbólicas por años hasta quedar firme, estuvo sembrado de obstáculos que puso el kirchnerismo para impedirla; hasta ahora, la República consiguió removerlos.

Las maniobras que intentó para evitar el principio de un fin tan amargo –seguirán otros fallos adversos para Cristina Fernández, sus hijos y sus cómplices de todo tipo- comenzaron en su propia gestión e incluyeron la modificación de la integración del Consejo de la Magistratura (el organismo que escoge y destituye a los jueces y administra el presupuesto del Poder Judicial), la presión a los magistrados para que se jubilaran y dejaran vacantes susceptibles de ser llenadas con militantes, las falsas denuncias contra todos los considerados enemigos de su santa causa, la tentativa de “democratizar” la Justicia, los inmundos ataques a la Corte Suprema, al Procurador y a jueces y fiscales y la persecución a los medios de prensa, pero todas ellas fracasaron.

El jueves, en la Cámara de Diputados y en medio de un escándalo, se frustró la renovación del mandato de la Presidente, Cecilia Moreau, por su maniobra de respaldar tanto el golpe de Estado que la emperatriz hotelera encabeza contra el Poder Judicial como su maniobra para paralizar ese Consejo, y quedó demostrada la enorme debilidad legislativa y política que afecta al Frente para Todos, que ha perdido hasta el apoyo de los diputados de la izquierda trotskista.

Con el provocador lema “Si la tocan a Cristina …”, ya se pararon de manos ATE Capital, los camioneros de Pablo Moyano y los “¿Miles?” de Luis D’Elía quienes, con su habitual lenguaje extorsivo, amenazan con paralizar la administración del Estado y con cortar todas las rutas del país; también anticiparon que resistirán, a como dé lugar, una victoria opositora en las próximas elecciones. La pregunta de oro debiera ser cómo reaccionará esta vez una sociedad tan apática, que sólo se distrae mirando hacia Qatar, para rechazar estas invasiones bárbaras que prometen asolar Roma.

Nada hicimos cuando los salvajes energúmenos apedrearon a la Policía de la Ciudad mientras se discutía en el Congreso una reforma previsional que, como está a la vista, hubiera beneficiado a tantos jubilados, o cuando acampan en avenidas impidiéndonos circular; ¿toleraremos pacíficamente que nuevamente agredan a la democracia e intenten arrasar con Comodoro Py?, ¿de qué fuerzas reales dispone el Estado para asegurar la paz?, ¿querrá utilizarlas o será cómplice de estos fanáticos enloquecidos, como sucedió recientemente en el sur con los terroristas pseudo-mapuches?

La situación se aproxima a un desenlace que promete ser violento; la proximidad de las fiestas de fin de año, que ponen en primer plano las necesidades más elementales de individuos y familias, en un marco de pobreza y miseria generalizadas, de creciente inseguridad, de inflación al 100%, de una inminente recesión, de corrupción rampante (subsidios, vacunas, sobreprecios y nuevos aviones), de indignación y descontento generalizados, tienden a reforzar esa promesa.

La PresidenteVice ha jugado a ser oposición al gobierno que inventó e integra; nadie describió mejor ese rol esquizofrénico que Jorge Liotti cuando escribió: “Cristina Kirchner elogia en público y en privado a Massa, porque necesita que siga sosteniendo la gestión de un gobierno con el que es muy crítica”. Pero otro ingrediente de la insalubre sopa es la salud de Alberto Fernández, que podría obligarlo a renunciar o pedir licencia; la Constitución dice que ella debería asumir en su lugar y, junta, la responsabilidad de timonear este Titanic que se está hundiendo.

Si se planteara esa situación, deberá elegir entre aceptar o renunciar a su vez, dejando la brasa candente en manos de la Senadora Claudia Ledesma Abdala de Zamora (o, sucesivamente, la Diputada Cecilia Moreau y el Presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti), que debería convocar a la Asamblea Legislativa para designar a quien deba completar el período. ¿Intentará la “abogada exitosa” recurrir a sus propios “jóvenes idealistas” para derrotar a la Justicia o utilizará nuevamente como excusa la salud de su hija para huir a Cuba? Tal vez haya sido tema de la reunión que mantuvo recientemente en su despacho del Senado con el ex Presidente de Ecuador, Rafael Correa, convicto, prófugo y refugiado en Bélgica.

Otra posibilidad, no descartable ab initio, es que el kircherismo proponga a la oposición adelantar el calendario electoral. No lo creo, pero, si se diera, puede que Juntos por el Cambio lo acepte, aunque sólo fuera para evitar que continúe deteriorándose la desastrosa situación socio-económica del país y se incremente el peso de la herencia que –supone- recibirá.

Como se ve, la realidad jamás da respiro en esta enloquecida Argentina, un país siempre al borde de un abismo aún más terrible que la absoluta decadencia que emprendió con vocación suicida hace tantas décadas. Reitero mi consejo de rezar, pero, también, de comprar cascos y chalecos antibalas, porque resultarán indispensables a muy corto plazo.

 ¡País al agua!  26-11-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 865


“El verdadero soldado no lucha porque odia lo que tiene por delante, sino porque ama lo que tiene por detrás”. Gilbert K. Chesterton


La Argentina ya se cayó del buque en que un mundo, tan golpeado por las consecuencias de la criminal invasión rusa a Ucrania, pide desesperadamente aquellas cosas que podríamos vender si tuviéramos libertad para comerciar y competir y, por supuesto, las inversiones necesarias: alimentos, petróleo, gas, agua potable, minerales, tecnología agroindustrial, capacidad informática, etc... Es imposible que esos capitales aterricen en este país enloquecido y suicida, que carece de seguridad jurídica, o sea, no pasará hasta que recuperemos la confianza perdida.

En un escenario global de exceso de dinero, quienes podrían venir observan, con indisimulado horror, las incongruencias que significan 50% de pobreza y 10% de miseria, economía con una informalidad de 50%, inflación de 100% anual y creciente, quince tipos de cambio diferentes, proliferación de cepos y prohibiciones, corrupción rampante y desmadrada, trabas a las importaciones esenciales, imposibilidad de remisión de ganancias, insólitas protecciones sectoriales para evitar la competencia, desprecio por la propiedad privada, demenciales sistemas impositivo y laboral, educación pública destruida, expansión geométrica del narcotráfico y la inseguridad, extensión de la violencia sindical extorsiva, multiplicación de planes sociales y, actualmente, la insólita conversión de Cristina Fernández en jefa de la oposición a su propio Gobierno y el golpe de Estado que está ejecutando, desde el Senado, contra la Corte Suprema de Justicia.

Mauricio Macri creyó que bastaba con sus racionales pero tibias políticas de sinceramiento para generar una lluvia de esenciales inversiones, olvidando que la confianza es de cristal y, cuando se rompe, su reconstrucción exige mucho tiempo y mucha perseverancia. En especial porque los dueños del capital, que conocen nuestra historia mejor que nosotros, recuerdan nuestra fama de defaulteadores seriales, que fuimos capaces de falsificar las estadísticas públicas y romper arbitrariamente contratos y concesiones, y que nuestro Congreso deroga sus propias leyes cuando el poder político así lo requiere. Quien se quema con leche, ve una vaca y llora, y llevan años quemándose con nosotros.

El oficialismo, atónito, se muestra incapaz de metabolizar una situación inédita en sus gestiones anteriores: el viento ha borneado y sopla decididamente en contra. La sequía mermará cosechas y recaudaciones por retenciones, la bola de nieve de las Leliqs y otros bonos ha crecido tanto que peligra su refinanciación aún a tasas siderales y lo obligará a seguir emitiendo para cubrir todo aquello que no capte del mercado, el loteo de ministerios y áreas de decisión paraliza la gestión, los precios internacionales de la energía que deberá comprar siguen elevados, la falta de dólares no le permite abrir la importación de insumos esenciales, carece de acceso a los mercados externos de deuda, crece la percepción de una fuerte recesión, el empleo privado no crece y los jóvenes lo abandonan. Qatar no se trasformó en el somnífero social que muchos imaginaban y, aunque la selección nacional pudiera llegar a la final, su efecto no durará lo suficiente para paliar tantas necesidades angustiantes.

Sergio Aceitoso Massa sigue haciendo equilibrio, utilizando la imparable inflación como piedra de honda contra el Goliat del gasto público. Pero está claro que la emperatriz hotelera, aún aterrada ante la probabilidad de verse obligada a asumir en directo la Presidencia y tomar el timón simbólico de este desastre, no se resignará a poner en riesgo su principal bastión electoral y futuro refugio para atravesar el desierto, obligándolo a abrir aún más la bolsa para financiar a la Provincia de Buenos Aires y permitirle a Axel Kiciloff continuar designando a miles de militantes y parásitos. Además, ella evita que sus quintas y cajas privadas dentro de la Administración (PAMI, ANSES, Aerolíneas, AySA, YPF, Hidrovía, etc.) vean recortados sus ingentes recursos.

Es cierto que tampoco contribuye a enviar señales tranquilizadoras una oposición que sigue exhibiendo impunemente sus bastardas disputas, sus injustificables festejos y viajes, y sus “sensualismos de camastro”, como diría Leopoldo Lugones. La ausencia de un público compromiso de los partidos que integran Juntos por el Cambio de respetar a rajatabla un programa de gobierno común, convirtiéndolo en vinculante y obligatorio para la fórmula que surja de las PASO (si es que el cristi-camporismo no consigue doblar el brazo a Alberto Fernández, que sabe que suspenderlas significará el definitivo certificado de defunción de su gestión), se está transformando en un duro pasivo. Mucho tiene que ver esa falencia, que permite suponer que la coalición ya se siente –estúpidamente, por cierto- triunfadora en las próximas elecciones, en el renovado crecimiento de la intención de voto de Javier Milei y su proyecto anarco-capitalista.

Aún estamos a tiempo de evitar ahogarnos y morir en ese proceloso mar de problemas e inconsistencias, con los cuales hemos convivido hace ya demasiadas décadas, y con todas las resistencias y hasta probablemente violentas manifestaciones, tanto en el terreno social cuanto económico, que deberá enfrentar quien se atreva a marcar el camino de esa redención común. Deberá tocar muchos intereses: empresarios acostumbrados a tener ventajas y cotos de caza exclusivos, sindicalistas eternizados y enriquecidos, fanáticos kirchneristas, narcotraficantes protegidos por el poder, policías, jueces y fiscales cómplices del crimen y, por supuesto, de los millones de empobrecidas víctimas de este populismo mafioso.

Pero necesitamos tomar colectiva consciencia de ese fenomenal y angustioso inventario y convencernos todos de la urgencia de nadar hacia una aún muy lejana orilla de simple normalidad. El esfuerzo que deberemos realizar es inconmensurable, y las correcciones necesarias insumirán varios períodos presidenciales consecutivos, pero vale la pena emprenderlo y mantener el rumbo contra viento y marea. La Argentina misma está en juego y, hasta ahora, vamos perdiendo por goleada.

La Masacre de González, fue por locura, ¿fue por el alcohol? No tiene la culpa el Chancho sino… 25-11-22

por Alberto A. Anselmi

El aberrante delito que habría cometido el Legislador Oscar Félix González, sumado al abandono de personas por haber huido del lugar, sin siquiera arrimarse a las gravísimas víctimas, más aún, sabiendo que es médico. Alejandra Bengoa, a quien dejó morir sin prestarle ayuda. Su hija menor, Marina, y Alexa, su amiga, gravemente internadas en Córdoba.

Su frialdad y desapego lo convierte en otro enemigo del Pueblo, como el “Señor” Gobernador, cuando expulsa, (como a nosotros) a los Periodistas que, a pesar de ser invitados, unos tremendos y corpulentos guardaespaldas nos amenazan con prepotencia y violencia para que no nos arrimemos al Gobernador para hacerle preguntas, porque saben que son evidentes y conclusivas, donde ante las evidencias no encuentran respuestas favorables.

González circulaba, además de que habría estado pasado de alcohol y sin permitir le hicieran el análisis correspondiente. El auto había sido robado en Buenos Aires y llevado a Villa Dolores por un colombiano. La Justicia no lo devolvió a su legítimo propietario.

Ahora, su propietario original tendrá que reclamarle un resarcimiento al Estado de la Provincia de Córdoba por el siniestro vial que protagonizó González.

También se descuenta que el Estado cordobés, que era el garante del BMW X1 en guardia judicial, va a terminar por ser el demandado, con una indemnización por todo el daño causado en la tragedia vial de las Altas Cumbres.

El BMW X1, el que pertenecía a un vecino de Buenos Aires, le adulteraron la documentación y lo llevaron a La Rioja, hasta que después lo intentaron colocar en la concesionaria de Villa Dolores.

La Justicia de Córdoba no ha explicado aún por qué durante estos tres años nunca le devolvió el auto al dueño original, el que había denunciado el robo en Morón, ya que sobre esta persona no hay ninguna acusación que justificara la retención judicial del vehículo.

Habría que investigar: 1. Por qué la Fiscalía, que primero intervino fue de Villa Dolores. 2. Por qué no se le hizo halitosis alcohólica a González... y si 1 y 2 están relacionadas. Y 3. Si en la negativa de González a ello y a las autoridades, no hubo desacato o desobediencia a la autoridad o abuso de poder de González y la policía que intervino... por eso tenía un registro de Las Tapias que no está en línea con el registro nacional, por lo tanto, no quita puntos y don Oscar vivía en Villa Dolores y no en Las Tapias.

Es ilegal que González haya circulado durante 3 años con un vehículo con chapa adulterada y toda la documentación “trucha”.

Nuestra Constitución Nacional menciona que ante la Ley y los impuestos todos los ciudadanos son iguales, pero González y sus “compañeros”, estarían exentos de esta “pavada”.

Cualquier buen vecino estaría detenido por el sólo hecho de documentación adulterada, o conducción peligrosa, o haber pasado en la doble línea amarilla, o abandono de persona, cuando todavía estaba viva la señora del Sandero y más aún que un funcionario de “Alta Gama” como este Legislador, que tiene la obligación de dar el ejemplo, pero si actúa igual que los chorros, qué podemos esperar de los que actúan como Oscar Félix con total impunidad. Qué es peor; ¿un chorro o un político de esta talla?  ¿Cuántas analogías existirían ante tamaña comparación?

 Sutil confesión  19-11-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 864


"No temas ni a la prisión, ni a la pobreza, ni a la muerte. Teme al miedo”. 

Giacomo Leopardi


El paupérrimo, inconexo y sesgado discurso que Cristina Fernández descerrajó contra la sociedad el jueves al anochecer, merece integrar la antología mundial de la hipocresía y dejó, muy a pesar de la voluntad de la disertante, algunas claras certezas: siente pavor y, como consecuencia, una enorme debilidad electoral, que afecta en su personal situación penal. Para darle la razón, hasta un insignificante Anímal Fernández, su Ministro de Seguridad, se atrevió a retrucar ayer sus dichos sobre la Gendarmería.


La escasa concurrencia (el estadio tiene capacidad para 48.000 personas, y se veían claros en las tribunas) al acto en La Plata confirmó que ya no atrae a los más jóvenes, que no vivieron los años de bonanza que permitieron que Néstor y a ella misma hacer populismo con mucho dinero, y que hoy deben subsistir en un universo infinito de exclusión, miseria, drogadicción, falta de educación y carencia de futuro. Resultaron patéticas sus tentativas de identificarse con los hambreados jubilados –ella, que cobra 3 millones de pesos por mes- o con los habitantes del Conurbano, abandonados a la inseguridad por obra de sus Axel Kiciloff y Sergio Berni.


Utilizando un disfraz peronista, el “movimiento” al que –hay pruebas en las redes sociales- despreció toda su vida, hasta el extremo de insultar a su fundador, buscó insuflar en los grandes ex-machos-alfa territoriales la necesidad de unirse a su bandera para conservar el poder; pero éstos, que ya huelen el perfume de las calas y tienen una gran experiencia, están separando los comicios locales de las elecciones nacionales para evitar que ella los arrastre a la profunda sima que se abrirá a sus pies.


Como era dable esperar, nuevamente arremetió contra la Justicia –el “partido judicial”- de la que siente el aliento en la nuca e insistió con la necesidad de su “democratización”, que no logró concretar en su apogeo y, otra vez, mientras acusaba a Juntos por el Cambio de estar detrás del supuesto atentado contra su vida que actuó una triste pandilla de marginales, convocó a un “acuerdo” para erradicar la violencia política y defender las instituciones. Pero no mencionó siquiera al golpe de Estado que organizó y ordenó ejecutar a su bastarda tropa de senadores contra el Poder Judicial al desobedecer un fallo de la Corte Suprema, a contramano de lo que ordenan la Constitución y el Código Penal; todos, tarde o temprano, deberán responder por ello puesto que se trata de delitos imprescriptibles.


Una vez más, y rodeada por funcionarios y legisladores oficialistas, buscó disfrazarse de jefa de la oposición a un gobierno que ella misma inventó y que la tiene nada menos que como Vicepresidente; pero, si un incidente de salud como el que lo afectó esta semana incapacitara a Alberto Fernández, se vería obligada a ejercer la primera magistratura e intentar comandar este muy escorado Titanic en el último y pavoroso año de su singladura. De darse esa situación, la llevaría a un todavía más estrepitoso fracaso en las urnas y, con ello, al fin del kirchnerismo, porque carece de un heredero atractivo y del poder para imponerlo; por eso, sus críticas al Gobierno que integra esta vez fueron tan suaves y elípticas.


Contra lo que supone la mayoría, e insiste Cristina Fernández, la más peligrosa bomba al borde de estallar en sus manos no es la deuda nacional en dólares, pese a la magnitud de ésta, sino las obligaciones en pesos, que crecen a mayor ritmo que la pavorosa inflación. Como ya nadie cree que el Gobierno pueda controlarla, cada vez le resulta más difícil renovar sus vencimientos, y ello obliga al Tesoro y, por ende, al Banco Central a emitir más y más billetes, que realimentan el ciclo y pueden llevar a una hiperinflación o a reflotar un “Plan Bonex”, ahora para los bancos.


Los datos objetivos cuentan que la mitad de los argentinos es pobre, y el 10% mísero, que esos porcentajes crecen geométricamente cuando se trata de niños y jóvenes, que los médicos huyen de la salud pública y que la población es abandonada a su suerte, que resurgen enfermedades erradicadas, que los salarios registrados no garantizan la subsistencia y que los informales son aún peores, que la industria se está deteniendo por falta de insumos importados y se pierden puestos de trabajo genuino, que se continúa subsidiando a empresas públicas enormemente deficitarias para emplear militantes y engrosar el bolsillo de sus jefes políticos, que el narcotráfico y la violencia social son incentivados y protegidos desde el poder, que los gerentes de la pobreza roban y son cómplices, que el saqueo a las cajas del Estado se incrementa, que la educación hace agua y los chicos no aprenden siquiera a leer y comprender los textos, que las fronteras son coladores y los falsos mapuches siguen ejerciendo el terrorismo.


La principal duda que recorre la mente de analistas, politólogos, sociólogos y economistas es hasta cuándo resistirá este cuerpo social, tan dañado, el gigantesco cataclismo que, día tras día, cae sobre él: a la convicción de lo escaso del tiempo del que ella dispone se debe su penosa intención de negar su total responsabilidad sobre lo que ocurre, después de los ocho años en que fue Presidente y los tres del actual mandato. Los gritos que la incitan a “volver” van, exactamente, en ese sentido y tienen ese objetivo; pero, si aún está y nunca se fue, ¿volver de dónde y para qué?


Argentina está al borde de la disgregación por inviabilidad. Si conseguimos ofrecer a propios y extraños seguridad jurídica, una moneda sana, la certeza de que no gastaremos más de lo que podemos, y sistemas tributarios y laborales racionales, tendremos aún la oportunidad de evitarlo.

Al fútbol con ovalada    12-11-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 863

“Toda simulación en los actos o en los dichos representa una estafa al conjunto social que, honestamente, me repugna”. Alberto Fernández

Le preguntaron a un hombre cómo había sobrevivido su matrimonio durante seis décadas. Respondió que se habían dividido las esferas de decisión; él se ocupaba de lo importante mientras que ella de lo menor. “Es simple; lo mío son los conflictos mundiales, el cambio climático, la geopolítica internacional, etc.; y ella de dónde vivimos, qué hacemos con el dinero, cuántos hijos tenemos, cómo los educamos, qué comemos, etc.”.

El miércoles, en medio de la monumental crisis que ha generado el cuarto gobierno kirchnerista, se reunieron los ministros con la ausencia de Sergio Aceitoso Massa, responsable de la catastrófica economía. Apareció Alberto Fernández y les dedicó un discurso de diez minutos, referido exclusivamente a la paz en Ucrania y la propuesta que llevará al respecto a Emmanuel Macron, en Paris; una versión señala que tanto Vladimir Putin cuanto Volodomir Zelenski la están esperando con ansias.

La administración del país quedó en las impolutas manos de la jefa de la oposición, que la conducirá con mano de hierro hasta su regreso de tan esencial periplo, que incluye a la paradisíaca isla de Bali para discutir acerca del clima del planeta con la ausencia de los principales países contaminadores. Cuando vuelva el viernes 18, escuchará los ecos de la flamígera perorata que ella seguramente le habrá dedicado el día anterior por la forma en que gerencia este miserable populismo sin dinero, por su resistencia a convalidar el sacrificio de las paritarias en el altar de un bono fijo y, sobre todo, a suprimir las PASO para habilitar el “dedazo”.

Lo cierto es que la emperatriz hotelera ve crecer a su alrededor un bosque de rejas y, naturalmente, se desespera. Más allá de las sentencias que prometen comprometer, al menos, su libertad de movimiento por los innumerables delitos cometidos, está delineando la batalla que se convertirá, sin duda, en un monumental conflicto de poderes. De su lapicera, que sí tiene tinta, surgirá un levantamiento del Senado contra la Corte Suprema por el fallo que, condenando el ardid para robar a Juntos por el Cambio el sillón que le correspondía en el Consejo de la Magistratura, lo devolvió a Luis Juez. ¿Qué hará la Corte cuando el H° Aguantadero insista en designar a Martín Doñate, desconociendo lo resuelto?, ¿se resignará pacíficamente a ser desobedecida, como hizo en el caso del Procurador de Santa Cruz, Eduardo Sosa, que nunca fue repuesto en el cargo, o definirá la maniobra como lo que sin duda será, un real golpe de Estado? Los cómplices de la PresidenteVice en su fraudulenta acción deberían recordar cómo fulmina el artículo 227 del Código Penal a quienes lo intenten.

Pero, aun así, no será el mayor ataque de nuestra peculiar reina a la República. En los próximos meses, seguirá impulsando un incremento en la ya sideral deuda pública, la aceleración de la inflación, el aumento del gasto, llevándonos hacia la reedición del “rodrigazo” y ocupando todos los estamentos del Estado con militantes que actuarán como quintacolumnistas para hacer fracasar el futuro. Para ello, contará con la esencial colaboración de los reiteradamente empoderados y enriquecidos gerentes de los movimientos sociales y con Hugo Moyano y su patota, todos los cuales se han comprometido a resistir, a como dé lugar, cualquier cambio en el statu quo corporativo que tanto daño nos ha producido durante 77 años.

Durante los gobiernos de Néstor y Cristina, se decía “la soja es kirchnerista”; hoy los vientos han borneado y vienen de frente con intensidad de temporal. China se está desacelerando y, con ello, reduciendo sus compras de nuestros productos; los precios de la energía siguen en las nubes; la inexistencia de reservas está paralizando la producción por la falta de insumos importados; y la persistente “Niña” está castigando a niveles nunca vistos al campo y garantizando la falta de dólares, como mínimo, hasta la llegada de la cosecha gruesa, o sea, durante todo el verano.

¿Con qué armas defenderá el Aceitoso las metas fijadas por el acuerdo con el FMI de los avances del Instituto Patria para reflotar un “plan platita II”? ¿Tendrá que soportar una diatriba destituyente de la inédita jefa de la oposición cuando ésta hable el jueves próximo en La Plata? ¿Cuán lejos estamos de un híper con índices mensuales que arañan el 7%? Y la esencial: las bombas que han cebado, ¿estallarán en las manos de los Fernández² o podrán retardarlas hasta entregar el poder?; de eso dependerá la supervivencia del kirchnerismo, después de ser parte esencial de un gobierno fracasado que ya tiene fuerte olor a calas. Los grandes machos-alfa del peronismo territorial siguen atados a la voluntad de Cristina y le han perdonado –algo inédito- haber sido la mariscala de la derrota en tantas elecciones (2009, 2013, 2015, 2017 y 2021). ¿La acompañarán hasta la puerta del cementerio o se enterrarán con ella?; sería la primera vez en que el movimiento no obedeciera su regla de oro. La progresiva separación de las elecciones locales de la nacional puede ser la respuesta.

Hundidos en una ciénaga inconmensurable, nuestra gran esperanza radica en que la oposición continúe unida cuando deba aprobar el plan de gobierno que están elaborando las fundaciones partidarias; el sector de Miguel Ángel Pichetto ya presentó el suyo (por cierto, excelente) y la próxima semana se hará una reunión general para compatibilizar las propuestas. Luego, llegará la hora señalada porque, quien triunfe en 2023, sólo podrá ofrecer, sin mentir, “sangre, sudor y lágrimas”.

 Pasando la gorra    05-11-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 862


"Para hacer la guerra hacen falta tres cosas: dinero, dinero y más dinero. Hay guerras más baratas, pero se suelen perder". Napoleón Bonaparte


La semana que pasó fue retazo más en el manto de vergüenza que Argentina presenta ante el mundo. El primer episodio se dio cuando el individuo que se autopercibe Presidente manifestó desconocer la existencia de acuerdos entre la Comunidad Europea y el Mercosur, precisamente ante el jefe de la diplomacia comunitaria; demostró tanto la supina ignorancia que nubla el cerebro de Alberto Fernández cuanto la penosa incapacidad del librero Santiago Cafiero, su Canciller, cuyo único mérito es la pertenencia al más que reducido círculo de fieles. Es pavorosa la devastación que el kirchnerismo produjo en uno de los cuerpos más profesionalizados del Estado, el diplomático, y reconstruirlo requerirá de años de esfuerzo; en muchos países, la ideología determina políticas, pero en ninguno, como sucede en el nuestro, sacrifica tantos intereses nacionales –que debieran ser permanentes- en el altar de sus imaginarios y transitorios alineamientos.


Por cierto, más grave fue el que encarnó nuestro desesperado “pato rengo” visitando, con una enorme e injustificada comitiva, a Luiz Inácio Lula da Silva al minuto de que éste lograra, por escasísimo margen, vencer a Jair Bolsonaro y regresar al Palacio del Planalto, después de haber estado preso por corrupción. Si el devaluado y desprestigiado meme que sienta sus posaderas en el sillón de Rivadavia pretendió con ese gesto acumular fuerzas para su desigual batalla contra Cristina Fernández y pasar la gorra, la pólvora se le mojó cuando una legisladora de la Provincia de Misiones entregó al mandatario electo de Brasil una con el lema “CFK 2023”.


Los videos que documentaron el encuentro no dejan lugar a dudas: el desesperado argentino abrazando y acariciando reiteradamente a un Lula molesto por esas ridículas efusividades. Todo se debió, como siempre sucede aquí, al terrible ombliguismo que afecta a los argentinos; por ello, la dramática elección brasileña del pasado domingo generó, en ambos lados de la grieta criolla, preocupaciones inconducentes o falsas ilusiones.


Desde los bunkers del Instituto Patria y La Cámpora, se leyó la victoria como una reafirmación de la existencia del lawfare en la región, y un renacimiento de aquellas gastadas fotos de la Unasur; la visita del prófugo ecuatoriano Rafael Correa a Cristina y el encuentro de Alberto con Evo Morales fueron en este sentido. Y en la mente febril de Cristina Fernández se abrió camino como la posibilidad de un salvavidas financiero y una nueva y triunfal reencarnación, aún después de las inexorables condenas penales que la esperan en un futuro inmediato.


El primer error es creer que el Lula que asumirá el 1° de enero de 2023 es el mismo que lo hiciera en 2003 y gobernara hasta 2010. Con setenta y siete años y mucha experiencia y prudencia acumuladas, el actual sabe que la época de la soja a US$ 650 la tonelada es cosa del pasado y que, esta vez, no dispondrá de aquellos recursos que permitieron a Fernando Henrique Cardoso y a él mismo sacar de la pobreza a tantos de sus compatriotas.


La falta siquiera de una mención de Lula a Dilma Rousseff, que fuera su sucesora en la Presidencia y a quien el Congreso destituyó por su “contabilidad creativa” (aquí no quedaría en pie ningún mandatario, ya que todos recurren a ella), también debe analizarse por separado. Ex guerrillera y muy ideologizada, su conspicua ausencia permite entrever que tampoco se establecerán alianzas estratégicas con Nicolás Maduro, Gustavo Petro, Luis Arce, Pedro Castillo, Miguel Díaz-Canel, Daniel Ortega o Gabriel Boric, sino que regresará a Itamaraty la tradicional posición geopolítica de Brasil, o sea, relaciones con todos los países en pos de sus intereses comerciales y de desarrollo permanentes.


Es consciente, además, de los límites que tendrá su gestión, marcada por la fuerte presencia conservadora en ambas cámaras legislativas y por las concesiones que deberá hacer al antiguo PSDB, el partido de su Vicepresidente electo, Geraldo Alkmin, y a los bloques parlamentarios del “Centrāo” para lograr algunas mayorías, siempre lábiles. Y aseguro que el respaldo irrestricto y la ayuda económica que el kirchnerismo espera ahora no pasa de ser un mero espejismo voluntarista.


Desde la Argentina, un país que ha hecho trizas sus instituciones y en el que el Congreso ha sido mucho tiempo sólo una suerte de escribanía de brazos enyesados al servicio del Ejecutivo de turno, es muy difícil entender que, en Brasil, aquél se ha convertido en el poder más fuerte de la tríada y en él priman los muchos partidos de centro, que sirven como permanente fiel de la balanza. Y en la medida en que, pese a la Constitución, somos un país profundamente unitario, también es incomparable el verdadero federalismo que goza nuestro vecino; así, un elemento fundamental del análisis es la cantidad y calidad de gobernaciones estaduales que han quedado en manos del bolsonarismo, nada menos que Sāo Paulo entre ellas.


Cristina Fernández, empeñada en generalizar su teoría del lawfare, disfraza la actual situación de Lula ante la Justicia de su país transformándola en un inexistente sobreseimiento definitivo de los cargos de corrupción que llevaron a su encarcelamiento. No es así; el Supremo Tribunal Federal sólo resolvió que los jueces que lo condenaron no eran competentes en razón de la jurisdicción, es decir, que volverá a enfrentar un proceso penal por las mismas acusaciones ante otros magistrados.


Finalmente, un último dato: mientras aquí galgueamos por la falta de dólares, nuestro vecino tiene US$ 350 mil millones en reservas. Y la principal razón es que el Banco Central es independiente del Ejecutivo, y su conducción está altamente profesionalizada. Realidades incomparables.

Fuga y tocata     29-10-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 861

 

“La historia muestra que los levantamientos ciudadanos siempre fallan … salvo que el régimen gobernante y sus fuerzas vivan un hundimiento de la voluntad”. Max Hastings

 

La renovada discusión acerca de las PASO que el cristicamporismo ha instalado con tanta anticipación –están previstas para agosto del año próximo- es una prueba de la resignación ante la dura derrota que descuentan los dirigentes del Frente de Todos (gobernadores, intendentes, gerentes de la pobreza y sindicalistas K). Esa percepción ha transformado al Gobierno en una verdadera centrífuga, algo que se venía viendo desde la renuncia de Martín Guzmán al Ministerio de Economía y a los trabajosos esfuerzos que tuvo que realizar el MemePresidente para intentar su reemplazo por alguien que le respondiera; finalmente, tuvo que aceptar a Sergio Aceitoso Massa, ese aventurero siempre disponible que luchó por encontrar una plataforma de lanzamiento de su propia campaña presidencial desde que pasó a integrar la diminuta mesa del oficialismo.

 

Y la otra prueba, más contundente, es la forma en que se ha encarado, con la notoria complicidad de los funcionarios del FMI, la renegociación de la deuda externa y la “reperfilación” de la interna para que las bombas estallen durante el próximo período presidencial: mientras que a la actual administración se le tolera una “contabilidad creativa” que le permite grandes dibujos, en 2024 el organismo exigirá un superávit del 2% del PBI. El monumental ajuste que deberá hacerse entonces, servirá para justificar las renovadas toneladas de piedras que arrojarán quienes estarán en el llano, incluyendo a todos aquéllos que lucran con este status quo regulado y corrupto y se niegan a competir en una economía abierta y transparente.

 

A esta altura, ya es evidente hasta para él mismo que el Aceitoso no ha podido enderezar la tan escorada economía nacional. Tampoco podrá hacerlo en el extenso año que falta para los comicios nacionales porque, desde ahora mismo, Cristina Fernández, cuyo poder mengua a ojos vistas diariamente, lo obligará a seguir gastando para intentar la reelección de Axel Kiciloff y sostener su bastión electoral, la Provincia de Buenos Aires, para convertirlo en refugio de la militancia kirchnerista durante la travesía por el desierto. Massa sabe que ha perdido su arriesgada apuesta para convertirse en su candidato presidencial –hoy no tiene ninguno competitivo- en 2023; ilusionado por su juventud, se imagina serlo en 2027.

 

Con una inflación que este año superará el 100%, esas necesidades personales de la emperatriz hotelera podrían, sin duda, hacer chocar el inexorable iceberg antes del cambio de mando, y no habrá entonces botes suficientes para salvar a todos los integrantes del Frente, incluida ella misma. Cómo reaccionará la ciudadanía -tan hambreada y pauperizada por la gestión del adefesio electoral que inventó Cristina para ganar en 2019- en ese momento crucial aún es una incógnita, ya que la situación es muchísimo peor que la que vivimos en 2001. ¿Estallará con violencia, como sucedió en Santiago de Chile, en Lima, en Quito o en Bogotá? Aún con el mini-ajuste que está ejecutando el Aceitoso, una real sopa de sapos que el kirchnerismo se ve obligado a deglutir todos los días, la situación social está elevando su temperatura. Si la explosión se produce, ¿de qué herramientas dispondrá el Estado para recuperar la paz?

 

Por su parte, y sin olvidar la positiva ponderación que me merece el trabajo conjunto que están realizando las fundaciones que responden a cada uno de los partidos que integran Juntos por el Cambio, los grandes figurones de la coalición siguen dando que hablar por su temprana tocata por liderazgos que, en este contexto socioeconómico, pueden también naufragar. Salvo excepciones puntuales y muy valiosas, se muestran por completo alejados de las angustias y el hartazgo de la sociedad, no explicitan propuestas esperanzadoras y, así, hacen al conglomerado fácil presa de la anti política de derecha e izquierda; que ésta roya también al Frente de Todos no quita que debiera obligar a esos “ombliguistas” de manual a reflexionar acerca de los errores que cometen todos los días.

 

Todavía no me explico por qué Juntos se comportó de la manera en que lo hizo cuando se votó en Diputados el Presupuesto 2023, la “ley de leyes”, un mamarracho trasnochado de aumento de impuestos, concesiones a los extorsionadores y falsas proyecciones que hubiera cubierto de vergüenza a cualquier Parlamento normal; pero nos hemos acostumbrado tanto a la idea de que nuestros representantes son un grupo de vivillos y ladrones que sólo buscan cuidar la propia que no se produjo cuestionamiento alguna en la sociedad.

 

Mañana, se hará el segundo turno de las elecciones presidenciales en Brasil: un unívoco Jair Bolsonaro y un cambiante Luiz Lula da Silva llegan a él en situación de empate técnico. El actual Presidente ha logrado instalar con fuerza a su movimiento de derecha, a punto tal que ha obtenido 99 escaños en la Cámara de Diputados -tiene 513 miembros- contra sólo 80 del candidato petista, y ha permitido que muchos de sus partidarios accedieran a decisivas gobernaciones estaduales en un país seriamente federal. Ese escenario implica que, cualquiera sea el resultado, no habrá probabilidad alguna de una deriva autoritaria o de un marcado populismo; aún una victoria de Lula desilusionará a los kirchneristas que soñaban no sólo con la reivindicación del lawfare como excusa política sino también con un claro respaldo de éste al socialismo del siglo XXI, saqueador y violador de los derechos humanos en todos los países de la región que lo sufren.

 

¿Qué será de la herencia?     22-10-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 860

 

“Lo cierto es que, para evitar un cataclismo, debe estar dispuesto a dar malas noticias y a convencernos de que ellas son correctas e imprescindibles”.

Jorge Fernández Díaz

 

Los laureles eternos de los que habla nuestro Himno tristemente se han marchitado hace mucho, y los libres del mundo no responden ya “al gran pueblo argentino, salud”, porque hemos hecho todo lo necesario para asombrarlos con nuestra compulsión autodestructiva, rayana en el suicidio. Pero aún tenemos una oportunidad; sólo se trata de no ser tan imbéciles como para dejarla pasar una vez más, porque seguramente será la última.

 

Más allá de la implosión del peronismo que desnudó la multiplicidad de convocatorias para conmemorar el Día de la Lealtad –el resto son, por supuesto, de la traición- quienes en ellas hablaron dejaron sentado, lo dijeran con mayor o menor énfasis o hasta con cierto terrorismo verbal, que ahora son férrea oposición a su propio Gobierno; sin embargo, el truco ya no convence, y de allí la escasa concurrencia que lograron. Pero también quedó en claro que, cuando el Frente de Todos pierda las próximas elecciones, algo para ellos ya inevitable, resistirán todo y cualquier cambio, inclusive aquéllos que debieran ser gratos para los oídos de los líderes sindicales, puesto que permitirían crear empleos privados y registrados, es decir, aumentar el número de afiliados a sus propios gremios.

 

A partir de la semana próxima, toda la sociedad será víctima de una nueva extorsión de los violentos camioneros de Hugo y Pablo Moyano, que han amenazado con convertir el reciente y costosísimo paro de los trabajadores del neumático en un mero juego de niños y, de no obtener el 131% de aumento que pretenden, paralizar el país interrumpiendo, desde el miércoles, el transporte de cargas, alimentos y combustibles y la reposición de dinero efectivo en los cajeros automáticos.

 

Quien quiera llegue al comando del desastre en que hemos convertido (o tolerado que lo hicieran) a este país tan gravemente enfermo de sí mismo desde hace demasiadas décadas, deberá hacerse cargo de una explosiva herencia, con bombas cebadas y quinta-columnas en cada esfera del Estado y en la economía. Pero aún estará a tiempo de evitar la desaparición de la Argentina como nación independiente; esta imagen no es exagerada, porque un nuevo escenario global se ha abierto por la criminal invasión de Rusia a Ucrania, y ese mundo en crisis y con hambre no podrá aceptar que sigamos desperdiciando nuestra inmensa capacidad de producir alimentos, energía y recursos naturales indispensables.

 

Aunque obvias, la magnitud de nuestro drama amerita hacer una lista de títulos de reformas indispensables: respetar a rajatabla la Constitución; conformar un federalismo real y no declamado; dividir la Provincia de Buenos Aires y unificar otras en regiones; recuperar la seguridad jurídica; depurar el galimatías de leyes y decretos; honrar nuestros compromisos locales y externos; generar la confianza internacional necesaria para atraer inversiones; modificar los códigos para acelerar los procesos judiciales; sancionar las leyes de boleta única y de ficha limpia; imponer el “juicio de residencia” para los cargos electivos, ministros y jueces; racionalizar el inicuo sistema tributario y el régimen laboral (éste, para el futuro); reducir el gasto achicando todos los organigramas; profesionalizar el empleo público en los tres niveles del Estado y cambiar su estatuto.

 

E incorporar a esa enunciación: recuperar los valores y la cultura del trabajo para terminar con la pobreza y la indigencia; mejorar el sistema jubilatorio y elevar la edad para acceder; abolir el sistema sindical de gremio único por actividad y afiliación obligatoria; acabar con las patotas y los piquetes; recuperar la educación pública y establecer que sólo los mejores pueden enseñar; tender lazos comerciales con todas los países en función de intereses permanentes y no de ideologías; devolver la excelencia del personal diplomático y eliminar las designaciones a dedo; luchar hasta terminar con la inflación; liberar los mercados de cambio; sincerar todas las variantes económicas y las tarifas; terminar con los subsidios distorsivos; privatizar todas las actividades económicas en manos del Estado y cerrar las empresas públicas deficitarias; modernizar el equipamiento de nuestras fuerzas armadas y mejorar sus salarios; resolver la inicua situación de los presos políticos militares; luchar efectivamente contra el narcotráfico y sus cómplices, y contra la inseguridad; bajar la edad de la imputabilidad penal; aniquilar el terrorismo de los falsos mapuches; establecer una política de inmigración acorde con nuestras prioridades; etc..

 

Será una tarea muy difícil y, para complicarla más, deberá encararse de inmediato, porque la situación en que se encuentra el país no admite demoras y la luna de miel no podrá extenderse más allá de algunos días. El próximo Presidente deberá ser sumamente resiliente, porque todos quienes lucran con los privilegios y la corrupción que genera el increíble cosmos de regulaciones y disparates en que se asienta este triste status quo -se trate de funcionarios y dirigentes gremiales y sociales, se trate de industriales que sólo saben pescar en la bañadera y cazar en el zoológico-, intentarán derrocarlo desde el primer día, utilizando quizás hasta la violencia callejera.

 

Pero si esa oposición que se vislumbra ganadora –no tanto por sus escasos méritos sino por el claro fracaso del populismo sin dinero- plantea, desde ahora mismo, propuestas esperanzadoras que permitan soñar con un horizonte en el que cada generación quiera permanecer en el país para tirar del carro común y vivir mejor que la anterior, contará con el apoyo social necesario para cambiar 180° el rumbo, y podrá fijarlo durante sucesivas administraciones, transformándolo en permanentes políticas de estado.

 

Si el nuevo Presidente es valiente, si tiene el coraje de encarar a cualquier costo la ciclópea tarea, la ciudadanía en su conjunto lo acompañará y lo incorporará, sin dudas, a la nómina gloriosa de quienes, desde Juan Bautista Alberdi, Domingo F. Sarmiento y Julio A. Roca en adelante, forjaron este país tan lejano que, hace ya demasiados años, admiró al mundo entero al erradicar el analfabetismo generalizado, integró su inmenso territorio, tuvo los mejores establecimientos educativos de América, permitió una veloz movilidad social ascendente basada en el esfuerzo y el mérito personal, alcanzó un producto bruto interno superior a casi todos los de Europa, rivalizó con los Estados Unidos en imagen y atractivo, y alimentó a los pueblos necesitados.

SOLICITADA 17-10-2022

“Vecinos por el Monte” 

Inauguración repleta de falsedades y errores 

Ayer, 11 de octubre a las 11hs se inauguró el Parque Solar de Villa Cura Brochero con un cartel de Cese preventivo y precautorio de Policía Ambiental que depende de la Secretaría de Ambiente de la provincia de Córdoba. Su secretario, Juan Carlos Scotto, se hizo presente avalando la obra que consiguió la licencia ambiental de la provincia de Córdoba en el año 2017 con un Estudio de Impacto Ambiental presentado por las empresas interesadas, representadas en ese momento por Harz Energía S.A.U., repleto de falsedades y gravísimos errores. 

Link al EIA 

https://drive.google.com/drive/folders/1HJmTyh1jyRyfRZxkSoH9c0g6DcQP32oJ?usp=sharing 

El sitio donde se ubica la obra se asienta, en parte, en sectores categorizados como zona 

roja y amarilla de bosque nativo según la ley provincial 9814 y ley nacional 26331. 

En medio de la pandemia, entre septiembre y octubre de 2020 sucedieron los desmontes de más de 80 hectáreas y en cada denuncia de los vecinos, Policía Ambiental labró actas y allí también quedó el cartel Cese preventivo y precautorio. 

Ante este atropello, varios vecinos presentaron notas a la Secretaría de Ambiente pidiendo acceso al expediente del proyecto que debería ser de acceso público y nunca estuvo publicado. Luego de 6 meses y pronto despachos se consiguió acceder a él y en Julio de 2021 se presentó una acción civil colectiva en el Juzgado de Villa Cura Brochero, que se declaró incompetente y la causa fue aceptada por la Cámara de Villa Dolores como Amparo Ambiental colectivo. 

Para esta acción, entre varios vecinos del valle de Traslasierra, profesionales y especialistas en el tema se elaboró un informe, en gran parte basado en las gravísimas falsedades del EIA con el que se obtuvo la licencia ambiental, en donde existe una expresa negación de toda intervención ambiental y confunden la zona de estudio con otra de la provincia de San Luis. Refieren al Río Conlara cuando deberían referir al Río de Los Sauces. El EIA desconoce totalmente las características geológicas del lugar y lo confunde con formaciones más antiguas, minimizando los efectos del proyecto en relación con la erosión de los suelos y su consecuente pérdida, afectando tanto la capacidad del suelo para soportar las precipitaciones como su posibilidad de restauración futura, entre otras. 

Ver informe en  

https://drive.google.com/file/d/14-nTq4BWbo3Nt3sXHcRiIymw8TEZ69g6/view?usp=sharing 

Luego de varias idas y vueltas, finalmente, el 1 de julio pasado, la Cámara de Villa Dolores dispone la suspensión preventiva de la Licencia Ambiental.  

Ver en 

https://drive.google.com/drive/folders/1HJmTyh1jyRyfRZxkSoH9c0g6DcQP32oJ?usp=sharing 

El 4 de julio siguen desmontando, se hace la denuncia y Policía Ambiental sólo labra un acta.  

El 14/7 ante los desmontes que siguieron en el Parque y el pedido de abrir feria resuelven: 

I. Habilitar la feria judicial. II. Ordenar a la Policía Ambiental que durante la feria judicial –que concluyó el 20 de julio del año en curso- ejerciera las tareas de fiscalización y control de las  

medidas dispuestas por Auto nº 90, del 01/07/2022. 

Ver en 

https://drive.google.com/file/d/14-nTq4BWbo3Nt3sXHcRiIymw8TEZ69g6/view?usp=sharing 

El 15/7 la secretaría de energía de la nación autoriza el ingreso como Agente Generador del MERCADO ELÉCTRICO MAYORISTA (MEM) a la empresa PARQUE SOLAR CURA BROCHERO S.A.U. para su Parque Solar Cura Brochero con una potencia de DIECISIETE MEGAVATIOS (17 MW), ubicado en el Departamento San Alberto, Provincia de CÓRDOBA, conectándose al SISTEMA ARGENTINO DE INTERCONEXIÓN (SADI) en el nivel de SESENTA Y SEIS KILOVOLTIOS (66 kV) mediante la apertura de la Línea de Media Tensión E.T. Cura Brochero – E.T. La Viña, jurisdicción de la EMPRESA PROVINCIAL DE ENERGÍA DE CÓRDOBA (EPEC).  

Ver en 

https://www.argentina.gob.ar/normativa/nacional/resoluci%C3%B3n-540-2022-368236 

El 27 de Julio la Cámara resuelve conceder que la medida resuelta es con efecto devolutivo, esto significa que debían pararse las obras. 

https://drive.google.com/file/d/1yGk-67y7OO7zvxVgTQDOvtnq0ZjgGm5i/view?usp=sharing 

Pero a los pocos días se desdice y resuelve rectificar en donde dice “y con efecto devolutivo” debe decir “con efecto suspensivo”. 

https://drive.google.com/file/d/1aS037mO3YCVfFFc-xKFvmvhchRsNPduo/view?usp=sharing 

Que significa que su resolución del 1/7/2022 queda con efecto suspensivo hasta que resuelva el TSJ, es decir, suspende la medida cautelar que el mismo tribunal había dispuesto. 

Los tiempos procesales corren muy lejos de los hechos reales. Mientras tanto se desmontaron más de 80 hectáreas y decomisaron casi 900 toneladas de monte hecho leña. Muchos vecinos lo vieron, aún intentan que muchos más lo vean, incluidos los funcionarios judiciales que hoy les toca actuar con las leyes que vienen siendo violadas desde que comenzó esta obra, naturalizándose los procedimientos legales como simples trámites, mientras se sigue violando con total impunidad el bien común. 

“Vecinos por el Monte”  

El país de los autitos chocadores    15-10-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 859


… “A este fondo no rodé, me mudé con gran trabajo”.

María Elena Walsh…


El mundo se ha vuelto loco, y la amenaza nuclear de Rusia, debido a la patente derrota que está soportando en el plano militar su agresión criminal a Ucrania, no hace más que acelerar el proceso. Por lo demás, la guerra tecnológica que ha comenzado Estados Unidos contra China tampoco augura tiempos pacíficos para el planeta, ya que ha pasado a segundo plano la disputa sobre Taiwan, pero se agudiza en terrenos comerciales. Si a eso le sumamos la predecible recesión que golpeará a todos los países, con mayor costo en los más pobres por la caída en la demanda de materias primas y alimentos de los ricos, la pronunciada suba de las tasas de interés por la Reserva Federal de Estados Unidos y el fortalecimiento consecuente del dólar, y los daños que está produciendo la sequía, el escenario global sólo podría empeorar si Vladimir Putin decidiera apretar el botón.

En la Argentina, se agregan otros factores que hacen aún más negro el futuro. La inflación, que se redujo muy levemente en septiembre (apenas unas décimas) pero promete nuevas escaladas, y la marcada carencia de divisas -que el “dólar soja” sólo calmó anticipando las liquidaciones de este cuarto trimestre pero que faltarán ahora- obliga al Gobierno a cerrar aún más el cepo cambiario y la importación de los insumos básicos para la producción, añadiendo efectos locales a la recesión que recibirá de afuera, y hace que solamente pueda financiarse con emisión, que luego absorbe con instrumentos por los que paga tasas que ya superan el 100% anual, cebando así aún más la bomba que dejará a sus sucesores.

Las dos mayores coaliciones del escenario nacional semejan juegos de parque de diversiones, ya que sus miembros arremeten todos los días contra sus propios y teóricos socios, y se estrellan sin cesar. A pesar del notorio rechazo que esa actitud provoca en esta sociedad cada vez más angustiada e indignada con los políticos en general, a los cuales califican cada día más como una casta, una palabra que ha impuesto Javier Milei, un outsider que está creciendo en las encuestas porque pretende encarnar la anti-política y se define como anarco-capitalista, los principales referentes de cada espacio insisten en esta demencial conducta.

El Frente de Todos, que en su origen era una mesa de tres patas, ha perdido una en razón de la manifiesta y confirmada insignificancia de Alberto Fernández, imaginario mascarón de proa; y las dos que quedan (Cristina Fernández y Sergio Massa) exhiben diariamente sus siderales diferencias en materia económica. Si bien el Ministro ha demostrado que carece de un plan integral para salvarnos del naufragio inminente, al menos pretende imponer una cierta racionalidad en un gobierno que, por la ansiedad de impunidad de la emperatriz hotelera, parece decidido a estrellar la nave contra el monumental iceberg que sus propias decisiones populistas han fabricado con gran esfuerzo.

La mayor prueba de las divisiones que coexisten en esa comunidad pan-peronista se verá en los distintos actos que se realizarán el próximo lunes para conmemorar el emblemático “Día de la Lealtad”. Resulta fácil prever que, salvo en el mini-acto que hará el PresidenteMeme por no haber sido invitado a participar de ninguna otra, tanto en el que asistirá la CGT cuanto el que hará en la Plaza de Mayo la CTA con los camioneros de Hugo Moyano, los camporistas de Máximo Kirchner y algunas organizaciones sociales, coincidirán en su fuerte protesta contra el Gobierno que todos integran.

Es que nadie tiene ya margen para seguir sosteniendo a este nuevo experimento peronista porque: a) la indomable inflación golpea a ingentes proporciones de ciudadanos, en especial a aquéllos que van cayendo en la pobreza y la indigencia; b) la inseguridad y el narcotráfico ascienden en la preocupación cotidiana; c) la indignación cunde frente a la demora en las causas por corrupción que tienen como protagonista a Cristina Kirchner, a la cual un mayoritario porcentaje considera culpable y adjudica gran parte de las penurias que sufre, mientras percibe enormes prestaciones previsionales cuando los jubilados de a pie no llegan siquiera a comer; d) el crecimiento del trotskismo en las comisiones internas fabriles pone en riesgo a la supervivencia de los eternizados caudillos gremiales; y e) la experiencia lleva a que todos los caciques, sean provinciales o municipales, intenten salvar la propia ropa cuando todo avizora una derrota electoral nunca vista para el Partido Justicialista.

En la otra coalición, Juntos por el Cambio, nada difiere demasiado. Facundo Manes sigue intentando asistir a una fiesta a la que nadie lo invita y, para ello, tira golpes contra todos. Gerardo Morales, tan amigo y socio de El Aceitoso, trata de hacer equilibrio dentro del espacio opositor. Córdoba cruje por el enfrentamiento entre radicales. Y confirmando mis estimaciones, Mauricio Macri deja traslucir que no será candidato, pero se reserva el rol de gran elector. En el camino, PRO, UCR, CC-ARI, pichettistas y republicanos de Ricardo López Murphy, aunque parecen todos decididos a conservar la indispensable unidad, no parecen aún listos para ofrecer a esta sociedad -tan harta de impiadosos saqueadores, de “ceo’s” y “científicos” fracasados- planes creativos y racionales que consigan alimentar sus esperanzas frente a un futuro que sigue vislumbrando terriblemente triste, tanto en general cuanto en lo personal.

Si no consiguen hacerlo, el riesgo de una crisis mayor explote en las calles se tornará cada vez mayor, pues las acuciantes necesidades siempre se agudizan en diciembre, aún en las cómplices gestiones peronistas.

Su Majestad, el Ombligo    08-10-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 858

“Como todo revolucionario, si gana instala una dictadura popular: censura, expropia, encarcela, tortura y fusila. Si pierde, se refugia en los derechos humanos, se vuelve un demócrata y denuncia la persecución, la crueldad, el patriarcado y la falta de libertades civiles”. Arturo Pérez-Reverte

La semana estuvo, sin duda, marcada el resultado de la primera vuelta electoral en Brasil. Otra vez los más reputados encuestadores dejaron jirones de su prestigio por los tan equivocados resultados que pronosticaron, producto tanto de vender sus análisis al mejor postor cuanto de la tentativa de influir en la opinión de los ciudadanos. En ese mismo error incurrió el Frente de Todos, que confundió deseos con realidad y tanto apostó a un definitivo triunfo de Luiz Inácio Lula da Silva (48,43%). Los muchísimos votos obtenidos por el tan repudiado Jair Bolsonaro (43,20%) aguaron la fiesta aquí prevista por el Gobierno para celebrar la resurrección de la Patria Grande que el Foro de San Pablo imagina para la región y para exhibir un éxito en su teoría del lawfare. El segundo turno electoral se disputará el 30 de este mes, y su resultado todavía es imposible de prever.

El actual Presidente brasileño obtuvo 99 bancas en la Cámara de Diputados, mientras que el candidato del PT, que sólo pudo competir porque su juicio por corrupción fue declarado nulo por el Tribunal Supremo Federal por problemas de competencia y sin llegar al fondo del asunto, sólo consiguió 80 escaños. Esa Cámara cuenta con 513 miembros; o sea, el oficialismo y la oposición carecen, por mucho, de mayorías propias y estarán obligados a negociar cada ley que pretendan sancionar a partir de ahora.

La injustificada centralidad argentina no permite entender cómo funciona la democracia en Brasil, donde un montón de diputados electos por infinidad de partidos políticos constituyen lo que se denomina el “centrāo” que, entre otras virtudes, impide cualquier deriva autoritaria en ese país. A eso me refiero cuando digo que allí, en Uruguay, Chile, Perú, Colombia y Ecuador, las instituciones -en especial, las legislaturas-, son fuertes, estableciendo una enorme diferencia con lo que aquí sucede.

Otro aspecto curioso para nosotros es el funcionamiento del Ejecutivo brasileño que, en la medida en que siempre accede al poder mediante coaliciones políticas, públicamente distribuye los cargos ministeriales entre los diferentes partidos que las integran; o sea, cada vez que se produce una renuncia o incapacidad, es la fracción a la que fue asignado ese ministerio quien propone a su reemplazante. Y lo mismo sucede en muchos otros países, tales como Dinamarca, Noruega, Chile, Uruguay, España o Italia.

En la Argentina, producto del ombliguismo irracional del cual derivan las bastardas actitudes de algunos de sus miembros, la coalición opositora cruje y, al hacerlo, debilita las esperanzas en que pueda ejecutar el volantazo que permita nuestra resurrección. En lugar de generar empatía con la ciudadanía, agobiada por la inflación, la inseguridad y la corrupción, Juntos por el Cambio dirime sus feroces disputas personales en televisión, mostrando cuán lejos se encuentra de las verdaderas necesidades de la sociedad y, de continuar así, corre un enorme riesgo de perder las próximas elecciones. El oscilante Facundo Manes, seguramente inquieto por la escasa adhesión que suscita su potencial candidatura, es el paradigma de ese pecado; al menos por ahora, hasta su propio partido, la UCR, lo ha criticado.

Tampoco el Gobierno, tan ocupado como está en tratar de evitar las serias consecuencias penales que la PresidenteVice deberá soportar por el gigantesco latrocinio que la asociación ilícita que encabeza perpetró -aún lo hace-, consigue ubicarse cerca de las angustias cotidianas de sus votantes, la mayoría de los cuales pertenece al sector más castigado por la pobreza y la creciente miseria. A la manifiesta impericia del equipo económico, se suma el creciente fuego amigo que recibe Sergio el Aceitoso Massa desde la Presidencia del Senado, el Instituto Patria y La Cámpora, muy poco dispuestos a arriar sus banderas populistas, sobre todo en la crucial Provincia de Buenos Aires.

En la calle, todo el mundo se pregunta, por la diaria pérdida del poder adquisitivo del salario frente al aumento constante del precio de los alimentos, cómo se transitará este último trimestre y si algo explotará con violencia antes de las fiestas de fin de año.

Mientras tanto, el incapaz Ministro del Interior, Anímal Fernández (¡qué mal nos va con tantos descendientes de Fernando en el Gobierno!), ordenó desalojar algunas de las propiedades públicas y privadas invadidas por estos bandidos disfrazados de pueblos originarios. Pero lo hizo con tal ineficacia (o mala intención) que todos pudieron escapar y sólo se consiguió detener a algunas mujeres y niños. El único resultado positivo del operativo policial fue, precisamente, la renuncia de la Ministro de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta, defensora de los derechos humanos del falso mapuche Francisco Jones Huala, prófugo de la Justicia chilena que se pasea impunemente por Bariloche, y de Milagro Salas.

Si alguien cree que terminaron las actividades de estas bandas de delincuentes patrocinados y subvencionados por el Estado argentino, deberá desilusionarse; continuarán las invasiones y los incendios provocados, las golpizas y, pronto, los asesinatos de quienes resistan. Y eso sucederá porque hay demasiado en juego: la Patagonia, a ambos lados de la Cordillera, es un territorio casi vacío de pobladores, pero inmensamente rico en recursos naturales, y la ambición de conquistarla por la fuerza, separándola de Chile y la Argentina, no cederá hasta que se logre exterminar definitivamente el accionar de estos terroristas. ¿Acaso le suena esta frase?

¿Ya murió la Argentina?    01-10-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

 Nota N° 857

“Quien lucha puede perder; quien no lucha, ya perdió”. Bertolt Brecht

La guerra (negada) que se libró en nuestro país en las décadas de los 60’s y 70’s costó demasiado dolor, sangre y muerte. El 25 de mayo de 1973, cuando Héctor Cámpora asumió la Presidencia y liberó a los terroristas condenados por la Justicia por sus delitos presuntamente políticos, los guerrilleros tomaron oficinas públicas, empresas y medios de comunicación. La “historia oficial” se niega a reconocer que ERP y Montoneros, que justificaban sus acciones en la resistencia a la opresión de los gobiernos militares, continuaron con sus acciones terroristas después del triunfo de Juan Perón con el 62% de los votos; por el contrario, el Frente de Todos sigue calificando a esos asesinos como “jóvenes idealistas”.

Como dijo Enrique Cadícamo, la historia vuelve a repetirse. En Villa Mascardi se vivió esta semana algo similar cuando una banda de terroristas pseudo-mapuches, que desconocen la soberanía nacional y pretenden arrebatar su territorio con la complicidad y protección del Gobierno, atacó a tiros un puesto de Gendarmería y al retirarse sus ocupantes, que tienen prohibido responder a las agresiones, lo quemaron; al día siguiente, usurpó más propiedades privadas y viviendas que previamente había destruido. Y digo que se trata de algo comparable porque el jefe de Montoneros, Mario Firmenich, amenazó con una guerra civil y en el sur están operando Roberto Perdía y Fernando Vaca Narvaja, sus segundos, que reivindicaron recientemente el accionar guerrillero durante los 70’s y trabajan de consuno con las FARC colombianas, la RAM chilena, el Sendero Luminoso peruano y “asesores” castro-chavistas.

Mientras tanto, la conducción trotskista del Sindicato del Neumático tomó el Ministerio del Trabajo, bloqueó el ingreso de trabajadores a las plantas y, al producir un faltante monumental de ese fundamental insumo generó, en cascada, la paralización de las fábricas de automóviles y maquinaria agrícola; las patotas de Camioneros, que ya habían cometido idénticos delitos en empresas de todo tipo, invadieron una transportadora en Avellaneda y golpearon a su propietario y al personal; los piqueteros, una vez más, acamparon en la Avda. 9 de Julio y cortaron rutas en todo el país; los estudiantes secundarios capitalinos, organizados en “El Acostazo”, que se referencia en Axel Kiciloff, ocuparon los colegios e impidieron asistir a clases a los demás; los “trabajadores de la educación”, también kirchneristas, concretaron huelgas salvajes en la Capital Federal; los asesinatos en Rosario, producidos por la batalla entre narcotraficantes, enlutan a la población y baten diariamente records insoportables; las barrabravas, aliadas del poder, continúan ensangrentando al fútbol y convierten los eventos deportivos en verdaderas batallas campales.

El kirchnerismo finge olvidar que Perón, por cadena nacional, el 20 de enero de 1974, dijo: “Ya no se trata sólo de un grupo de delincuentes, sino de una organización que, actuando con objetivos y dirección foráneos, ataca al Estado y a sus instituciones como medio de quebrantar la unidad del pueblo argentino y provocar un caos … Aniquilar cuanto antes el terrorismo criminal es una tarea que compete a todos …, lo que nos obliga perentoriamente a movilizarnos en su defensa y empeñarnos decididamente en la lucha a que dé lugar”, Y no era para menos, ya que el día anterior el ERP había atacado el Regimiento de Caballería Blindada 10, de Azul, matado a su jefe, el Cnel. Camilo Gay, y a su mujer, y secuestrado al subjefe, el Tte. Cnel. Jorge Ibarzábal, a quien torturó y, diez meses después, asesinó.

En la economía, por supuesto, tampoco la llegada de Sergio “el Aceitoso” Massa al Ministerio de Economía trajo buenas noticias: la inflación sigue su rápido curso ascendente, la deuda pública y sus intereses alcanzan ya niveles ridículos, siguen faltando los dólares indispensables para pagar las importaciones más esenciales para la producción, la recesión parece cercana, y muchos salarios registrados no permiten superar la línea de pobreza, que ya afecta a más de diecisiete millones de compatriotas.

La corrupción permea en los tres poderes del Gobierno y en las policías, compinches todos de los grandes cárteles de la droga, y la geografía nacional muestra la completa y cómplice abdicación del Estado en el monopolio de la violencia y en el cumplimiento de sus roles indelegables, lo cual hace que la anomia y el “sálvese quien pueda” avancen en un país que ha perdido su entramado social y expulsa a sus mejores y más preparados ciudadanos, mientras promueve la inmigración de los menos instruidos y más pobres de los países vecinos, que se amontonan en tierras usurpadas, transformadas en villas de emergencia de todos los conurbanos argentinos.

Las fuerzas armadas, carentes de medios materiales y pauperizadas hasta la inanición por ideologizados y sucesivos gobiernos populistas, acompañados por el inmoral silencio de una sociedad cobarde e hipócrita, se ven impedidas de cumplir con las más mínimas tareas de vigilancia y defensa nacional. La injusta persecución y la denegación de los más elementales derechos humanos que, con la esencial colaboración de asesinos togados, sufren quienes combatieron contra esta misma guerrilla en su edición anterior, hará que sus actuales miembros lo piensen muy bien antes de obedecer órdenes de represión que surjan de un decreto presidencial (como el que firmó Ítalo Luder en 1975) o, inclusive, de leyes del vergonzoso Congreso, que no dudó en derogarlas cuando los vientos políticos cambiaron, como ocurrió a partir de 2003 con las de “punto final” y “obediencia debida” o con la “re-interpretación” del beneficio del “2x1” en contra de sus antiguos camaradas. Y lo mismo sucederá en las fuerzas de seguridad, a cuyos integrantes nadie respalda y son procesados cuando actúan en sus funciones específicas, como sucede en el sur.

Este escenario de disgregación nacional y fuerte indignación social, que se enmarca en la renovada y dura interna del oficialismo y los imparables ataques del Poder Ejecutivo al Judicial en pos de la impunidad de Cristina Fernández, justifica la pregunta que da título de esta nota. Porque tampoco será fácil para la oposición (si no pierde la ventaja que hoy registran todas las encuestas por su ombliguismo y sus innobles rencillas personales) si llega al poder, desarmar tantas trampas que acechan en el futuro, en especial porque las elecciones, cualquiera fuera su resultado, no cambiarán demasiado la composición del Senado. Y allí estarán esperando nuevamente el kirchnerismo y sus aliados trotskistas para intentar impedir los cambios necesarios, tirar toneladas de piedras e incendiar el país a su paso.

Billetera, ¿seguirá matando galán?   24-09-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 856

"La política es el arte de conseguir que tus intereses egoístas parezcan intereses nacionales". Thomas Sowell

Ayer, quienes esperábamos un renovado show mediático en el que la “abogada exitosa” desplegaría su innegable arte escénico y nos regalaría profundas perlas de su pensamiento, quedamos absolutamente frustrados. La multiprocesada PresidenteVice sólo repitió esos clichés a los que nos tiene tan acostumbrados: lawfare, yo no fui, me persiguen por ser mujer, no sabía qué hacían mis socios ni mis funcionarios, pregunten a los jefes de Gabinete de Néstor y míos, sólo hicimos negocios legítimos con Lázaro Báez, el Poder Judicial no es democrático, el Congreso aprobó todo, la culpa es de Mauricio Macri y sus amigos del fútbol, etc... Recordó las sospechadas piedras que rompieron los vidrios de su despacho en el Congreso y, por supuesto, no olvidó el atentado mortal que dice haber sufrido; fue cínica en extremo cuando dijo que la única puerta de un político que se conocía era la suya, después de haber convocado en su domicilio, por años, manifestaciones de apoyo, complicando la vida de tantos vecinos.

Lo más notable de su rara y endeble defensa, tanto en las palabras de sus letrados (confío en que le hayan resultado carísimos) cuanto de ella misma, es que nunca negaron la existencia de delitos y, por el contrario, sostuvieron que todos habían robado, refiriéndose a la administración de Macri; pretendieron que sus actos ya fueron juzgados y sobreseídos por la colonizada Justicia de Santa Cruz y por otro Tribunal que la absolvió sin juzgarla -está impugnado ante Casación- o como Norberto Oyarbide, que confesó que lo habían “agarrado del cogote” (sic) para obligarlo a dictar la sentencia que exculpó a ambos Kirchner del delito de enriquecimiento ilícito.

Pero ya se vio el truco, y ni siquiera un raro revólver a escasos centímetros de su cara le permitieron, según todas las encuestas, recuperar la magia perdida. El pánico a una grave condena -la sociedad mayoritariamente la reclama- que la embarga, surge claramente de sus propios dichos y los de sus principales lenguaraces, se llamen Alberto Fernández (auto-percibido Presidente de la República), Martín Soria (Ministro de Justicia y Derechos Humanos) o Gregorio Dalbón (su abogado patotero) contra los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola, que incluyeron desde profecías de sumarios y despidos hasta veladas amenazas de asesinato al compararlos con el Fiscal Alberto Nisman.

La semana que comienza traerá los alegatos de las defensas Carlos Kirchner, el enriquecido primo, y de José López, el lanzador de bolsos, a quien la emperatriz hotelera dijo odiar como nunca ha odiado a nadie; habrá que ver entonces si éste acepta deglutir solo esta sopa de sapos. Luego, será la hora de las “palabras finales” de todos los encausados y, muy probablemente, antes de fin de año conoceremos la sentencia del Tribunal oral, que será apelada a Casación y, más tarde, a la Corte Suprema; o sea, falta mucho para que quede firme y se ordene su cumplimiento.

El jueves logró unificar, tras sus necesidades personales, a todo el peronismo que, así, renunció a cualquier matiz que lo diferenciara del kirchnerismo. Con el voto de tres legisladores aliados -Alberto Weretilnek (Río Negro), Magdalena Solari Quintana (Misiones) y Clara Vega (La Rioja), la tránsfuga que ingresó en la lista de Juntos por el Cambio- convencidos sin duda con algunas “efectividades conducentes” salidas de los bolsos del saqueo, el Senado dio media sanción al proyecto de ampliar la Corte Suprema, llevándola a 15 miembros. En el debate, los caraduras del H° Aguantadero adujeron que el desprestigio de la Justicia justificaba su voto, olvidando que ellos están muchísimo peor en la consideración ciudadana.

Otra vez este episodio –más la lujosa gira presidencial a Estados Unidos con 50 acompañantes y las dos horas de reunión de funcionarios para discutir el ¿problema? de las figuritas del mundial- mostró cuán lejos están los intereses personales de Cristina Fernández de las necesidades más urgentes de la sociedad, abrumada por la inflación, la pobreza y la inseguridad.

Si bien hoy parecería que esta iniciativa –tanto como la de suprimir las PASO- no pasaría el filtro de Diputados, donde las elecciones de 2021 redujeron sensiblemente el poder de fuego de la émula local de Nicolás Maduro, no deberíamos descartar que aparezcan oportunas billeteras capaces de “motivar” a ciertos opositores, en especial aquéllos dependientes de algunos gobernadores que mantienen llamativas asociaciones con Sergio “el Aceitoso” Massa.

A esta altura resulta lícito preguntarse para qué Cristina Fernández, su familia y los miembros de su banda robaron –y lo siguen haciendo- tanto, si no podrán llevar nunca más una vida razonable (abordar aviones comerciales, viajar al extranjero, caminar por la calle, comer en restaurants, ir al cine o al teatro, etc.) y ella no tiene ningún amigo –sólo cómplices- con quien compartir sus penas y alegrías.

Pero nada nos debe hacer olvidar, puesto que está en juego el futuro de la Argentina, que estamos ante la mayor tentativa de demolición de la República desde 1983, ya que quienes la conducen están encaramados en lo más alto del Estado, disponen de los mayores medios económicos acumulados con el impar latrocinio y la asociación con el narcotráfico y tienen en sus manos los principales resortes del Estado.

El Reconocimiento de nuestro Trabajo sobre los pasos Verdaderos de Brochero 16-09-2022

por Alberto A. Anselmi

"La Comisión Nacional de Monumentos de Lugares y Bienes Históricos” tiene nueva Presidenta, se trata de la Profesora Mónica Capano, por decreto N 542/2022 del Presidente de la Nación Dr. Alberto Fernández. Su mandato será por seis años a partir del 13 de julio del año 2022. 

También fue ratificada en su cargo nuestra talentosa Periodista, Carina Judith Villafañe Batica, quien viene desempeñándose desde hace más de una década en la investigación de “La Voz de Mina Clavero”. 

Carina en su gran exploración descubrió grandes trabajos realizados por nuestro querido Santo, uno de los más importantes descubrimientos fue que Brochero brindaba a los detenidos Ejercicios espirituales y Misas en la cárcel San Martín de la ciudad de Córdoba, donde se destacaban las cartas de los presos al Gobernador pidiéndole se aplicaran esos Ejercicios en otras cárceles y que han sido publicadas en nuestro Periódico en su oportunidad. 

Su brillante tarea fue más que suficiente para que la Comisión Nacional de Monumentos, Lugares y Bienes Históricos corroborara su trabajo con el inapelable Decreto 707 del 11-10-19, firmado por el Presidente de la Nación, Alberto Ángel Fernández 

Carina trabajó también arduamente, junto a “La Voz de Mina Clavero” con la creadora de las “Cabalgatas Brocherianas”, la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero”, presidida por el gran idealista, que dedicara parte de su vida en conocer los pasos de Brochero en su trayectoria, dando trabajo y enseñando a tantos serranos; el ex Juez Federal, Dr. Oscar Raúl Sasso, quien, lamentablemente falleciera, luego de cumplir con su trabajo de investigación sobre el Santo. 

Alguien que viene trabajando y acompaño al Dr, Sasso de manera incansable y altruista, el Señor Edgardo Rodríguez, que tuvo y tiene a cargo el desarrollo, diseño y mantenimiento, de los contenidos digitales para que se le pueda dar difusión en todo el mundo, a través de la Web, sobre todo lo referente a nuestro querido Santo Brochero. Sin la gran colaboración y dedicación de Edgardo, y a la decisión de la familia del Dr. Sasso de dar continuidad y acompañamiento a su legado, esto no sería posible.  

Un gran agradecimiento por su trabajo en Altas Cumbres y demás lugares donde anduvo Brochero como el Diácono Ricardo Oliva, con Chichi Castro y Carlos Cunda, “El Negro” Heredia, Julio Pedernera, Luis Heredia con su trabajo de señalización tan valioso y sus viajes junto a quien escribe, quiero destacar también el trabajo de la Arquitecta Mónica D’Amico de la Municipalidad de Hurlingam, desde donde colaboraron para destacar la labor de Brochero e inauguraron el primer monumento en otra provincia, de nuestro Cura Santo  y los integrantes de nuestro Periódico quienes a lomo de mula y a pie han recorrido esos áridos caminos para dejar registrado en letras y fotos cada paso de esta misión sagrada, desde 1996 y perdón de tantos más que dejo de mencionar, pero todos saben bien que el arduo trabajo fue realizado con gran vocación y esfuerzo sin esperar nada a cambio, sino con el orgullo de relevar los caminos de nuestro Curita Gaucho y que nadie deforme lo realizado por nuestro Sagrado Santo. 

La Comisión Nacional estaría por declarar la certeza de todo lo realizado por la Asociación Cultural “La Vuelta del Guerrero” creada y presidida por el bajo la Presidencia del Dr. Oscar Raúl Sasso y el relevamiento que se hizo cabalgando entre montañas y valles, con pico, pala y pisón, junto a especialistas de la Cátedra de Geodesia de la Universidad Nacional de Córdoba, en sus comienzos, y concluida de manera particular con recursos propios de la Asociación, en el año 2017, para demarcar de los verdaderos caminos recorridos por nuestro Santo y que ya no se recorren porque pasan por otro camino, que es ruta y más corta y que nada tiene que ver con los abandonados caminos que realizó y recorría Brochero. (Ver www.cabalgatasbrocrerianas.com.ar)

El Laberinto de “El Aceitoso”   17-09-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 855

“La gente se abandona a ella, aturdida, intoxicada por la mentira como por un veneno sistémico”. Antonio Scurati

Sergio Massa volvió de Estados Unidos con un logro que envidiaron tanto Martín Guzmán cuanto Silvina Batakis, ex usuarios de la silla en la cual, desde hace poco más de un mes, asienta sus posaderas el Ministro de Economía: una foto con la Secretaria del Tesoro, Janet Yallen. La otra, con la Gerente del FMI, Kristalina Georgieva, no se le niega a nadie, aunque sólo sea para ser apretado por el organismo acreedor, como sucedió ahora por el altísimo nivel de inflación que la Argentina sufre, una vez más, en este cuarto y penoso gobierno kirchnerista.

Al regresar, tuvo que resignarse a que el índice mensual de agosto (7%) fuera el peor en treinta años, lo cual certifica que superará el 100% en 2022 y, probablemente, sea aún mayor en la previa a las elecciones del próximo año. Y eso sólo por la mera inercia de la puja entre gasto público, impuestos, subsidios, precios, salarios, tarifas, deuda soberana, tasas de interés, brecha cambiaria, emisión y reservas monetarias, o sea, sin sumar el renovado “Plan Platita II” que seguramente impondrá Cristina Fernández para conservar (o al menos intentarlo) su base en la Tercera Circunscripción Electoral de la Provincia de Buenos Aires.

Sin necesidad de ser economista, resulta fácil entender que, con esta tan distorsionada economía, el aumento de la tasa para que supere la inflación (una obligación que surge no sólo el acuerdo con el FMI sino, especialmente, de la necesidad de que los pesos privilegien los plazos fijos y no presionen al blue), la renovación de la inmensa bola de nieve de los bonos atados a la inflación o linkeados al dólar implicará duplicar la actual base monetaria, realimentando gravemente la inflación. La contrapartida de ese aumento de intereses será la quiebra de muchas pymes, ya endeudadas hasta la maceta, y la consiguiente pérdida de puestos de trabajo.

Pero los problemas de Massa no terminan ahí. Por un lado, tendrá que luchar contra las apetencias de los gobernadores e intendentes, escasamente dispuestos a resignar sus obras públicas y remesas del Tesoro, sobre todo en un escenario electoral en que pronostican una fuerte derrota del oficialismo nacional. Por otro, resistir la presión en la calle de los sindicatos, para mejorar los salarios, y de los movimientos sociales, en pos de aumentar los subsidios y conservar su administración, que enriquece a los gerentes de la pobreza. Y peor aún, batallar contra el relato populista de la PresidenteVice a quien, a pesar de su insólito pragmatismo actual, no imagino tolerando un severo ajuste fiscal que, tradicionalmente, lleva a perder las elecciones. ¿Podrá sobrevivir El Aceitoso a ese triple abrazo mortal cuando, además y si tuviera éxito, se convertiría en un peligroso presidenciable?

Y todo eso mientras la angustiosa escasez de reservas en el Banco Central obliga a cerrar el grifo de importaciones, muchas de las cuales son imprescindibles para producir aquí, o sea, provocar una fuerte caída en la actividad con un marcado incremento de la demanda por el exceso de pesos en la economía; en resumen, la temible estanflación.

Creo que, aún con muletas, el Gobierno terminará su mandato y logrará transferir el mando a la oposición, pero ésta deberá asumir en condiciones catastróficas y sin contar con el apoyo del Senado, donde el peronismo, siempre indomable y muchas veces destituyente, conservará un poderío trascendental, tal como sucedió en las gestiones de Raúl Alfonsín, Fernando de la Rúa y Mauricio Macri, aunque éstos cometieran sus propios y graves errores. Pero también, en este escenario internacional que estará por mucho tiempo signado por la escasez de alimentos (por la generalizada sequía) y de energía (por la invasión rusa a Ucrania), tendrá otra enorme oportunidad que, espero, no vuelva a dilapidar. Basta con pensar las posibilidades que ofrecen la agroindustria, la minería, la pesca, el gas, el petróleo, el uranio, el litio, la industria del conocimiento y cientos de productos regionales.

Para salir del enorme atolladero que recibirá, y para provocar un giro copernicano en la mentalidad de una sociedad esclavizada por la dádiva y la obligada genuflexión, la próxima administración deberá concitar un alud de inversiones, especialmente en infraestructura de transporte de cargas, fluidos y pasajeros. En este momento, existe mucho dinero buscando dónde ser aplicado, pero exige la confianza, la previsibilidad y la seguridad jurídica que la Argentina no puede ofrecer. Entonces, para presentar un escenario atractivo, deberá entre otras cosas establecer que todos los contratos que se suscriban estarán sometidos a alguna jurisdicción extranjera y crear un fondo de garantía con activos públicos estatales fácilmente ejecutables, tal como hizo Brasil en 2003; también, cambiar de raíz los regímenes tributario y laboral y liberar los mercados, para generar rápidamente empleo genuino y, en pocos años, las divisas indispensables para nuestro desarrollo.

Si lograra producir ese cambio tan brusco en los primeros cien días, dispondrá de la tolerancia social, del tiempo y de los fondos necesarios para recuperar la perdida educación pública y entrar en un círculo virtuoso en el que se premie el mérito y el esfuerzo. Hoy, en el marasmo de piquetes, inexplicables atentados, grietas insalvables, desesperanza, resignación, pobreza, decepción, violencia, corrupción, impunidad, emigración de nuestros hijos e insólitas y ríspidas disputas personales entre los dirigentes en que estamos sumergidos, todo esto puede sonar a utopía; sin embargo, es un camino que deberemos recorrer para evitar que se cumpla el presagio del arqueólogo encarnado por el Tato Bores (https://tinyurl.com/yckk8v7s) mientras exploraba el lugar donde, se decía, había existido la Argentina.

Una sugerencia, entre tantas chapuzas  10-09-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

(Nota N° 854)

“¿Es posible que tales mentes sean aptas para gobernar?”. Samuel Taylor Coleridge

A más de una semana del fallido atentado, real o fingido, contra Cristina Fernández y todos los ¿descuidos? en que se incurrió durante su investigación (similares lo sucedido cuando el Fiscal Alberto Nisman y el enriquecido secretario privado de ella, Fabián Gutiérrez, fueron asesinados) siguió ocupando las primeras planas de los diarios, pero ya, con la muerte de Isabel II, pasó definitivamente a las páginas interiores. Pese a la magnificación mediática y su malintencionada utilización política, el presunto magnicidio no sirvió para victimizarla como se pretendía; la preocupación de la ciudadanía que, en su gran mayoría descree de la explicación oficial e imagina un perverso y chapucero montaje con seres marginales y policías distraídos o ineptos, volvió a pasar de inmediato por la inflación, la pobreza, la inseguridad y, muy cerca, por la impunidad de la corrupción.

No asombró, por lo habitual, la virulencia de los ataques a la prensa, la Justicia, la oposición, la oligarquía, los Estados Unidos, etc. (la vetusta “sinarquía internacional”, a la cual el primer peronismo echaba la culpa de todos sus errores y fracasos) del falaz Alberto Fernández y la inmunda cohorte que lo acompañó en sus diatribas. Pero nadie fue más explícito en sus intenciones que el Senador José Mayans, empleado del siniestro señor feudal formoseño, Gildo Insfrán (¡27 años en el poder!), cuando dijo que la paz social estará en riesgo si la causa “Vialidad”, en la cual a su reina se le ha pedido una pena de doce años de prisión, sigue su curso procesal. La contemporánea reaparición de los asesinos terroristas Fernando Vaca Narvaja y Mario Firmenich, en actitud de franca amenaza a la sociedad y a la democracia que el Gobierno auspicia, no contribuye precisamente a consolidar esa paz que Mayans considera en peligro.

La Argentina, desde la crisis de 2001, vive en un estado de anomia generalizado, en el que el tejido social se ha roto completamente, nadie respeta los derechos de los demás, y donde muchos políticos, sindicalistas y empresarios de toda laya se auto-perciben exentos de cumplir la ley y, por ende, distintos al resto de nosotros frente a ella. Si bien Cristina Kirchner es paradigmática, porque no sólo pretende que no se la puede condenar sino siquiera juzgar, pululan los Luis D’Elia, José Alperovich, Milagro Salas, Amado Boudou, Julio de Vido, etc., que invocan un ya gastado “lawfare” para desacreditar los procesos judiciales que los enviaron a la cárcel.

Gran parte de nuestros problemas radica en la falta de instituciones fuertes, como las que tienen nuestros vecinos, preparadas para resistir cualquier deriva autoritaria, del signo que fueran. Aquí, el kirchnerismo, que ha gobernado dieciséis de los últimos veinte años, dispara fuego graneado sobre el Poder Judicial, amén de haber desarticulado y anulado a todos los organismos de control. Al menos por ahora, sólo impide que el desalmado ataque que encara contra la República y su Constitución tenga éxito, la escasa diferencia que obtuvo la fórmula Fernández² en 2019, debida a la remontada que provocó la gira del “sí, se puede” que realizó Mauricio Macri por todo el país después de las PASO de ese año, ya que le impidió hacerse con mayorías propias en las cámaras del Congreso.

Pero, lamentablemente, también en la oposición se cuecen habas y se incurre en chapucerías, derivadas de los personalismos y las distintas visiones políticas que abundan entre sus dirigentes. Juntos por el Cambio, a la cual muchos presumimos ganadora en noviembre de 2023, exhibe públicamente sus miserias agregando así preocupaciones a las demasiadas que tiene una sociedad que espera que, esta vez, se consiga desterrar al populismo castro-chavista. Parece haberse instalado un abismo entre esos dirigentes y la ciudadanía en general, que tiene necesidades cotidianas y urgentes mayores. Para esa oposición formulo una propuesta.

Las fundaciones (los “think-tanks”) que dependen de cada uno de los partidos políticos que integran esa coalición están trabajando conjuntamente en un plan general de gobierno, conscientes de que el próximo Presidente, por el pesimismo y el hartazgo ciudadano, por la angustiante situación económico-social y por la pesadísima y explosiva deuda que recibirá de la actual gestión, no dispondrá de la tradicional luna de miel -los primeros cien días- que gozan las nuevas administraciones, y deberá tomar medidas de inmediato.

No sugiero que esos proyectos sean explicitados ahora, cuando aún falta un año para las primarias y un par de meses más para las elecciones generales, porque generarían una reacción negativa en una sociedad en la que siempre prima el principio de “con la mía, no”, pero sí que se pongan de acuerdo en diez o veinte políticas de Estado y, sobre todo, en quién estará a cargo de cada cartera ministerial clave, sea quien fuera luego el futuro Presidente, al mejor estilo del “gabinete en las sombras” británico. Por lo demás, así funcionan en todo el mundo los gobiernos de coalición que, siempre a la luz pública, distribuyen las distintas áreas de responsabilidad entre los partidos políticos que la integran, se trate de Brasil, Chile, Uruguay, Dinamarca, España o Italia.

De ese modo, las próxima PASO se circunscribirían sólo a definir quiénes serán los candidatos finalmente elegidos para representar a la coalición opositora en octubre de 2023, y la ciudadanía sabría con anticipación cuál será el perfil que revestirá el nuevo gobierno por los nombres de los futuros ministros, en especial en lo que, a la economía, tan averiada y decepcionante hoy, se refiere. Tal vez así podamos contemplar con cierta tranquilidad las incendiarias discusiones que, aun siendo aliados, mantienen quienes aspiran a los cargos más expectables, sean éstos nacionales, provinciales o municipales. ¿Seré escuchado o soy un pobre iluso?

Algo Huele mal en Argentina  03-09-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

(Nota N° 853)

 “Cuando un payaso se muda a un palacio, no se

 convierte en rey; el palacio se convierte en circo”.

Proverbio turco

 

El jueves a la noche nos fuimos a dormir conmocionados por un hecho extraño; ni William Shakespeare podría haberlo imaginado mejor. Como todos, traté de entender qué había pasado en la puerta del edificio donde vive Cristina Fernández, que ha sido el escenario sobre el cual nos regaló su arte escénico desde que concluyó el alegato de los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola, con un pedido de doce años de prisión para ella y sólo los cuatro –no un gobierno entero- integrantes de la asociación ilícita que le imputan haber organizado y dirigido después de la muerte de su marido.

 

La secuencia de lo acontecido en el barrio de Recoleta fue llamativa. La concentración de escasos –nunca superaron los 6000- militantes, con cortes de calles, fuegos artificiales que impactaron en balcones vecinos, parrillas de choripán y puestos de venta de merchandising kirchnerista y, derivó en un descontrol total que justificó la intervención de la Policía de la Ciudad; los salvajes disturbios, con veinte policías heridos, hizo que el Estado retrocediera. En minutos, el inefable Juez local, Roberto Gallardo, que exhibe en su despacho curiosos retratos de gente repudiable, ordenó al Gobierno de la Ciudad, anfitrión en su territorio del Gobierno nacional, liberar la zona y retirar las cámaras de seguridad. Enseguida, el hijísimo Máximo dijo que la oposición estaba buscando matar peronistas.

 

Apareció entonces la Policía Federal, a las órdenes de Anímal Fernández, para asumir la seguridad de la PresidenteVice, sumándose a su custodia personal de más de cien efectivos encabezados por el Comisario (R) Diego Carbone, un campeón de kickboxing. El jueves, cuando ella llegó a su casa y comenzó a autografiar ejemplares de “Sinceramente …”, el bodrio que dice haber escrito, un tipo mezclado entre sus adherentes se acercó a 50 cm. de la cara de la procesada funcionaria y disparó un arma frente a cámaras casualmente muy cercanas; digo “disparó” porque, claramente, se vio salir algo de ella. La emperatriz hotelera continuó firmando con tranquilidad durante seis minutos más, saludó y se fue.

 

El atacante fue detenido por los asistentes, no por la custodia -que no reaccionó y tampoco aseguró el primer círculo alrededor de la víctima- y, sin ser esposado, llevado a un móvil policial, y un arma encontrada cerca. Aparentemente, se trata de una pistola de calibre 7.65, que cabe en el bolsillo que se usa para las llaves o el encendedor. Pese a que tenía cinco balas en el cargador, no había ninguna en la recámara; para quienes no están habituados, cuando un arma automática se dispara, la corredera retrocede y otro proyectil se introduce en la recámara. Hasta aquí, los hechos.

 

Tres horas después, el auto percibido Presidente firmó el decreto que dispuso un raro feriado nacional -¡por suerte nos va tan bien que podemos permitirnos cerrar la industria, el comercio, los bancos y las escuelas!- para arropar a la laureada actriz Cristina Fernández y responsabilizó a la Justicia, a la prensa y a la oposición por el atentado por su “discurso de odio”. De inmediato, La Cámpora convocó -acompañada por funcionarios, sindicalistas y “pobristas”- a una movilización popular. Todo muestra una actitud totalmente diferente a la que tuvo el kirchnerismo cuando Alberto Nisman fue asesinado, un real magnicidio irresuelto; por supuesto, también fue diametralmente opuesta a la de Raúl Alfonsín cuando, hace treinta años, vivió un episodio similar y pidió a la ciudadanía mantener la calma.

 

Como mínimo, es obvio que se está tratando de reinstalar el “vestidito negro” que la llevó, en andas de una sociedad tristemente empática, al triunfo en 2011. Además, sirve para ocultar el ajuste que Sergio Massa está llevando a cabo contra un sector de la sociedad y de la actividad privada, pero evitando, como siempre sucede, reducir el gasto público federal, provincial y municipal, que cada vez requiere más impuestos y gravámenes para sostenerse; no podemos olvidar cómo se comportó el kirchnerismo cuando se votó en el Congreso el acuerdo con el FMI, que sólo fue rescatado por la decisión de la oposición de evitar un cataclismo económico-social.

 

Pero esta concentración de Plaza de Mayo, y la que se ha convocado para el lunes frente a la Corte Suprema, recuerdan a aquélla que, en 1953, terminó con las hordas peronistas quemando las de sedes de partidos políticos opositores y del Jockey Club tras la explosión de bombas sin autores conocidos, y permiten imaginar escenarios muchos peores; como sostengo hace tiempo, hoy esta revivida Nerón está dispuesta a incendiar Roma para obtener impunidad y, en última instancia, conservar el poder eternamente, al mejor estilo chavista.

 

Las redes sociales están documentando para el futuro las dudas y sospechas que invaden el ánimo de la enorme mayoría de los argentinos con relación a lo sucedido antenoche, y la prensa militante y muchos energúmenos están acelerando la marcha hacia el abismo -ya no una grieta- que ya existía pero que, en estas circunstancias, puede llevarnos a la extrema violencia, tal como la vivimos en los 70’s.

 

Es la Juez María Eugenia Capuchetti quien tiene la responsabilidad de esclarecer este episodio, y debe hacerlo lo antes posible porque, en la Argentina, el horno no está para más bollos. Y todos debemos cuidar a los jueces y a los fiscales –y a sus familias- que están realizando el juicio oral a Cristina Fernández, puesto que el oficialismo los está acusando de la autoría intelectual de este fracasado atentado y, como hemos visto, siempre puede aparecer un loco suelto, auténtico o no.

Mafiosos y golpistas  27-08-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

(Nota N° 852)

 

“El fascismo mediático funciona de esa manera: los fanáticos consumen la basura, la

 metabolizan y luego la convierten en patoterismo de obvio comienzo, pero de incierto final”.

Jorge Fernández Díaz

 

Cristina Elisabeth Fernández de Kirchner sólo tiene un objetivo -lograr la impunidad para sus múltiples delitos- y, para lograrlo, está dispuesta a incendiar Roma; la comparación con Nerón no es gratuita, ya que el Emperador padecía una gravísima enfermedad mental similar a la que, sin duda, afecta a nuestra emperatriz hotelera. Las fuerzas de choque de las que la insana jefa dispone para generar el caos incluyen a “soldaditos” del narcotráfico, barrabravas subsidiados, criminales liberados con la excusa del Covid, falsos mapuches y terroristas del Sendero Luminoso peruano y de las FARC/ELN colombianos, instructores venezolanos, cubanos e iraníes, y anarco-cuentapropistas; esta semana, algunos de sus más energúmenos seguidores han llamado a la “batalla” (sic) y arrastran a los pobres tan fanatizados que se niegan a reconocerla como responsable de su miseria.

 

Cuando los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola pidieron penas tan severas para la viuda de Kirchner y un grupo de sus cómplices, abrieron la caja de Pandora. Pese a que falta mucho para que la sentencia del Tribunal sea emitida, ya que aún deben hablar los abogados defensores e, inclusive, decir sus “últimas palabras” los acusados, el aparato mediático del Ejecutivo ordenó que el “pueblo” salga a bancarla, realice enormes concentraciones y corte las rutas, en una actitud claramente mafiosa y golpista; que ese golpe sea dirigido contra el Poder Judicial, en especial contra la Corte Suprema, no lo hace menos grave a la luz de los preceptos constitucionales.  

 

En su intervención por YouTube desde su despacho en el Senado –algo habitual en ella pero no por eso menos ilegal- Cristina Fernández no refutó una sola de las demoledoras pruebas que los fiscales exhibieron en el juicio, utilizó bastardamente datos personales tergiversados o falsos para denostar a fiscales y jueces y tratar a Mauricio Macri de delincuente,, confesó que su AFI espiaba, acusó de corrupto a su marido muerto, negó que su gobierno haya sido una asociación ilícita y sostuvo que ella ignoraba cuanto sucedía (confesiones de empresarios “arrepentidos”, secretarios privados enriquecidos, cuadernos de Oscar Centeno, asociación inmobiliaria con Lázaro Báez y bolsos de José López incluidos) en su administración; o sea, pretendió que no se le puede atribuir “responsabilidad funcional”.

 

Fue aplicando precisamente ese concepto que fueron condenados los integrantes de las juntas militares y, desde 2003, con la clara complicidad del entonces Presidente de la Corte Suprema, sentenciados a prisión perpetua infinidad de militares y civiles que “hubieran debido saber” en razón de su posición en el organigrama estatal durante el Proceso.

 

Por otra parte, no se puede olvidar que fue la propia Cristina Fernández, como Convencional Constituyente, quien propuso en Santa Fe, en 1994, agregar al artículo 36: “Atentará asimismo contra el sistema democrático quien incurriere en grave delito doloso contra el Estado que conlleve enriquecimiento, quedando inhabilitado por el tiempo que las leyes determinen para ocupar cargos o empleos públicos”.

 

El hasta ahora denostado peronismo, a cuyos dirigentes ella mandó hace poco a suturarse un esfínter, salió unánimemente a respaldarla, preocupado porque la mancha venenosa de la lucha contra la corrupción alcance a sus señores feudales, sean éstos eternizados gobernadores o gremialistas. Pero la renovada humillación de esos “machos alfa” frente a la “abogada exitosa” y sus aspiraciones de impunidad se da en un momento económico y político sumamente complicado debido al fracaso del artilugio inventado por ella para ganar en 2019 -hoy una mesa que ha perdido una de sus tres patas- y a la inminencia de las elecciones del próximo año, en las cuales prevén una fuerte derrota del oficialismo nacional.

 

Si bien todo el revuelo mediático ha servido para enviar el feroz ajuste en la educación y la salud de Sergio Massa, “el Aceitoso”, a las páginas interiores de los diarios, no por ello dejará de sentirse en los bolsillos de la gente, absolutamente harta del despilfarro y de la corrupción del Estado; cuando esa “sensación” se agudice, habrá que ver si la declamada lealtad a ultranza de estos caciques, que pretenden renovar sus tan infinitos mandatos, no flaquea ante las encuestas que muestran que la mitad de los votantes del Frente para Todos, y todos los no lo son, dice estar convencida de la culpabilidad de Cristina Fernández.

 

El canalla que se autopercibe Presidente venía violando la Constitución hace tiempo y ahora, al arrogarse el conocimiento de una causa judicial en trámite, algo que tiene expresamente vedado por su artículo 109, incurrió en un nuevo delito. Llegó al colmo cuando dijo algo que ya entró en la historia prostibularia de nuestro país: “Nisman se suicidó, espero que Luciani no haga lo mismo”; a nadie llamó la atención que contradijera sus públicas y recientes declaraciones sobre el asesinato del Fiscal, porque estamos acostumbrados a su permanente incoherencia, pero sí que formulara, desde el sillón de Rivadavia, una tan clara amenaza al mejor estilo de Don Corleone.

 

La semana pasada recomendé comprar cascos, asegurando que lloverían piedras; con las violentas amenazas que se formulan diariamente y la fuerte agresividad que exhiben ahora los militantes kirchneristas, seguramente me habré quedado corto.

Todo roto 20-08-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 851


“Para corromper a un individuo basta con enseñarle a llamar ‘derechos’ a sus anhelos personales y ‘abusos’ a los derechos de los demás”. Gilbert K. Chesterton

 

Todos los días me pregunto, contemplando desde adentro a esta Argentina tan penosa, cuánto falta para que todo termine aquí en un “big bang” similar al que dio origen al universo. ¿Ocurrirá cuando los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola pidan la condena de Cristina Fernández o cuando se emita la sentencia? Sobre todo, mi inquietud se dirige a imaginar cuál será el resultado final y quiénes sobrevivirán a la explosión y lograrán imponer su propia ideología en nuestro país. De ser, durante 150 años, un ejemplo que buscaban imitar todos nuestros vecinos y un imán que atrajo a millones de inmigrantes que huían de las tragedias que enfrentaban en sus naciones de origen, y aquí forjaron una sociedad con enorme movilidad social ascendente, fruto del esfuerzo y del mérito –“m’hijo, el doctor”-, llegamos a este presente que nos duele tanto.

 

El miércoles, día del Padre de la Patria, la ciudad de Buenos Aires fue, una vez más, un escenario que mostró el descalabro mental que la demagogia produjo por la falta de educación y la falsificación de la realidad y por la vocación clientelista, corrupta y prebendaria de quienes nos gobiernan, sean éstos funcionarios, educadores, empresarios o dirigentes gremiales y sociales. Las simultáneas marchas de la CGT y de la izquierda dura tuvieron un denominador común, expuesto por una foto que se viralizó: un camión-jaula de ganado transportando pobres, que ignoran para qué asisten o contra qué protestan. La central obrera, impedida de enfrentar a un gobierno peronista del cual, al menos teóricamente, forma parte, se vio obligada a realizar contorsiones dialécticas para no inculparlo por la inflación y la pobreza que nos afectan, y sólo agregó confusión al panorama.

 

El Estado ha gastado, durante 70 años, más dinero que el que tenía y ahora, cuando ya no dispone de crédito externo ni puede aplicar más impuestos a la actividad privada, se enfrenta a una implacable verdad: no se puede hacer populismo sin plata. Ese fenómeno se extenderá, como mínimo, al próximo período presidencial. Quien gane las elecciones tendrá la misma dura pared por delante, con una sociedad que no cesa de quebrarse, con pérdida acelerada del poder adquisitivo del peso, el 50% de la población bajo la línea de pobreza, una legislación laboral retrógrada, un sistema tributario insano y expropiador, el empleo público como sustituto del privado, un altísimo porcentaje de la actividad económica en la informalidad, una Justicia morosa que facilita la impunidad, el narcotráfico rampante y violento, la renacida subversión terrorista y los reclamos territoriales de los pseudo mapuches, etc., etc.

 

A partir de ahora, no nos será dado recibir buenas noticias, en especial en lo que a tarifas, subsidios y planes sociales se refiere; debemos ser conscientes de la necesidad de asumir que sólo tendremos “sangre, sudor y lágrimas”. Nadie, propio o ajeno, está dispuesto a invertir aquí ni a prestarnos una moneda más por el desastre en que nos hemos convertido. Sin inversiones ni crédito, no podremos generar más alimentos ni energía, no contaremos con las obras indispensables para la explotación racional de nuestros recursos y así economizar las tan escasas divisas, y no podrá crearse empleo genuino; por otra parte, tampoco quienes podrían buscarlo en un mercado tan moderno y competitivo están preparados, porque han perdido la cultura del trabajo y llevan generaciones sin hacerlo.

 

Debemos -lo hizo Brasil este mismo mes- aplicar una significativa reducción en los impuestos, en especial aquéllos que gravan los combustibles, la energía y los alimentos básicos y, por supuesto, unificar las decenas de tipos de cambio que aquí se aplican; que tantas autorizaciones y permisos dependan de la arbitrariedad de los funcionarios no resulta un factor menor al analizar la corrupción rampante que nos agobia.

 

Será la calle la que marcará la diferencia. Si, como parece altamente probable, un miembro de la oposición lograra hacerse con el triunfo electoral en 2023, y tal como sucedió con Mauricio Macri, verá encenderse la más cerril violencia. Recuérdese, para confirmarlo, las 17 toneladas de cascotes arrojados cuando se discutió una reforma previsional muchísimo menos lesiva para los jubilados y pensionados que el régimen actual, que tanto los expolia; sin embargo, hoy, con un gobierno kirchnerista, esa misma calle guarda un atronador silencio. ¿Qué duda cabe acerca de la autoría intelectual de ese monumental atentado contra la democracia? Esos mismos autores, aún en el fondo de la tabla de posiciones electorales, conservarán intenso poder de fuego, ya que tienen a muchos fieles en altos cargos de la administración pública y disponen de palos necesarios para trabar ruedas.

 

Por la perpetuación de los eternos mandatarios en las gobernaciones, que incidirá en la elección de los legisladores que representarán a sus feudos, seguramente el próximo Presidente tampoco contará con un Congreso dispuesto a aceptar los indispensables cambios que la República requiere aunque sólo sea para sobrevivir, ya que estará plagado de populistas y estatistas; observemos cómo votó parte de la bancada de Juntos por el Cambio la ley que faculta a las provincias aumentar impuestos y crear nuevos tributos.

 

En resumen, hagamos el mayor esfuerzo posible para que Alberto Fernández, aunque sea ya sólo una figura decorativa y carente de toda importancia, termine en tiempo y forma su mandato, pero ahorremos para comprar cascos, porque seguramente volverán a llover piedras.

 Polideportivo: “El Significado de una Gran Obra”  17-08-2022

por Alberto A. Anselmi

La Municipalidad de Villa Cura Brochero realizó la Inauguración de la 2º etapa del Polideportivo de nuestra localidad, una obra que fue soñada durante varios años y que ya es una realidad.  

Esta ceremonia se llevó a cabo el jueves 4 de agosto y contó con la presencia de autoridades nacionales, provinciales, regionales y locales.  

Las canchas de Pádel, Hockey y Tenis ya son de gran trascendencia para el deporte local y regional, los cuáles albergan a chicos y grandes para la práctica de actividades deportivas y recreativas, en lo que ya son nuevos espacios de inclusión y de fomento de una vida saludable. 

Estos deportes pueden brindar oportunidades de: jugar y divertirse, competir, evitar el aburrimiento, estructurando ocupar el tiempo libre, promover la vida social, introduciendo normas a seguir, cooperar con otros para lograr metas, poner a prueba los límites humanos, ponerse a prueba uno mismo, establecer y vencer riesgos, descubrir las propias limitaciones, hacer amigos y estrechar las relaciones con otras personas, conocer mejor el propio cuerpo, obtener ingresos, experimentar orgullo, expresar su propio talento y aptitudes, fomentar la paz local e internacional, mantenerse en forma, ganar o perder peso, mantener una buena salud mental, aprender a respetar a los demás, compartir una meta común con otros, desarrollar lealtad, compromiso y perseverancia, fomentar valores culturales, experimentar el sentimiento de “vanguardia”, llegando al límite, reducir el estrés. 

 Los científicos no han estudiado todos los beneficios potenciales del deporte. Pero, de acuerdo con Wolfgang Brettschnneider (1999), que examinó los estudios científicos, las investigaciones han demostrado que el deporte para los jóvenes puede producir una parte importante como es sentir el propio cuerpo y establecer una relación con el mismo. Mayor autoestima, mayor capacidad para hacer frente al estrés, mayor rendimiento en los estudios, mejores relaciones con la familia.  

Este es sólo un reducido número de los modos en que se ha considerado en esta Municipalidad que los diferentes deportes contribuyen al desarrollo de los jóvenes. En el caso de la prevención, los consideramos como factores protectores o beneficios que pueden desarrollarse potencialmente mediante el deporte, y pueden evitar una gama de problemas, incluida la toxicomanía. 

Quiero destacar la feliz decisión de otro Intendente anterior y el gran reconocimiento del actual Intendente Carlos Oviedo y el gran empuje, comprendiendo la importancia de esta obra de bien, especialmente para los jóvenes que deben encontrar su orientación sana, que le brinde felicidad. 

Este reconocimiento va también para el noble Pueblo de Brochero, que apoyó firmemente esta iniciativa, en beneficio fundamentalmente de todos nuestros hijos con la oportunidad de una vida mejor, con una educación superior. 

Fiscales piden embargar propiedades de Cristina Kirchner, sus hijos y Julio De Vido 15-08-2022

por Alberto A. Anselmi

Por estafa en obra pública en contra del Estado, es acusada de criminalidad compleja.

14 Ago 2022 17:54 h

Los fiscales Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques solicitan al juez Julián Ercolini el embargo de más de 180 bienes de propiedad de la expresidenta de Argentina, Cristina Kirchner, al ex ministro de Planificación Julio De Vido y al resto de los procesados en la causa que investiga las irregularidades y direccionamiento en la obra pública.

El pedido fiscal señala que a fin de cumplir las obligaciones internacionales que asumió el país en materia de delitos vinculados a criminalidad compleja con aprobación judicial se determinó la afectación de 145 inmuebles, 42 autos, 2 embarcaciones, y 18 productos bancarios y participaciones en 11 sociedades, entre otros.

Entre los bienes a incautarse existen decenas de vehículos, cajas de seguridad y cuentas bancarias. Se incluyen bienes que la expresidenta les cedió de manera gratuita a sus hijos, Florencia y Máximo Kirchner, como son 25 propiedades, acciones en distintas sociedades, el dinero depositado en las cajas de seguridad (US$ 5.696.144 y $53.280), y hasta una camioneta Honda CRV.

El eventual decomiso incluye el listado de los bienes de todos los procesados incluye 145 inmuebles, 42 autos, 2 embarcaciones, y 18 productos bancarios y participaciones en 11 sociedades. La mayoría pertenecen a Lázaro Báez, que totaliza 81 inmuebles y 4 vehículos, entre otros bienes.

En el caso de las cajas de seguridad que fueron franjadas durante la investigación (2 de Julio De Vido, 1 de José López y 3 de Carlos Kirchner), los fiscales le solicitaron al juez que ordene un inventario y el secuestro de su contenido. Respecto a los otros bienes embargados, reclamaron una tasación para determinar el valor real.

El embargo preventivo es una medida cautelar que suelen pedir los fiscales para garantizar el eventual decomiso de los bienes de los imputados, y a su vez para satisfacer la pena pecuniaria, la indemnización civil y las costas del proceso luego del juicio.

En este caso, el juez Ercolini ya había embargado los bienes de los imputados al momento de procesarlos. Primero ordenó un embargo de hasta $10.000.000.000, y luego sumó otro por $2.500.000.000 cuando amplió el listado de procesados. Pero la medida recién se hace efectiva cuando quedan identificados todos los bienes y se comunica a los registros oficiales.

Los fiscales elevaron el pedido de 37 páginas al juez federal Julián Ercolini, a quien le solicitaron, además, que disponga una serie de embargos sobre activos a nombre de Báez, del ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido, y al ex secretario de Obras Públicas José López, entre otros.

Con ese norte, los fiscales reclamaron que «se disponga el secuestro y depósito judicial de los bienes muebles registrables, como así también el depósito en el Banco Nación de los productos bancarios inmovilizados a embargar, constituyéndose plazos fijos de renovación automática».

De Expreso.com

Reproducido por Alberto Anselmi

¿Cuál Argentina? 14-08-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

(Nota N° 850)

“No es con el oro sino con el hierro que se recupera la Patria”.

 Marcus Furius Camillus


En medio del alucinante caos en que hemos convertido la realidad nacional, donde una PresidenteVice está siendo juzgada por comandar una asociación ilícita creada para saquear al país y un líder subversivo reivindica públicamente el terrorismo, resulta lógico preguntarse qué país queremos y, sobre todo, cuál será el que conseguiremos dejar en herencia. Esta misma semana, el panorama general dejó algunos penosos ejemplos que justifican dudar acerca de qué, realmente, podremos lograr cuando nos toque volver a votar y logremos desalojar a los ladrones que nos gobiernan.

 

Nadie duda ya del pavoroso cuadro que todos los análisis pintan respecto al profundo deterioro, casi terminal, de la educación en nuestro país, con tantos chicos excluidos de las escuelas por la pobreza, la falta de capacidad y la ausencia permanente de los docentes, amén de la carencia de conectividad en los hogares humildes durante la tan malsana “cuareterna” que impuso el Gobierno. En ese marco, el principal sindicato de “trabajadores de la educación”, CTERA, conducido por el nefasto Roberto Baradel, profundizó el drama al decretar una huelga nacional para respaldar a uno de sus representantes, condenado por la Justicia por incendiar la Legislatura de su provincia. O sea, dejó sin clases –y, en muchos casos, sin comer- a millones de niños por defender a un delincuente.

 

En paralelo, tampoco ignoramos el monumental déficit que conlleva la operación de Aerolíneas Argentinas, “su (de La Cámpora) compañía”, que llega a una cifra de US$ 800 millones por año. Y eso a pesar de cerrar los cielos y hasta el aeropuerto de El Palomar y perseguir y expulsar del país a las empresas “low cost” para evitar su leal competencia, que tantos beneficios habían llevado a todos los argentinos por la gran vinculación que permitieron entre las provincias sin necesidad de pasar por Buenos Aires. La cantidad de pilotos por avión apto para volar que mantiene la empresa supera en mucho a esa relación en todas las líneas aéreas del mundo, y los salarios que aquí se pagan son tan elevados que resultan obscenos en comparación con el resto de la población.

 

El Poder Ejecutivo, acosado por una crisis económico-social a la cual no parece encontrar salida, anunció -sin detalles- que recortaría el gigantesco gasto público que él mismo ha llevado a las nubes y que, ante la falta de fuentes genuinas de financiación, pretende compensar con una emisión de moneda ya fuera de control. Ante ese potencial peligro para sus ansias de rapiña, el desmadrado Pablo Biró, que comanda el gremio de los pilotos, APLA, avisó que decretará nuevos paros si ese inevitable ajuste afectara a sus insólitos privilegios, privando –como siempre en épocas de gran tráfico aéreo- a la población del derecho a viajar.

 

Y el último de los pantallazos, sin duda el más grave, que complican aún más el panorama de esta trágica Argentina, fue la celebratoria presencia de tantos y tan poderosos representantes de la “patria contratista” en la asunción de Sergio Massa como Ministro de Economía. Ese coro tan festivo de pescadores en bañaderas y cazadores en zoológicos augura que, por delante, tenemos todo el pasado nacional –gracias, Jorge Luis Borges- que nos empobreció por generaciones, ya que sin duda se beneficiarán de la arbitrariedad con la que los funcionarios corruptos deciden temas tan relevantes como las tarifas eléctricas y de gas, las inversiones en litio, el acceso a divisas a precio oficial, los contratos de “dólar futuro”, etc., etc.

 

Son aquéllos a quienes cabe a la perfección el calificativo de “expertos en mercados regulados”, con el cual Repsol justificó la “venta” del 15% (+ 10%) de YPF a los Eskenazi, claros testaferros de los Kirchner que lo único que sabían de la industria petrolera cargar combustible en sus automóviles, sin poner un centavo. La operación resultó tan gravosa para la Argentina que le costó el autoabastecimiento energético, del cual derivó la necesidad de importar gas que, a su vez, produjo –además de muchos negocios turbios- un fenomenal drenaje de reservas del Banco Central y, finalmente, es causa de la inflación que nos destruye.

 

Cuando digo que fue gravoso me refiero, claro, no sólo al precio que pagó Axel Kiciloff (US$ 10.000 millones) a la empresa española después de haber asegurado, pública y registradamente, que sería ella quien debería pagar al Estado por los daños ambientales que había producido durante su administración de la compañía, sino que la expropiación del 51% de YPF, que aún pertenecía a Repsol, se hizo violando el estatuto social, que obligaba a quien tomara el control ofertar por el resto del paquete accionario. Eso es lo que está en juicio en los Tribunales de Nueva York, al borde de una sentencia que podrá resultar contraria a los intereses nacionales por un monto que oscila entre US$ 5.000 millones y US$ 20.000 millones; sospecho (así lo escribí y fue profusamente publicado hace siete años) que, detrás de esos “fondos buitres”, está la propia familia bi-presidencial.

 

En resumen, y dada la situación en que el Gobierno está condicionando gravemente el futuro a través de un impagable endeudamiento en pesos,  que se ha transformado en una inmensa bola de nieve que crece a razón de billones por mes, y hasta rapiña los encajes de los depósitos en dólares de los particulares, cierro esta nota con la pregunta del título: con este estado de cosas, con la anomia que reina en el país, con el geométrico crecimiento del narcotráfico, con el 50% de la población bajo la línea de pobreza y con los incontrolados y múltiples planes sociales clientelistas, ¿es viable esta Argentina en democracia o deberemos refundarla?

¡Paren el mundo, Argentina se baja!  06-08-2022

por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 849

 

“El coraje no se puede simular; es una virtud que escapa a la hipocresía”. Napoleón Bonaparte

 

Dada mi condición de abogado recién recibido –sólo 55 años de ejercicio profesional- muchos me han preguntado acerca del desarrollo de la causa “Vialidad”, en la cual Cristina Fernández de Kirchner y un montón de cómplices y testaferros integrantes de la asociación ilícita que organizó su marido y ella encabeza hasta hoy, están siendo juzgados por el monstruoso saqueo al que sometió al país durante la tan mentada “década ganada” sólo para la delincuencial dinastía hotelera.

 

En especial, las consultas se refieren a la función que, en ella, desempeñó el Fiscal Carlos Stornelli, ante el fallecido Juez Claudio Bonadio, en primera instancia, y hoy lo hacen sus colegas Diego Luciani y Sergio Mola ante el Tribunal Oral Federal N° 2, a cargo de los jueces Rodrigo Giménez Uriburu, Jorge Gorini y Javier Ríos. En todos los casos, aun cuando se desempeñen en instancias diferentes, los fiscales representan al Estado y, por ende, a la sociedad toda. Pero lo que unifica el proceder de los tres nombrados es su enorme coraje, ya que no se puede disipar de sus mentes el recuerdo del asesinato del Fiscal Alberto Nisman, un día antes de presentar ante el Congreso Nacional las pruebas del encubrimiento del terrorismo que significó la firma del pacto con Irán, del cual responsabilizó –lo mismo hizo públicamente Alberto Fernández- directamente a la misma PresidenteVice que hoy han arrastrado ante los jueces.

 

El alegato que están presentando en estos días –lo seguirán haciendo al menos otras dos semanas- Luciani y Mola se ha transformado en un tétrico inventario -tan comprensible hasta para los neófitos- de las contundentes pruebas de los crímenes que los Kirchner (incluido su hijo Máximo, ahora Diputado) cometieron, que les permitieron acumular una fortuna incalculable, que aún se encuentra oculta en bóvedas y cajas de seguridad, paraísos fiscales o transformada en inmuebles o diamantes de fácil disposición. Tengo para mí que también son los dueños ocultos del juicio derivado de la expropiación de YPF, próximo a la sentencia en Nueva York, que puede derivar en una condena cercana a US$ 14.000 millones contra el Estado, o sea, seis veces más del valor actual de toda la empresa.

 

El kirchnerismo más cerril, La Cámpora y el Instituto Patria están empeñados en una campaña de intimidación a la Justicia (“si la tocan a Cristina …”), invocando una eventual proscripción a Cristina Fernández si quisiera ser candidata en las próximas elecciones; que así sea es altísimamente improbable ya que, si bien el Tribunal Oral que la está juzgando podría dictar su sentencia antes de fin de este año, la misma será apelada ante la Cámara de Casación Penal, que demorará lo suyo en revisarla y, cuando esto suceda, llegará el turno de la Corte Suprema, que no tiene plazo alguno para resolver; no creo que lo hiciera, aún en caso de que hubiera llegado para entonces a sus manos, en un año electoral.

 

Como dije, las pruebas que están mostrando los fiscales son de tal magnitud que, sin duda, finalmente será condenada, y eso lleva a analizar sus opciones futuras. La primera es, en caso de renuncia o incapacidad de su títere, si asumir la Presidencia y completar el período constitucional o también renunciar; en la primera, deberá hacerse cargo directo del desastre socio-económico en que nos han sumido, pero, en la segunda alternativa, podría ser detenida de inmediato.

 

La segunda decisión, para no perder la protección deformada de los fueros parlamentarios, será para qué cargo y por cuál jurisdicción, es decir, por Buenos Aires o Santa Cruz; en este último caso, seguramente ganaría una banca senatorial, fuera por la mayoría o la minoría, algo que sería arriesgado si optara por intentarlo en territorio bonaerense, ya que allí el Frente de Todos podría resultar, por efectos de la inflación, tercero en la lid. Por supuesto, si encabezara la lista de candidatos a diputados en cualquiera de las provincias, sin ninguna duda sería electa, pero también debe pesar en su ánimo el caso de Julio de Vido, que fue desaforado por sus pares y fue inmediatamente encarcelado.

 

La Argentina kirchnerista no ha cesado, desde su nacimiento en 2003, de cometer enormes desaguisados y tristes papelones en el terreno internacional; basta recordar la “contracumbre” que Néstor y Hugo Chávez organizaron mientras George W. Bush se encontraba aquí en una reunión de presidentes, el allanamiento con tenazas del Canciller Héctor Timerman a un avión norteamericano, el respaldo a las criminales dictaduras de la región y la negativa a condenar sus violaciones a los derechos humanos, las valijas con dólares venezolanos de Guido Antonini Wilson para la campaña de Cristina Fernández, la complicidad para el suministro de tecnología nuclear a Irán, la cesión territorial a China para la instalación de una base militar, la patética y humillante sumisión de Alberto Fernández ante Vladimir Putin en vísperas de la invasión a Ucrania, los despidos a ministros mientras estaban en el exterior en funciones oficiales, etc., etc..

 

Pero el bochornoso espectáculo que hoy brinda el juicio oral a la PresidenteVice y el resto de sus gangsters (funcionarios públicos, secretarios, cómplices y testaferros) está en las pantallas y los diarios del mundo entero, que lo contempla con enorme asombro. Así, el perjuicio para la Argentina ya no se debe exclusivamente a su alienada y demencial conducta en todos los foros y mercados internacionales, sean políticos o financieros, sino a la desnuda y pornográfica demostración de la corrupción que nos impregna como sociedad. Sólo resulta explicable y atribuible a la destrucción de la educación y de la cultura y al debilitamiento de las instituciones y los organismos de control que el kirchnerismo impuso durante los últimos veinte años. Costará generaciones corregirnos.


Lo que mata es la ambición 30-07-2022

Por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 848 

“Todo el mundo tiene un plan, hasta que le dan un puñetazo en la boca”. Mike Tyson

 Si hay alguien que comprueba la exactitud de la frase, ese es Sergio Aceitoso Massa, el camaleónico personaje que nació en la UCD de Álvaro Alsogaray, pasó a integrar el gobierno de Carlos Menem, siguió con Eduardo Duhalde, se alió con Felipe Solá y Francisco de Narváez para derrotar a Cristina Kirchner en su disputa contra Esteban Bullrich, se alió con Roberto Lavagna y Miguel Ángel Pichetto para detener al kirchnerismo, juró ante las cámaras que barrería con los ñoquis de La Cámpora y metería presos a sus dirigentes y, finalmente se unió con éstos para ganar las elecciones de 2019 con el desfondado Frente para Todos y presidir la Cámara de Diputados.

 

También el mejor ejemplo de favorito de los grandes capitales es el entronizado “casi súper” Ministro de Economía, que reúne el apoyo del no tan curioso entramado que integran José Luis Manzano y Daniel Vila, Enrique y Sebastián Eskenazy, Claudio Belocopitt, Mauricio Filiberti, Jorge Brito, Marcelo Midlin, José Luis Lengeri, Alejandro Bulgheroni, etc., algunos de ellos cómplices en el saqueo y todos sospechosamente enriquecidos por los Kirchner desde su origen en los lejanos tiempos de Santa Cruz.

 

Este cuarto gobierno de gánsters estaba rascando el fondo de la lata para encontrar a quien estuviera dispuesto a recibir esa brasa ardiendo en que el fracaso de los Fernández² han convertido a la economía, a punto tal que muchos cuentan que, cuando Martín Guzmán tiró su renuncia por Twitter, apagaron sus teléfonos para evitar exponerse al rechazar una súplica oficial para aceptar el cargo entonces vacante.

 

Y no era para menos, toda vez que cada vez es más notorio el desprecio y el manoseo al que la cúpula del FpT somete a sus funcionarios, convertidos en eunucos esclavos; ya lo experimentó Solá cuando se enteró, en viaje hacia una cumbre internacional, que había dejado de ser Canciller; lo mismo ocurrió con Silvina Batakis, a quien sacaron el banquito luego de decir en Washington que tenía todo el apoyo de Cristina y ni siquiera había tenido tiempo para contratar una asesora de vestuario, Daniel Scioli, que tuvo que volver a la Embajada en Brasilia con el rabo entre las piernas después de ser un optimista y creyente Ministro de Industria por poquísimos días, y Eduardo Hecker, que estaba por presentar un nuevo producto del Banco Nación cuando su teléfono le avisó que lo habían eyectado de su Presidencia.

 

Y digo “casi súper” refiriéndome al Aceitoso porque, a pesar de los off de record con los que se postuló sin tapujos como salvador de la patria, no obtuvo todos los resortes que había pedido –incluían la AFIP, el Banco Central, etc.- y, además, todas las grandes cajas del Estado y el área de energía quedaron en manos de La Cámpora y, por ende, de Cristina Fernández. Ésta, como toda mujer que se precie de tal, conserva en su memoria, donde nada prescribe, esa noche en que este ambicioso la convirtió en perdedora frente a un cuatro de copas político, como era en aquel entonces este gran señor al que la enfermedad ELA tanto ha golpeado.  

 

¿Qué hizo que buscara ser designado en circunstancias tan peligrosas para sus irrefrenables ansias de poder? Creo que lo hizo porque, desprestigiado como está por sus históricos y continuos cambios de posición y condenado a ser sólo otra pata floja en la tríada de gobierno, sabe que la probable derrota del FdT en las próximas elecciones, también lo arrastraría al baúl de los (malos) recuerdos. Por ello, optó ahora por arriesgarse a intentar torcer el rumbo de inevitable colisión –algo harto difícil dada la irreductible posición del Instituto Patria en materia de gasto público, emisión monetaria, acuerdo con el FMI, tarifas y subsidios- ya que, de tener éxito, sí podría imaginar algún futuro político.

 

Por otra parte, me parece que el ya sumamente decaído ánimo del MemePresidente debe haber sufrido una nueva declinación que lo acerca al colapso final. La lapicera que debiera acompañar al cargo la tiene ahora el Aceitoso y la tinta sigue conservándola Cristina Kirchner. Alberto Fernández no sólo ha sido humillado hasta convertirlo en un deprimido y emasculado pelele, la nada misma, sino que, además, ha debido entregar las cabezas de sus más fieles y escasos amigos; a esta altura, sólo conserva al inútil del Canciller Santiago Cafiero, quizás a Miguel Pesce en el Banco Central, y a Vilma Ibarra, la Secretaria Legal y Técnica que trata de evitar que cometa más y mayores delitos.

 

El punto neurálgico de esta trágica situación es que lo único que puede arreglar este monumental desbarajuste es la confianza pública, y Sergio Massa no es, precisamente, alguien que pueda concitarla; muy por el contrario, todas las encuestas lo ubican, como al resto de sus socios políticos, en el fondo de la tabla de posiciones.

 

Así, es probable que la primavera financiera que comenzó anteayer se mantenga por un tiempo impulsada por acciones proactivas de los empresarios y medios de prensa que apoyan a este reputado panqueque, pero, lamentablemente, en breve volverá el invierno. Será percibido cuando comience el inevitable ajuste y Cristina Fernández de Kirchner, famoso escorpión, se vea obligada a definirse; entonces, el plan de Massa recibirá su puñetazo.

Cristina está procesada en 10 casos: ¿cuáles son las causas en su contra?   27-07-2022

por Alberto A. Anselmi

La ex presidenta fue procesada en 10 expedientes distintos, 7 de ellos a cargo del juez federal Claudio Bonadio.

Cinco causas ya llegaron a la instancia de juicio oral.

En mayo último comenzó el primer juicio oral en su contra, en la causa conocida como “Vialidad”.

La vicepresidenta electa Cristina Fernández de Kirchner declaró en el juicio en su contra en la causa conocida como “Vialidad”, en la que se investigan irregularidades en la concesión de obras viales al empresario Lázaro Báez en Santa Cruz. Es el primer juicio que se lleva adelante en su contra.

Contando este expediente, la ex presidenta acumula 10 causas judiciales en las que fue procesada, 7 de ellas a cargo del juez federal Claudio Bonadio. Varios de esos expedientes están en la instancia de juicio oral.

Hay 5 causas en las que Fernández de Kirchner está a la espera de un juicio oral, es decir que luego de su procesamiento la Justicia dio por cerrada la etapa de instrucción y ahora otro tribunal juzga su culpabilidad. La primera causa elevada a juicio es el expediente en el que se investigan supuestas irregularidades en las operaciones con dólar futuro. Bonadio la procesó por administración infiel en perjuicio del Estado. Es el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 4 el que ahora deberá juzgar a la senadora del Frente para la Victoria (FPV).

La segunda causa elevada a juicio fue por la firma del Memorándum de Entendimiento con Irán. En este expediente Bonadio pidió por primera vez el desafuero de Fernández de Kirchner para poder detener a la ex presidenta, aunque el Senado no trató su pedido. El juez la procesó por el delito de traición a la patria y encubrimiento, aunque luego la Cámara Federal sólo mantuvo el delito de encubrimiento y revocó la acusación por traición. Será juzgada por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 8.

El tercer expediente que llegó a la instancia de juicio es en el que se investiga el direccionamiento de obras viales para favorecer al empresario Lázaro Báez en la provincia de Santa Cruz. El juez federal Julián Ercolini procesó a la ex presidenta a fines de 2016 por asociación ilícita y administración fraudulenta agravada y en marzo de 2018 elevó la causa a juicio oral. Este juicio comenzó el 22 de mayo último y es el primero en marcha contra Fernández de Kirchner. El proceso está a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 2 y la vicepresidenta electa ya declaró ante el Tribunal.

En la causa “Los Sauces” se investiga si los empresarios Báez y el titular del Grupo Indalo, Cristóbal López, pagaron alquileres de propiedades de Los Sauces SA como retorno de las adjudicaciones de obra pública que recibieron entre 2003 y 2015. La ex presidenta y los dos empresarios, que están detenidos, fueron procesados por Bonadio, quien luego envió el expediente al juzgado de Ercolini. La causa fue elevada a juicio oral y está a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 5.

En la denominada causa “Hotesur”, CFK fue procesada en mayo de 2018 por Ercolini por el delito de lavado de activos y asociación ilícita. También fueron procesados sus hijos, Máximo y Florencia Kirchner. Se investiga el presunto lavado de dinero a través del alquiler de habitaciones del Hotel Alto Calafate, ubicado en Santa Cruz. En febrero de 2019 el magistrado elevó la causa a juicio, que estará a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 8.

Causas en trámite

Hay 5 expedientes que aún no llegaron a la etapa de juicio oral, pero la ex presidenta ya tiene procesamientos. La principal es la llamada causa de los “Cuadernos de la corrupción”. Bonadio consideró que la ex presidenta fue la jefa de una asociación ilícita que operó entre 2003 y 2015. El magistrado la procesó con prisión preventiva en septiembre de 2018 y a fines de abril amplió su procesamiento.

De las restantes, la gran mayoría son desprendimientos de la causa “Cuadernos”. A partir de las revelaciones de ese expediente, Bonadio la procesó en otras 4 causas: irregularidades en el otorgamiento de subsidios a trenes y subtes, el envío de diarios y otros objetos a través de aviones oficiales desde Buenos Aires a Río Gallegos y el Calafate, el expediente en el que fue procesada por tener en su poder la carta de San Martín a O’Higgins y uno sobre cartelización de la obra pública.

También había sido procesada en una causa por subsidios a colectivos y otra por la renegociación de contratos de los corredores viales, desprendidas también de la causa “Cuadernos”, pero en los dos expedientes se le dictó falta de mérito.

Además, en marzo de 2019 la ex presidenta fue procesada en la causa por la compra de gas natural licuado, en la que Bonadio también le había dictado prisión preventiva, pero la Cámara revocó el procesamiento.

Todos estos delitos graves fueron facilitados por el voto del populismo (o de los que menos saben) y por eso hablamos aparte del “Voto Selectivo o Epistocracia”


Pepita la Pistolera versus Cristina con su Bastón 24-07-2022

por Alberto A. Anselmi

Es la historia de una particular ladrona, rebautizada como Pepita la Pistolera, que entre febrero y junio de 1988, asaltó unas 10 casas de crédito, y ocupó los titulares de los diarios y los informativos de televisión, su estilo era muy amable y poco agresiva, y usaba para intimidar a los asaltados el mango de un paraguas roto que no sacaba del bolso.

La policía tuvo muchas dificultades en encontrarla y la Justicia en descubrir fehacientemente sus delitos, y finalmente se sorprendieron al encontrar una mujer de clase media, con una hija a su cargo y un esposo internado en un hospital siquiátrico y desesperada por los apremios económicos.

Con esta historia y una investigación periodística se muestra una historia simple pero con toque de ironía donde se deja ver la veta humana, solidaridad entre asaltante y asaltados, rasgos de comprensión por parte de los policías y con sentimiento en la relación con su familia. Falleció el 30 de septiembre de 2009

Cristina, en vez de un paraguas roto usaba el Bastón Presidencial y, en vez de casas de crédito, Instituciones del Estado, ingenuos como Baez, con “tomala vos y dámela  mí” y sus hoteles para lavar dinero y para guardar los dólares en Cuba y en Islas del Caimán. Cristina no usa armas de fuego, sino el filo de sus palabras tan ofensivas y amenazantes que daba miedo a cualquiera.

Pepita, o como se llamaba, Margarita Di Tullio, estuvo también procesada junto a su pareja y otros miembros de la bautizada "Banda de los Pepitos" en la causa por el crimen de Cabezas, pero luego fue sobreseída. Ella también asesinó a sus 3 socios disparando desde abajo de las sábanas con un arma que guardaba en la almohada.

A Pepita la Pistolera sólo la detuvo la muerte, mientras Cristina, todavía no sabemos.

Esto es sólo una analogía, aunque a Cristina le quede chica esa comparación.

Todavía nos quedan dudas de la muerte de Néstor, si fue muerte natural o lo habría matado su hijo, frente a su madre. Las dudas seguirán vigentes, ya que nunca permitieron abrir el cajón, el único que sabía, porque ocultaba todo era Aníbal Fernández, que se ocupó de todo. Sólo se podrá saber cuando abran el cajón y hagan la autopsia, si es que están los restos de Néstor.

La Ley dice que a todos los presidentes en actividad que fallecen, deben velarse con el cajón abierto, al menos durante seis horas y no existe ni siquiera una foto de su cadáver.

Hablamos aparte de los procesos contra Cristina.

Alberto Anselmi


Aterrada y enloquecida, ¿pero impotente?    23-07-2022

por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 847

 

“En la lucha sólo es vencido quien desiste de luchar”. Mário Soares

 

Oscar Wilde escribió “Ten cuidado con lo que deseas, se puede convertir en realidad”. Yo rogaba para que las bombas que el populismo kirchnerista ha cebado en la economía nacional explotaran en sus propias manos; en 2015 logró traspasarlas a Mauricio Macri quien se negó a contárselo a la sociedad para eludir dar malas noticias y, al convertir a Cristina Fernández en el sparring electoral –una especulación bastarda, dije entonces-, determinó su derrota cuatro años más tarde y el regreso al poder de la banda de saqueadores. Pues bien; ya todo ha saltado por el aire y los responsables corren con teas encendidas en el campo reseco en que han convertido al país. Con certeza, las peores imágenes de una nueva hiperinflación se harán realidad a corto plazo, con las naturales consecuencias que, en materia de pobreza y miseria tanto conocemos.

 

La oposición debe abstenerse de participar de la debacle, en especial porque el Gobierno ni siquiera puede ofrecer un interlocutor unívoco para participar de la mesa de negociaciones que, aparentemente, está proponiendo, so pena de resultar corresponsable del infinito desastre que el alucinado kirchnerismo ha producido. Si alguien debiera estar sentado en esa mesa soñada por los derrotados es, sin duda, la propia Cristina Fernández, único factor de poder real en la devaluada tríada que encabeza el disparatado dispositivo político ideado por ella sólo para ganar en 2019.

 

Este ciclo, claramente terminado, del kirchnerismo tiene un correlato aún más grave en el ánimo de la emperatriz hotelera. No es para menos, ya que sólo la amenaza de divulgar algunos complicados secretos privados de Alberto Fernández ha impedido a éste huir de la residencia presidencial como rata por tirante y dejar la papa hirviendo en sus manicuradas manos; pero nada garantiza que la frágil salud de la marioneta presidencial no lo lleve a un retiro anticipado. Si así fuera, por su riesgosa situación penal ella se vería obligada a asumir formalmente la conducción de este tan escorado Titanic para evitar ser detenida de inmediato, ya que hasta las próximas elecciones carecería de fueros; aún si llegara a ser elegida como legisladora, la perseguirá la historia de Julio de Vido, a quien la Cámara de Diputados retiró ese manto protector y voló, sin escalas, a la cárcel.

 

Ese estado anímico la ha convertido en una demente enfurecida, capaz de todo, incluyendo dinamitar el país, para sortear tan trágica coyuntura; esa locura es la que está detrás de los incendiarios misiles que disparan ella, el MemePresidente y sus más salvajes lenguaraces contra la Corte Suprema y, por ende, contra las instituciones de la República y su Constitución. Lo peor para nuestro futuro es que también sabe que ninguna de sus absurdas iniciativas –el juicio político a los ministros del Tribunal o la ampliación de éste a veinticinco miembros, uno por provincia- superará el obstáculo de un Congreso en el cual ha perdido tanto poder; así, para intentar conseguir sus objetivos de impunidad y absolución por la historia, deberá recurrir a otros caminos, todos ellos non sanctos, y sabemos que carece de límites.

 

¿Cuáles podrían ser esas sendas? Sospecho que, revestida de oposición contra su propia creatura, motorizará grandes movilizaciones “populares”, auxiliada por algunos desalmados que tanto han lucrado con la pobreza. Con una monumental pérdida del poder adquisitivo de los salarios, con los aumentos anunciados de las tarifas de energía y transporte, la mesa estará servida para la manifestación violenta del descontento popular, como sucedió en Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador, Panamá y hasta en Sri Lanka.

 

Si hubiera logrado cooptar a las fuerzas armadas, como hicieron los tiranos de Cuba, Venezuela y Nicaragua, tal vez podría intentar una revolución que le permitiera permanecer indefinidamente en el poder, pero no ha sido así y ni siquiera su provocada pauperización ha doblegado el espíritu de sus integrantes. Entonces, ¿qué? Lamento mi pesimismo, pero los dichos de Juan Gabrois, uno de sus más fieles transmisores, esta misma semana –habló de saqueos y de sangre en las calles- permiten imaginar cuál será la ruta elegida: un conflicto social de grandes dimensiones, inspirado y fomentado por los países que militan el “socialismo del siglo XXI”, e infiltrado por violentos armados de todo origen.

 

Hace mucho tiempo que, desde esta modesta columna semanal, intento alertar acerca de las fuerzas de que dispone Cristina Fernández para instalar el caos, una situación que, si bien puede resultar en cualquier cosa, siempre le permitirá victimizarse para intentar un regreso triunfal, al estilo Evo Morales, o simplemente escapar, como hizo su amigo Rafael Correa, aunque no sea a Europa y sólo pueda hacerlo a algún “paraíso” poco agradable, como Rusia o Irán. El inventario de esas “tropas” insurreccionales ha engrosado: a los limados “soldaditos” de sus socios en el narcotráfico, a los barrabravas de Hinchadas Unidas, a los asesinos y violadores del “Vatayón Militante” liberados con la excusa Covid, ahora se han sumado los criminales brasileños del Primeiro Comando Capital, los terroristas peruanos de Sendero Luminoso y colombianos de las FARC, los “asesores” cubanos, venezolanos e iraníes y, por si todos fueran poco, hasta los pseudo-mapuches de Facundo Jones Huala. Cuando observamos lo sucedido en Chile, por ejemplo, vemos algunos encapuchados quemando iglesias y destruyendo estaciones de subterráneo; a partir de ello, ganó las elecciones la izquierda, que pretende reformar la Constitución y terminar con esa república.

 

Nos toca vivir la agonía de este proceso tan destructivo; esperemos que Dios se apiade de nosotros y nos lo haga breve.


Caretas Reciclables   16-07-2022

por Enrique Guillermo Avogadro

Nota N° 846 

“Los príncipes deben ejecutar a través de otros las medidas que puedan acarrearles odio, y ejecutar por sí mismos aquellas que les reportan el favor de los súbditos”.

 Niccolò di Bernardo dei Machiavelli

 


El desastre terminal al que los Fernández² han llevado a la Argentina se agudiza al extremo porque el tablero de control se ha convertido en un caos absolutamente incomprensible. La mesa de comando tiene en su cabecera a la multi-procesada emperatriz patagónica, gran competidora, a quien acompañan su esclavo, el humillado Alberto Fernández, y su siempre oscilante socio, el odiado y aceitoso Sergio Massa, dos claros campeones mundiales en el concurso de intercambio de máscaras. El traslado de las magistrales actuaciones de los comensales a los ministros y a los secretarios que, al menos en teoría, dependen de aquéllos, y al control de las grandes cajas, celosamente custodiadas (y robadas) por La Cámpora, han transformado al Estado en un paquidermo carísimo, ineficiente, inservible, cómplice y víctima de las garrapatas que viven de succionar su sangre.

 

Ese irresuelto rompecabezas se complica aún más con las actitudes de los movimientos sociales, que ven amenazada su monumental recaudación por la decisión de Cristina Fernández de entregar la administración de los múltiples planes a gobernadores e intendentes adictos. El jueves, en Plaza de Mayo y frente al Congreso, se dio una situación hasta ahora impensable, ya que compartieron la protesta líderes trotskistas opositores y gerentes oficialistas de la miseria, éstos funcionarios del Ejecutivo, que se imaginan “albertistas”; y con el anuncio de un paro general para el 14 de agosto que formuló la CGT, que dice apoyar al Gobierno, pero está muy preocupada porque la corren por izquierda, explica por qué no entendemos nada.

 

Porque, sin duda, debemos agregar al cuadro el descalabro de una economía que, a través de la descomunal inflación, está empobreciendo a la ya tan menguada clase media, y convirtiendo en miserables hambrientos a tantos compatriotas. En esa situación, mucho más grave y extendida que la que llevó a la crisis de 2001, resulta sorprendente la falta de una reacción explosiva por parte de una sociedad tan abusada y golpeada, a la cual se ríen en la cara los funcionarios, con sus irritantes privilegios, su dilapidación de recursos públicos, su rampante corrupción, sus negociados asesinos con las vacunas, sus fiestas en Olivos, la pavorosa destrucción del poder adquisitivo de salarios y jubilaciones, el creciente desabastecimiento, su supina ignorancia, su injustificable soberbia, su impunidad, su complicidad con el narcotráfico y la violenta inseguridad derivada de éste. La única razón para que todo no salte ya mismo por el aire es que quienes gobiernan hoy son los mismos que entonces organizaron los saqueos.

 

Cristina Fernández, exhibiendo una vez más su crudo cinismo, trata de despegarse de la total responsabilidad que innegablemente le cabe y, aunque “revolea” ministros, juega a ser oposición, pero, claramente, sin admitir la renuncia de su delegado presidencial. La razón es clara: desesperada por su inminente catástrofe penal, buscará ser electa como legisladora por la Provincia de Buenos Aires para conservar la protección de los fueros; no intentará volver a la Presidencia porque, en este tan penoso contexto socioeconómico el riesgo de perder sería enorme, como lo demuestran las crisis que están estallando en todo el mundo, y la dejaría a la intemperie.

 

Los argentinos, desde ambos costados de la insalvable grieta que nos divide, observamos erradamente los sucesos de Chile, Perú, Ecuador y Colombia. Unos, mirando con esperanza el acceso al poder de una izquierda brava hasta en Brasil, con la cual identifican a Luiz Inácio Lula da Silva, imaginando un continente teñido de rojo; otros, aterrados ante la probabilidad de que el castro-chavismo extienda sus tentáculos más allá de Venezuela, Cuba y Nicaragua. Pero, salvo en estos tres últimos, en los cuales sus tiranos están férreamente aliados a los militares, todos los países mencionados tienen instituciones fuertes capaces de controlar a sus presidentes y evitar alteraciones extremas.

 

Guillermo Lasso superó el golpe de Estado que intentó Rafael Correa, el fugado ex mandatario, aliado de los regímenes autoritarios de la región, para recuperar el poder en Ecuador. Gabriel Boric, Pedro Castillo, Gustavo Petro y Jair Bolsonaro no tienen el control de los parlamentos nacionales, ni lo tendrá Lula si triunfara en octubre; mucho menos, sobre los jueces. El chileno, acosado desde los extremos de su coalición, verá naufragar en septiembre el insólito proyecto de Constitución; su homólogo peruano, como sucedió con tantos de sus predecesores que terminaron en la cárcel o se suicidaron, se encuentra a tiro de la destitución por el Congreso; el Presidente electo colombiano, que recién asumirá el 7 de agosto, ha debido anunciar ya un Ministro de Economía pro-mercado; y su actual colega brasileño no podrá desconocer un eventual resultado electoral adverso, pese a sus amenazas en ese sentido.

 

Nuestras instituciones, bajo fuego durante dos décadas y, en muchos casos, colonizadas por el oficialismo, son débiles al extremo. Néstor y Cristina Kirchner, durante tres períodos, y ahora Alberto Fernández, destruyeron todos los organismos de control y, hasta las elecciones del año pasado, habían logrado transformar al Congreso en un mero circo de brazos enyesados y en un gran aguantadero de delincuentes, mientras combatían con saña a la prensa libre e intentaban saquear aún más al campo, pretendían “democratizar” a la Justicia para evitar comparecer luego ante ella y, dado el fracaso de la tentativa de cooptación, pauperizaban a las fuerzas armadas y a sus miembros, que perciben salarios dos tercios inferiores a los de las fuerzas de seguridad y recuerdan a sus miles de camaradas presos por defendernos del terrorismo, víctimas de una sociedad hipócrita, representada en los tribunales por verdaderos asesinos togados.


Ahora sí, ¿viene por todo? 09-07-2022

por Enrique Guillermo Avogadro

(Nota N° 845)

“Es necesario tener miedo para tener esperanza”. Jorge Dezcallar

La semana pasada, antes del nuevo arcabuzazo de Cristina Fernández contra su propia creatura, preguntaba si quedaban opciones. Pues bien, sí las había, como demostró la tan oportuna renuncia de Martín Guzmán a su silla de Ministro de Economía (cuya responsabilidad eludió ella ayer, en Calafate, calificándola de irresponsabilidad política, después de haber exigido su cabeza durante meses) y su tardío reemplazo por la devaluada Silvina Batakis: la emperatriz hotelera tomó todo el poder y su penoso y emasculado mandatario, Alberto Fernández, quedó relegado a ser un simple mascarón de proa de este Titanic ya hundido en que la dupla ha convertido a la Argentina; en el camino, también deglutió las esperanzas del aceitoso Sergio Massa de convertirse en Jefe de Gabinete como plataforma de lanzamiento para sus tan ilusorias aspiraciones presidenciales.

El kirchnerismo que, como no es idiota, grita pero se aferra a las cajas más suculentas del Estado y presiona sin pausa para obligar a continuar en ese rumbo demencial a través de nuevas moratorias previsionales, de “salarios” universales, de la reconfiguración de los planes sociales para pasar su administración a gobernadores e intendentes adictos, la denuncia del acuerdo con el FMI, el aumento de las retenciones agropecuarias, etc., incrementando el desbocado gasto e imprimiendo a destajo billetes tan depreciados (el más grande equivale a menos de US$ 4) que sólo sirven como papel picado, como demostraron los hinchas de Corinthians en la final contra Boca Juniors.

Los mercados reaccionaron dramáticamente ante los carnavalescos gestos que sólo empeoran la imagen de nuestro país: el peso se devaluó 30% en sólo ocho días y esos bonos soberanos, con los cuales la Argentina se ha endeudado hasta el tuétano, se han hundido de modo tal que ya ni siquiera resultan apetecibles para los fondos de inversión más audaces, aunque redundan una tasa en dólares equivalente al 40% anual. Lo perverso es que se sigue engañando a los menos informados, convenciéndolos de que los precios suben culpa de los “formadores” (aunque actúan en todos los países de la región, sólo son perversos aquí), de los especuladores y de la prensa “concentrada”, y ocultando la realidad: es el peso el que reduce diariamente su valor por el gasto, la corrupción y la emisión enloquecida.

Ahora bien, ¿qué significa todo eso para nuestro futuro? Hacer populismo radical sin dinero resulta imposible, salvo que el Gobierno empobrezca tanto más a la sociedad que fuerce todos sus integrantes a mendigar al Estado su magro sustento. Los ejemplos “exitosos” sobran; lo hicieron Fidel y Raúl Castro y Miguel Díaz-Canel en Cuba, Hugo Chávez Frías y Nicolás Maduro en Venezuela y Daniel Ortega y Rosario Murillo, en Nicaragua. Basta contemplar esos países, cuyos ciudadanos se ven obligados a emigrar arriesgando su vida para huir del hambre y la asesina tiranía de sus jerarcas, todos involucrados en el narcotráfico, con el que han corrompido a las fuerzas armadas, sentándose sobre sus bayonetas.

En el párrafo final de la nota anterior dije que sólo una hecatombe social podría hacer que todos aceptáramos los monumentales cambios que se deben introducir para evitar que la Argentina desaparezca como nación independiente (reformas tributaria, fiscal, previsional, laboral, sindical, educacional, social, económica y, sobre todo, judicial) ya que no parece que estemos dispuestos a admitirlos por las buenas. Olvidé consignar, sin embargo, que el riesgo, a la vista de cuanto ha sucedido en Chile, Perú y Colombia, es que la taba caiga del lado equivocado y la izquierda termine destruyendo lo poco que queda en pie

Un amigo me planteó como posible que Cristina Fernández, que había escuchado a economistas racionales, asumiera la Presidencia –previo despido de su mandatario- y aplicará un programa que le evitará al país el enorme sufrimiento que implicará aguantar hasta el 10 de diciembre de 2023. Pese a sus recientes apelaciones a la oposición para discutir políticas bimonetarias, y a la vista de su permanente ataque a la Corte Suprema, lo descarté de plano ya que no tiene interés alguno en la suerte del país, en alfombrar el camino a su sucesor, que seguramente será de otro signo político, ni incinerar el mito anti-ajuste con el que ha construido su relato, tanto como no quiere en verdad construir un indispensable gasoducto que sólo aprovecharía, por los tiempos que demandará, a la oposición.

Los rumores arreciaron y aturdieron a la sociedad durante toda la semana, y mencionaron renuncias y hasta golpes de puño y carpetazos entrecruzados. Uno de ellos, concretamente, daba por cierto que Alberto Fernández, empujado hasta el borde del olvido por su jefa, dejaba el sillón presidencial. Sostengo, como vengo haciendo hace tiempo, que eso no sucederá porque, básicamente, Cristina Kirchner no tiene interés alguno en asumir en forma pública –ya lo es, en realidad- el comando de una situación que va hacia el desastre inevitable; tampoco en hacer una verónica y pasar la responsabilidad a Claudia Abdala de Zamora ni, menos aún, a Sergio Massa o a Horacio Rosatti, aunque sólo fuera por unos días, ya que además perdería la indemnidad de arresto que hoy la protege.

El panorama general, sumamente enturbiado por los inexplicables vuelos de aviones iraníes-venezolanos en la Argentina y en la región, se ha oscurecido aquí más aún. Cuando la PresidenteVice está más cerca que nunca de una condena con pena de cárcel incluida, se produjo un extraño episodio: desconocidos ingresaron a una oficina del Consejo de la Magistratura, violaron las selladas declaraciones juradas de los magistrados que están juzgándola y de los familiares de éstos y, en un claro gesto de intimidación, dejaron expuestas las constancias de la incursión. Un dejá vu respecto a lo sucedido con el Fiscal Alberto Nisman, asesinado dos días antes de presentar ante el Congreso las pruebas de la complicidad de Cristina Fernández con los terroristas iraníes que volaron la AMIA; incluso nos recordó el secuestro del hijo del Fiscal Eduardo Taiano cuando éste debía apelar, en 2005, el sobreseimiento que el Juez Julián Ercolini había dictado a Néstor Kirchner en una causa por enriquecimiento ilícito sin siquiera investigarlo.

Hoy mismo, a las 1600 horas, estaremos voceando nuestra indignación contra tanto atropello contra la República y sus instituciones, y tanta corrupción impune, en el Obelisco, la Plaza de Mayo y el resto de las plazas y lugares icónicos de todo el país, pero, ante todo, lo haremos bajo el grito que nos unifica y nos hermana: ¡VIVA LA PATRIA!

Bs.As., 9 Jul 22

¿Quedan opciones? 02-07-2022

por Enrique Guillermo Avogadro

(Nota N° 844)

“Una creciente resistencia a las arcaicas prácticas de la gestión pública en manos de elites sin convicciones morales ni preparación profesional”. Juan Archibaldo Lanús

No quiero ser agorero, pero la realidad no ofrece alternativas. Esta semana, casi todos los analistas, los grandes empresarios, los sindicalistas, los dirigentes sociales y hasta muchos funcionarios de alto nivel coincidieron en poner en seria duda la probabilidad de que el MemePresidente complete, en tiempo y forma, su mandato. Y no es para menos, toda vez que la angustiante inflación continúa en una espiral ascendente –aquí se predijo que llegaría al 100% a fin de año- que, día a día, va arrojando a más gente al abismo de la miseria y que puede convertirse, en cualquier momento, en híper; basta con pensar cuántos ciudadanos con trabajo formal, inclusive siendo empleados públicos, perciben un salario que no les permite superar el límite de pobreza, cuánto se ha incrementado la asistencia a los comedores populares y la creciente violencia social.

La inseguridad jurídica y las políticas que el Ministerio de Economía, presionado por el populismo de La Cámpora y el Instituto Patria en el Senado, está llevando adelante, es decir, aumentar un gasto público que ya resulta imposible de financiar con recursos genuinos ni con el indisponible crédito, hacen que el riesgo-país de la Argentina sea similar al de Rusia, en default, y pronto alcanzará al de Ucrania, destruida por Vladimir Putin.

Los inversores huyen despavoridos de los bonos de deuda soberana, aunque la mayoría de éstos esté atada a la inflación o al dólar, y el nivel de endeudamiento del Tesoro con los bancos privados preanuncia una corrida bancaria que, de concretarse, será mucho más grave que la de principios de siglo, que tanto dolor trajo. Y nada que hoy pueda hacer Alberto Fernández, incluyendo el despido del ineficaz Martín Guzmán y su reemplazo por el camaleónico y desprestigiado Sergio Massa, podría mejorar el escenario.

Tristemente, por unanimidad las encuestas dan cuenta de la mala imagen que tienen todos los dirigentes políticos, incluyendo a los libertarios, aunque sean los kirchneristas quienes están peor calificados. Y la falta de acuerdos en verdaderas políticas de Estado que está afectando a los partidos que integran Juntos por el Cambio no permite avizorar un mejor futuro, más allá de un eventual triunfo en las próximas elecciones.

El pavoroso cuadro lo integra la nueva batalla que Cristina Fernández está librando por el manejo de los planes sociales, con el objetivo de cederlo a los gobernadores e intendentes para evitar una mayor disgregación del Frente para Todos, y es rechazado por las organizaciones “albertistas” y trotskistas, que prometen llevar la resistencia a la calle; será la primera vez que el peronismo, que ha sido dueño y señor de ella durante muchas décadas, la pierda y eso transformará un escenario ya más que complicado. Esta misma tarde, ella hablará en Ensenada, uno de sus municipios más fieles, y seguramente disparará un nuevo misil para, “sinceramente”, tratar de eludir la enorme responsabilidad que le cabe en la génesis de este desastre.

La PresidenteVice, ya está convencida de la imposibilidad de ganar alguna elección nacional y su preocupación aumenta en consonancia porque ve más cercano el infierno penal al cual se ha hecho acreedora por la monstruosa corrupción con la cual la organización ilícita, que organizó su marido muerto y ahora encabeza ella misma, saqueó el país entero desde que ambos llegaron a la Casa Rosada.

Y es entonces cuando debemos hacernos terribles preguntas: desesperada ante la inminencia de una derrota y, con ella, un huracán de condenas para ella, sus hijos, sus cómplices y testaferros, ¿intentará perpetuarse en el poder por la fuerza, como muchos sospechan? Si quisiera hacerlo, el camino debería ser un conflicto social de envergadura e incierto final, pero, ¿dispondrá la República de los anticuerpos necesarios para responder una agresión así?

Algunos de sus más dilectos amigos en la región (los hermanos Castro en Cuba, Hugo Chávez y Nicolás Maduro en Venezuela, Daniel Ortega en Nicaragua) lo lograron; entonces, ¿por qué no tratar de imitarlos, si además podría recibir el apoyo de Rusia e Irán? Colombia, Chile, Perú y Brasil son países en los cuales sus mandatarios están fuertemente condicionados por sus respectivos parlamentos, que pondrán límites a cualquier deriva autoritaria, pero la Argentina posee instituciones muchísimo más endebles. ¿Tienen algo que ver en este tablero los vuelos de raros aviones y la confirmada presencia de narcotraficantes colombianos, mexicanos, peruanos y brasileños en los conurbanos de todo el país, de terroristas islámicos, cubanos y venezolanos en la Triple Frontera y la Patagonia pseudo-mapuche, y de asesinos liberados y barrabravas criminales en todos los barrios?

Tengo la más absoluta certeza acerca de cuál será la interpretación que hará el kirchnerismo, convenciendo a sus fieles, de la conmoción social de enorme magnitud que ella misma provocaría procediendo de ese modo: se victimizará, echará la culpa a los Estados Unidos, a los empresarios, al campo y a la prensa libre, tal como hizo Evo Morales en Bolivia, habilitando así a su partido político (MAS) el retorno al poder. Para evitar esa posibilidad que, lo perciban o no, ha resultado tan gravosa para todos los argentinos, resulta indispensable sostener a Alberto Fernández, pagando el precio que sea necesario, hasta diciembre de 2023. Las bombas que Cristina Fernández ha cebado con tanto entusiasmo deben explotar esta vez en sus propias manos, para no permitir que, tal como hizo en 2015, las pase a su sucesor quien, estúpidamente, las recibió sin denunciar el contenido de la herencia y eligiéndola como sparring; así le fue a Mauricio Macri.

De todas maneras, y en la medida en que la sociedad en su conjunto no parece estar demasiado dispuesta a asumir los costos que implicará corregir el rumbo de decadencia que la Argentina encaró con tanta dedicación hace ya siete décadas, vuelvo a la comparación de la semana pasada, cuando dije que todo me hace pensar en la España de 1935, en la que todo resultaba imposible. Cuatro años y un millón de muertos más tarde, esa misma nación fue capaz de comenzar a pagar esa factura con el pasado y parir un país moderno, totalmente integrado al mundo, que hoy se ha transformado en una Meca para tantos de nuestros jóvenes, muchos de ellos cultivados, que han comenzado a recorrer, en sentido inverso, la misma ruta que trajo hasta aquí a sus laboriosos antepasados desde una Europa devastada.

Bs.As., 2 Jul 22

País cachivache  25-06-2022

por Enrique Guillermo Avogadro

(Nota N° 843)

 

"Contra la estupidez, hasta los mismos dioses luchan en vano”.  Friedrich Nietzsche

 

Entre el cúmulo de disparates, falsedades, tergiversaciones y rotundas mentiras que contuvo la perorata con la que Cristina Fernández nos volvió a azotar el lunes pasado, hubo una frase que, creo, pasó injustamente desapercibida. Me refiero a su sibilina referencia a Manuel Belgrano y al éxodo jujeño, es decir, a la retirada que, en 1812, el General ordenó sobre Tucumán, dejando atrás tierra arrasada para que los realistas no pudieran abastecerse en su avance. ¿Habrá sido una sugerencia a su títere, al cual cedió la lapicera, pero no la tinta, para que haga lo mismo?

 

Sin duda, está desesperada por la inminencia de la sentencia en el juicio por el direccionamiento de la obra pública a las empresas del testaferro de su marido muerto, Lázaro Báez, destrabado el martes por la batería de fallos con los que la Corte Suprema rechazó sus múltiples e improcedentes recursos. Y no es para menos, ya que, en el Instituto Patria, más allá de las declamaciones, nadie cree que ella pueda ser una candidata triunfante en las elecciones del año próximo; por eso, descarto que lo intente, toda vez que resultar perdidosa la dejaría sin protección contra las múltiples órdenes de detención que la afectan.

 

En el marco de un tejido social destruido, un escenario muchísimo peor que el que precedió a la crisis de 2001 y que se está complicando a una velocidad imprevista, debido a la guerra interna en la que está inmerso el Frente para Todos (ese adefesio que Cristina inventó y del cual ahora pretende despegarse sin renunciar a las tremendas cajas del Estado que controla con impericia y corrupción), la falta de gasoil y sus consecuencias sobre el transporte de granos y mercaderías, el creciente déficit fiscal, la imparable inflación, la escasez de reservas, la increíble bola de nieve en que se ha convertido el festival de bonos del Tesoro y Leliqs un riesgo-país de 2400 (3200 al final de De la Rúa), el país se asoma a una hecatombe.

 

La situación internacional y regional merecen un somero análisis, ya que ambas también incidirán en nuestro futuro. En primer término, corresponde decir que lo sucedido en Francia, en España, en Chile y en Colombia ratifica que, en los países en los cuales se ejerce el voto en libertad, las enormes diferencias socio-económicas que padecen las sociedades, agudizadas por la pandemia, están derrumbando a los oficialismos sin importar si se trata de regímenes de derecha o de izquierda. Todo indica que lo mismo sucederá en Brasil, en Gran Bretaña y hasta en Estados Unidos, en las elecciones de medio término de noviembre, en las que Joe Biden corre alto riesgo de perder el escaso control del Congreso del que hoy dispone.

 

En Europa, la criminal invasión a Ucrania parece transformarse en una guerra prolongada, y hasta es posible que se extienda a los países bálticos y a Moldavia, sobre el Mar Negro, con las enormes consecuencias que todo ello ya está produciendo sobre los senderos de los recursos energéticos y alimentarios globales. En el sur de Asia, Corea del Norte sigue amenazando con sus misiles al mundo y China continúa hostigando a Taiwan, mientras que, asociada a India en la empresa, diluye los efectos de las sanciones occidentales sobre Rusia al comprar sus combustibles.

 

Si esos conflictos se extienden, la base militar que el kirchnerismo regaló a Xi Jinping en Neuquén convertirá a la Argentina, ya muy sospechosa por su cercanía con los ayatollas de Irán, en un más que razonable objetivo militar. Y tampoco resultará ajena nuestra ubicación geográfica en la cercana discusión sobre la Antártida y el Atlántico sur ni, menos aún, la vocación de Alberto y Cristina Fernández por cortejar rastreramente a los peores y más sanguinarios dictadores del mundo.

 

En América, una región que los triunfos de Gabriel Boric y Gustavo Petro están tiñendo de rosa shocking, que podría acentuarse con la probable victoria de Lula da Silva en octubre, la preocupación cunde, aunque, creo, por ahora resulta injustificada. Sus países tienen instituciones sólidas y ninguno de estos nuevos presidentes podrá hacerse con una mayoría automática en sus congresos. Si bien el proyecto de modificación de la Constitución trasandina merece particular atención, por sus enormes implicancias sobre la forma del Estado (en realidad, casi su desaparición), no es probable que sea aprobado en el plebiscito previsto para septiembre y, en el país cafetero, más allá del pasado guerrillero del nuevo Presidente, no parece que éste se encuentre en condiciones de alterar demasiado el rumbo, como tampoco pudieron hacerlo para un lado Pedro Castillo, que todos los días está al borde de la destitución en Perú, ni hacia el otro Guillermo Lasso, con Ecuador incendiado por las protestas indígenas. Y tampoco debemos olvidar que Daniel Ortega, Miguel Díaz-Canel y Nicolás Maduro sostienen sus tiránicos regímenes sobre el apoyo irrestricto de las fuerzas armadas, algo que no sucede en Chile, Perú, Ecuador o Colombia, país que mantiene una antigua alianza militar con los Estados Unidos.

 

Volviendo a la Argentina, creo que sólo una verdadera catástrofe como la que se perfila en el horizonte cercano puede salvarla del terrible destino al cual la condenan los veinte años que el kirchnerismo lleva destruyendo la educación, colonizando la cultura, e implantando en el frágil carácter de la población ese egoísmo que hace que nadie esté dispuesto a sacrificar nada, ni a pagar por lo que las cosas valen, en beneficio de todos. Por eso, porque únicamente cuando ya no les queda nada por perder, las sociedades consiguen hacer pie en el fondo para impulsarse hacia la superficie y volver a respirar. Conviene recordar dos frases -una de Jorge Luis Borges (los peronistas son incorregibles) y otra de Juan Domingo Perón (peronistas son todos)- porque su combinación puede explicar qué nos sucede hoy como país.

 

Bs.As., 25 Jun 22

La magnificencia de los Periodistas   07-06-2022

por Alberto A. Anselmi

¿Qué quiere decir la palabra magnificencia?

Una de las más frecuentes es la virtud de aquella persona que es muy generosa y comparte lo que tiene con los demás. En este contexto, la magnificencia es la virtud contraria al vicio de la avaricia propio de aquella persona que se obsesiona con ahorrar y no valora lo que tiene porque nunca le parece suficiente.

 

Fijemos la atención en esos magníficos seres “diferentes”, gigantes del Espíritu, los Periodistas, que, con sus vidas evolucionadas ejemplares, demostraron la salida del laberinto con sus propuestas de conductas siempre simplificadoras, pero saturadas de honestidad y renunciamiento. Busquemos en ellos, el arquetipo como elixir de vida real, desbaratadora del formidable drama de la ignorancia. Y esos buenos hombres de Prensa, son los que han alcanzado como profesionales, lograr modificar el larguísimo proceso del tiempo-evolución en el programa de la Creación.

Estaríamos en tiempo de acortar el desequilibrio de sufrimientos, si se pudiera repartir, “sin cargo alguno”, el despertar de conciencia espiritual a toda la humanidad, y esto sería lo ideal, o bien algunos grupos que sobre sus hombros pesa la responsable tarea de gobernar y educar, pero bien sabemos de lo difícil que es ese despertar de conciencia ante la enorme presión de hábitos erróneos adquiridos a través de los tiempos.

Y dentro de nuestros Periodistas tenemos los comunicadores, que siempre encuentran la mejor manera de llegar a todos; los escritores que con su pluma saben entrar en el corazón de los lectores; los profesores que a través de sus analogías enseñan a comprender para una mejor asimilación; a los compositores, que con sus canciones consiguen llegar al alma sedienta de paz y amor; a los poetas quienes logran la sutil armonía de las palabras enhebradas, hambrientas de felicidad; a los valientes corresponsales de guerra, que exponen sus vidas para hacer saber al mundo los pormenores de las despiadadas guerras; a los deportivos que saben transmitir las emociones de los sanos y variados deportes que nos dan la magia que nos hace encontrar motivaciones de vida.

Y así, los buenos Periodistas que saben llevar lo pequeño a inmenso, con magnitudes inexplicables, con la filosofía en cada caso.

Los Periodistas son los únicos que no hacen huelgas, ni paros, ni piquetes, que no amenazan ni matan, ni reaccionan ante la violencia, que no se quejan de su situación ni miseria. Que acuden tanto a los pobres como a los ricos, que interpretan que los derechos pertenecen a todos.

Son los que luchan por los demás, sin pedir nada a cambio, son los que se juegan la vida a cada momento, los que ignoran los insultos.

Son los que defienden nuestro idioma y no los “mamarrachos” que quieren imponerlo con los gusanos de la política que pretenden hacer creer que las mujeres eran discriminadas porque cuando decimos “todos” no estuvieran ellas incluidas, semejante barbaridad de los que quieren hasta eliminar la “Poesía”, tan maravillosa y necesaria (“los ignorantes nos han igualado”, “lo mismo un burro que un gran profesor” …) y el Periodista no baja los brazos, sigue en su lucha por el bienestar común. Los mercenarios que nos quieren hacer creer que los únicos “buenos” son los de su partido, esos NO son periodistas, sino canallas. El periodista no tiene tendencias porque es neutral a la hora de opinar.

El periodista lleva su vocación en el alma y no abandona su misión tan noble y justa, no se doblega ante nadie, su trabajo está antes que sus intereses personales, Él tiene respuesta a todo, dejando satisfechos a los que escuchan su prédica de amor, justicia y conocimiento, como decía Mariano Moreno: “Si los pueblos no se ilustran, si no se divulgan sus derechos, si cada hombre no conoce lo que puede, vale, debe, nuevas ilusiones sucederán a las antiguas y será tal vez nuestra suerte cambiar de tiranos sin destruir la tiranía”. Eso nos enseña cuán noble es nuestra vocación por servir al prójimo.

También nos señalaba el gran integrante de la Junta Nacional: “¿Por qué se han de ocultar a las Provincias sus medidas relativas a solidar su unión, bajo nuevo sistema? ¿Por qué se les ha de tener ignorantes de las noticias prósperas o adversas que manifiesten el sucesivo estado de la Península?

Un día después de la fundación de la Patria, Mariano Moreno nos enseñaba a los Periodistas cuán importante era la libertad de escribir y difundir, publicando en La Gazeta” lo siguiente: “Si se oponen restricciones al discurso, vegetará el espíritu como la materia; y el error, la mentira, la preocupación, el fanatismo y el embrutecimiento, harán la divisa de los pueblos, y causarán para siempre su abatimiento, su ruina y su miseria”. Y eso es justamente lo que estamos viviendo ahora y cuando más necesitamos que nuestras fuerzas no flaqueen, ni tengamos que comer de las manos de algún amo, como los perros.

Y hemos aprendido mucho de Moreno como otros integrantes de la Primera Junta, como Castelli o Belgrano, -Periodista también- quien entregó todo, sus sueldos, sus bienes para la educación, bastión fundamental para el crecimiento de nuestros jóvenes, él donó Escuelas para nosotros y también para el sur de Bolivia, donde consiguió que sus hombres colaboraran para luchar contra los invasores en Salta y Jujuy y nosotros les retribuíamos luchando con nuestros gauchos patriotas de a caballo, para defender los ataques contra nuestros hermanos, los bolivianos. Y hoy nos enorgullece poder ver en Yacuiba una de sus escuelas, donde los niños veneran a Belgrano, agitando sus banderas azul y blanca en cada mano, al grito de “somos belgranianos”. Y así murió uno de los más grandes próceres argentinos, con el orgullo de su misión cumplida, como nuestros periodistas que conocen el orgullo de luchar para el bien de los demás.

Traslasierra dispone de muchos periodistas de gran talla, que bien podrán decir que de este rincón cordobés brotaron, como las semillas, de este gran suelo serrano, como lo quería Moreno de sus hombres manifestando que:

“Ha resuelto la Junta formar una biblioteca pública, en que se facilite a los amantes de las letras un recurso seguro para aumentar sus conocimientos...”. “Por fortuna tenemos libros bastantes para dar principio a una obra que crecerá en proporción del sucesivo engrandecimiento de este pueblo”.

"El pueblo tiene derecho a saber la conducta de sus representantes, y el honor de éstos se interesa en que todos conozcan la execración con que miran aquellas reservas y misterios inventados por el poder para cubrir sus delitos. El pueblo no debe contentarse con que sus jefes obren bien, debe aspirar a que nunca puedan obrar mal”.

Nuestros Periodistas han tenido buena escuela y Enseñanza, así como también lo han tenido nuestros alumnos y docentes de nuestra Escuela “Policía Federal Argentina”; designada justamente, la mejor Escuela del Interior de nuestra Provincia de Córdoba y algo muy importante; a los alumnos se le han dado clases de enseñanza de Periodismo y hoy, con orgullo practican ese conocimiento en cada acto de fiesta o conmemoración de nuestra Patria argentina, dirigiendo periodísticamente en todas las ocasiones.

Con tantos antecedentes de excelentes periodistas locales, podemos sentirnos muy orgullosos en Traslasierra.